PLAY.
Te iba a dejar por dos semanas.
Empezando el día de tu cumpleaños.
¿Cómo se atrevió?
—¡Lo siento! Realmente no pude opinar al respecto. — Sooyoung retrocedió levemente para alejarse de tu ira.
Hmph. Te quejaste.
La linda Heejin intervino para romper la creciente tensión. — No deberías ser tan dura con Sooyoung, Jiwoo.
—Si, si, Chuu. Yves dijo que no tiene elección. — Dijo Jinsoul después de comer un poco de arroz.
—Por alguna razón, que Jinsoul me defienda no me hace sentir nada segura. — La bailarina del grupo hizo un mohín mientras miraba dudosamente a su amiga.
Tus cejas se fruncieron al escuchar el automático quejido de Jinsoul.
—Pero juro que te protegeré.
—Si, si...
—Creo que Heejin tiene razón, Jiw- .— Jungeun no pudo ni terminar su oración cuando la miraste.
—¡Ahh, Jiwoo! ¡No seas mala con mi Kim Lip!
La mirada fija en tu rostro se suavizó. ¿Acaso tú, Jiwoo, la más amorosa del grupo, miraste con furia a Jungeun?
La chica de cabellos castaños y mediana estatura se veía un poco deprimida por la penetrante mirada que le habías mostrado.
—L-lo siento, Kim Lip. — Tartamudeaste, sintiéndote culpable por hacer sentir mal a una de las más alegres del grupo.
—Ahora ya sabes con qué tipo de mirada tengo que lidi-
—Nos estamos yendo del tema de nuevo Sooyoung. — Interrumpiste y cruzaste tus brazos. Estabas más enojada que desde... la semana pasada. Era difícil no verte alterada con Sooyoung y Jinsoul juntas. En especial cuando se abrazaban o miraban demasiado. — ¿Desde hace cuanto sabías que te ibas?
—Ehm... ¿Cómo una semana? — Alcanzó a decir Sooyoung.
—¿Y no nos dijiste?
—¡Estaba ocupada!— La chica de cabello corto gritó impotentemente, despeinando su cabello con frustración.
—¿Por qué no dejamos a Yves un momento en paz? — Dijo Haseul tratando de calmar las cosas.
Hmm...
Decidiste interrogarla un poco más.
—¿Ocupada con qué exactamente? Incluso te libramos de los ensayos la semana pasada. — Hasta agregaste un tono molesto a esas palabras.
Las demás chicas permanecieron en silencio. Conocían tu lado diva y sabían que no debían intervenir.
—Estaba... haciendo algo. — De repente Sooyoung se quedó extrañamente en silencio, mirando a nadie más que a ti.
—¿Haciendo algo...?
—Si. ¡Pronto lo descubrirás así que deja de insistir! — Frustrada y sin energía, la chica se dejó caer en la mesa.
Te sentiste triunfante por su derrota pero eso no alivió tu molestia.
Sooyoung jamás se había perdido ninguno de tus cumpleaños desde que se conocieron.
—Bien. — Dijiste con tono de molestia una vez más y tomaste una taza de café que tenías enfrente para tomar del líquido vigorizante que vagamente olía bien. Esperando que eso aliviara tu hipertensión.
—Te lo recompensaré. Te lo prometo, reina Jiwoo.
Te atoraste con el café que estabas bebiendo, pues no esperabas que tu amiga se dirijiera así hacia ti. Miraste a Sooyoung sólo para ver que tenía esa astuta sonrisa.
Oh, no te atrevas a hecharme en cara eso Ha Sooyoung...
—Mira lo que hiciste. Derramaste tu café. — Tu amiga se rió mientras agarraba unas servilletas. — Déjame limpiarlo por tí, reina Jiwoo.
Sooyoung estaba limpiando el café de tu blusa cuando decidiste darle el golpe final.
Tu mano izquierda golpeó su frente levemente.
—¡Auch!
Las chicas continuaron como si nada hubiera pasado.
__________
Dos chicas están sentadas espalda contra espalda sobre una alfombra de peluche rosa. Una de ellas mira un papel con líricas mientras que la otra tararea un ritmo suave. — Siempre me ha gustado escucharte cantar. Hace cada día nublado uno soleado.
__________
Pronto, te encontrabas en el aeropuerto a las 5:00 AM en la mañana de tu cumpleaños.
Llamando a los pasajeros del Vuelo 149 de la Aerolínea Coreana. Está próximo a su salida.
—Sooyoung~
—Jinsoul.
Las dos hermanas no divertidas se abrazaban, un poco dramáticamente a decir verdad. Demasiado para tí y para la familia Ha.
—¡Voy a extrañarte!— Declaraba la pelinegra mientras seguía abrazando a Sooyoung.
—También voy a extrañarte. Recuerda limpiar el cuarto, ¿de acuerdo~?
Casi refunfuñas por su humorístico intento de parecer la compañera de cuarto responsable que nunca ha sido.
—Pero tú nunca lo haces, Yves, ¿por qué debería limpiar yo? — Se quejó Jinsoul, esperando que la chica de cabellos cortos se compadeciera de ella.
—¡Porque te lo ordeno, Soldado! — Soltó Sooyoung, obviamente imitando a un Sargento.
Su conversación rápidamente perdía sentido.
Llamando a los pasajeros del Vuelo 149 de la Aerolínea Coreana. Está próximo a su salida.
—Creo que todas deberíamos despedirnos ahora, Jiwoo, pronto abordarán el vuelo. — Finalmente habló Heejin después que notaste su diversión al ver el show que Sooyoung y Jinsoul estaban haciendo a medio aeropuerto.
Preferiste ignorar la peculiaridad de Heejin y asentiste, aceptando su consejo aunque honestamente ni siquiera sabías cómo hacerlo. Nunca antes le has dicho adiós a Sooyoung, no en serio. Nunca se ha ido por más de una semana.
Te negabas a aceptar que ibas a extrañarla.
—Que tengas buen viaje, Sooyoung unnie. — Jungeun inclinó su cabeza respetuosamente sólo para terminar siendo atrapada por el cuello.
—¡No finjas que no me extrañarás, Kim Lip! — Sooyoung acusó falsamente mientras apretaba las mejillas de la castaña.
—Sooyoung, no hagas eso, lastimarás a mi Kim Lip. Además no está completamente despierta a esta hora. — Una vez más, como si estuviera pasando muy seguido; Jinsoul fue hacia Jungeun para sobar sus mejillas y protegerla del peligro.
Comprobando la declaración de Jinsoul, Jungeun estaba a penas despierta en términos de funciones mentales ya que aún bostezaba a pesar de ser casi ahorcada. Y el hecho que Jungeun no se opusiera a que Jinsoul la abraze en un lugar público era prueba suficiente de que Jungeun aún estaba en el mundo de los sueños.
Reflexionabas sobre que Jinsoul estuviera tan despierta a esa hora. Ella definitivamente no era alguien madrugador.
Debe ser por Jungeun... Siempre le ha gustado abrazarla.
—Sooyoung, ten un buen viaje. — Dijo Kahei, acercándose junto a Chaewon.
La peli plateada le entregó una pequeña bolsa que tenía una cámara digital. — Toma muchas fotos, ¿ok?
Sooyoung sonrió. — ¡Claro! Por tí, ChaCha.
Chaewon parpadeó y luego sonrió. — En realidad es por...
Te dió un vistazo.
¿Eh...?
Llamando a los pasajeros del Vuelo 149 de la Aerolínea Coreana. Está próximo a su salida.
—¡Oye, Yves, tenemos que irnos!— Sunmi llamó a su hermana antes de tomar su maleta y seguir a sus padres.
—Si, si...
De repente sentiste la mirada de todas en ti.
—Ehm, Yves... — Comenzaste, pero con cada segundo que pasaba, encontraste más y más difícil continuar.
