Yeonjun no sabia desde que distancia del instituto se venia poniendo su colonia, pero poco le importaba, mientras más rápido sea mejor, ya que tenia el olor de Hueningkai impregnado en su ropa y lo ultimo que quería es que sus amigos hicieran un escandalo.

Cuando noto que ya fue suficiente se encamino a la siguiente cuadra por donde varios de sus compañeros entraban al instituto.

Llegar con miradas encima suyo era algo común para Yeonjun, obviamente por su vestimenta quería creer, pero cuando unos gritos de lejos lo llamaron supo que debia abrir sus brazos para recibir a Beomgyu.

El rubio corrió a su encuentro y de un salto abrazo a su mejor amigo, pero antes de que pudiera saludarlo correctamente otro brazos apapacharon al menor que pronto se dio cuenta que estaba siendo rodeado por todo su grupo de amigos.

－Hola chicos. －saludo tranquilo, tratando de no demostrar lo nervioso que se encontraba.

Todos se separaron para mirarlo con una sonrisa en sus rostros, excepto Taehyun y Yuna que intercambiaron mirada sospechosas que Yeonjun no llego a notar.

－¿Cómo amaneciste hoy, Yeonjunnie? －pregunto Felix empezando a caminar siendo seguido por todos.

－B-Bien, fue una linda mañana. －y no mentía, sin duda eso de despertar abrazado con alguien era lindo después de todo.

－Escuche que la semana que viene se abrirá una feria en el centro de la ciudad. －hablo Hyunjin entusiasmado.

－Seria genial que vallamos a ver, ¿Qué dices Yeonjun? －Beomgyu coincidió con Hyunjin, mirando con el mismo entusiasmo al mencionado.

－Estaría bien. －asintió compartiendo la misma sonrisa.

Pero de un momento a otro los Alfa siguieron avanzando hasta adentrarse al instituto y por alguna extraña razón el se detuvo, o mejor dicho, alguien lo estaba deteniendo, por lo que miro hacia atrás, ahogando un gritito cuando las miradas de Taehyun y Yuna lo intimidaron.

Debia ser raro que un Alfa de pura sangre, como lo es Yeonjun, llegara asentir miedo por dos par de Omegas, pero es que tenia que, no solo eran sus mayores, si no que ambos poseían un carácter bastante fuerte que a veces podía con el y mucho más con cualquiera.

－Lastimosamente a nosotros no nos puedes engañar, Yeonjun. －hablo la chica con los brazos cruzados.

－¿D-De que hablan? －se hizo el confundido, aún que su lado torpe lo deschavara con un simple tartamudeo que lo hizo maldecir internamente.

－Tienes el aroma de un Omega, no solo eso, es la fragancia de un Omega en celo. －hablo seriamente el pálido haciendo tragar en seco al Alfa. －¿Algo que decir, Choi Yeonjun?

－Pues... －se quedo en blanco, no pensaba ser atrapado tan pronto. －S-si, lo es...

－¡Lo sabía! －festejo la pelinegra.

－¿Eso significa que ya no eres virgen?－se pregunto el castaño con una mano posada en su barbilla hasta que sonrió. －¿Osea que estuviste cortejando a un Omega todo este tiempo y no lo sabíamos? －se puso contento, Yeonjun seguro encontró al amor de su vida.

－A-Algo así. —se rasco la nuca nervioso, ¿Cómo les diría que tuvo sexo con un Omega en celo que apenas conocía y que alojaba en su casa con total confianza?

Estaba en el horno, definitivamente.

－Eso suena lindo, Yeonjunnie. －Yuna hablo con un tono tierno abrazando a su amigo al instante. －Ya quiero conocerlo...

－Si, respecto a eso yo-...

－No quieres, debemos conocerlo. － corrigió Taehyun, abrazando de igual forma al menor.

－¿Cómo que Yeonjun ya no es virgen?
－la voz asombrada de Beomgyu hizo que los tres amigos abrazados se dieran vuelta, encontrándose con el resto de los chico del grupo que tenían la boca bien abierta.

Mierda.

－¿De todo lo que dijeron escuchaste solo eso? －le cuestiono Bangchan luego de salir de su mini shock. －¡Oh por dios! ¿Esos son chupones? －tras eso ultimo el pelirosa se tapo su cuello rápidamente, creyendo que los había tapado bien con maquillaje.

－Si, definitivamente dejo de ser virgen. －susurro Yuna a su pareja bajando lentamente su mano señalando la zona cubierta por Yeonjun que ahora se encontraba muy nervioso.

－¿Y-Yeonjun eso es verdad? －le toco a Felix hablar aun con los ojos bien abiertos.

－Bueno es... －miro la cara de todos sus amigos, analizando cada rasgo, al aparecer todos parecían felices de alguna forma asombrada, pero felices, por lo que solo suspiro. －Es cierto...

Un pequeño silencio se adueño del grupo, hasta que salieron de sus asombros y sonrieron en grande.

－Eso es... ¡grandioso! －exclamo Hyunjin abrazando con sus fuertes brazos el cuerpo del menor que soltó una tímida sonrisa.

－G-Gracias...

－Es más que grandioso, es alucinante, es increíble, mi Yeonjunnie al fin tiene un Omega digno, e-el... ¿No tiene problema con verte vestido así, verdad?, porque si es así, le haremos una visita y-...

－No, a e-el de verdad le gusta como visto. －interrumpió a Beomgyu que solo pudo sonreír más que contento, pues Yeonjun no mentía, al menos esta vez no.

－Eso lo hace el doble de grandioso. － expreso Bangchan pasando su brazo por los hombros de su chica. －¿Cuándo lo conoceremos?

－¡Si!, exijo saber quien es el Omega de mi niño. －exagero Felix sacudiendo un poco el cuerpo del pobre pelirosa.

－Debe ser tierno, ¿o no? －las manitos de Beomgyu se juntaron de tan solo imaginárselo, mientras que Taehyun negaba con la cabeza por la ocurrencias de su pareja.

－D-De hecho, el es muy tierno si, pero es bastante tímido. －no tenia que dejar que sus amigos se acercaran a Kai, además lo suyo no era anda oficial.

Dios, en que mentira se había metido ahora.

－No importa, seremos cuidadosos. － aseguro Yuna, pero ella más que nadie sabe que los chicos eran muy escandalosos, aun si Hueningkai sea tímido o no.

－Se los voy a presentar cuando llegue la ocasión, ¿si? －pidió con una sonrisa nerviosa, viendo como todos hacían un mini puchero en sus labios. －Es que no quiero presionarlo, el en verdad es bastante tímido...

－Pe-Pero... －intento hablar Beomgyu pero su Omega coloco una mano en su boca para callarlo.

－No pasa nada, Yeonjun. －hablo con un tono tranquilo, ya que vio los nervios en el menor. －Cuando tu quieras podremos conocerlo, ¿Qué dices?

－Pero yo quería-...

－Dije, cuando tu quieras Yeonjun. － repitió mirando con advertencia su Alfa que detuvo su berrinche casi de inmediato.

Yeonjun observo como todos parecían reaccionar a la palabras del castaño y asintieron entendiendo la situación, algo que en el fondo el Alfa de sangre pura agradecía.

－Gracias, chicos. －agradeció de inmediato.

Todos le restaron importancia, ahora sí comprendían a Yeonjun, por lo que decidieron seguir con su día normal en el instituto y no hablar tanto del tema.

・・・

Hueningkai abrazo con fuerza su cuerpo mientras miraba por la ventada el vecindario, soltó un suspiro cansado, pues se la había pasado limpiando la casa por todas las partes posibles y por haber, algo dentro de el quería hacerlo entonces lo hizo.

Aburrido aspiro el olor a mentas y chocolate del buso que le había prestado Yeonjun, un aroma que era muy exquisito para el, tanto que cubrió todo su cuerpo con el mismo buso para sentirse protegido.

Sabia que pronto su celo volvería a atacar y estaba dando todo de el para retenerlo un poco más hasta la llegada del Alfa, por lo que quiso pensar en otra cosa para poder distraer pero a su mente solo llegaban los recuerdos de los días anteriores.

Horrible, horrible desde el momento de su primer celo como Omega.

Esa vez que visitaron al medico para su primer chequeo como Omega, ese jodido día donde todo empeoro, donde todo se fue a la mierda, años de puro sufrimiento que lo hizo querer dejar su manada en varias ocasiones.

Hasta que lo hizo, fue difícil pero no iba a soportar tener otro celo bajo el techo de su casa, el camino pudo haber sido complicado, pudo haber pasado hambre, pero valió la pena haber recorrido cada kilometro y el haberse encontrado con alguien como Yeonjun lo hacia ver mejor al dura viaja que tuvo.

Toda su familia, empezando por los diabólicos de sus padres como los traicioneros de sus hermanos que ahora mismo deberían estar buscándolo por todas partes, pero algo dentro de Kai gritaba que estaba en buenas manos con un Alfa como lo era Yeonjun.

Nada malo iba a pasar ahora.

Estaba seguro que de Daegu a Seúl era un camino duro de realizar, si no tienes transporte claro, pero Hueningkai se las había ingeniado tan bien, que justo cuando llego a la tan esperada ciudad, su celo comenzó y para su suerte se topo con Yeonjun.

Era obvio que su familia jamás llegaría a pensar que ahora se encontraba en Seúl.

Dejo de pensar de golpe cuando vio que por las calles del vecindario se acercaba tan esperado Alfa, por lo que con muchas ansias bajos las escaleras y con una nerviosa sonrisa se fue acomodando los mechones del pelo, prefiriendo verse bien para recibir al menor.

Sus nervios crecieron cuando la cerradura de la puerta hizo ruido y sus ojitos se iluminaron inconscientemente cuando vieron la figura de Yeonjun aparecer del otro lado.

－Y-Yeonjun, hola. －saludo algo tímido y eso solo causo ternura en el nombrado que asombrado por la bienvenida dejo sus cosas tiradas en el piso.

－Hueningkai, que bueno verte. －no sabia que decir o que hacer, pero su vista inevitablemente se quedo en el piso observando como este brillaba más de lo normal. －¿Acaso limpiaste? －pregunto mirando alrededor cómo todo estaba ordenado.

