Estaba sentado en el borde de su cama, asimilando toda la situación, sintiendo el dolor en su cuerpo. Sentía su cuerpo adolorido y débil, pero el dolor más insoportable fue el dolor en su corazón al saber que la persona quien más ama lo lastimó.

¿Cómo llegué hasta aquí? La frecuente pregunta que surgió hace ya seis meses atrás. Hueningkai soltaba lágrimas como si de un cielo lluvioso se tratase, sus pensamientos chocaban uno por uno. Sabe que las peleas son normales en las parejas pero si comprende que ser lastimado no es la solución a nada y es anormal en la gente que se ama. ¿Por qué sufrir por quien amaste por casi siete años?

Un portazo lo hizo sacar de sus pensamientos, se levantó rápidamente y bajó a la cocina donde su pareja lo esperaba. Miró fijo a su pareja, quien estaba con la mandíbula apretada.

—¿Otra vez estuviste llorando, maricón?— dijo el mayor con un tono duro en su voz.

El menor no pudo responder y solo se limitó a tragar un sollozo. Soobin por otro lado, se sacaba su abrigo y lo tiraba en dirección a su pareja, guárdalo, el menor solo lo acomodó y fue dirección al cuarto para colgar el saco del trabajo, sabía que iba a tener problemas si el mayor encontraba una sola arruga en su ropa.

Cuando bajó, tuvo que preguntarle que quería comer para poder cocinar. Mala idea.

—¿No cocinaste nada todavía? No haces nada en todo el día, ¿En qué gastas tu tiempo idiota? —le gritó.

—Lo...siento. No sabía que cocinarte. —dijo cabizbajo, sintiendo las lágrimas en sus ojos pero que no dejaba caer.

—Como siempre, parece que no sabes hacer nada. —se dio vuelta y fue hacia el teléfono.

Kai suspiró. Segundos luego se quedó viéndolo desde la puerta, hablaba animadamente con su amigo. Se lo veía feliz, como el día en que ambos se conocieron. Huening sonrió, le gustaba verlo feliz, como él no podía serlo quería que alguien a quien amara tanto por lo menos lo fuera. Soobin colgó el teléfono y vio a su novio parado en la puerta de la cocina.

—¿Tu que me ves? Vístete, iremos a la casa de Yeonjun. —dijo molesto.

Kai solo se fue a vestir, quería darse un baño pero sabía que si tardaba su novio iba a gritarle de nuevo, en parte, no quería sentir el dolor en su espalda y algunas partes de su cuerpo donde fue golpeado y lastimado por el mayor.

—Hyuka. —el menor fue rápidamente hacia él. —Haz algo con eso. —dijo refiriéndose al gran moretón en su cara, cerca de su labio.

Soobin estaba navegando por su celular en lo que Kai terminaba de arreglarse. El menor en su cuarto se puso ropa cómoda pero elegante, sabía que si su novio lo veía con jeans ajustados iba a golpearlo. Sabía tantas cosas sobre él que era mejor evitarlo. Hizo muecas de dolor al rozar la ropa en su piel cortada y herida. Luego de vestirse, se colocó la base de maquillaje. Estaba procurando de que no se viera maquillado ni lastimado.

Soobin perdió la paciencia y subió al cuarto.

—¿Por qué tardas tanto estúpido? —se quejó.

—Esto no es fácil de cubrir. —dijo con voz suave y débil.

Soobin rodó los ojos y se sentó en la cama. Estaba un poco inclinado con sus codos sobre el colchón y sus piernas abiertas. Miraba de arriba abajo a su novio con todo deseo lujurioso pasando por su mente. Kai se dio vuelta y vio a su novio mordiendo su labio.

—¿Qué? —dijo sonriendo suavemente.

—Ven aquí. —dijo con una voz cariñosa, acercando el cuerpo del menor hacia su cuerpo.

Lo sentó en su regazo y comenzó a besarlo con suavidad. Sus besos feroces y fuertes que lastimaban los labios y sentimientos de Kai pasaron a ser besos de amor de verdad, besos delicados llenos de sentimientos, como la vez que se conocieron. Soobin lo miró y acarició con suavidad la mejilla de Kai.

