🥀Capítulo 3-Morfina🥀
—¡Maldita sea, humano de mierda! —gritó Jungkook agitando la mano con dolor mientras veía la quemadura causada por el toque a la piel de Jimin ir sanando de poco en poco—. Quítate ese cochino amuleto ahora mismo.
Jimin negó con la cabeza, pegándose a la pared. Su respiración estaba agitada y el corazón estaba a punto de salirse de su pecho. Pero sus ojos verdes no se despegaron de los ojos rojos del vampiro frente a él.
—Luces como un conejito a punto de ser devorado por un lobo. —Jungkook se relamió los labios.
Después le miró la mano, los dedos e incluso las orejas tratando de encontrar el amuleto.
—Supongo que tienes el amuleto escondido entre la ropa. ¿Quieres que te la quite? —Sonrió de lado al avanzar hacia él y tomar con la punta de los dedos su camisa, estirándola y rompiéndola por completo—. Uuuuuy, aparentemente no lo traes en la parte alta, veamos en los pantalones.
—¡Basta, basta por favor! —gritó finalmente cubriéndose el pecho avergonzado.
—Ah, no eres mudo. —Se tronó el cuello impaciente—. Dame el maldito amuleto.
—Va a matarme cuando lo haga, pero yo solo quiero preguntar por mi hermano antes de morir. ¿Ustedes lo mataron? ¿Se... —Jimin tragó saliva apretando los puños—... Ustedes se comieron a mi hermano?
—Responderé tus preguntas cuando me entregues el ¡Puto amuleto! —gritó furioso eso último.
Jimin cerró los ojos al mismo tiempo que suspiraba, estaba atrapado. Le diera o no el amuleto ese vampiro o alguno de los otros que estaban en la planta baja iban a matarlo, entonces solo le quedaba una única opción; confiar.
—Bien, voy a confiar en usted. —Tragó saliva sacando la pulsera azul del bolsillo de su pantalón para entregársela al vampiro.
Jungkook se quejó al tomarla entre sus manos mientras se quemaba la piel, luego la aventó a la cama y avanzó a su mesita de noche tomando una cajita de madera para meterla ahí.
—Lindo cuerpo, humano —dijo mirando con detenimiento el abdomen marcado de Jimin—. ¿Cómo te llamas?
—Jimin. —Suspiró—. ¿Ya va a contestar mi pregunta?
—¿Tienes alguna fotografía de tu hermano?
—Sí, en mi teléfono —contestó apresurado buscando el teléfono en su pantalón, pero este se había caído en la sala de estar de la mansión cuando tiró el jarrón.
—No lo traes. —Jungkook sonrió, un poco de burla asomándose en sus labios—. Descríbelo. —Se sentó en la cama estirando las piernas.
—Alto, moreno, ojos verdes, muy guapo.
—Hemos comido bastantes humanos con esas características, así que no. No lo ubico, como puede ser que sí, puede ser que no.
—Entonces debería seguir buscándolo. —Volvió a tragar saliva nervioso.
—¿Cuánto tiempo llevas buscando?
—Dos años.
—Ya no lo vas a encontrar, deberías aceptar que está muerto. —Se miró las uñas, luego hizo un gesto con la mano indicándole a Jimin que se acercara a él.
Jimin obedeció parándose a un lado suyo en la cama, Jungkook estiró ambas manos tocándole el abdomen, se sentía tan bien, caliente, firme y con vida.
—¿Ya va a matarme?
—Si quisiera matarte lo habría hecho allá abajo, pero te rescaté de los colmillos de mis hermanos.
Jungkook se puso de pie rápidamente, fue un movimiento como el flash de una cámara pero en lugar de resplandecer se vio oscuro. A los segundos ya estaba parado frente a Jimin sosteniéndole el mentón y obligándolo a verle el rostro.
—¿Entonces qué va a hacerme?
—Primero que nada, llámame Jungkook, ese es mi nombre y segundo... Tu sangre huele delicioso. —El vampiro se inclinó oliendo el cuello de Jimin, provocando que su piel se erizara—. E incluso me pareces familiar, tal vez conocí a algún antepasado tuyo.
—¿No va a beber mi sangre? ¿No va a comerme?
—Me gustaría comerte, pero no de la manera que piensas. —Lamió el cuello de Jimin provocando que soltara un leve jadeo.
—Yo... ¿Le gusto?
—¿Gustarme? —Se apartó de Jimin alejándose de él—. Me intrigas, ¿por qué me gusta tanto tu aroma? No es que seas el humano más hermoso de la faz de la tierra... —Se lamió los labios—. ¿Estaré flechado? —Hizo mueca de desagrado, después negó—. No creo. Sea cual sea la razón ahora me perteneces y no te irás de mi lado hasta que averigüe qué es exactamente lo que siento por ti.