—Lo siento, traté de convencerlos. Realmente lo intenté.
La miraste y la viste rascándose incómodamente su mejilla.
No pudiste más que sonreír porque sabías, sólo por ese peculiar gesto, que Sooyoung lo decía en serio. — Está bien, Yves.
—No, no lo está. Nunca me he perdido uno. ¡Siento que arruino mi récord!
La miraste desconcertada. — ¿Qué récord...?
—¡Así que, hoy preparé algo para ti!
Claramente, ya no te estaba escuchando. A veces te preguntabas por qué tratas de tener su atención por más de unos segundos.
Sooyoung abrió su maleta y comenzó a buscar entre los artículos de adentro. Una porción de tu mente estaba alarmada; Sooyoung tiene la costumbre de sacar cualquier cosa para hacer bromas, pero otra parte de ti tenía curiosidad sobre lo que te había preparado. Ella podía ser muy dulce y considerada cuando quería. Esperemos que trate de ser dulce esta vez.
Viste que Sooyoung sacó una caja de su maleta.
—Toma. — Te la ofreció sonriendo.
Entrecerraste los ojos por la caja pero la tomaste de todos modos.
—Espero no sea otra broma, Yves. — Suspiraste.
—No, no lo es. ¿No me tienes un poquito de confianza?
¿Después de todas tus bromas? Tal vez...
—Olvídalo, no contestes eso. — Se despedía y continuaba sonriendo todo el tiempo. — Bueno, ¡Feliz cumpleaños, Chuu!
Una tonta sonrisa se marcó en tu cara. Su brillante sonrisa siempre ha tenido ese efecto en ti.
—Gracias, Yves. Yo-
Última llamada para los pasajeros del Vuelo 149 de la Aerolínea Coreana. Por favor diríjanse a la zona de abordaje.
El anuncio interrumpió lo que ibas a decir. Comprendiendo que tenía que irse en ese momento, trataste de hablar luego que el anuncio terminó. Sin embargo, rápidamente te encontraste envuelta en un abrazo.
—¿Yves...?
—Realmente lamento irme en tu cumpleaños, Jiwoo. Espero que mi regalo pueda compensarlo. — Dijo Sooyoung. Su voz era suave y totalmente sincera.
Sentiste que tu cara ardía por la forma en que te hablaba. A veces envidiabas lo transparente que era, lo honesta que era con ella misma y con los demás.
—Aww, ¿no me abrazarás también? — Bromeó.
—Yves...
—¡Sooyoung! — Gritó Sunmi.
—Tengo que irme, Jiwoo...
Y con eso, te soltó.
Te quedaste ahí, estupefacta, con tu brazo libre levantado. Estabas a punto de abrazarla también.
—¡Asegúrate de estar lista a las 7:30 AM, Chuu! — Dijo Sooyoung mientras cerraba su equipaje.
Parpadeaste. Era sábado. Planeabas regresar a dormir cuando llegaras a casa.
—¿Por qué?
—Voy a llevarte a una cita. — Te guiñó el ojo.
¿Cómo...?
—Lo verás cuando abras mi regalo.
Realmente odiabas cuando tenía ese travieso tono en su voz. Garantizaba que iba a poner en marcha un diabólico plan.
Antes de que pudieras preguntarle, ya se estaba yendo hacia su familia mientras se despedía de ti y del resto de las chicas. — ¡Adiós! ¡Nos vemos en dos semanas!
—¡Adiós!
Decidiste por fin decir algo, así que comenzaste a hablar. — ¡Te veré en dos semanas, Yves, y gracias por el regalo!
Levantó su pulgar y te dió esa maravillosa sonrisa antes que entrara al portal que la llevó al avión. — ¡Sé que lo amarás, Chuu!
Bajaste la mirada hacia la caja que tenías en las manos.
Papel con pequeños pingüinitos, ¿eh?
_______
Kim Jiwoo viendo a través de una cerca de alambre mientras un avión despegaba en el relampagueante cielo. Su cabello ondea hacia el Oeste como una cortina de seda oscura. — Hasta que nos volvamos a ver...
________
Pronto te encontrabas en tu cuarto viendo la peculiar caja que Sooyoung te dió. Eran ya las 7:00 AM y, como ibas a jugar su jueguito, debías abrirla y alistarte para la "cita".
Algo dentro de ti dudaba sobre abrir la caja. ¿Qué tal si era otra broma de Sooyoung?
Voy a confiar en ti esta vez, Sooyoung.
Acercaste la frustrante e inocente caja hacia a ti mientras te sentabas en la silla del escritorio y cuidadosamente quitabas el listón. Debajo del grueso listón, encontraste una tarjeta pegada a la caja.
"Jiwoo, no hay ninguna broma en esta caja. Sólo ábrela."
—Idiota... — Dijiste para ti misma mientras sostenías la tarjeta con tu mano. Te negabas a admitir que su mensaje era la señal que esperabas. Eso disminuyó un poco tus dudas sobre la tonta cajita.
Rápidamente, desenvolviste la caja. Era un simple cubo como de la mitad del tamaño de una caja de zapatos, decorada con puntos multicolores.
Hasta ahora, todo bien. Parece bastante inofensivo...
Te sentías tonta por la idea de que parecía que estabas desactivando una bomba de tiempo.
Pero esto es de Sooyoung... bien podría serlo.
Tentativamente, colocaste tu mano izquierda en la tapa de la caja color durazno. Sólo en caso de que algo brincara, te alejaste mientras la abrías.
Nada salió.
Suspiraste en alivio.
Ahora que el miedo era la última de tus preocupaciones, finalmente examinaste lo que contenía la caja. Dentro, encontraste un Walkman con una nota pegada, dos cassettes, un pingüinito de peluche, y un CD en su caja. Sin saber qué hacer con todas esas cosas y el peluche, tu cerebro automáticamente te dirigió al trozo de papel pegado al Walkman.
"Alista una mochila, y vístete en ropa cómoda (pero abrigada, afuera debe hacer frío). Luego toma un par de audífonos y escucha el Cassette 1. ~ Sooyoung"
Mientras aún tenías tus sospechas, te sentiste extrañamente emocionada luego de leer la nota. ¿Qué planeó? ¿Y cuál era la cita de la que habló?
Esto está muy elaborado para ser un chiste...
Ya que no te cambiaste de ropa luego de despedirte de Sooyoung y su familia, estiraste tu brazo izquierdo y tomaste los audífonos de tu Reproductor mp3. Mareada sin razón aparente, metiste los audífonos en el Walkman y buscaste el mencionado Cassette 1.
Al estilo Yves, los cassettes estaban etiquetados como "Play Me!" y enumerados con 1 y 2.
Pusiste el "Play Me #1" en el Walkman, asegurándote que estuviera en el lado A, y lo reprodujiste.
—"¡Hola, Chuu! ¡Soy yo!"
Fue un milagro que no te cayeras de la silla al escuchar la emocionada voz de Sooyoung. Y fue aún más milagroso que no te diera un infarto.
—"Finalmente tuviste el valor de abrir la caja, ¿eh? Estaba pensando en dártela sin envolver pero así no sería un regalo de cumpleaños, ¿cierto? Así que terminé envolviéndola. Puedo ver tu cara tratando de abrirla. Hahaha."
Incluso aunque era sólo su voz grabada en un cassette, Sooyoung aún tenía la capacidad de irritarte.
—"Ya que no puedo estar físicamente contigo hoy, pasé toda la semana pasada grabando esto y preparándote el mejor cumpleaños que hayas tenido."
Ahora todas sus ausencias tenían sentido.
—"Ahora, déjame explicarte algunas reglas. ¡Lo primero y más importante, tendrás que hacer todo lo que yo diga o sino no funcionara! Cuando diga Pausa, pondrás pausa. ¡No hagas trampa y sigas escuchando! Me aseguraré de darte las indicaciones de lo que tienes que hacer mientras pasas por esta cita nuestra, ¿ok?"