—Eres hermoso. —susurró. —No quiero que nadie más esté contigo.

—No mi amor, nadie estará conmigo. Te lo prometo. —sonrió y volvió a besarlo.

Kai era de las personas más fieles que una persona podía tener, era como tener un perro, fiel y leal a su dueño. Soobin conoce tanto a Kai, pero si conoces a una persona ¿Por qué muchas veces te falla? Soobin es el tipo de novio celoso, luego de ver un mensaje "muy cariñoso" por parte de uno de los compañeros de su novio, aumentó su nivel de celos y se acostumbró por vigilar a su chico, sentía que debía de vigilarlo. La infidelidad no iba con él y si Kai le era infiel iba a pagarla más que caro.

Cuando era hora de irse, le abrió la puerta del auto. Luego, él fue quien entró. El camino fue un poco incómodo. No hablaban mucho pero tampoco había silencio. Kai le preguntaba acerca de cómo le fue en su trabajo, Soobin le contestaba con modestia. Lee deseaba poder responder algún día esa pregunta, que su novio lo dejara trabajar, o al menos lo hubiera dejado terminar su último año de universidad. Deseaba poder estar en una veterinaria trabajando, rodeado de lindos perritos o gatitos, en otros casos cuidando de peces o loros. Deseaba poder trabajar en una tienda de mascotas y salvar a los animales.

Una vez llegado a la casa de Yeonjun, Choi tomó fuertemente del brazo a Huening y le miró de forma intimidante.

—Ni se te ocurra acercarte a alguno de ellos. —su mirada era muy profunda.

—Lo...lo prometo amor. —dijo sintiendo miedo.

Soobin lo soltó bruscamente y bajaron del auto. Kai sobaba su brazo adolorido y fue abrazado por la cintura, su pareja le susurró un leve pórtate bien.

Entraron a la casa y su amigo los saludó alegre.

—¡Qué bueno que llegan! Ya no soporto escucharlos. —dijo asqueado Yeonjun.

—Hola Jun. —saludó fríamente Choi, mientras se adentraba a la casa. Kai por otro lado estaba parado, sintiendo miedo e incomodidad.

—Hyuka, mírate. —dijo Yeonjun divertido, Soobin se volteó de forma brusca mirando con celos a su novio.

—Si... si gracias. Hola Yeonjun. —dijo nervioso. El más alto pudo captar los nervios y vio cómo su amigo se alejaba de él para ser abrazado por su novio.

Por otro lado, la habitación del hermano de Yeonjun, Taehyun, era abierta y de ahí salía el menor con su pareja.

—Uh... —dijo Beomgyu con un poco de vergüenza.

—¿No...? —dijo Taehyun con sus mejillas coloradas.

—Tranquilo recién llegan. —dijo Yeonjun rodando sus ojos.

Taehyun y Beomgyu se fueron a la cocina para ayudar a Yeonjun a preparar la mesa, Kai estaba al lado de Soobin mientras el Kang mayor era un manojo de preguntas hacia la pareja. Soobin cada vez apretaba más la cintura de su pareja, pero debía de resistirse a las muecas de dolor.

Beomgyu gritó que todo estaba listo y que podían comer ya. Yeonjun les sonrió y los invitó a la cocina. Allí, Taehyun se sentó junto a Beomgyu, Yeonjun en una esquina y Soobin junto a Kai, éste último no tenía a nadie sentado en la esquina a su lado, justo como a Soobin le gustaba. Estaba cabizbajo, sin decir una sola palabra y sin mirar a ninguno de los chicos.

—Kai... estás muy callado ¿Qué tienes? — dijo Taehyun. Conocía al amigo de su hermano y era lo contrario a silencioso.

—Yo... —fue cortado por Choi.

—Está un poco enfermo. —mintió el mayor.

—No deberías de comer entonces. —dijo Yeonjun preocupado, queriendo sacar su plato.

—Déjalo. —dijo con un tono fue muy fuerte, que todos se quedaron viendo de forma sorprendida la reacción del mayor.

Kai sentía el brazo del mayor rodear su muñeca, haciendo más fuerte el agarre. El dolor aumentaba y su mano se tornaba de un tono azulado. Soobin miraba con fuerza al mayor quien se volvió a sentar.

