Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

🌼 Capítulo I

A través del cristal de la ventana y gracias a los colores del cielo se podía notar que el día estaba acabando, era ya domingo, domingo por la tarde noche, posiblemente uno de los peores momentos ya que en pocas horas volvería a empezar la semana y junto a ella el conocido horario de clase, algo que para múltiples niños era una tortura pero para nuestro pequeño no.

ONU Ereny Angel Walker, un niño que apenas cursaba actualmente primero de primaria.

Un pequeño algo alto para su edad, mientras sus compañeros rondaban el 1'20 de altura en el caso de ONU era aproximadamente 1'24, no tanta diferencia realmente pero si la suficiente para ser clasificado como el más alto de todo primero.

Su piel era pálida, tanto que algunas personas que lo venían lo comparaban con el color de la nieve aún está siendo develada por pequeñas tonalidades rojizas por sus mejillas, nariz al igual que en la punta de sus ojeras y el rosado que teñía sus labios.

Su pelo era normalmente peinado hacia atrás con un par de mechones juguetones por todo su rostro, de tono rubio platino que hacía resaltar esos azulados y grandes ojos llenos de brillo.

En sí, desde el primer día que el joven piso esa casa, con apenas un par de meses de vida, todos lo comparaban con un pequeño ángel volviéndose así el tesoro más preciado de su padre.

Y lo de ONU no se limitaba solo a su belleza, era considerado un niño bondadoso y de gran corazón aparte de que aún con tan corta edad sus notas nunca bajaban de sobresalientes con apenas estudiar, era un genio nato, y nadie esperaba menos del hijo de la primera potencia mundial.

"Es un ángel" "Es muy obediente" "Es un amor de niño", todo eran halagos hacia el joven, el orgullo de su padre sin lugar a dudas.

ONU es un gran chico, nunca se mete en problemas, es listo, popular... Tengo el hijo perfecto.

Esas eran las palabras de su propio padre cada vez que le preguntaban sobre el joven, pero no todo era color de rosa.

ONU amaba mucho a su padre, y eso estaba claro puesto que a la mínima que lo veía corría a sus brazos, y cada vez que salía en la tele él se alegraba dando saltos y diciendo "¡Papá papá!". Pero a la vez le entristecía que no tuviera tanto tiempo para él, aunque en el fondo ambos sabían que para cualquier problema siempre estaría ahí, puesto que solo quería lo mejor para su hijo.

Pero por buscar lo mejor, le metió en el peor problema que pudo tener...

→ONU←

Baje de aquella limusina con ayuda de Lewis, el chófer que papá contrato, cerré la puerta seguido de que mis pies tocaran el suelo y me dirigí con toda velocidad hasta el portón de mi casa el cual estaba abierto por Zara, una de las empleadas de la casa.

— ¡ Que tenga buen día Lewis! — Me despedí con mi mano mientas cruzaba el portal — ¡Buenos días Zara!

Ambos se inclinaron en modo de despedida y saludo respectivamente, corrí con más energía hasta la casa riendo y agarrando las asas de mi mochila, ¡hoy papá tenía la tarde libre!

Soy hijo de Estados Unidos de América, USA para los amigos, muchos de mis compañeros de la escuela dicen que es genial y todo eso, y no lo niego, ¡Mi papá es genial! Siempre está atento conmigo en sus tiempos libres y suele cancelar o negar reuniones para venir a eventos del colegio. Es el mejor papá del mundo.

Pero a su vez, últimamente ha tenido demasiados problemas, y muchos eventos que no ha podido cancelar... Él estaba triste por dejarme solo y me dijo que hoy tenía una sorpresa para mi, por lo que mi emoción se multiplicó al llegar a casa.

— ¡Llegué~! — Saludé desde la puerta, sacándome la mochila y los zapatos del uniforme, corriendo hacia el salón nada más dejé estos en el mueble de la entrada — ¡Papá papá! — Llame al mayor, emocionado.

— ¡En el salón! — Me avisó.

