I
-Actualmente 14 años-
10/ Nov/ 2003
Museo Internacional de Historia
-12:45-
-Narradora-
-Las alarmas de la academia sonaban y sonaban desesperadamente, alertaban una misión para los pequeños. Reginald no dejaba de apurarlos-
— ¿Cómo se hacen llamar héroes si son tan lentos a la hora de la acción? -Gritó el padre furioso por la lentitud de aquellos jovenes. En ese momento Diego paso corriendo al lado de él buscando su correa para pierna-
— ¿Alguien a visto mi otro zapato? -preguntó apurada, Allison-
— A quien le importa tu zapato, ¿Alguien a visto mi mascara? -Gritó de igual forma buscando apurado la antes mencionada, el pequeño Cinco-
— Aquí está tu zapato mi niña -Ayudó la madre de los pequeños. Allison corrió por el zapato- y tu mascara, cariño, la dejaste debajo de tu cama -Cinco corrió por esta y se la puso de inmediato-
— Tienen un minuto para estar en la entrada con la ropa adecuada y bien presentables -Ordenó el padre enojado por la tardanza de los niños al prepararse para se deber-
-No paso más de un minuto y los 8 chicos estaban formados en la entrada de la Academia, presentables y preparados. Sir. Reginald los subió a una camioneta negra discreta, para así llevarlos a la parte trasera del Museo y poder entrar sin ser interrumpidos por los policias y periodistas. Los chicos entraron, se encontraban tras una pared intentando crear un plan, el cual no es su fuerte realmente-
— Aquí vamos de nuevo -Se quejó número cuatro mientras formaba un circulo con sus demas hermanos-
— No comiences Klaus. Bueno, son dos pisos, 8 esquinas por cubrir -Todos escuchaban a su líder-
— Lo que haremos sera dividirnos para cubrir todo el terreno, son más de 6 ladrones. Diego, Klaus y Charlize cubrirán la parte de ariba, Charl cubrirás dos esquinas -La chica solo asintió- Allison, Ben, Cinco y yo cubriremos la planta baja. Charl, llévalos arriba -Ordenó número uno, Luther, para luego separarse y todos tomar sus posiciones-
-Luther hacia lo que podía, aventaba, golpeaba y noqueaba a los criminales para poder ser entregados y cumplir su condena en la cárcel por robar. Diego lanzaba sus cuchillos a lo loco pero con puntería, claramente, dandole a cualquier delicuente que se le atravesara. Allison manipulaba a los delincuentes con el rumor para que se pelearan entre si, a la vez soltaba a los rehenes que tenían atados con sogas. Klaus...., bueno, Klaus estaba escondido por ahí, evitando tener que pelear. Cinco se teletransportaba de un lado a otro, peleando y sobreviviendo a las armas de fuego, y... dejando uno que otro insulto a los criminales. El pequeño Ben, luchaba a puño evitando usar sus poderes, al igual que ayudaba a Allison a soltar los rehenes, les daba palabras de aliento por la situación que estaban pasando. Charlize hacia lo que podía desde la planta de arriba.-
-De un momento a otro, Diego, Allison y el pequeño Ben terminaron atados en medio del Museo en la planta baja. Mientras Luther, Cinco y Charlize buscaban más ladrones en la planta de arriba, sin notar a sus hermanos quienes estaban en problemas-
-Amaya-
Al parecer teniamos compañia, y bastante irritable.La increíble Academia Umbrella volvía a lucirse atrapando a mis compañeros, a mi Familia, con la cual eh pasado de todo. Observaba el pequeño show desde la segunda planta un poco escondida. Entre todos los enanos, uno de ellos me llamo la atención, o mas bien, una de ellos.
A los 12 años conocí a una chica con sus caracteristicas, llamada Charlize. Ambas nos conocimos por el vicio, si, donas y café. Ella se escapaba de su casa, y yo hacia el trabajo mas sencillo, robando de la cafeteria, el alimento, claro, así comencé, mi primer trabajo en equipo. La chica decía que se escapaba de su casa aunque jamas menciono donde vivía o algun tipo de información sobre ella, solo su nombre, al igual que yo. No eramos tan diferentes, pero tampoco parecidas. Era extraña, pero amigable, me agradaba y eso es algo raro en mi. Simplemente no la volví a ver.