—¿Me va a tener aquí cautivo? —Jungkook asintió con la cabeza.
—Sí, y te aseguro protección. Mis hermanos no se atreverán a tocarte. Pero primero vamos a revisar tus manos... —Tomó las manos de Jimin con suavidad—. Tienes vidrios, ¿por qué no te quejas?
—No los sentí, quizás porque tengo miedo.
—¿Miedo? —Alzó las cejas—. Bueno, sí, en realidad deberías estar aterrorizado. Espera aquí.
Jungkook salió de la habitación dejando a Jimin sentado en la cama semidesnudo, pero no tardó ni un minuto cuando regresó con unas pinzas, alcohol y un viejo botiquín.
—¿Va a curarme?
—Es mejor que comiences a llamarme de tú, tanta formalidad me da asco.
—Lo siento...
—Ash. —Levantó la mirada haciendo contacto visual con Jimin mientras humedecía la torunda de algodón con alcohol—. No te disculpes, odio a las personas que piden perdón. Si haces o dices algo sopórtalo, pero no pidas perdón.
—Entiendo.
—Esos tatuajes... —dijo refiriéndose a los tatuajes de los brazos de Jimin—... Me gustan, hace años quise tatuarme pero la tinta se borró de mi piel. Cosas que tiene que soportar un ser inmortal como yo.
—Pensé que los vampiros no existían...
—Muchos lo piensan.
Jungkook quitó cada pedazo de cerámica de las manos de Jimin con habilidad, precisión y cuidado, después le vendó ambas manos.
—¿Ya cenaste? —Jimin negó con la cabeza—. ¿Quieres cenar conmigo y mis hermanos?
—Yo... Nunca he comido sangre humana.
Jungkook comenzó a reír, luego caminó avanzando al clóset para tomar una playera casual y aventársela a Jimin.
—Los vampiros también podemos comer otra cosa que no sea sangre. Vístete, yo creo que Seokjin ya debería tener lista la cena.
Jimin no dijo nada, él se puso la playera rápido mientras pensaba «¿Van a cenar? ¿No era yo su cena?» Se puso de pie atemorizado, las piernas le temblaban, Jungkook al notarlo lo volvió a tomar del mentón.
—Mientras yo esté de tu lado nadie va a lastimarte —dicho eso depositó un beso casto en los labios del humano haciendo un sonido como de pop—. Así que deja de temblar.
—Entonces debería permanecer a tu lado y nunca alejarme de ti —dijo Jimin agarrando el brazo de Jungkook con fuerza.
—Ay querido, te voy a desilusionar horrible pero me estoy divirtiendo bastante, eres como un cachorrito.
El vampiro avanzó, saliendo de la habitación con Jimin colgado de su brazo. El jarrón que había tirado ya no estaba al igual que el resto de los hermanos Jeon. Se sintió medianamente en paz hasta que uno de ellos, el más pálido salió del comedor sosteniendo entre las manos un juego de ajedrez.
—Oye Jungkook vamos a ju... —Se quedó en silencio viendo a Jimin colgar del brazo de Jungkook.
—Él es Yoongi, el tercer hermano —le dijo a Jimin—. Adora jugar ajedrez conmigo.
—Oh... —Jimin contuvo el aliento.
—Jugamos en otra ocasión, hoy tengo que cuidar mi nueva adquisición porque con cinco vampiros bajo el mismo techo podría perderlo.
—¿Vas a quedarte al humano? ¿En serio? —preguntó Hoseok mientras servía vino en la quinta copa de la mesa.
—Por ahora será algo así como mi mascota. —Sonrió—. Así que no se lo coman, sirve otra copa para él.
—¿Ni siquiera puedo probar una gota de su sangre? —preguntó Seokjin al salir de la cocina con una charola llena de espagueti.
—No, es mío y no me gusta compartir.
—Pensé que ya te lo habías cenado —dijo Namjoon sentándose en su lugar.
—Ya he comido bastante estos últimos años, creo que estoy saciado.
—No creo —contestó Yoongi sentándose en la mesa.
—Tal vez te gusta el muchacho —se burló Hoseok.
—Tal vez me gusta su aroma —contestó medio molesto.
—A todos nos gusta su aroma —dijo Seokjin sentándose en la mesa y sirviéndose espagueti en su plato.
Nadie dijo nada más, todos comenzaron a servirse espagueti en sus respectivos platos. Jungkook fue rápidamente por uno más para Jimin, él también se sirvió aunque temblando de miedo porque todos los presentes excepto Namjoon lo veían como si quisieran comérselo.