Tu cerebro aún trataba de asimilar que Sooyoung pudiera organizar algo así de complejo.
—"Ahora... pon pausa y reproduce cuando estés afuera de tu casa. La diversión comenzará entonces. Recuerda tomar las cosas que escribí en la nota y se supone que empezamos a las 7:30 ¿si, Chuu?"
La voz de Sooyoung desapareció y el cassette se quedó en silencio.
Tomaste eso como señal de presionar el botón de pausa.
Miraste el Reproductor, asombrada, realmente tan asombrada que sentías mariposas volando en tu estómago. Cualquier duda sobre que esta caja y que todo lo que había en ella era una broma fue tirada por la ventana. Sooyoung, a pesar de ser una idiota contigo la mayoría del tiempo, encontró la forma de hacerte compañía en su ausencia. No sólo eso, también organizó toda esta "cita" para ti.
Viste al reloj.
Eran las 7:15 AM.
Rápidamente, sacaste una mochila del closet, metiste la caja que contenía los cassettes, saliste de tu habitación, y prácticamente volaste por las escaleras de tu casa. Estabas tan emocionada que resplandecías.
—Jiwoo, ¿a dónde vas tan temprano? — Tu padre asomó su cabeza desde la cocina cuando te vió pasar.
—Afuera. Yves me dio estos cassettes y se supone que es un regalo y-
—Oh... — Tu padre se rió ante tu entusiasmo antes de dar un trago a su café. — Ya veo. ¿Puedes hacerme un favor antes de irte? Tráeme el periódico y el correo, por favor.
Levantaste una ceja por curiosidad y leve sospecha. Normalmente, tu más-que-un-poco-protector padre preguntaría más.
¿Sabrá de esto?
—Claro.
—Gracias, Jiwoo.
Preguntándote por qué tu padre tenía esa mirada de complicidad en su rostro, fuiste hacia el buzón y sacaste el contenido. Por hábito, automáticamente pusiste el periódico debajo de tu brazo mientras revisabas el correo sólo en caso de que tuvieras algo para ti. Luego de tomar algunas tarjetas de felicitación y meterlas en tu mochila, fuiste a la cocina a entregárselos a tu padre.
—Lo dejo sobre la mesa, papá.
—Jiwoo, ¿no vas a tomar el desayuno primero? — Dijo tu madre mientras cocinaba huevos en la estufa.
Sacudiste tu cabeza. — Estoy bien. Comí pan tostado mientras iba a encontrarme con las demás.
—Déjala, querida, — Dijo tu padre mientras se acercaba a revisar el correo. — Un divertido día la espera.
—¿Papá...?
—Ve. — Te dijo con esa reservada pero gentil sonrisa que tenía. — Pero regresa a casa para la cena. También queremos celebrar tu cumpleaños contigo.
—¿Es Yves? — Preguntó tu madre y con la confirmación que tu padre le dió, dijo — Una chica bastante animada ¿verdad? — Tu madre sonrió.
Saben de todo esto... lo sé.
¿Y cuál "chica animada"? ¿No debería ser "travieso demonio"...?
—Ehm... Ya me voy. — Aunque un poco confundida, te despediste de tus padres y saliste por la puerta.
Casi olvidabas presionar Play en el reproductor.
Luego de unos segundos de silencio, volviste a escuchar la voz de Sooyoung, "¡Bienvenida a 'Mi Increíble Cita de Cumpleaños con Sooyoung!'"
Casi te tropiezas en el corredor.
¿Qué rayos?
"Hahaha, sé que acabas de hacer algo gracioso. Bueno, comencemos, ¿si? Primero ve hacia el Café Migabon mientras yo parloteo."
Curiosamente, no tenías dudas de que Sooyoung podía hablar con ella misma.
Comenzaste a caminar hacia el Café que se encontraba a unas cuadras de tu calle. Sooyoung y tú frecuentaban ese Café desde que lo construyeron, a veces aprovechando el ambiente para ensayar líricas sin la distracción de los manhwas y una computadora llena de música en sus cuartos.
"Me pregunto qué estarás viendo, Jiwoo. ¿Aún está oscuro? No, lo dudo. Ya son las 7:30, ¿cierto? Mm, estoy grabando esto de tarde así que estoy viendo diferentes colores de los que tú ves."
Si no fuera porque caminabas sola, habrías contestado su pregunta.
"Veamos si puedo adivinar lo que ves... es de mañana y probablemente hace frío... Mmm."
Frotaste tus manos para calentarlas, soplándoles para aumentar el calor.
"¡Ah, ya sé! Oye, Jiwoo, ¿Ves tu respiración llegar hacia el cielo? Siempre pienso en ello cuando vamos a la compañía. Me pregunto si nuestra respiración llegara a las nubes."
Inconscientemente, sonreíste mientras escuchabas sus palabras. Sooyoung nunca se da suficiente crédito cuando se trata de perspicacia. Siempre se hace pasar como una chica aventurera sin comprender que tiene una mente tan maravillosa.
Sí, las veo, Yves. También veo la tuya.
"Ah... pensando en eso me acuerdo de la canción que escribiste. Todavía quiero saber qué era esa canción. Es una canción sobre una confesión, ¿verdad? ¡Lo demostraste con ese... ese... cursi coro!"
A pesar que insultaba tus letras, no pudiste más que reír por la imagen avergonzada de Sooyoung mientras grababa ese cassette.
¿Confesión...?
"¿Qué estoy diciendo? Toda la canción es cursi."
Casi podías ver su inquietud.
"Aunque no puedo creer que hicieras que Haseul la cantara..."
"..."
Te encontrabas escuchando atentamente, esperando que continuara. ¿Acaso estaba decepcionada porque Haseul la cantara? ¿Por qué? Aparentemente ella era la única que se oponía a la letra. De hecho fue por democracia que se convirtió en una canción romántica.
"Pero, como terminó siendo una canción romántica y alegre creo que la voz de Haseul le queda mejor. No puedo imaginar a la diva del grupo cantando esa cursi y linda canción, 'Heart Attack' es tu récord máximo. ¡Haha!"
Normalmente formularías una inteligente respuesta a eso pero, ¿por qué repentinamente te sentías decepcionada?
"La primera vez que vi la letra, pensé que sería una canción demasiado lenta, ¿sabes? Pero eso sería depresivo, ¿verdad?"
Te abrazaste cuando te atravesó una brisa fresca. Un aire frío salió de tus labios.
—Qué frío...
"De hecho, intenté cantar una versión lenta... está en el CD que viene con los cassettes. Pista 4, creo. Quemé algunas pistas de ese CD. Adelante. Puedes reírte. ¡Esa estúpida canción afectó demasiado mi cabeza, lo juro!"
Tus ojos se abrieron completamente y de repente olvidaste el frío en tu cuerpo. ¿En verdad Sooyoung cantó una versión lenta? Sacaste el Walkman de la bolsa de tu chaqueta para verlo, para confirmar lo que Sooyoung dijo.
Sentiste que el aparato te veía burlonamente, a pesar de que no tenía ojos.
La voz seguía hablando mientras tú reflexionabas.
"¡No sabía qué hacer con ella cuando decidimos convertirla en canción! ¡No vuelvas a escribir algo así! ¡Mejor aún, sólo mándamela por e-mail! ¿Qué pensabas dejándola en el buzón? ¡Pensé que algún sujeto me acechaba!"
Te preguntabas por qué hacía tanto alboroto por ello pero no te importó. No te pareció mala idea dejar las letras en su buzón.
Tampoco escribir canciones sobre ella...
Luego escuchaste un suspiro de resignación. Aparentemente se cansó de reclamarte.
"Como sea, a menos que estés caminando como caracol, supongo que ya debes estar cerca del Café, ¿cierto?"