—Lo siento. —dijo, regalando una sonrisa. —No deberías, él sabe lo que hace. —Yeonjun sonrió apenas y se volvió a sentar.

El ambiente se volvió más incómodo en la casa. Soobin hizo una pregunta al hermano de su amigo para romper el hielo.

—¿Y ustedes hace cuanto están juntos? — dijo casi sonriendo Choi.

—Hace dos años. —dijo Beomgyu, así sorprendiendo a los invitados.

—Jamás nos dijiste que tenías pareja. —dijo por primera vez en la noche Kai.

—Bueno, si, pero es que cuando empezamos a salir, yo estaba en Estados Unidos estudiando. —dijo esta vez el Kang menor.

Kai recordó que Taehyun había sido transferido a Estados Unidos cuando tenía diecisiete años, tal vez durante su transferencia conoció a su novio. Solo pedía que Taehyun no pasará por lo mismo que él cuando tuvieran un poco más de años. Aunque viéndolos, ellos disfrutaban de su relación como una pareja normal. Miraba y pensaba lo lindo que debía ser tener un novio como Beomgyu, que se rían y jueguen, que tengan cuidado del otro cuando tuvieran su intimidad o en cualquier lado, que puedan salir con sus amigos, y que ninguno tuviera celos. Ellos también empezaron su relación a los diecisiete años, y a los diecinueve eran dos locos enamorados. Apenas llegó a los veinte, Soobin empezó a ser posesivo y mandón. A los veintitrés años, Soobin lo mantenía como novio florero, no lo dejaba socializar ni estudiar. Kai tenía miedo de que Beomgyu fuera igual, o al revés.

Soobin acarició la mano de Hueningkai y lo sacó de sus pensamientos.

—¿Amor? ¿Todo bien? —dijo Choi, de forma amable. Hueningkai solo asintió.

Eran las 23:00, Beomgyu y Taehyun estaban consumidos por una película, mientras que Yeonjun y Soobin estaban hablando en la cocina.

Kai estaba en el baño, sus ganas de llorar aumentó cuando Soobin comenzó a mentir sobre él. No sabe que estudiar; Odia a los animales; No es muy sociable; Somos una pareja feliz. Si fuera feliz podía haber terminado de estudiar, podía salir con sus amigos, podía celebrar sus cumpleaños, podía visitar a sus padres, podía comer lo que quisiera cuando quisiera, podía vivir. Pero no, pasados tres años desde que estaba con Choi Soobin, su vida dio un giro drástico, así dejando paso a la amargura y la tristeza.

Secó sus lágrimas y quitó todo rastro de llanto. Se miró al espejo y se sonrió. Pronto cambiará dijo para sus adentros, pensaba que un día volvería el otro Soobin, el chico que conoció hace seis años atrás, el que lo dejaba decidir, socializar, vivir.

Salió del baño y volvió a sentarse en donde estaba antes. Soobin le dio su teléfono cuando volvió y le sonrió.

—Chicos, les agradecemos todo, esperamos volver o que vayan a casa. —sonrió Choi.

—¿Ya se van? No han probado el postre. —dijo con un puchero Yeonjun.

—Es que estamos cansados y considerando el tiempo que Hyuka tardó, se ve que está mal. —dijo sarcástico, volviendo a apretar su cintura.

—¿Enserio? —dijo sin creerle.

—Enserio hyung. —dijo Huening, con un tono apagado.

La pareja se estaba despidiendo de los jóvenes adolescentes, que se habían quedado dormidos mirando Toy Story. Yeonjun los acompañó hasta la puerta, divisó la escena, Hueningkai entrando un poco molesto al auto y Soobin con la mandíbula apretada entrando al asiento del conductor, mientras azotaba con fuerza las puertas del auto.

Frunció el ceño y vio como el auto se iba, los jóvenes miraban desde la ventana y saludaron, a lo que Kang imitó. El auto se fue y Yeonjun se quedó pensando.

¿Qué fue todo eso?

Esta es una adaptación créditos a coscomix gracias por dejarme adaptarla >3<

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