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🥀Capítulo 5-Simple humano🥀

Octubre del año 1700

En la mansión Jeon vivía un joven llamado Hoseok. Su mente era un laberinto de sombras y susurros porque sufría de una extraña enfermedad que nadie comprendía. Los aldeanos lo consideraban maldito, y su madre, desesperada, buscaba respuestas en los libros antiguos y las supersticiones.

Hoseok veía cosas que los demás no podían ver: sombras danzantes en las esquinas, rostros distorsionados en los espejos y voces que le susurraban al oído. Pero lo que más lo atormentaba eran las visiones del demonio. Un ser de ojos llameantes y garras afiladas que se materializaba en las noches de luna llena.

La gente murmuraba que Hoseok estaba poseído, que el demonio lo había elegido como su víctima. Su madre lo llevó a los curanderos y sacerdotes, pero ninguno podía aliviar su sufrimiento. Los tratamientos eran brutales: sangrías, exorcismos y encierros en celdas oscuras.

Él era el tercero de cinco hermanos, el mayor era Jeon Seokjin. Bueno con la espada, estaba comprometido con una hermosa mujer llamada Sabrina. El segundo hermano era Jeon Namjoon, tan obediente y pulcro, era un médico reconocido en el pueblo a pesar de ser joven. El tercero era Hoseok, quien permanecía siempre oculto porque era considerado demente. El cuarto Jeon Yoongi, creció siendo la sombra de Hoseok y siendo ignorado por sus padres ya que al tener un hermano con problemas mentales le prestaban más atención. Así que Yoongi no hablaba con casi nadie, los únicos con los que tenía confianza eran sus hermanos y años después apareció su hermano menor; Jeon Jungkook. Al ser el más joven también era ignorado, por lo tanto Yoongi lo cuidaba como a un hijo, por eso era su favorito.

Jungkook se obsesionó con querer ayudar a su hermano para que sanara de esa extraña enfermedad. Por eso una noche decidió embarcarse a las montañas en búsqueda de brujas, pues se decía que ellas guardaban secretos ancestrales que podían ayudar a su hermano a mejorar.

Estando en el bosque sintió cientos de ojos mirarlo, hasta que una de ellas se acercó. Sus ojos brillaban con malicia y sabiduría. Las otras brujas comenzaron a acercarse rodeándolo en un círculo, todas vistiendo túnicas oscuras, todas con sus cabellos enmarañados.

—¿Qué haces aquí? —preguntó una con voz aterradora provocando que la piel de Jungkook se erizara.

—¡Quiero su ayuda! —gritó tembloroso.

En ese momento la antorcha que llevaba en sus manos se apagó, provocando que el ambiente que ya era de miedo se convirtiera en uno de terror.

Las brujas se carcajearon, todas comenzaron a murmurar.

—Los tuyos nos han cazado durante años, estamos excluidas y ahora. ¿Quieres que te ayudemos?

—¡Tengo un hermano, él está enfermo! —gritó llenándose de valentía—. ¡Mi madre dice que las brujas ancestrales pueden ayudarlo, por eso he venido!

—No podemos ayudarte, vete o nos comeremos tus intestinos.

—¡Se los ruego! —suplicó.

Las brujas sonrieron.

—Entonces, bebe de nuestra copa maldita —dijo una de ellas acercándose a él.

Ella estaba descalza, al acercarse hizo emerger de su mano un cáliz lleno de líquido carmesí. Jungkook tenía miedo pero quería ayudar a su hermano. Así que bebió, sintiendo cómo su sangre se transformaba. El dolor fue agudo, como si su piel se desgarrara desde dentro.

Y las brujas danzaron a su alrededor burlándose porque era un humano más al que asesinaban.

Jungkook mintió.

No llevó a Jimin al sótano cuando se recuperó porque no podía resistirse a sus encantos. Lo veía caminar y andar drogado con su sangre por toda la mansión, era su sombra, lugar al que iba Jimin, era lugar al que iba Jungkook. Cada paso que daba, cada rincón que exploraba, estaba impregnado de la presencia y del aroma de Jimin.

Sus hermanos vampiros lo veían con recelo, les parecía extraño ver a Jungkook emocionado porque era difícil de complacer.

El aroma de Jimin era dulce y adictivo, y Jungkook se encontraba atrapado en una espiral de deseo y culpa.

Los hermanos vampiros observaban desde las sombras. Se preguntaban qué había sucedido con Jungkook, el cazador implacable que solía burlarse de las debilidades humanas. Ahora, estaba dispuesto a enfrentarlos por su causa.

—¿Qué te ha hecho este humano? —le preguntó Hoseok finalmente. Sus ojos rojos brillaban con curiosidad y desconfianza.

Jungkook se encogió de hombros.

—No lo sé. Es como si su sangre me llamara.

