En la sala de estar del departamento de Makima se encontraban Megumi y Tsumiki haciendo su tarea de la escuela, mientras el cachorro estaba junto a Tsumiki, su cabeza apoyada sobre el yeso en la pierna de la niña.

Se escuchaba una música en el ambiente, ni tan fuerte y ni tan baja.

Todo eso estaba siendo observado por Ayra Ueshiba junto a Makima, quienes los veían a través de un monitor y otros monitores tenían otras imágenes que se veían en otros ángulos del departamento.

─ La recuperación de Tsumiki ha sido rápida, los niños se recuperan más rápido que los adultos después de todo.─Dice la de cabello violeta con una pequeña sonrisa, se había encariñado con los pequeños.

Makima mira de reojo a Ayra, sin que la última mencionada se de cuenta. Para luego mirar el monitor en el que se encontraban los niños.

─ ¿Qué puedes ver?─Pregunta Makima con su ya reconocida tranquilidad.

En Ayra Ueshiba, aparecen dos manos de sombras que cubren sus ojos y boca a la vez, la mano que cubría los ojos tenía un ojos blanco en el dorso de la mano.

─ Culpabilidad... Por parte de Megumi, se siente mal por lo que pasó con la maldición de segundo grado.─Responde con una voz ligeramente distorsionada la mano que tenía una boca en el dorso de esta.─ Tsumiki se siente inquieta y preocupada por lo que puede pasar a futuro.

La de ojos dorados hace una pose pensativa, mientras ve el monitor dónde se encontraba la cámara.

─ Lo que ocurrió hace poco más de medio mes con esa maldición los debió afectar, incluso tal vez un trauma que no deberían de haber presenciado a esa edad.─Dice ella mientras ve atenta al monitor.─ Tendré que borrarles la memoria sobre ese suceso, será lo mejor.

─ ¿Puedo opinar sobre esa decisión, señorita Makima?─Pregunta Ayra de manera inmediata al escuchar lo que Makima planeaba.

Makima la mira por unos segundos.─ ¿Por qué no?

Ayra se aclara la garganta.─ ¿Alguna vez pensó... Preguntar antes de modificar la memoria de quienes quería que le sirvieran a usted?─Pregunta algo insegura de lo que estaba diciendo.

─ Hm... No.

─ A lo que quiero llegar, es que creo que aunque lo que pasó con los niños Fushiguro fue malo y traumático para ellos, sería mejor que les pregunte para tener su consentimiento y así no habrían problemas futuros...

Makima piensa un momento, con la mirada ahora en la pantalla del monitor viendo a los dos niños quienes estaban guardando sus cosas luego de terminar de hacer su tarea.

O bueno, Megumi hacía eso también por su hermana por obvias razones.

─ *Espero no haber dicho algo malo o me controlará como a los otros...*─Piensa la de ojos lavanda algo nerviosa.

Hubo un par de segundos de silencio.

─ Ayra-chan... Tú nunca pones las llaves debajo de la alfombra de la puerta de entrada del departamento, ¿verdad?

Ayra levanta ligeramente la ceja algo confundida por esa pregunta que no tenía nada que ver de lo que estaban hablando.

─ Eh... No, ¿por qué?

Makima apunta otro monitor, en el que se veía a Satoru Gojo entrando por la puerta del departamento con sus propias llaves.

Ayra parpadea un par de veces consecutivamente mirando el monitor.─ ¿Qué demonios...?

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─ ¡Ya llegué! Traje helado~─Canturrea el albino con una sonrisa, mientras alza la bolsa que tenía en mano con un paquete de helado.

─ ¡Gojo-san!─Exclama Tsumiki con sorpresa pero sonriendo ligeramente.

Mientras que Megumi se muestra igual de sorprendido, pero a diferencia de su hermanastra mayor se muestra ligeramente molesto.

─ *¿Qué hace él aquí?*─Se pregunta a sí mismo con la ceja ligeramente alzada.

─ ¡El mismo!─Dice mientras se apunta a sí mismo con orgullo, para luego ir a la mesa y dejar el paquete de helado.─ Y bueno... ¿Dónde está Makima?

─ Dijo que iba a su trabajo... Pero no nos dijo nada sobre que recibiríamos una visita tuya.─Dice el pequeño de cabello puntiagudo, apuntando de manera acusadora a Satoru.

El usuario de seis ojos se ríe ligeramente a manera de burla y broma a la vez, lo que irrita más al pequeño Megumi.─ Megumi, Megumi, Megumi; tú siempre tan... Severo conmigo, ¿acaso no te agrado?

─ No.

Tsumiki ríe nerviosamente ante la situación que se desenvolvía frente a ella.─ Traeré unos platillos para el helado.─Dice ella mientras tomaba las muletas cercanas.

─ Yo lo haré.─Rápidamente Megumi se dirige a la cocina antes de que Tsumiki se levante de su asiento, dejando a la mencionada y a Satoru solos en la sala de estar.