Corrí hasta esta habitación, estaba ilusionado, no tanto por la sorpresa si no más por ver a mi papá, aunque me extrañe puesto que al llegar él no estaba a solas como de costumbre, si no que un hombre estaba junto a él.

Me quedé viéndole, era un señor moreno casi de la edad de mi papá, con gafas de sol, pelo negro desordenado y que vestida con un traje policial esos especiales.

Oh, ¿Es un amigo? — Pregunté, acercándome a este hombre tras soltar mi mochila en el sillón. — ¡Buenas! ¡Me llamo ONU Edwan Walker! ¡Tengo 7 años y mi papá es Usa! — Me presente, tan como me habían enseñado a hacerlo mientas estiraba mi pequeña mano hacia el hombre.

El hombre río, extendiendo su mano hacia la mía y estrechando la, era muy grande...

Un gusto ONU, soy FBI. — Comentó, sonriendo levemente.

ONU — Mi papá llamo mi atención — FBI es un gran amigo mío, es policía y me ha ayudado mucho, así que le he pedido un favor. — Le mire, esperando que siguiera — Apartir de ahora él estara cuidándote cuando yo no pueda, ¿Sí?

Miré de reojo a este hombre, su sonrisa, su ropa... Algo en él no me acababa de gustar, pero papá nunca me mentiría ni me pondría en peligro... ¿No?

Oh, ¿Y tú? — Pregunté, viendo al rubio.

Seguiré contigo... Claro que sí, pero cuando yo no pueda estar aquí tendrás a FBI para no estar tan solo...

Bueno. — Aquel hombre habló, interrumpiendo la conversación entre papá y yo. — ¿Por qué no nos conocemos un poco, ONU? Así tu padre podrá descansar tras el trabajo.

— ¡Sí! ¡Claro! — Sonreí, acercándome a mi mochila y cargándola. — ¡Vamos a mi cuarto! — Sonreí, dirigiéndome hacia las escaleras.

Me giré uno segundos, papá se veía serio junto a este hombre, algo me preocupaba pero al notar mi vista volvieron a verse felices... Adultos supongo... O miopía.

— ¡Ven Señor FBI! — Le llame, este se levantó del sofá, viniendo hacia mi después de despedirse de mi padre. — ¡Vamos!

Había soltado mi mochila sobre el escritorio, estaba sentado sobre la cama y FBI de pie a mi lado, le había dicho varias veces que se podía sentar pero no hacía caso... Era como una Barbie.

— ¿Cuantos años tienes? — Pregunté, viendo hacia este señor.

35 años. — Respondió, viéndome. — 5 veces tu edad. — Sonrió levemente.

Eres muy alto, ¿Cuanto mides? — Volví a cuestionarme.

1'87 — Contesto, parecía Google, yo preguntaba él respondía.

— ¿Cuál es tu color favorito? — Volví a preguntar.

— ¿Por qué me haces tantas preguntas? — Esta vez evito responder.

Es para hacernos amigos, ¡Mira! ¡No seas tímido! Yo tengo 7 años, mido 1'24 m, peso 23 kg y mi color favorito es el celeste. — Respondí ante mis propias preguntas. — ¿Ahora me dirás tú color favorito?

El negro. — Respondió, viendo hacia el frente — Y el azul marino.

— ¡Tenemos mucho en común! — Dije — ¡A ti te gusta el azul! ¡A mi también! ¿Podemos ser amigos? — pregunté, levantándome de la cama y yendo hacia él.

Bueno, estaría bien que seamos amigos, al final vamos a estar mucho tiempo juntos.

— ¡Pues ya eres mi amigo! — Dije, agarrando la mano del contrario — Tienes las manos muy grandes...

Y tú muy pequeñas... — Respondió, agarrando mi manita y acariciándola con el pulgar. — Y una piel muy suave...

Gracias — Dije, soltando su mano y sonriendo.

La voz de mi padre sonó llamándome para comer desde el exterior de la puerta. Me separé de FBI y me dirigí corriendo hacia la puerta, viendo a este.