El Café se encontraba a la vuelta de la esquina.
Si no fuera por el hecho que el Café se encontraba tan lejos de su casa como de la tuya, habrías comenzado a creer que el Walkman era en realidad un Walki-talkie. ¿Acaso grabó esto mientras "realizaba la cita"? ¿Caminaba la misma calle que tú mientras grababa esto?
"Cuando llegues, sólo entra. Te vas a encontrar con alguien, ¿bien? Sé que dije que era una cita pero no puedo tenerte sólo para mí en tu cumpleaños, ¿sabes?"
Mirabas las puertas del Café como si fueran un portal para otro mundo. No sabías nada del plan de Sooyoung aunque te contó algo, tus instintos de autodefensa estaban al máximo. Después de todo durante años te has visto envuelta en las bromas de Sooyoung.
"El lado A casi termina así que no necesitas poner pausa. Sólo deja que termine y luego lo volteas. ¡Rebobinarlo va contra las reglas!"
Claro que va contra las reglas...
El Walkman hizo clic, en señal que el lado A de "Play Me #1" había terminado.
Suspiraste. — También puedo seguirle el juego...
Abriste la puerta del Café.
________
Dos chicas están tiradas una sobre la otra en la acera durante un día nevado de invierno. La chica de cabello corto sonríe con alegría a pesar de su adolorida espalda. - ¿Ves? Siempre te atraparé cuando caigas, incluso si tú fuiste la que me hizo caer.
________
—¡Ah, Srita. Kim! — Una de las meseras te saludó mientras entrabas.
Te quitaste la bufanda luego de pasar por la puerta. — Buenos días, Semi. ¿Acaban de abrir?
—Si, pero te hemos estado esperando. La Srita. Ha nos dijo que llegarías temprano hoy.
—¿Ah si? — Preguntaste mientras doblabas la bufanda alrededor de tu brazo.
Semi sonrió y asintió. — Por aquí. — Luego se dirigieron hacia el lugar donde tú y Sooyoung suelen sentarse.
—Hola, Jiwoo— Una grave voz te saludó.
—¡Heejin!
La chica sonrió dulcemente. — ¡Feliz cumpleaños!
Semi se retiró y te dejó con tu amiga. Así que Heejin era la persona de la que Sooyoung hablaba.
—Espera, Heejin, ¿así que sabías de los cassettes...?
Heejin rió un poco. — Si, lo sabía. Sooyoung me lo contó hace una semana y ya que sonaba muy divertido la convencí de que me dejara unirme. — Dió golpecitos al asiento junto a ella. — Ven, siéntate.
Te sentaste y colocaste la mochila cerca de tus pies. — Así que yo era la única que no lo sabía... — Ni siquiera tuviste que preguntarle si las demás también estaban involucradas. Estabas tan preocupada que ni siquiera pensaste que esto pasaría.
Tu falta de sexto sentido para las bromas de Sooyoung podría resultar fatal para tu ya ansioso corazón.
—Bueno... — Heejin dudó pero decidió hablar. Sabía que no tenía caso seguir guardando el secreto. — Las demás nos escucharon mientras hablábamos de eso...
—Ahora entiendo por qué la defendían cuando faltaba a las prácticas.
Heejin sólo sonrió y palmeó tu mano. — Sooyoung sólo pensaba en ti.
Esa chica...
—Srita. Kim, tome. — Semi regresó con una enorme taza del chocolate especial del café para ti.
La mirabas mientras colocaba la taza en frente de ti. — Pero aún no he ordenado nada...
Semi sonrió. — Es de parte de la Srita. Ha. Dijo que era un regalo de cumpleaños. Ah, aquí está su té, Srita. Jeon. — Luego sirvió la taza de té antes de volver a retirarse.
Debías tener una curiosa expresión en tu cara porque Heejin rió ligeramente. — Es muy dulce, ¿verdad?
—¿Semi?
—No, tonta, hablo de Yves.
—Oh... — Ahora te sonrojabas.
Rodeaste con tus manos la humeante taza de chocolate caliente, suspirando alegremente mientras el calor pasaba a tus manos. Dirigiste la pesada taza hacia tus labios. Le soplaste un poco antes de tomar cuidadosamente la dulce bebida. Sonreías mientras la cálida bebida calentaba tu cuerpo.
—¡Jiwoo, aquí tienes tu regalo! — Heejin tomó su bolso y sacó su regalo.
—Oh, gracias, Heekki. — Dejaste la taza en la mesa y tomaste el regalo. — ¿Puedo abrirlo?
—Claro.
Cuidadosamente desenvolviste el regalo, y encontraste un colorido álbum de fotos.
—Sé que te gusta tener fotos de todas. Esas son algunas fotos que he juntado de nuestras presentaciones y ensayos. Pensé que te gustarían. — Heejin sonrió tranquilamente. Asumiste que hasta ella estaba un poco avergonzada de las imágenes del álbum.
Abriste el álbum y, como esperabas, la nostalgia te invadió.
Heejin y tú pasaron el resto del tiempo viendo, platicando y riendo de las fotos del álbum. Estabas impresionada por su atención en los detalles ya que no sólo había imágenes, Heejin realmente hizo un collage maravilloso con ellos, lindas calcomanías y todo.
Hizo que tu "niña" interior gritara de alegría.
—Gracias por esto, Heejin, en serio. — Le dijiste a tu amiga luego de terminar esa bebida monstruosa que Sooyoung ordenó para ti.
—Me alegro de que te gustara, Jiwoo. — Heejin sonrió y se levantó. — Ahora, mi tiempo se acabó. Es hora que vayas a tu siguiente aventura.
—Eso supongo... — Sonreíste. — ¿Pero a dónde se supone que vaya ahora?
—¿Por qué no le preguntas a tu cita? — Sonrió y continuó antes de que pudieras protestar. — Te veré más tarde, Jiwoo.
—Bien... — Apenas alcanzaste a decir mientras veías a Heejin caminar tranquilamente hacia la salida del Café. Sin embargo, segundos después, volteó su cabeza hacia ti.
—¡Oh, casi lo olvido!
—¿Qué pasa?
—Presiona Play.
Y con eso Jeon Heejin desapareció caminando por la acera felizmente.
________
Jiwoo sentada en el Café Migabon pasando su dedo a través del bordo de una gran taza. Su otra mano está en una foto con 12 chicas vestidas con trajes del tipo porristas como si se hubieran divertido a lo máximo. — Qué mal, no puedo recordar lo que pasó durante ese concierto... todo pasó muy rápido.
_________
Luego de recoger todas tus cosas y ponerte la bufanda en el cuello saliste del Café, volteaste el Cassette 1 y presionaste Play.
"¡Hi, Bienvenida, Chuu! ¿Cómo te la pasaste con Heejin? ¿Te gustó el chocolate? Le dije a Semi que no se contuviera con el azúcar ya que tienes un paladar muy dulce. Haha."
Te reíste para ti, disfrutando del sonido de su voz. Verdaderamente deseabas compartir tu día y felicidad con ella justo en ese momento pero incluso si hablabas, no podría escucharte.
"Se siente algo raro ya que estoy en frente de Migabon ahora mismo. ¡Bueno... me aseguraré de que tu dulce paladar quede completamente satisfecho en nuestra siguiente parada!"
Automáticamente rodaste los ojos por su tonta alegría.
"Oye, no me ruedes los ojos Kim Jiwoo."
Parpadeaste y miraste el Reproductor.
¿Sooyoung era psíquica o algo así?
Pero nuevamente...
Sacudiste la cabeza. Realmente te conoce bien.
"Si Heejin siguió el plan, deben ser como las 10:00 ya. ¿Por qué no me acompañas al Cubo, Jiwoo?"