Satoru se sienta en una silla mientras saca el paquete de helado de la bolsa.─ ¿Ya estás mejorando?─Pregunta mientras apunta la pierna enyesada de Tsumiki.

Tsumiki asintió suavemente, su sonrisa se mantuvo aunque algo más tímida.

─ Sí, va mucho mejor. La señorita médica dice que en unas semanas más podría dejar las muletas.─Contestó la niña con voz calmada, observando a Satoru mientras este sacaba el helado.

─ Eso es genial, Tsumiki.─Dijo mientras sacaba las cucharas de la bolsa.─ Megumi-kun está muy pendiente de ti, a pesar de ser un pequeño cascarrabias que no muestra afecto, se ve que dentro de esa masa de maldad que tiene es blando.

Tsumiki asintió de nuevo con pequeñas risitas, mirando hacia la cocina donde Megumi estaba subiendo a un pequeño banco para alcanzar los platillos de la estantería.

─ Él siempre ha sido así. Desde que era pequeño, no era tanto de mostrar afecto... Pero es tan cascarrabias.─Explicó con cariño en su voz.─ Pero yo me preocupo por él, no quiero que cargue con todo solo y que se sienta culpable, después de lo que pasó esa noche con esa cosa.

─ ¿Cosa? ¿Makima no les dijo que eso era una maldición?─Cuestiona el albino con una ceja alzada.

Tsumiki parpadeó ligeramente confundida.─ ¿Maldición? Umm... No, no nos habló nada de eso hasta el momento y tampoco queremos preguntar.

Satoru puso una mano en su propio mentón, en una pose pensativa.─ *¿Por qué ella no les dijo? Es importante...* Bueno, una maldición es...

Pero se oyeron un par de golpes en la puerta, interrumpiendo la conversación. Satoru giró la cabeza ligeramente para ver a la puerta, Tsumiki se veía confundida y Megumi asomó la cabeza desde la cocina también algo confundido.

─ No esperamos visitas... Y Makima-san...─Megumi fue interrumpido por el albino.

─ No es Makima... *Es un hechicero de primer grado...*─Piensa el albino con el ceño ligeramente fruncido, ya que gracias a sus seis ojos pudo detectar la energía maldita detrás de esa puerta.

Satoru Gojo se dirige a la puerta, mientras que Megumi coloca los platillos en la mesa y se pone delante de Tsumiki.

Él abre la puerta, no hay mucha preocupación en su rostro, después de todo, es el más fuerte.

─ Huh... Así que te encuentras aquí.─Dice el hombre de cabello negro sin mucha emoción.

─ Ougi Zenin, la sombra de Naobito... No es un gusto verte desde la última reunión de hace... Ya ni me acuerdo cuántos años pasaron.─Suelta el albino con una sonrisa burlona.─ Al grano anciano, ¿qué quieres?

─ Vengo a llevarme a Megumi Fushiguro al clan Zenin.─Responde de manera seria.

Satoru Gojo volteó la cabeza para ver al pequeño Megumi y a Tsumiki, uno se veía con el ceño ligeramente fruncido y la otra se veía preocupada.

─ Estoy consciente de que puede ser un gran hechicero, pero no te lo puedes llevar y menos a ese clan de mala muerte y cuestionable si nos referimos en la familia.─Dice con cierto sarcasmo en sus palabras.

─ ¿Por qué no mejor se lo preguntas a su padre? Él lo vendió y el jefe del clan le dio el dinero, el negocio ya fue ejecutado.─Responde con el ceño fruncido y una mueca molesta.

─ Y tú pregúntale a su cuidadora, a ver si ella los va a soltar con facilidad.─Contesta con una sonrisa burlona.

Una mirada de enojo y odio vino de Ougi Zenin a Satoru Gojo, pero este no se inmutó y le dió una mirada de superioridad.

Se escucharon pasos del pasillo.

─ Señor Zenin, que bueno que haya venido...─La voz de Makima se escucha al acercarse a la pequeña discusión.

Ambos hombres voltearon a verla, Satoru con una ceja alzada y Ougi con ligera molestia por la conversación anterior.

─ Disculpe que mi visita haya sido tan irrespetuosa con usted, porque realmente la visita de Satoru Gojo también fue una sorpresa e inesperada para mi, pero me gustaría que pudiéramos tener nuestra reunión...

¿Reunión entre la demonio del control y el hermano menor del jefe del clan Zenin para hablar sobre el destino de Megumi Fushiguro?

Qué conversación tan interesante tendrán.

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¡¡¡HE VUELTO!!!

Lamento haber tardado, ya saben que los capítulos salen cuando ya están listos.

Me gusta explorar cosas, aún no llegaremos a Jujutsu Kaisen 0, porque tengo que cocinar esta historia para que no sea tan monótona.

¿Les está gustando por dónde está yendo la trama? Porque yo espero que sí.

Espero les haya gustado el cap, realmente me gusta escribir esto.

Los quiero (⁠ ⁠ꈍ⁠ᴗ⁠ꈍ⁠).