La curiosidad de descubrir si era la misma chica me mataba, ademas que si lograba asegurarme que era la misma chica podría dejarnos ir, ya saben, por los viejos tiempos. Decidí hacerme invisible para así poder acercarme un poco hacia ella, una máscara me lo impedia pues esta cubria su identidad, maldita sea. Pense un poco, comencé a tirar unos cráteres que estaban en unos estantes para llamar su atención, y al parecer lo logre. Se Teletransporto para evitar que estos calleran y se rompieran, no recordaba eso, pero no es nada sorpresivo.
Estaba sola, buscando a mis demas compañeros, Analicé un poco la situación..., si me hago visible, resulta ser quien creo y me reconoce, no me hará nada y podre irme de aqui. En cambio, si no es quien creo que es, las cosas podrian salir muy mal... enserio, muy mal. Ademas corria el riesgo de que aunque si fuera ella, podria no reconocerme, mi cabeza se inundo en miles de pensamientos.
"La vida no es vida sin riesgo" recordé las sabias palabras de... de un amigo. A la mierda, tengo que arriesgarme, además, no le tengo miedo a una niña como ella.
-Charlize-
Buscaba y buscaba a más criminales sin obtener resultados, Luther suele ser muy insistente en estos temas. Cuando me asegure de que no hubiera absolutamente nadie decidí retirarme, lo cual fue impedido por unos cráteres que se movieron al punto de casi caer de los estantes y romperse en mil pedazos. Reaccione rápido y me teletransporté para agarrarlos y dejarlos en su sitio, me asusté un poco pues no había nadie más que Luther y Cinco, pero estaban alejados de mi.
Buscaba con la mirada por el lugar hasta que vi a una chica con un atuendo bastante bueno, llevaba unos shorts holgados semi cortos color negro, una camisa blanca con una corbata de rayas color guinda y amarillas, acompañado de una chaqueta holgada color negra que llegaba a la mitad del short. La chica estaba recargada en la pared con los brazos cruzados y una sonrisa algo burlona a mi parecer, al principio creí que era una rehen que había escapado, pero luego la analice, era Amaya Gerdsthen, la chica con la que robaba donas y café en la noche a los 12 años.
No queria pensar que fuera una más de los delincuentes. Vaya que paso tiempo..., aunque, su estilo la delato un poco mejor, opté por hablar un poco con ella antes de que mis hermanos se la llevaran.
— ¿Qué haces aquí? -pregunté mientras me cruzaba de brazos-
— Jugando policías y ladrones -me hizo una presentación con sus brazos, el sarcasmo siempre ha sido su fuerte, hasta donde recuerdo- Ya sabes, divirtiendome un poco -sonrió cínicamente, y ahí fue donde me aseguré de que no era una rehen, si no una mas de los criminales, ¿Cómo es eso posible? Donas y café es una cosa, ¿pero esto?-
— Pues tu jueguito está poniendo en riesgo la vida y la salud mental de muchas personas
— ¿Me importa? -levantó ligeramente su ceja, no la recordaba tan burlona, me agradaba, pero era estresante-
— Deberías irte, en menos de dos minutos mis hermanos, Luther y Cinco, estaran aquí e intentaran matarte -Le sonreí y metí mis manos a los bolsillos, si ella está siendo cínica, ¿por qué yo no?. Ella solo rodó los ojos, no la recordaba así, vaya que el tiempo cambia a las personas-
Noté como Luther se acercaba hacia mi.
— ¡Rápido, escóndete! -¿qué?, recién nos reencontramos y dije que me agradaba. Ella quedó pensativa, pero después observo al frente y se hizo invisible, ya lo había olvidado-
-Amaya-
Se los dije, Charlize la chica de la cafetería, solo debía acercarme, la mascara me impedía reconocerla rápido, pero digamos que su voz no cambió mucho. Todo bien, pero ¿acaso me esta ordenando algo? ¿que carajos le pasa?, no obedezco a nadie.
— ¡Rápido, escóndete!
No
O mejor si.
