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𝗖𝗔𝗣𝗜𝗧𝗨𝗟𝗢 𝟭𝟵:
𝗘𝗟 𝗡𝗨𝗠𝗘𝗥𝗢 𝟭𝟮 𝗗𝗘 𝗚𝗥𝗜𝗠𝗠𝗔𝗨𝗟𝗗 𝗣𝗟𝗔𝗖𝗘
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- ¡Harry! - recién llegábamos nosotras y Harry al parecer igual. No pude evitar correr a sus brazos. - ¿que haces aquí?

- lo mismo te pregunto. - seguía abrazándome. - que bueno es verte.

- ¡Harry! ¿Cómo estás? ¿Estás bien? - la señora Weasley nos abre la puerta y abraza muy fuerte a Harry. Que incómodo momento. - Vivian, que bueno que viniste.

- entonces ya has venido antes. - en verdad seguía molesta por el hecho de que jamas me dijeran de esta "orden". Y no entiendo el por qué.

- hola Molly. - mi hermana le da un gran abrazo. - ¿mi papá esta aquí? - ella asiente. - bien. Ya traje a Charlotte.

- ¡hola linda! - ella me da un gran abrazo el cual no esperaba en lo absoluto. Quiero decir, no me conoce. - en verdad que soy la mas feliz de conocerte.

- lo mismo digo. - se separa de mi y toma de mis mejillas.

- si, eres igualita a tu padre. - no pude evitar sonreír ante ese comentario. - y Fred tenía razón, en verdad eres hermosa. - Fred. Al escuchar su nombre, sentía como mi corazón latía de lo mas rápido. - que por cierto, todos están allá arriba.

- vamos. - me dice Vivian. Harry parecía querer entrar a la habitación donde los adultos se encontraban pero Molly Weasley no lo dejó.

- lo siento Harry. No puedes entrar. Pero sube, Hermione y Ron allá están.

- ¿tu tampoco sabes nada? - le pregunté a Harry mientras subíamos las escaleras. El asiente con la cabeza. - no entiendo el porque.

- Charlotte, tu no sabías de esto porque simplemente papá no quería darte mas en que pensar con lo sucedido en verano. - volvió la Vivian dura y molesta, ya que su amiga no esta. - y Harry... tu no sabes porque...

- Dumbledore nos hizo jurar que no te diríamos nada. - le dice Hermione una vez que lo ve y corre a sus brazos. - te extrañamos. - lo suelta y luego me abraza a mi. - ¿cómo están?

- confundidos. - decimos al mismo tiempo y Ron nos abraza a los dos por igual.

- creo que pensaba que donde estabas más seguro era con los muggles... - le dice Ron. - fuiste vigilado todo el tiempo por miembros de la Orden del Phoenix.

- ¿ustedes podrían decirme que es eso? ¿y donde estamos? - miré molesta a mi hermana que aun no me decía nada. Ella sale de la habitación.

- el cuartel general de la Orden del Fénix - contestó Ron de inmediato. - y la orden es una sociedad secreta. La forman los que lucharon contra Quien-tú-sabes la última vez.

- ¿Quiénes? - pregunta Harry.

- Nosotros hemos conocido a unos veinte, incluyendo a tu padre, Charlie. - me dice Ron. - es muy amable.

- ¿saben algo? - pregunté. - sobre... el.

- Fred y George han inventado unas orejas extensibles. - de nuevo, esos nervios al escuchar sus nombres. En especial el nombre. - y gracias a esas orejas sabemos que algunos miembros de la Orden están siguiendo a unos conocidos mortífagos.

Fred y George se habían materializado de la nada en medio de la habitación, causando un ruido el cual me causó un gran susto. Solté un brinco.

- ¡deben dejar de hacer eso! —ordenó Hermione. - siempre me asustan.

- ¡hey pequeña Lottie! - George empieza a decir y ambos ya estaban por empezar a decir toda clase de cosas pero antes yo de verdad tenía que darles un gran abrazo. A los dos.

- nos pareció oír tu dulce voz. - dice Fred.

- La reunión ha terminado, ya pueden bajar a cenar. - grita la señora Weasley y todos bajan, aunque yo me quedó con los gemelos.

- pudieron haberme dicho de esto. - los miré molesta. - no dejarme todo el verano sola.

- solo hicimos lo que tu papá nos dijo. Darte tu espacio. - dice George.

- digo, si te mandábamos cartas pero... tratamos de marcar nuestra distancia para evitarte preocupaciones alternas. - Fred dice.

- estoy bien. Quiero que sepan que estoy bien. - saben a que me refería.

- si, tranquila. - me dice Fred. - George y yo nos hemos propuesto a hacer de este año el mejor para ti.

- y para nosotros ya que es nuestro último. - no es lindo recordar eso. George me vuelve a abrazar. - pero si créeme, desde hoy, cero secretos.

- bien. - dije y este baja las escaleras. - ¿debería preocuparme? por todo esto que esta sucediendo.