— ¡Vamos señor FBI! — Respondí, sonriendo y abriendo la puerta para salir corriendo hacia el comedor.

Horas antes...
→FBI←

Desde el minuto 0 que me contaron he estado a cargo de la vida de USA a la par que de los problemas en la ciudad. Nunca he aceptado un soborno ni he dejado escapar a un criminal, por lo que sin mucho esfuerzo llegue a ser el jefe del gremio policial y un miembro respetado, todos me adoran, me confían sus vidas, y es un orgullo para mí protegerlas y tener esa confianza del país.

USA me había llamado especialmente para un "cambio de planes", y eso me tenía aquí ahora mismo, en el salón de su casa, un lugar algo informal pero a la vez seguro.

Supongo que ya te han llegado las últimas noticias... ¿No? — Me preguntó desde su asiento, y antes de que pudiera responder siguió hablando — Están habiendo muchas desapariciones de niños entre 2 a 15 años... Dicen que es por un grupo de pedófilos o traficantes... ¿Estas al tanto?

Sí señor, tenemos a múltiples agentes especialistas en investigación en el caso por si esa es su duda, aunque todavía no hay respuestas o pistas — Respondí, manteniendo mi postura firme ahí mismo.

No realmente — Respondió. — FBI, eres mi mejor agente... Te dejo mi propia vida en tus manos y tengo la confianza de que no me pase nada... — Empezó a hablar, incorporándose en su silla, se iba a poner serio — Sabes que tengo dos hijos, ¿No? — Preguntó.

Sí señor.

Uno de ellos está ahora mismo está con NASA, estudiando, él está en buen resguardo... Pero me queda otro niño... — Hizo una pequeña pausa, sacando de su bolsillo una foto y entregándome la.

En esta se podía ver a un pequeño niño, pelo rubio platino y ojos azules... Parecía un muñequito o un pequeño ángel.

Es ONU, me han llegado rumores de que está en peligro por esos grupos de pedófilos... — Este empezó a decir, recostándose en el sillón — No sé si será verdad o no, pero igualmente hay muchas razones para que lo ataquen a él por dañarme a mi... ¿Sabes por dónde van los tiros?

— ¿Seré el guardaespaldas de un crío? — Levante mi vista de la foto, mirando a USA.

De mi hijo... Te subiré el sueldo a cambio, pero quiero que estés pegado a mi hijo... Que no le toquen ni un pelo... ¿Sí? — Asentí — Sabía que podía confiar en ti.

El contrario se levantó del sofá, acercándose a mí y tocando mi hombro a leves palmadas.

A partir de ahora y hasta nuevo aviso serás la puta sombra de mi hijo, si hace falta cuando yo no esté te vienes aquí o te lo llevas a tu casa... Pero no quiero ni el mas mínimo rasguño por accidente... ONU es mi tesoro más preciado ... ¿Entendido?

Entendido señor.

Él sonrió y posteriormente estrechamos manos, USA se dirigió hacia un mini bar que había a un lado del salón, dejándome a mi viendo la foto.

Por pura curiosidad... ¿Cuantos años tienes? ¿10? — Pregunté, viendo aquella fotografía y fijándome en cada detalle de está.

7 años ... — Respondió este, viendo hacia otro lado. — 24 de Octubre por si te interesa.

Guarde la foto del chico en mi bolsillo, viendo hacia USA y asistiendo.

Entendido señor.

Cuidar a adultos es una cosa, y hacer de niñera otra, pero había tantas buenas palabras respecto a este jovencito que era imposible decirle que no a esa linda carita redonda... A ese fino cuerpo y a inspeccionar ese cuerpecito....

Suspiré acercándome al sofá...  Ya quiero tener a ese muñeco en mis manos, solo de pensarlo ya me pongo duro...

Putas es el cumpleaños de ONU hoy justo JSJSJS NI QUERIENDO GENTE.

1882 palabras.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro