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LXIII: SIGUIENTE MISIÓN

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𝗖𝗔𝗣𝗜𝗧𝗨𝗟𝗢 𝟲𝟯:
𝗦𝗜𝗚𝗨𝗜𝗘𝗡𝗧𝗘 𝗠𝗜𝗦𝗜𝗢𝗡
...

-¡Expelliarmus! -rugió Fred, apuntando la varita hacia Bellatrix, y la de ella voló en el aire y fue capturada por la mano de Harry.

-¡Desmanius! - Harry grita y Lucius Malfoy se derrumbó junto a la chimenea. Rayos de luz salieron disparados de las varitas de Draco, Narcissa y Suzanne. Harry y los demás se lanzaron al suelo para evitarlos.

- ¡alto! o ella muere. - Bellatrix dice, mientras sujetaba su cuchillo en mi garganta.- dejen caer las varitas. ¡ahora!

-¡De acuerdo! -escucho a Queenie decir algo asustada. - háganlo.

- ¡Draco, recógelas!- el me voltea a ver con los ojos llorosos y si, levanta de las varitas. - ¡El Señor Oscuro está de camino, Harry Potter! ¡Tu muerte se aproxima!

- Fred.- se escucha a Suzanne hablar. - creo que siempre es bueno verte.

- me gustaría decir lo mismo pero no. - Fred seguía prestando atención a como Bellatrix me tiene sujeta. - ¿sabes? no tienes que hacer esto.

- ¿es el? ¿el mismo muchacho? - le pregunta Bellatrix a Suzanne y ella asiente. - huh, con mas razón ahora de matarla. - me toma con mas fuerza.

- ¿no piensas hacer nada? - vi como Fred le decía a Draco pero el no tomó ni una acción. La verdad es que no lo culpo, se que si el hace algo, esta loca haría algo contra el. - claro, eres tu. Siempre supe que eras un hipócrita.

- hey. - Narcissa apunta con su varita a Fred.

Harry me mira, dándome a entender que hará algo para distraerla, y en ese momento, el corre hacia a Draco y le quita de las varitas. Entre ellas, ahí estaba la mía, que Draco apropósito puso ahí.

-¡Desmanius! - escucho a Fred gritar.

Harry ataca a Bellatrix y es ahí cuando me suelto de su agarre y termina por entregarme mi varita. Al fin la tengo en mis manos. Narcissa arrastraba a Draco fuera de peligro y no pude decirle que se viniera con nosotros y Bellatrix se ponía en pie.

-¡mátalos, Suzanne! -le ordenó Bellatrix, pero se oyó otro crujido, y la varita voló en el aire para aterrizar al otro lado de la habitación.

- ¿cómo te atreves a tomar la varita de una bruja, cómo te atreves a desafiar a tus amos? - le regaña. No puedo creerlo, era Dobby.

- ¡Dobby no tiene amo! Dobby es libre, y Dobby tiene que salvar a Harry Potter y sus amigos.

- tomen la mano de Dooby. Ahora. - Harry nos ordena, y todos nosotros lo hacemos. Eramos demasiados. Un destello azul de plata voladora cuando Bellatrix tiró el cuchillo desde el otro lado de la habitación hacia el lugar donde nos estábamos desvaneciendo... la casa de Bill y Fleur.

- ¿Fred? - una vez llegando a lo que parecía ser una playa, todos terminamos en el suelo, en diferentes partes. Dobby se encontraba a un lado mío. - hola. - sonreí al verlo. ¿estás bien?

- Dobby esta de maravilla. - Fred corre hacia donde yo estaba y me levanté del suelo, para poder abrazarlo. Abrazarlo como en mucho tiempo no lo hice.

- ¿te encuentras bien? - asentí pero el seguía buscando por todos lados, mis brazos o espalda, si algo me había pasado. - quizás no lo sabes, y algo te pasa.

- estoy bien. - lo detuve, tomando de su rostro y le di un gran beso. - no sabes lo feliz que estoy de verte. - nos volvimos a abrazar. Y esta vez al abrazo se unieron George, Queenie y Tony.

- lamento que no hayamos podido venir antes.- dice Queenie entre lagrimas. - no teníamos idea de a donde ir o que hacer.

- hasta que Harry apareció. - dice Tony y cuando todos nosotros nos separamos, ahora yo fui a abrazar de ellos. De mi trio favorito.

- gracias Harry.- le dije mientras me separaba. - en verdad gracias.

- todo fue gracias al diario así que, gracias a Queenie. - Harry dice sonriéndole. - ¿qué le pasó a tu cabello?

- es una larga historia. - por un momento lo había olvidado.

- hola. - Vivian dice con los ojos muy llorosos, como casi nunca la he visto, viendo a sus dos mejores amigos. Quienes aun no se creían el que la estuvieran viendo después de mucho tiempo. George se acerca y le da un golpe en el hombro. Fred hace lo mismo pero del otro lado. - ouch, hey... - pero sus quejidos fueron interrumpidos una vez que estos dos la abrazan.

- vamos, todos entren a la casa. - Bill aparece y la mayoría lo siguen pero yo me quedo afuera con Maddie, Vivian y los muchachos. En un rato iríamos.

- eso fue por preocuparnos. - le dice George. - te lo merecías.

- aparte de que jamás te despediste. - Fred le dice. - ¿donde quedó la chica Slytherin? - estaba muy molesto.

- ella no hizo nada malo. - me metí en la conversación. - y no pudo acompañarnos por ahora porque su madre si se entera, estaría en grandes problemas.

- ¿qué no hizo nada malo? tan solo convirtió a Viv en mortífaga. - George se cruza de brazos y se comporta como si fuera alguna clase de hermano mayor para ella. - en el momento en que la vea, te lo prometo que...

- es cierto, ella tomó esa decisión por su madre. - Viv dice y noto la tristeza en sus ojos. De no poder estar ahora con ella. - y yo lo hizo por igual por mi madre. - los gemelos me voltean a ver en busca de respuestas.

- no tontos, mi mamá no es mortífaga. - aunque si estuvo interesada en uno. - todo ese asunto de que Lucius Malfoy muere de amor enfermo por nuestra mamá y que jura y perjura que soy su hija...

- ¿te hizo algo? - Fred de inmediato se acercó a mi, ahora teniendo en mente eso. - ahora no me tengo que preocupar por un Malfoy, sino por dos.

- por ello decidí tomar esa decisión. Sabía que eventualmente una de las personas que amo terminaría en esa casa y... solo no quería ver a mi madre ahí. Y si de alguna manera podía ayudar...

- entendemos. - dicen al mismo tiempo.

- aun así nos pudiste haber dicho. - le dice George, aun muy decepcionado.

- no podía. Ni Draco. - eso ultimo lo dije para mi pero aun así lo escucharon. - que mal que también el tuvo que quedarse allá.

- ¿cómo? ¿sigues pensando que es una buena persona? - Fred pasa sus manos por su cabello. - dime que no tiene que ver eso con tu color de cabello.

- ¿que? no. - reí nerviosa. - esto fue por la maniática de Bellatrix. De verdad que era una tortura estar ahí...

- lo bueno es que ya no lo estas mas. - George me abraza. - de nuevo estamos los cuatro juntos. Es lo único que importa.

- ¡Luna! - dije recordando que la había visto. - no puedo creerlo, la hemos dejada allá.

- no, Dobby se encargó de traerlos aquí. Están en la casa. - dice George. - vamos.

- supongo que tengo muchas cosas que explicarles a todos. - dice Viv mientras va directo a la casa de Bill y a un lado George.

Fred y yo nos quedamos atrás. Tan solo de nuevo abrazándonos.

- fueron demasiados días sin ti... - me dice mientras acaricia de mi frente, notando la marca rojiza de la linea. Por la cual tenía el cabello de ese color. Se que le dolía verme así de lastimada.

- hey, ahora no solo tengo marcas en el cuerpo. - dije refiriéndome a mi enfermedad. - también en la cara. - reí para romper la tensión.

- luces igual de preciosa que siempre. - besa de mi frente. - me puedo acostumbrar a verte con ese color de cabello.

- es horrible.

- te ves sexy. - se ríe por su propio comentario, y yo también me río. - ¿Suzanne una mortífaga? dime porque no estoy para nada sorprendido.

- oye fue tu novia, no la mía. Tu eres el que se enamoró de una demente.

- enamorado es una palabra muy fuerte. Yo no estaba enamorado de ella. - niega con la cabeza. - me gustaba mucho besarme con ella, si... - hace como si estuviera recordando sus momentos juntos y le di un codazo. - sabes que solo bromeo.

- solo tu bromeas en momentos como estos. - me vuelve a tomar del rostro para acercarme a el y volver a besarme.

- créeme que decir estupideces es mucho mejor que empezar a llorar por tantas emociones que tengo ahora.

Me lo imagino. Ver a su ex novia como una... mala persona. Pero una de verdad, no solo porque era una diva y una insoportable en la escuela. Ahora mata personas. Eso debe ser extraño. Supongo que el hecho de volvernos a ver, después de mucho tiempo. Y por supuesto el ver a su mejor amiga de toda la vida a la cual ya daba por perdida para siempre y lo cual le causó mucho dolor...

Ah y por si no fuera poco, el mundo esta en horribles condiciones en estos momentos gracias a el que no debe ser nombrado.

Pero creo que por eso, ahora mas que nunca, aprecio su carisma y su humor. Sin sus comentarios, creo que yo también estaría devastada.

Entramos a la casa, y Harry, Ron y Hermione eran quienes hablaban con el duende. Yo aproveche eso y fui directo a Luna.

- hola. - le dije y ella me sonríe. Se encontraba platicando con Dobby. - al final si salimos.

- lo sé. - Queenie se une a la conversación. - lo logramos.

- ¿han notado que somos muchos de Ravenclaw y de Gryffindor? - el comentario fue de lo mas extraño, mas porque no tenía nada que ver con el tema. Ambas la miramos y no decimos nada. - solo decía.

- Charlie. - Harry termina de hablar con el duende y se acerca a mi. - tenemos que ir a Gringotts.

- ¿a..? - Fred se acerca a mi y toma de mi mano. - ¿hay un horocrux?

- eso creo. - volteo a ver a Ron, quien no dejaba de checar si Hermione se encontraba bien. - pero ahora no solo es eso importante... sino también las reliquias.

- ¿qué? - no entendía nada de lo que me decía. - ¿reliquias?

- por ahora solo se que tengo que ir a Gringotts. - voltea ver a sus amigos. -iré con Ron y Hermione.

- ¿en que te ayudo?

- la verdad es que, creo que otro horocrux esta en Hogwarts. - alcé los ojos sorprendida. No había pensado en el hecho de volver a la escuela. - ¿crees poder ir a buscarlo?

- ¿dices como estudiante o que vaya de contrabando?

- no estaría mal que Tony, Queenie y tu vayan a ver como están las cosas. Checar como están los demás. - asentí.

- ¿cómo? ¿otra vez nos separamos? - Fred me dice negando con la cabeza. - no lo creo.

- tu y George deberían ir viendo los asuntos de la orden. - el niega con la cabeza. - si. ¿o tienes una mejor idea?

- puedo ser un profesor de Hogwarts. - el mismo sabía que eso nunca pasaría.

- recuerda quien es la persona al mando de la escuela en estos momentos. - le dije y es que creo que nadie recordaba que Snape era. - lo haré, Harry. Iremos. No se como le haremos para que Snape nos permita volver pero... ahí veremos que hacer.

- bien. - el me entrega de nuevo mi bolso con el diario adentro. - mucha suerte.

- a ustedes. - Hermione me abraza y los tres salen de la casa junto con el duende. - Luna ¿tu querrás también regresar?

- por supuesto. - se acerca a mi. - a menos de que pueda ser de ayuda aquí... - voltea a ver a Bill y a Fleur y ambos niegan con la cabeza. - bien, iré.

- veinte minutos. Veinte fueron los minutos que estuve contigo. - me dice Fred algo triste.

- y tendremos toda una vida. - le dije mostrándole mi mano, en especial mi anillo. - por si lo habías olvidado.

- oh por Dios. - escuchamos a Fleur decir a lo lejos y con un tono de emoción.

- así que... unos días en Hogwarts no serán nada ¿de acuerdo? - el asiente. - falta nada para que termine el ciclo escolar.

- suerte con ello, quizá aun logren graduarse. Ya ven que los Ravenclaw les importa mucho sus calificaciones. - dice George pero nadie ríe. - okay, solo creí que sería chistoso.

- te iré a buscar eventualmente. - me dice Fred mientras suelta de mi mano, para que podamos irnos. - no te vas a escapar de mi.

- es lo que menos quiero. - le sonreí a lo lejos. - Viv...

- lo sé. - ella entiende lo que iba a decirle. - tengan mucho cuidado.

- lo haremos. - dice Tony, mientras toma de mi mano, para sacarme de la casa, de lo contrario, el sabe lo difícil que sería para mi el hacerlo.

...
Lamentó si estuvo medio sencillo este capítulo y también si tardé. Ando en semana de exámenes jaja pero ya mañana subo otro:)

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