Curiosa, te preguntabas porque sería el Cubo la segunda parada. El Cubo es un complejo de tiendas pequeñas no muy lejano a Migabon, algo así como la parada entre el área residencial y el principio del centro. El único lugar que visitaban ahí era el restaurante de comida rápida y la pequeña dulcería a donde Jinsoul tiende a escabullirse cuando nadie presta atención.
Volviste a reír para ti. Podías adivinar con quién te encontrarías ahí.
Comenzaste a caminar por la acera. Sooyoung dejó de hablar por unos segundos y te preguntabas si debías poner pausa. Aunque esperaste un largo rato, te sentías cómoda porque escuchabas su respiración como si caminara contigo.
Pudo haber grabado eso hace algunos días pero eso no importaba. Aún seguía contigo. Podías sentirla. Y la idea de que, a pesar de la diferencia del tiempo, caminara junto a ti, te hacía feliz.
"Revisé como estaría el tiempo en tu cumpleaños y decía que estaría soleado. ¿Está soleado, Chuu? Espero que sí. No me gustaría que en tu cumpleaños este nublado cuando ya hace frío. Creo que el año pasado estaba así. Si, recuerdo que nos quedamos en tu casa viendo películas porque afuera hacía mucho frío. Espero que Dios me ayude este año y te dé un cielo azul. El azul siempre ha sido tu color favorito junto al beige, ¿cierto?"
Lo es, Yves. Y, si, el cielo está muy azul hoy.
"Estoy viendo al cielo ahora..."
Casi podías verla con sus brazos cruzados, sonriendo.
"...y está naranja. Haha, no puedes ver cielo 'amarillo' hasta el verano ¿verdad? Pero, ¿sabes qué? No me molesta el cielo naranja. Es bastante parecido, ¿no lo crees?"
Ya que estaba hablando del cielo, no pudiste evitar mirar tu propio cielo. Era un azul pastel perfecto con grupos de nubes de algodón blancas moviéndose perezosamente. Cerraste tus ojos y trataste de imaginar el cielo que ella tenía mientras grababa esto.
Cálido y brillante ámbar...
"Perdón si sueno rara, Jiwoo." Su tono alegre titubeó por un momento, "Es un poco difícil hablar con algo que no te puede responder, sabes. Digo, al menos tú me respondes, incluso si es algo pretencioso... pero eso es algo."
—¿Acaso en serio dijo que soy pretenciosa...? — Susurraste con un poco de gracia. Sin embargo, sabías que no era así. Si ella realmente creyera que eres pretenciosa, no se habría quedado contigo todo este tiempo.
Parpadeaste cuando escuchaste el sonido de una bofetada desde el cassette.
"¡Anímate, Yves! Alégrate, alégrate por el cumpleaños de Chuu~!"
No pudiste más que reír. Debió haberse golpeado ella misma para salir de su estado de melancolía. Tal vez no se daba cuenta pero sabías que Sooyoung frecuentemente entraba en fases de melancolía cuando no tenía en qué enfocar su energía.
Idiota, no tienes que fingir. Sólo con que hayas hecho algo así me hace feliz.
"No sabía que sería tan difícil hablar a un objeto. Hahaha. ¡Oh, ya casi llegamos! Bueno... casi llego al Cubo. Escucha cuidadosamente, ¿ok? Cuando llegues a la intersección, encontrarás un puesto a tu derecha. No cruces la calle. Esta a la vuelta de la esquina. Ahora, pausa."
Obediente a las reglas, pusiste pausa.
Seguiste caminando por la acera mientras buscabas la mencionada intersección. Te preguntabas por qué Sooyoung era tan imprecisa con las direcciones cuando conocías el camino. También creciste en esa ciudad después de todo y sabías, perfectamente, que el puesto del que hablaba era una florería.
—Ah, Jiwoo, estábamos esperándote.
—¡Hola Haseul, ViVi! — Saludaste a tus amigas que salieron de la tienda. Aunque era invierno, la señora Boram seguía recibiendo a la gente con maravillosas flores que cultivaba en su invernadero. Sus coloridos productos definitivamente le dan vida al invierno.
—Hoy es tu cumpleaños, Chuu. — Dijo Kahei amablemente aún sin echarte un vistazo. Estaba ocupada observando un ramo mientras te hablaba.
—Así es. No me molestaría si me regalaras un beso, ViVi. — Dijiste mientras la mirabas curiosamente.
—Eso no pasará Jiwoo. — La mayor procedió a darte el ramo que estuvo observando todo este tiempo.
Aceptaste el frágil regalo con agradecimiento.
— ¡Gracias, ViVi! — Examinaste el ramo y encontraste gladiolos amarillos y claveles rosados. Tocaste los suaves pétalos, sonreíste. Rara vez recibías flores tan hermosas. Sin embargo, en medio de todos los colores, notaste un pequeño tono azul.
Prefiriendo no suponer qué eran esas flores azules, le preguntaste a Haseul. — Ehm... Haseul, ¿qué son estas flores azules?
Haseul simplemente sonrió, divertida. — Me sorprende que no las conozcas, Chuu. Son Myosotis. Mejor conocidas como "Nomeolvides".
—Oh... ya veo. — Parpadeaste tontamente.
De todas las flores por olvidar...
—Debo decir que Yves tiene un gusto peculiar en flores. — Dijo Kahei antes de darte un pedazo de papel.
—¿Yves...?
—Ella las escogió, Chuu.
Desdoblaste el papel que te dieron.
"Presiona: Play
~Sooyoung"
—Ahora corre, Jiwoo. — Te dijo Haseul con una mirada de complicidad. — Disfruta tu cumpleaños, ¿si?
Agradeciste y te despediste de ambas antes de volverte a poner los audífonos. No podías quitar tus ojos del ramo mientras presionabas Play.
"Te estás sonrojando ¿cierto?"
Parpadeaste y sentiste que la sangre llegaba a tu rostro. Ahora que preguntó si estabas halagada, tu cuerpo recordó que debías estar sonrojándote porque de repente recibiste flores. Flores de ella.
"Ojalá pudiera verte, Chuu. Debes estar tan linda justo ahora, tomando ese lindo y rosado ramo."
Estabas muy tentada a golpear el Walkman pero no lo hiciste. Sólo era una grabación. Y, además, las bromas sólo eran un pequeño precio por ese borroso sentimiento que te abrigaba en este frío día.
"Espero que sepas que significan esas flores, pero bueno... estamos llegando al final de este cassette también. Tu siguiente anfitriona debería estar por ahí. Le dije que estuviera visible pero, conociéndola, probablemente se distraiga. Por suerte no la envié sola. Pero te aseguro que ya están ahí, si no, ¡recibirán unos buenos regaños cuando regrese!"
Con eso, sabías perfectamente que estaba hablando de Jinsoul, y con su eterna compañía; Jungeun.
¿Quiénes más podrían ser...?
El cassette hizo clic, en señal que terminó el "Play Me #1".
________
Un vívido lienzo cuelga en una pared. Tiene dos escenas diferentes, una azul y otra bermellón. Una chica de cabello largo camina en el fondo bajo el cielo azul, mientras que otra de cabello corto camina de la misma manera pero bajo el cálido resplandor del Sol de la tarde. — No importa cuál sea el tono, aún así caminamos bajo el mismo cielo.
________
Caminaste por el Cubo durante diez minutos antes de que escucharas la voz de la persona que estabas buscando.
—¡Wolas~Chuu, por aquí!
—¡Jiwoo! ¡Aquí!
Volteaste y viste a Jinsoul y a Jungeun justo en frente de Max Burger, Jungeun estaba prácticamente brincando mientras te saludaba.
—¡Jinsoul, Kim Lip!
—¿Eh? ¿Sabías que íbamos a estar aquí? — Preguntó Jungeun mientras te acercabas a ellas.
Cuidadosamente guardaste el ramo de flores en tu mochila. — Luego de que Heejin apareciera, era fácil adivinar quien sería la siguiente, debido al lugar. Pero no me esperaba que Kim Lip también estuviera aquí.
—Oww~ y yo que pensé que podría sorprenderte. — Jinsoul hizo un gesto.
—Si te hace sentir mejor, creo que todo esto es una agradable sorpresa. Digna de alguien tan maravillosa como yo.
A pesar de tu comentario egocéntrico, Jinsoul te dio una de las más brillantes sonrisas que has visto. Jung Jinsoul fue dotada verdaderamente para compartir su alegría con todos a su alrededor, igual que Sooyoung.
No había duda de por qué las dos se llevaban tan bien.
—¿Te estás divirtiendo, Jiwoo?
Hmm...
—¿Tú no?
—Si, claro. Me estoy divirtiendo mucho. — Intentaste sonreír brillantemente como ellas.
—¡Vamos a comer pastel! — Por alguna razón, sabías que Jinsoul diría eso.
—¡Celebremos tu diversión, Chuu!
La miraste fijamente. — ¿Eh...?
¿Acaso Jungeun había sido contagiada por las ocurrencias de Jinsoul?
— Además, es tu cumpleaños. ¡El pastel es obligatorio! ¡Vamos! ¡Vamos!
Jinsoul tomó tu mano y se dirigió hacia la pastelería que tanto amaba mientras Jungeun las seguía. Sin embargo, a diferencia de Jinsoul, recordaste que Sooyoung tenía más delicadeza con su impaciencia y emoción por jalarte hacia una tienda con poca fuerza. Sin embargo, la gentil alegría de Jinsoul contrastaba bastante con el ardiente entusiasmo de Sooyoung.
Pronto te encontrabas sentada en una mesa con numerosas rebanadas de pastel, un par de parfaits bañados con salsa de cereza, y una Jinsoul sonriente. Mientras que Jungeun se preguntaba si serían capaces de comer todo eso.
Definitivamente no era el almuerzo más convencional que hayas tenido.
Debe haber gastado mucho de su dinero para comprar todo esto...
—Eh... Jinsoul, no tenías que pedir tantos. — Le dijiste a la pelinegra incluso cuando ya era muy tarde.
—Opino lo mismo Jinsoul, son demasiados. — Dijo Jungeun.
—Lo sé~ — Rascó su mejilla con un dedo. — Pero, ¿no quieren probarlos todos?
—En realidad... no... — Hubieras estado más que contenta con una rebanada de pastel de fresa.
—¡Deberían! ¿Qué tal si dejan de hacerlos mañana? ¡Así ya nunca sabrán cómo saben! — Articuló alegremente, como si los pasteles fueran lo más importante en el mundo. Luego pensaste que, tal vez en el mundo de Jinsoul, la comida era lo más importante del mundo.
La comida y Kim Lip.
—Aunque no sepa rico, al menos lo probaste, ¿no?
—... Supongo. — No tenías una respuesta apropiada a su pregunta.
—¡Comamos! — Gritó Jinsoul más que emocionda. Jungeun se dejó llevar al verla tan feliz.
Y, así, tu batalla contra toda esa azúcar comenzó.
En el momento que terminaste el último pedazo de pastel de caramelo fundido, pudiste sentir que engordaste innumerables kilogramos. Gruñiste, derrotada.
Luego viste a tu compañera, que probablemente comió el doble que tu y gruñiste de nuevo.
Jinsoul no parecía como si hubiera comido una mesa entera de pastel y helado. Jungeun en cambio parecía que estaba a punto de desmayarse por tanto azúcar.
—Creo que comí demasiado... — Fue lo único que dijiste.
—Pero está bien, ¿cierto? — Respondió Jinsoul, sonriendo. — ¡Teníamos que probarlos todos! ¡Ahora ya sabes que escoger la próxima vez, Chuu!
No voy a comer por una semana...
—Por cierto. — Repentinamente habló Jungeun. - Feliz cumpleaños Chuu.
—¡Oh cierto! — Parecía que la comida hizo que Jinsoul olvidara por qué estaban ahí. — ¡Feliz cumpleaños Chuu!
Parpadeaste cuando Jinsoul te mostraba una libreta violentamente decorada. Lindos pegotines, mini-pompones y marcos pequeños cubrían la dura tapa del cuaderno color durazno. Diferentes letras en foamy de colores escribían tu nombre en la portada.
—¿Una libreta? — Decías mientras tomabas el regalo de las manos de la pelinegra. Sin embargo Jungeun fue la que comenzó a explicar.
—Como Yves y Jinsoul perdieron tu otra libreta, decidieron regalarte esta. Todas sabemos que te gusta escribir notas en libretas. Incluso puedes usarla como un diario.
Curiosa, abriste la libreta.
Ya había algunos garabatos en la cubierta interna...
—¡Los pingüinos están ahí para inspirarte, Jiwoo! Heejin ayudó a dibujarlos. — Jinsoul exclamó inmediatamente.
—Si, si... — No hiciste nada más que sonreír a pesar de tu exaltación. Era Jinsoul después de todo.
—Gracias Jinsoul, Kim Lip. Disfruté este tiempo con ustedes.
Las nombradas sonrieron.
—¡Oh, si, Chuu! El cisne- digo Yves dijo que presionaras Play cuando termináramos de comer pastel.
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Jiwoo caminando en una acera ligeramente sombreada, oliendo el ramo de flores con una sonrisa serena en su rostro. — Si tan sólo fueran rosas...
________
"¿Qué te tomó tanto tiempo?" Fue lo primero que escuchaste luego de poner el Lado A del "Play Me #2".
Estaba con Jinsoul y Jungeun, tonta...
"Haha, lo siento, tenía el presentimiento de que Jinsoul se tomaría su tiempo comiendo así que no me sorprendería si pasaste un tiempo extra con ellas en la pastelería. Bueno, ¿tu dulce paladar está satisfecho, Chuu?"
Rodaste tus ojos por costumbre mientras colocabas la mochila en tu hombro. Te acababas de separar de Jinsoul y Jungeun porque, cuando vieron la hora que era, te sacaron de la pastelería frenéticamente, diciéndote que caminaras hacia el centro, y desaparecieron de tu vista antes de que pudieras preguntarles por qué.
"Voy hacerte caminar un poco más lejos. Tómalo como un ejercicio por todo lo que ellas te hicieron comer." Dijo descaradamente la voz en el cassette. "Vamos hacia la tienda de videojuegos arcade esta vez."
—Supongo que allá me encontraré a Hyejoo… y Chaewon. — te dijiste mientras comenzabas tu viaje hacia la tienda de videojuegos.
"Considerando que es Jinsoul comiendo, no puedo suponer qué hora es para ti pero si sé que son 20 minutos de caminata desde la pastelería hasta allá. Haha. 20 minutos de hablar sola."
Miraste a tu celular para checar la hora.
1:30 PM…
Sacaste el pequeño pingüino de peluche de la mochila mientras escuchabas. Casi se te olvidaba el peluche debido a la emoción de hoy. Lo recordaste sólo cuando buscabas el segundo cassette de la caja. No supiste de donde sacó Sooyoung ese peluche, pero claramente era idéntico a uno grandote que tenías en casa.
Ahora que lo pienso, ése también me lo regalo ella.
"Oye, Jiwoo… Hace tiempo que no hemos improvisado, ¿verdad? Sólo nosotras dos. ¿Recuerdas cuando no teníamos al grupo? Hehehe. No podíamos escribir canciones pero podíamos… cantar. Nos tomó un tiempo pero logramos sincronizarnos luego de algunos meses que comenzamos a practicar." Reía mientras al fondo se escuchaban algunas risas de niños. "Heh, aún recuerdo cuando me molestabas con que cantara. Cantaba, sabes, era muy difícil al principio porque todo lo demás me distraía."
Empujaste un poco al pingüinito mientras escuchabas las palabras de Sooyoung. Ustedes dos no han podido escribir una canción juntas desde hace tiempo. Siempre improvisaban melodías y letras.
Han improvisado pero no han… escrito una canción desde hace mucho tiempo.
La última vez que escribieron una fue-
"…cuando repentinamente llegaste a mi casa toda emocionada sobre unas estrofas que te surgieron mientras ensayabas tu baile el verano pasado. Realmente me espantaste, sabes. Estaba lloviendo a cantaros y ahí estabas, empapada, jadeando, con tu libreta, lápiz, y todo, en frente de la puerta. Pensé que te habían echado de tu casa o algo así. Heh… poco probable que eso pase; tus padres te consienten mucho después de todo, Señorita 'Soy la reina de todos' Kim Jiwoo."
Reíste al recordar aquello.
"Jiwoo, ¿crees que ya somos profesionales? ¿Crees que tenemos lo necesario? Vimos a nuestros compañeros de agencia en aquel evento, lo dedicados que eran. ¿Crees que somos como ellos?"
También te preguntas eso, esa noche de Año Nuevo cuando tus amigas y tú despidieron el año. Se sintió maravilloso, liberador.
"Pero oye, no tenemos que ser profesionales para seguir como grupo, ¿verdad? Si puedo seguir cantando y bailando con todas ustedes entonces no me importa si un reflector alumbra mi frente o no. Hahaha."
Sonreíste. Es cierto…
No necesitamos un escenario para cantar y bailar juntas.
"Hmm, creo que este lado casi se acaba. Deberías estar cerca de la tienda de videojuegos. Puedo verla desde donde estoy. Hyejoo me dijo que preparó algo especial para ti así que es cuestión de encontrarla. Hahaha. Puede desaparecer fácilmente detrás de ese montón de máquinas de videojuegos, y Chaewon es más pequeña que ellas. Buena suerte, Chuu~"
El Walkman hizo clic, fin del lado A del "Play Me #2".
————————
Luego de las prácticas, diez chicas ven a través de la ventana de la puerta de la sala de ensayo. A través del vidrio, se pueden ver dos chicas; una baila aleatoriamente mientras que la de cabellos largos canta. Demuestran su concentración y lo inmersas que están en su propio mundo. — La música es como suenan los sentimientos.
————————
Encontraste a Chaewon parada a lado de un anuncio el doble de grande. Hyejoo estaba a su lado jugando en su celular.
—¡Chuu!
—Hola, Chae, ¿han esperado mucho?
Hyejoo dejó el celular y volteó a verte. Ella negó. — Acompañamos a Heejin mientras.
— ¿Heejin estuvo aquí?
— Si. Queríamos asegurarnos de que Jinsoul no olvidara 'accidentalmente' que tenía que encontrarse contigo. Ya sabes como es ella…
Te tomó un poco de fuerza de voluntad no reírte. Hyejoo y Heejin se preocupan demasiado por Jinsoul. Incluso si ella es la mayor.
—Ya veo.
—Oh, va a festejar con nosotras, luego de tu… cita. — La pequeña Chae desvió sus ojos como si se sintiera incómoda por la palabra que dijo, sonrojándose todo el rato.
Qué linda…
—¿Celebrar con nosotras?
—¡S-si! Pero… Ehm, no puedo hablar mucho de ello. Tendrás que esperar, Jiwoo unnie.
—Hoy ha sido un día lleno de sorpresas pero… supongo que una más no dolerá, ¿no? ¿Yves también planeó eso? — No querías nada más que preguntar. Sólo la chica de cabello corto tenía la audacia para organizar algo así.
Hyejoo asintió — En parte, si, pero ya verás. Ehm...
—¿Entramos? Yves dijo que preparaste algo para mí y ansío saber qué es. — Sonreíste mientras colocabas tu mano en el hombro de Hyejoo.
—No es nada especial, Jiwoo unnie. — Dijo tranquilamente, mirándote.
¿Es malo que no pueda verla sin pensar en un lobo…?
Deshaciéndote de esas ideas, le diste una suave pero alentadora palmadita en la cabeza antes de entrar a la tienda de videojuegos con ella y Chaewon.
A penas entraron viste un montón de máquinas por todos lados. Habían de diferentes juegos, para diferentes edades incluso.
—Quiero ir a la sección +18. —Dijiste.
—No podemos ir ahí. — Hyejoo se puso nerviosa.
—¿Por qué no? Somos mayores de edad...
—Chae y yo no.
—Pff, está bien. — Fingiste decepción.
Chaewon solo reía. Desde un principio sabía que lo dijiste bromeando. En realidad, preferirías ir a la sección de niños y verlos jugar.
—Unnie. — Chaewon te habló. — Hicimos esto para ti. — Te entregó una pequeña caja transparente.
Contenía diferentes collares, brazaletes y anillos.
—-Este… No pude pensar realmente en qué regalarte así que los hice y decoré junto a Olivia.
—Chae... — Estiraste tu brazo y tomaste el regalo.
Tus ojos se abrieron por completo cuando viste con lo que se decoraban. Unos tenían tu nombre grabado, otros el logo del grupo, incluso algunos tenían la silueta de pequeños pingüinos.
Inmediatamente querías adoptar a Chaewon y a Hyejoo como tus hermanas menores.
—¡Son increíbles! ¡Muchas gracias! — Tomaste las pequeñas manos de Chaewon junto a las delicadas manos de Hyejoo con las tuyas.
Chaewon se sonrojó. — ¿Te gustaron…?
Asentiste.
Cualquier expresión de vergüenza o duda desapareció del rostro de Chaewon. Ella sonrió.
—Me alegro.
Sacaste uno de los anillos y te lo pusiste. Ese día no llevabas más que ese.
—Oye, Olivia, Chae… — Dijiste, mirando alrededor del lugar. — ¿Quieren probar algunos juegos?
—¿Eh? ¿Ahora?
Ladeaste la cabeza mientras las mirabas confundida.
—¿No estamos aquí para eso?
—¡Oh, cierto! — Dijo Hyejoo. Chaewon solo rió.
El tiempo se fue rápido, ahora entendías por qué a Hyejoo le gustaban tanto los videojuegos.
—¡Eso fue increíble, Jiwoo unnie! — Hyejoo prácticamente brillaba de felicidad. Se estaba divirtiendo.
—Fue divertido, ¿cierto? — Sonreiste y le diste una palmadita en la cabeza a la muy-emocionada chica.
—¡Si! No sabía que eras tan buena.
—Yo igual lo hice bien... — Chaewon hizo un mohín. Claramente estaba celosa.
Rascaste tu mejilla.
—También estuviste asombrosa, Chae. — Le dijo Hyejoo. Ella sonrió.
—Claro que lo hice bien, soy Jiwoo. Soy perfecta... En realidad, en mis tiempos solía pasear mucho, y a veces venía a jugar aquí.
—Anciana. — Miraste incrédula a Chaewon.
—Enana.
—Bueno, — Habló Hyejoo. — Creo que ya es hora de que continúes con tu "cita" Jiwoo unnie.
—Aún tienes que terminar el último cassette. Por cierto...
Hyejoo y Chaewon se voltearon a ver. — ¡Feliz cumpleaños!
—Chicas…
—¡Presiona Play, Jiwoo unnie!
————————
Jiwoo y Sooyoung paradas espalda contra espalda en una gruesa pared que las separaba, sujetando un Walkie-talkie para hablarse. Ambas sonreían. — La amistad es sólo un alma que habita en dos cuerpos.
————————
"¿Qué te regalaron Olivia y Gowon, Chuu?" Te preguntó la voz mientras caminabas de regreso a donde saliste esta mañana.
Inmediatamente te dejaron luego de decirte que escucharas la última parte de los cassettes, diciendo algo sobre preparar una fiesta para después.
Sacudiste la cabeza.
Tus amigas tenían sus defectos pero lo único que verdaderamente no sabían hacer era guardar secretos.
"Bueno, supongo que es inútil preguntar, ¿no? No es que pudieras contestarme ahora. Heh, está bien. Lo descubriré cuando regrese."
Colocaste la mochila en tu hombro por enésima vez. Sooyoung te dijo que te dirigieras al parque al que solían ir de pequeñas. También te indicó que pausaras el cassette y sólo lo reanudaras cuando estuvieras a una cuadra de dicho parque.
El viaje hacia allá fue silencioso pero estabas muy feliz como para tomarle importancia. Todas tus amigas te dieron regalos maravillosos y de tal manera que le hizo cosquillas a tu niña interior.
Reíste y acariciaste la bufanda de tu cuello.
"Así que éste es último cassette. Espero que te hayas divertido incluso aunque no estoy ahí. Espero total adoración cuando regrese, Chuu. Después de todo preparé todo esto para ti."
Si dejaras de ser irritante así podría demostrarte mi adoración, tonta.
Eso pensabas pero sabías que abrazarías fuertemente a la chica de cabello corto en el momento que regresara.
"¿Qué hora es para ti, Jiwoo? Sé que es poco probable pero imagina que estás escuchando esto a la misma hora que lo estoy grabando. Son las 5:30 PM ahora, por cierto estoy grabando esta última parte el día antes de irme. El Sol comienza a ponerse y está comenzando a hacer frío."
Miraste el reloj de tu celular.
5:00 PM
¿Qué crees…? Por una vez, tu regalo de cumpleaños ha salido de acuerdo al plan, Yves.
"¿Ya estás en el parque? Estoy sentada en tu banco favorito. Hehe."
Levantaste la mirada hacia al banco central donde típicamente disfrutaban de su helado. Casi esperabas ver la descarada sonrisa de Sooyoung. A pesar de no poder hablar con ella, sentiste que estuvo contigo todo el día.
"Vamos, siéntate conmigo, Jiwoo" la escuchaste golpear el banco de madera.
Te sentaste en dicho banco y, sin prestar atención, veías a los visitantes salir lentamente del parque.
"Quiero que me cuentes todo lo que te pasó hoy cuando regrese, ¿si? Realmente me molesta que no haya podido pasar el día contigo. Esta es la segunda mejor cosa que puedo pensar."
Realmente no tienes remedio. Te perdoné en el momento que me abrazaste en el aeropuerto.
"Bueno, ¿qué es lo que deseas para este nuevo año de vida? Hehe, conociéndote, probablemente dirás: Más fans, ropa nueva… y tal vez un novio. Siempre has sido la romántica sin remedio."
Sooyoung idiota…
"Digo, vamos… todas esas canciones cursis. Casi siento pena por tu futuro novio, Jiwoo. Le va a dar diabetes. Hahaha."
Aprestaste el Walkman con tu mano, como si una mano invisible oprimiera fuertemente tu corazón cuando la escuchabas hablar de esas cosas como si no le afectaran.
"Hmm, ahora que lo pienso, nunca me has contado que tipo de chico te gusta, además que es obvio que debe ser romántico, dulce, y… ehm… guapo, supongo, ya que eres una chica linda y todo."
¡Tú… gran idiota… estúpida!
Querías llorar mientras seguía atacando una muy sensible parte de tu corazón. Seguía describiendo a ese maravilloso hombre que, según ella, era 'Digno de la maravillosa Jiwoo' y eso te lastimaba. Te dolía tanto que hablara de esa forma, como si fácilmente te dejaría ir cuando el 'chico correcto' apareciera.
Te amo, idiota…
Presionaste una mano contra tu boca para evitar que sollozaras. Ya no lo querías escuchar, bloqueaste su voz. No querías oírlo. No querías escucharla decir que te dejaría ir. No querías escucharla hablar como si no le importaran tus sentimientos.
La voz suspiró, "Debería detenerme o probablemente me golpearas en el momento que ponga un pie en suelo Coreano dentro de 14 días. Y esa no es la bienvenida que quiero. Heh. ¡Quiero fanfarrias y muchos abrazos! Haha, Oh rayos… el cassette esta a punto de terminar. Y es el último."
Vaya forma de terminar esta cita, Yves… eres tan estúpida.
"Ah, puedo decirte que las chicas te recogerán ahí ya que tendrás una fiesta en tu casa, ¡cortesía de tu mamá, claro!"
¿Cómo pudiste involucrar a mis padres en esto?
"Ella estuvo más que contenta en participar. Tu mamá es muy linda."
Cállate…
"Celebra toda la noche, ¿si? Mañana es domingo así que disfruta esta noche. ¡Disfruta tanto como puedas, me escuchaste!"
¡Cállate!
"¡Diviértete como si estuviera contigo!"
— ¡Cállate! — Gritaste a toda voz, incapaz de lidiar con su alegría.
Por un breve momento, deseabas no tener que verla nuevamente, que se mantuviera lejos de ti si todo lo que quería era herir a tu pobre corazón.
Tu corazón casi se detiene cuando el Walkman se quedó en silencio.
¿Y-Yves?
"Feliz Cumpleaños, Jiwoo." Su voz era suave, insegura y casi temerosa. "Te amo…"
El reproductor hizo clic en el instante después que dijo esas dos últimas palabras, terminando el lado B de "Play Me #2".
Tus ojos se abrieron por completo y tu corazón se aceleró.
—¡Jiwoo! ¡Por aquí!
—¡Chuu!
Te encontrabas congelada, mirando fijamente el objeto inanimado que tenías en la mano.
—¿Jiwoo…? — Escuchaste la voz de Haseul.
—-Ha-Haseul…
—¿Estás bien? — La líder se hincó en frente de ti.
Rápidamente limpiaste las lágrimas que salían de la esquina de tus ojos y asentiste. — Si… sólo… estoy feliz, es todo.
Cualquier incómodo sentimiento desapareció por esas simples palabras. Sooyoung fue dotada para hacer de tu vida un infierno y luego, en segundos, volverla un paraíso.
Todas tenían miradas de complicidad y gentilmente te levantaron de donde estabas sentada.
—Vamos, Jiwoo. Tus padres te están esperando. — Heejin te sonrió y emocionadamente jaló de tu mano.
Asentiste, sujetando el Walkman cerca de tu corazón. — Si… vamos.
Reuniste tus regalos, preciosos, y dejaste que tus amigas te llevaran a casa.
Gracias, Yves… por este maravilloso regalo.
————————
Traído por el viento de invierno, un periódico arrugado volaba detrás de los talones de una chica. Continuó volando hasta que golpeó un poste de luz. En él, escrito con letras grandes y negritas: "Vuelo 149 de la Aerolínea Coreana estrellado hoy, 20 de Octubre de 2019, a las 6:00 AM. Probablemente no haya sobrevivientes."
Una chica de cabello corto, ojos hermosos vistiendo un vestido blanco de tirantes recoge el periódico mientras ve a Kim Jiwoo y sus amigas dejar el parque. Lee las palabras en el periódico y sonríe tristemente. — Lo siento, no quería despedirme así…
————————
Si realmente tuviéramos un botón de Pausa en la vida.
Si sólo pudiéramos presionar Regresar cuando cometemos errores.
Entonces seríamos capaces de vivir nuestras vidas sin lamentos.
Así que prepárate.
Para ganar,
O perder todo.
Porque no hay vuelta atrás,
No hay Pausa,
No hay Regresar.
Por lo tanto reúne el coraje para enfrentar esos retos,
Es todo o nada,
Ahora presiona Play.
°~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~°
Hola.
Si tienen alguna duda, pueden preguntarme.
Bye.
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Todos los derechos de la historia a su autor/a original。 «
©┋ghikiJ (FanFiction)
➴┋Traducción: Adri-VolKatina (FanFiction)
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