- creo que quedó bastante claro el hecho de que no queríamos que te preocuparas. - Fred me dice. Ya solo quedábamos el y yo en la habitación.

- no soy una bebé que no puede aguantar una noticia. - se porque hacían lo que hacían. - si, fue muy traumático perderlo pero... como le dije a George. Prefiero la verdad desde hoy. ¿de acuerdo?

- bien, mandona. - se acerca a mi pero esta vez, en vez de abrazarme, delicadamente me da un beso en la mejilla. Pero lo hizo tan lento que me puso toda nerviosa. De repente sentí algo en mis piernas empujarme y di un salto, algo asustada. Solté un grito. - y el es Kreacher.

- bajen de una vez por todas. - dijo muy malhumorado y se cambio de habitación.

- es el elfo domestico que vive aquí... - dice Fred riendo. - ya, bajemos.

Bajé de inmediato las escaleras y me encuentro con mi padre y todos los demás adultos que estaban en esa habitación. Todos nos sentamos en la mesa para poder cenar. Yo a un lado de Ginny y del otro lado, el señor Weasley. Fue el lugar que me asignaron. No lo escogí. Pero no pasaba nada. Yo le tenia un cariño a Ginny. Es una gran persona.

Quería hablar con mi papá sobre esto... saber su opinión y que pasaba con mi madre. Pero ahora no era el momento. Quizá, regresando a casa.

- ¿hey Viv, y la pesada? - le pregunta Fred. Quien se encontraba enfrente mío y a un lado suyo Vivian y luego George. - la hubieras invitado.

- no cabríamos aquí, ya con tantas personas. - dice ella. - y ella no debe saber de nada de esto.

- nadie te cree cuando dices que no le has contado. - la molesta George. - y te entiendo, si yo quisiera tanto a alguien, se lo diría.

- si, bueno, a mi no me lo dijeron. - dice Harry. - ni a Charlie.

- eso fue por otras razones. - dicen al mismo tiempo los gemelos.

- es cierto, Harry. - le dice Sirius. Esta es la primera vez que yo lo conocía. Sabía de el porque... bueno, todos sabemos de el por lo obvio. Azkaban. Pero también Harry me contaba mucho de el cuando me escribía el verano pasado. - y eso es algo que hablaremos terminado la cena.

- no creo que esto sea información que Harry deba saber. - le regaña la señora Weasley. - es muy chico.

- el lo ha visto. - se refiere a el que no debe ser nombrado. - así que es importante que sepa todo esto.

- ¿deberíamos irnos? - le dije en voz baja a Ginny, pero me escucha el señor Weasley y el es el que me contesta.

-  Molly puede ser algo controlodora... más bien, protectora. - el ríe. - no pasa nada. Déjalos que discutan un rato. - y si, se fondo solo escuchábamos todos como ellos dos debatían el hecho de que si Harry debía saber esta información, o no. - en verdad que eres igualita a Henry. - voltee a ver a mi padre, cuando el me dice esto.

- me lo han dicho mucho. - dije después de comer algo de sopa. - soy Charlotte.

- lo sé. He escuchado mucho de ti. - dice este.

- supongo que mi padre les ha contado de Vivian y de mi. - negué con la cabeza. - a veces pueden hablar de más.

- no, de quien he escuchado hablar es de mis hijos. Te adoran. Dicen que eres una increíble escritora. - es lindo saber que alguien se exprese así de ti. - ¿un día nos dejarás leer algo tuyo?

- por supuesto. - dije con una sonrisa.

- aparte de que cada que comprábamos dulces. - baja la voz para que no nos escuchen los demás. - Fred me pedía que guardara algunas varitas de regaliz. Dice que son tus favoritas.

- lo son, si. - voltee a ver a Fred con una sonrisa pero era evidente el que el no entendía porque.

- ¿quieres que Harry sepa todo? Bien, pero mañana. Tu se lo dirás y solo a él. - enfatiza muy molesta Molly.

- sabes que nos terminará contando a mi y a Hermione ¿cierto? - le dice Ron retándola.

- ¡a dormir todos! Esta es platica de adultos. - Molly dice, y sin mucha queja, Ginny es la primera en subirse.

- nosotros ya somos mayores de edad. - dice Fred y George al mismo tiempo.

- los felicito. - dice Molly cínica. - ahora, a sus habitaciones.

- ¿cómo? ¿Dormiremos aquí? - le pregunté a Vivian. - ¿por qué?

- solo por esta noche. - me levanté de mi asiento y seguí a Viv. - bien, yo me dormiré con Ginny y Hermione.

- bien, voy con ustedes. - la seguía pero ella me detiene y me entrega una mochila con mi pijama y unas cobijas. - ¿que?

- te toca en la habitación de Harry. Ya te guarde cepillo de dientes y todo.

- ¿por que tú si puedes dormir con las mujeres y yo no?

- porque tú y el son los nuevos. Tranquila, es mejor. Tienen una habitación nueva. - Ella entra a la habitación y la cierra en mi cara.