—Hermanos, cierren los ojos —dijo Namjoon—. Humano. ¿Puedes dar las gracias?
—¿Las gracias? ¿Algo como rezar?
—Ajá.
Jimin suspiró. ¿Cómo era posible que personas así de desalmadas pudieran dar las gracias? ¿Por qué rezaban? ¿Acaso sus almas tenían salvación?
—Oh... Gracias te damos señor por los alimentos y por las manos que los elaboraron... Amén.
—Amén —contestaron todos al unísono.
Después comenzaron a cenar, Jimin sentía la textura del espagueti deliciosa. Sin lugar a dudas estaban muy bien preparados, o tal vez tenía mucha hambre.
Seokjin se puso de pie destapando el cerdo rostizado que estaba en medio de la mesa, con un cuchillo afilado comenzó a partirlo mientras Namjoon y Hoseok hablaban acerca de cultura y la decadencia que estaba teniendo a lo largo de los años, Yoongi permanecía en silencio sin despegar la vista de Jimin y Jungkook parecía entretenido deslizando la mano a la pierna del humano.
—No me gusta quedarme con las ganas —dijo Seokjin.
Después sonrió maqueavelicamente yendo muy rápido hacia Jimin, cortandole el brazo con la punta del cuchillo, tomó la gotita de sangre con el dedo índice y la probó. Sus hermanos inhalaron el aroma que desprendía deseosos por probar pero Jungkook se puso de pie golpeando la mesa con fuerza ocasionando que el cerdo saliera disparado al techo.
—¡Te dije que no quiero que lo toques! —gritó furioso colocando ambas manos en el cuello de Seokjin quien estaba riendo.
—Pues está delicioso, pero he probado mejores —contestó relamiéndose los labios al empujar a Jungkook para zafarse de su agarre.
Jimin se cubrió el brazo con la mano en un intento nulo para ocultar su aroma. Pronto sintió un par de manos pesadas encima de sus hombros; era Hoseok.
—¡No me gusta pelear y mucho menos por la comida! —gritó furioso.
—Hey, Hobi... Jimin no es comida —dijo Jungkook acercándose a él.
Pero Hoseok apretó los hombros de Jimin quebrándole los huesos, este soltó un grito espeluznante que recorrió cada rincón de la mansión.
—Esto se puso bueno —murmuró Yoongi cruzándose de piernas, deleitándose ante la agonía del humano.
Namjoon se transportó de inmediato hacia Hoseok tomándolo de las muñecas para que soltara al humano que se retorcía de dolor.
—Hobi, tienes que tranquilizarte... No querrás...
—¡Arañas, arañas! —comenzó a gritar desesperado sacudiendo los animales ficticios que su mente estaba creando.
—¡Todo es culpa tuya! —Seokjin empujó a Jungkook.
—Te dije que Jimin es mío.
—¡La bruja me lo envió a mí a cambio de su primo!
Yoongi fue con Namjoon para ayudarle a abrazar a Hoseok y llevárselo a la habitación. Necesitaban dormirlo porque estaba teniendo un ataque esquizofrénico.
—¡Arreglen esto! —gritó Namjoon a medida que se alejaba—. ¡Ya sea vivo o muerto, hagan que el humano deje de sufrir!
Jimin seguía gritando retorciéndose en el suelo.
—Jin... Por favor... —murmuró Jungkook.
—¿Qué acabas de decir? ¿Dijiste por favor? No escuché bien. —Sonrió emocionado.
—No voy a repetirlo. —Se tocó el puente de la nariz.
—Bueno, si quieres conservar al humano hazlo. Buscaré otro allá afuera. —Al decir eso salió de la mansión para buscar otra presa.
Jungkook tomó el cuchillo con el que su hermano había cortado la piel de Jimin cortándose la punta del dedo índice para introducirlo en la boca del humano por la fuerza.
—Succiona, la sangre de vampiro es como morfina para los humanos...
Jimin comenzó a chupar, sintiendo al instante que el dolor disminuía, sintiendo que volaba encima de ponys de colores, sintiendo que estaba en un mundo de fantasía y alegría, pero después viajó a los ojos del vampiro frente a él, succionando con mayor esmero imaginando que se trataba de su pene.
Finalmente todo a su alrededor se puso oscuro.
Okay, esto estuvo muy acelerado. Pero verán como va tomando forma de poquito en poquito.
¿Por qué crees que JK está obsesionado con el aroma de Jimin?🧐
Namjoon pintó al Jungkook como el malo pero me da más miedo el Seokjin.
¡Hoy no hay tazas de sangre, hoy hay copas de vino para todas!🍷 Les daría cerdo pero ya saben, Jungkook lo aventó al techo😖🙄
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