Namjoon, el más sabio de todos, frunció el ceño.

—Los humanos son efímeros. No te dejes atrapar por sus encantos.

—Pero tú siempre defiendes a los humanos —se quejó Seokjin—. ¿Ahora no quieres que nuestro Jungkookie se enamore?

—¿Quién dijo que estoy enamorado? —preguntó Jungkook molesto—. Él es un simple humano, jamás me enamoraría de él.

Jimin, quien bailaba descalzo a causa de las drogas se acercó a los hermanos Jeon. Parándose un poco tambaleante frente a Jungkook.

—Conviérteme en vampiro, quiero ser inmortal.

—Y esta es una de las razones por las que no debemos tener humanos como mascotas —masculló Yoongi levantándose de la sala de estar para irse a encerrar a su habitación.

—¿Por qué quieres que te convierta? —preguntó Hoseok.

—No quiero morir y quiero ser igual de fuerte que ustedes. Además, si soy inmortal podré
encontrar a mi hermano más rápido.

—Creo que tu humano necesita dejar de tomar sangre vampirica —murmuró Namjoon—. Si sigue haciéndolo seguirá delirando y ya tenemos suficiente con los delirios de Hobi.

—¡Oye! —Hoseok se quejó.

—No voy a convertirte en vampiro —dijo Jungkook de manera tajante.

—¡Quiero ser como ustedes!

—Lleva tres días aquí y ya quiere ser inmortal —se burló Seokjin.

—Dios, que flojera —dijo Jungkook rodando los ojos.

Al decir eso, tronó el cuello de Jimin haciéndolo dormir. Y lo dejó tirado en el piso yéndose a su habitación. Ese acto no sorprendió a sus hermanos, pues era el Jungkook que conocían.

—¿Entonces ya puedo comérmelo? —preguntó Seokjin.

—No. —Namjoon sonrió tomando al humano entre sus brazos—. Si Jungkook quisiera que te lo comas lo hubiera asesinado, pero nada más lo durmió.

—Eres taaaan aburrido Namjoon.

—Lo llevaré a mi habitación para desintoxicar su cuerpo de la sangre de Jungkook. ¡Hermano, cuando quieras a tu humano de regreso me buscas! —gritó.

Seguido de eso se fue corriendo a su habitación dejando a Hoseok y Seokjin en la sala de estar.

—¿Quieres ir a ver al neófito? —preguntó Seokjin—. Le llevaré una prenda de Jimin para que se familiarice con el olor y sea más divertido cuando se encuentren, tal vez de esa manera le sacará las tripas más deliciosamente.

—Vamos.

Los escalones de piedra crujieron bajo los pasos de Seokjin y Hoseok mientras descendían, sus miradas fijas en el neófito que yacía allí, atrapado por cadenas encantadas. El vampiro novato, con ojos desorbitados y cabello enmarañado, emitía gemidos lastimeros que resonaban en las paredes húmedas.

Seokjin, el mayor, se inclinó hacia adelante, su aliento frío rozando la piel del neófito.

—Hola, bebito —susurró, su voz como una caricia gélida. En su mano sostenía algo pequeño y arrugado: un pedazo de calcetín. El objeto parecía insignificante, pero estaba imbuido del sudor y aroma de Jimin.

El neófito, con los ojos inyectados en sangre, se agitó. Sus cadenas tintinearon, y su boca se abrió en un gesto de hambre y desesperación. Extendió sus manos hacia el calcetín, como si reconociera su aroma.

Hoseok, el segundo vampiro, frunció el ceño.

—¿Jimin? —murmuró.

Hoseok frunció el ceño. ¿Por qué ese neófito pronunciaba ese nombre? ¿Es un cazador vidente o un ser con habilidades desconocidas? La incertidumbre se reflejaba en los ojos rojizos de ambos hermanos.

El neófito, ahora casi frenético, apretó el calcetín contra su pecho.

—Jimin —repitió, y su voz se quebró—. Mi hermano.

Seokjin y Hoseok intercambiaron una mirada.  Los dos sorprendidos ante el gran espectáculo que estaba por montarse. ¿Era el hermano de Jimin? ¿El hermano que había estado buscando?

—¿Dijiste hermano? —preguntó Seokjin tratando de contener la risa.

—Vaya, creo que será interesante ver al neófito beber la sangre de su propio hermano —masculló Hoseok.

—¿Qué pensará Jungkook sobre esto? —preguntó Seokjin riendo.

El mayor comenzó a brincar emocionado, pues quería que ambos hermanos, uno humano y el otro vampiro se enfrentaran.

Hastaaaa aquí el capítulo.

⚠️AVISO⚠️
El capítulo que se viene está fuerte, solo quiero decir que independientemente de lo que vas a leer a continuación la historia terminará bien y que recuerdes que esto es ficción.

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