Me hice invisible, no porque ella me lo haya dicho, si no porque mire a un tipo acercándose, lo curioso era que entre más cerca más alto se veía, ¿como puede estar tan alto?, le pediré el tip. Le calculo 1.70-1.80, no lo se, no se de medidas. Debo reconocerlo, me intimida un poco, no pienso morir tan joven cuando la diversión apenas comienza y menos por un grandulón como él, aunque bastante guapo, debo admitirlo.
Ahora que recuerdo Charlize mencionó dos nombres, "Cinco y Luther", ¿quien será él?, y ¿por que uno tiene nombre de número?. Si él resulta ser el tal Cinco, que desilusión.
— ¿Con quién hablabas? -cuestionó el tipo. Por accidente al intentar alejarme moví el estante del cráter a tal punto de que este cayera, maldita sea mi nivel de torpeza- ¿Qué fue eso? -comenzó a buscar con la mirada, en estos momentos si que estoy agotada, espero resistir o me descubrirían-
Otro tipo se teletransporto y logró tomar el cráter antes de caer para dejarlo en su lugar, ¿Cómo hizo lo mismo que Charlize?
— ¿Acaso por aquí hay fantasmas, o como se movió solo? -habló con algo de diversión aunque su rostro no lo demostraba, igual no intimida a nadie con esa voz chillona, ademas es de una estatura promedio, aburrido a mi parecer-
— ¿Dónde estan los demás? -cambió de tema mientras intentaba cubrirme con su cuerpo al frente de mi, al parecer si que le importo a la pequeña Charlize-
— Están abajo -Respondió el mismo chico de voz chillona, es gracioso-
— Comienzo a aburrirme y a cansarme -dije tratando de sonar lo más baja posible mientras hacía una mueca algo molesta. Ella solo respondió un "aguanta un poco más" en un susurro discreto, ¿cree que esto no cansa?, mi paciencia no aguantara más-
— ¿Escuchaste eso, Cinco? -preguntó el grandulón , Ja, ya decía yo que él no podía llamarse así. Él chico asintió con el ceño fruncido, ¿por que esta enojado?, sigue sin intimidarme. Los dos buscaban con la mirada parecia que jamas se irían, a la mierda, no les tengo miedo, ademas necesito energía para poder escapar-
Me hice visible.
— ¿Qué me harán estos niños mimados? -dije con tono burlón-
— Espera n... -la pequeña Charlize intentó hablar pero fue en vano pues el grandulón la empujó para quitarla del camino-
— Hazte a un lado -Que grosero-
— Oye cual es tu prob... -En un movimiento rápido me agarro del brazo bruscamente, me volteó y colocó su antebrazo sobre mi cuello, nada mal, en verdad no me lo esperaba- ¿Hace falta la agresividad? -pregunté entre risas pues era inutil quitarlo, siempre debes sacarle el lado divertido a la vida-
— ¡Deja de reirte! -ordenó el enano, el otro presionó más el agarre, santa mierda este tipo enserio es fuerte. Le perdono la ahorcada, no viene mal una de vez en cuando, pero no el que esté arrugando mi ropa- Eres uno de los ladrones, cierto -dicho esto se acercó a mi de frente con una mirada amenazadora-
— Te molestas muy rápido -me reí de nuevo y al parecer lo frustré más-
— ¡Responde!
— Claro que soy una de los ladrones, ¿que harás al respecto? -pregunté con una enorme sonrisa en mi rostro, siempre se tiene que actuar de manera tranquila sin importar que no tengas ni la mínima idea de cual será tu siguiente movimiento, o tal vez si se-
— Te llevar.... -le solté una patada en los bajos antes de que pudiera terminar, el chico si que habla mucho. Como dicen por ahi, más acción menos bla bla-
— Ya deje... -el intento de hablar de Charlize era inútil, pues Luther de inmediato la callaba, asi que también recibió un golpe... bajo. Dos en uno, Vualá-
Luther me soltó de inmediato al sentir la patada mientras maldecía a lo bajo, me reí un poco, luego hice una pequeña reverencia burlona y cuando decidí irme, mier-da. El enano Cinco logró agarrarme del pie haciendo que callera, de inmediato me doblo los brazos hacía atrás presionando mi rostro ligeramente deladeado contra el suelo, astuto y molesto a la vez.
— No te recomiendo moverte, te lastimaras. Pagarás por lo que hiciste niña -Habló bastante molesto, pero era cierto, su presión en mis brazos era mucha, si que dolía- Veo que estas orgullosa de ser una ladrona, será todo un placer entregarte yo mismo a las autoridades -dijo con aires de superioridad, ¿qué se cree?-
— ¡Ya sueltame, Niño! -Dije con clara molestia, me ignoró por completo-
— Mientras ustedes pierden el tiempo con ella, los demas criminales se escaparon y además dejarón a nuestros hermanos amarrados en el centro del museo como trofeo, eso no habla muy bien de nosotros -Habló Charlize mientras veia por el pequeño balcón hacía abajo, se veía demasiado tranquila-
Y ahí fue donde capté su jugada, pues los chicos voltearon hacía ella y el enano disminuyó la fuerza, lo cual fue perfecto para escaparme dándole un ligero empujón y hacerme invisible de inmediato. Aunque no podía salir, no aun, la oficina del dueño del museo era mi meta.
-Cinco-
— ¡La chica! -Gritó Luther, ¿cree que no me di cuenta?-
— Lo sé, se me fue -dije molesto mientras me levantaba del suelo, aun no entiendo como se fue tan rápido- No pudo ir lejos, debemos encontrarla -los apuré-
— Primero soltemos a los demás, nos ayudaran también -Ordenó nuestro líder y me teletransporte abajo-
La patada en los bajos si que me molestó, la chica tenía carácter, era muy molesta. Me las va a pagar. Estábamos desatando a nuestros hermanos, ¿cómo es posible que unos simples ladroncillos sin nada de especial pudieron contra tres niños con poderes? ¿acaso son inútiles?
— ¿Por qué no nos ayudaron cuando nos vieron? -se quejó Diego mientras sobaba su muñeca ya que la soga lo dejo marcado-
— Tuvimos un problema con uno de los ladrones -dijo Luther mientras soltaba a Allison-
— Pero todos escaparon -Habló Allison-
— No todos, queda uno -mas bien una-
— Pero Charl estaba muy tranquila viendonos desde el balcón y vi claramente que ustedes también voltearon -continuó quejandose Diego, dios esto enserio es estresante-
— Cállate Diego, no sabes ni lo que dices -mencioné algo molesto-
— Bueno ya basta los dos, debemos encontrar a la chica y cumplir nuestro deber -Ordenó nuevamente Luther-
— ¿Alguien sabe dónde está Klaus? -Preguntó Ben algo tímido, nadie dijo nada, Charl solo negó y él sin mas agarró su camino-
Tengo tantas ganas de encontrar primero a la chica y poder entregarla, salvaría el día, además dañaría el notable ego que tiene. Me teletransportaba mientras la buscaba, mi energía se agotaba así que decidí comenzar a caminar, pero entonces escuche un grito
— ¡Chicos, tienen que ver esto! -Gritó Diego. Debe ser ella, me importo un comino la energía y me teletransporte. Todos llegaron rápidamente, era una especie de oficina escondida, debe ser la del dueño del museo. Bastante astuta. Entramos y miramos algunas cosas flotando, ¿cómo carajos hace eso?-
Allison se acercó curiosa al escritorio en el cual habia algunos papeles, cuando estaba apunto de tocar un lapicero flotante apareció la chica sentada sobre la silla giratoria, ella sostenía el lapicero frente al escritorio.
— ¡Ah! -gritó del susto y dio un golpe a su suerte dándole en la nariz a la chica-
— ¿¡Que mierda te pasa, niña malcriada!? -exclamó la chica molesta mientras se agarraba la nariz-
Comenzarón a hacer preguntas estupidas de como era que la chica podía hacer eso, honestamente también quería saber, pero no era nuestro problema ahora.
— ¿Podrían callarse de una buena vez y solo atraparla? -Dije amablemente-
— Teletranspórtate -Ordenó nuevamente el rubio y solo rodee los ojos, creo que con eso debe entender que estoy cansado-
— ¿Que ocurre? ¿5 niñatos no pueden contra mi? vamos, debe ser facil, o acaso ¿tienen miedo? -soltó burlona- Ah y sobre como desaparecí -desapareció, enserio es extraño, no es de la Academia , ¿cómo es que lo hace?. Apareció al lado de Charl- ¡Bu!, ¡magia! -se rió cínicamente, es muy estresante, y nadie está haciendo nada para atraparla, más bien parece que en estan en un especie de shock-
Corrí con la intención de tirarla al suelo pero cuando lo iba a conseguir desapareció y ella fue la que me empujó haciendome caer de espaldas, me levanté aun más enojado, jamas en mi vida había visto a alguien tan irritante, y eso es mucho decir al vivir con 6 hermanos.
— ¿Te puedes hacer invisible? -preguntó Diego con cierto asombro mientras buscaba con la mirada, Luther se dirigía a la puerta para así cerrarla, vaya, por fin empiezan a hacer algo-
— Si niño -dijo ella apareciendo al lado de él para de inmediato volver a desaparecer, o mas bien, hacerse invisible..-
— Te dije que te fueras de aquí no que te quedaras -dijo Charl y la chica apareció al lado de ella, espera, ¿se conocen?-
— Ella no irá a ningun lado, debemos llevarla con la policía -exclamó Allison-
— Estoy de acuerdo -Aprobó Luther. Yo simplemente me preparaba para atraparla sin tener que teletransportarme. La chica desapareció nuevamente y apareció justo en el medio, nosotros la rodeabamos, esta justo como ratón apunto de caer en la ratonera-
Allison se acercó decidida a golpearla, la chica uso su poder y desapareció para luego simplemente ver a Allison en el suelo boca abajo, Luther dió un quejido y se agarro su estomago, Diego sacó uno de sus cuchillos pero fue en vano, no la veía. De un momento a otro Diego estaba en el suelo, y la chica tenía a Allison amenazada con el cuchillo en su garganta.
— Suéltala -Ordenó Luther notablemente enojado. Allison forcejeaba, pues aparte de tenerla amenazada con un cuchillo en la garganta tenia su antebrazo sobre su boca, para evitar su habla, joder, si que es astuta-
— Ven por ella, fortachón -dijo la chica con una enorme sonrisa en su rostro mientras se acercaba al escritorio. Luther corrió, ella aventó a Allison y ahí fue el momento exacto en el que me desplacé, pues su vista no estaba en mi.-
La empujé haciendo que callera con una rodilla en el piso, no le di tiempo de voltear pues me lancé sobre su espalda, reacciono rápido y dió un giro dejandome en el suelo quedando sobre mi sin dejar caer todo su peso. Rápido y discreto metió un papel en el bolsillo de mi saco para luego dar la vuelta, levantarse, sonreir ampliamente y volver a desaparecer. Quedé atónito pero de inmediato agarre fuerzas de donde pude y me teletransporte, en verdad no supe que hacer
-Luther-
— Wow todo paso muy rápido -exclamó Charl. Y era cierto, solo ayude a Allison unos segundos cuando Cinco ya no estaba y la chica tampoco-
— No se ha ido -dijo Diego, ella estaba invisible nos lo complicaba todo. Allison, Diego y yo buscabamos y lanzabamos manotazos al aire, mientras que Charl no hacía absolutamente nada, esto enserio es molesto-
De pronto miramos como la puerta se abrió y cerró de azotón, es todo, la chica se había ido
— ¿Por qué no la agarraron?!
— Se escapó, Luther, ¡que querias que hiciéramos! -me respondió Diego-
— ¡Charl la tenía enfrente y no hizo nada! -se quejó Allison, y así comenzando una discución entre ellos. Estaba cansado, ser su líder y estar a cargo de ellos es estresante, más de Charlize ella era una terca-
— No queria agarrarla, ¿nos vamos? -respondió ella, genial-
— Si claro, vamonos tranquilos sabiendo que hay una ladrona con poderes que en cualquier momento va a atacar -reclamó Diego, Charl comenzo a discutir de nuevo-
— Oigan, ¿ya vieron los baños? son muy comodos y bonitos -llegó Klaus asomandose en el marco de la puerta, ni él ni Ben nos ayudaron-
Todo había salido mal, los ladrones escaparon, la chica con poderes escapó, Cinco simplemente desapareció, Ben y Klaus no hicieron nada, Charl, Allison y Diego discutiendo, soy un pesimo lider, ni siquiera se si me deberían de llamar así.
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