－S-Si. －asintió con las mejillas algo rojas. －P-pensé que era lo minino que debia hacer, ya que tu me dejas quedarme, y además, se que no debí hacerlo, es decir... －se mordió el labio, pensó que había cometido una estupidez malinterpretando el tono de voz del Alfa. －N-no debí hacerlo, perdón...

Yeonjun ladeo la cabeza, no le veía nada de malo que Kai hiciera la limpieza, claro, hubiera preferido negarse a que hiciera dicha cosa pero su tono "enojado" había sido por eso.

No quería que el Omega hiciera esas cosas y no quería que se molestara en hacerlas, así que solo sonrió con ternura por el estado de sumisión del mayor.

Adorable, sin duda muy adorable.

－No lo decía como regaño. －hablo con un tono más suave que logro que sus ojos se conectaran con los bellos del más bajo. －Simplemente no me gusta que mis invitados hagan los quehaceres, ¿entiendes? －explico lo que había pasado.

Kai se ultra sonrojo, estaba avergonzado, malinterpreto las palabras del Alfa y se había sentido tan culpable que ahora solo pedía que la tierra lo tragara para siempre.

Pero su molestia desapareció cuando sus oídos fueron invadido por la armoniosa risa de Yeonjun.

Hermoso, el Alfa reía hermoso.

Inevitablemente se sonrojo otra vez, pero esta vez a causa de la risa del atractivo chico que le tenia en frente, a ese que le quedaba tan malditamente bien las prendas de chicas y que lo encendía.

O hablando de eso.

Yeonjun paro de reír cuando sus fosas nasales fueron invadidas por el aroma a cerezas y azucena del Omega, feromonas atrayentes que casi le nublan la vista de lo rico que olía.

－A-Alfa~

Su vista bajo y subió por todo el cuerpo del Omega, el cual portaba su largo buso rosa, pero que se podía ver perfectamente cuando el lubricante se resbalaba por esas acaneladas piernas, mientras que el cuerpo empezaba a temblar anticipadamente.

Y la carita, dios, la carita de Hueningkai era un poema, empezando por el día de ayer que intentaba memorizarse las hermosas expresiones del Omega cada vez que se dedicaba a tocarlo.

Ahora el mayor esperaba ser tocado por el Alfa y por eso temblaba con las mejillas ultra rojas, esperando ser comido.

－¿Necesitas ayuda, Omega? －la voz de Alfa de Yeonjun era algo que no usaba con frecuencia, pero justamente ese Omega ocasionaba que lo hiciera, ocasionaba que su lado mas primitivo saliera a la luz y enloqueciera.

－S-Si. －asintió desesperado, soltando leves gemidos en cuanto el Alfa le hablo con la voz.

Yeonjun no lo dejo esperar, por lo que rodeo su cintura y comenzó un hambriento beso que hizo desfallecer a Kai quien suspiraba pesado en medio de este.

Ambos ladeaban las cabeza para profundizar lo mejor posible el beso, disfrutando del sabor del otro, sedientos, desesperados por el otro, queriendo poseer hasta el mas mínimo rincón de sus bocas.

－¡Mhgg! －gimió el Omega cuando una traviesa mano llego a su agujero para penetrarlo con un solo dedo.

Y aprovechando que esa linda boquita se había abierto, Yeonjun adentro su habilidosa lengua para empezar a invadir todo el espacio bucal de Kai quien lo recibió gustoso a la vez que gemía por el intruso en su ano.

Empezaron una guerra de lenguas, que cada vez complicaba un poco mas al Omega que con sus manos aferradas a la remera rosa del Alfa trataba de no perder la estabilidad, primero porque era besado de una forma malditamente buena y segundo porque ahora era penetrado por tres dedos que lograron rozar su próstata.

－A-Alfa... yo-¡Aahg!, yo creo que-...

－Hazlo, vente, vente para mi Omega. － no tuvo que ser adivino para darse cuenta del placer que le estaba propinando a Hueningkai en cuanto comenzó con el sucio beso.

Por lo que se enterró en su cuello, aspirando el aroma a azucena pero penetrando con mucha más fuerza la entrada del Omega que ahora gritaba cerca de su oído.

－¡Di-Dios! －grito cuando esos largos dedos lograron golpear con mucha más rapidez contra su próstata, tanto que apretaba con sus puños la remera rosada que juraba romper por la poca estabilidad que tenía. －Aah, ¡Ah!, n-no... ¡si!...

Yeonjun soltó una pequeña risa cuando Kai comenzó a articular palabras sin razón, volviéndose casi religioso cuando gritaba por "dios", le causaba ternura pero a la vez solo pensaba que era demasiado sexy como para ser real.

Beso su mejilla acanelada mientras lo jodia con mucha más fuerza, moviendo su mano de una manera tan rápido que Kai tuvo que abrir los ojos al máximo para gritar su ultimo gemido.

－¡AH!...

Ahora Hueningkai podía decir que no había nada como el orgasmo con ese hombre ayudándolo.

♡