Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 18

Narrador omnisciente:

Como los padres estaban en la casa, ellos los despertaban, así que a Martin lo despertó la madre, y a Pedro su padre. Luego de que los levantaran, los jóvenes se arreglaron, y luego bajaron a desayunar.

Flor: y, ¿cómo durmieron?
Martin: mal.
Pedro: para el orto.
Santiago: ehhh, ¿por qué tan mal?
Martin: no importa.
Santiago: bue, y vos Pedro, ¿me queres decir?
Pedro: no.
Martin: bueno, yo ya me voy, ya terminé de desayunar.
Pedro: yo también, si queres te acompaño enano.
Martin: bueno dale dumbo.
Flor: bebé, ¿qué te pasa?
Martin: nada ma, ¿por?
Flor: estás raro, vos nunca comes tan rápido, vení, quiero hablar a solas con vos -dijo llevándolo a la pieza de ella- bebé, ¿qué pasa? sabes que podes hablar de todo lo que quieras conmigo.
Martin: si, pero no tengo nada para contarte, ahora ¿me dejas irme?
Flor: andá.

Martin bajó, y en las escaleras lo estaba esperando Pedro con su mochila.

Pedro: dale boludo que vamos a llegar tarde.
Martin: es re temprano.
Pedro: el camino es largo, dale vamos.

Ninguno dijo nada más, y salieron. Cuando ya estaban a la altura del callejón de ayer, Martin llevó a Pedro nuevamente.

Martin: me dolió lo de boludo, y enano -dijo haciéndose el triste-
Pedro: perdón bebé, no te pongas mal, que querías que te diga, ¿amor?
Martin: me encantaría que me digas así, pero por tu papá no podemos -dijo para darle un corto pico-
Pedro: si, ya se ese viejo de mierda, no se como tu mamá lo aguanta.
Martin: pasa que lo ama, como yo te amo a vos -dijo para darle un pico que duró bastante tiempo-
Pedro: yo te amo vos -dijo para tomarlo de la cintura, y besarlo-
Martin: ¿y si nos escapamos otra vez?
Pedro: bebé, nos van a retar, aparte no creo que sea buena idea, el tiempo está para el orto, se va a largar a llover en cualquier momento.
Martin: bebé -hizo puchero-
Pedro: no me puedo resistir a ese puchero, vamos.
Martin: por eso te amo -dijo para darle un beso, y empezaron a caminar-

[...] (Cuando llegaron al parque)

Cuando llegaron, los jóvenes se sentaron, al igual que ayer, solo que Martin esta vez se acostó, con su cabeza apoyada en las piernas de Pedro. Esto al castaño le causó mucha ternura, y se quedó acariciandole la cabeza, mientras lo miraba con una cara de enamorado mal.

Martin: bebé disimulá un poco.
Pedro: por que voy a disimular, si tengo al novio más lindo de todos.
Martin: ¿sabías que te amo mucho? -dijo para besarlo-
Pedro: ¿y vos sabías que sos lo mejor que me pasó?
Martin: me lo dijiste ayer hermoso.
Pedro: bueno, te lo dije ayer, te lo digo hoy, y te lo voy a decir siempre, sos lo mejor que me pasó.
Martin: te amo -dijo para besarlo-
Señora: ¿QUÉ HACEN? -preguntó con una cara de horror- ay dios, ustedes están enfermos.
Martin: ¿qu-qué? -lo que dijo la señora le había dolido, y se le notaba, ya que había abrazado a Pedro, y tenía su cabeza escondida en el pecho del mayor-
Señora: cómo se van a besar con alguien de su mismo género, dios esto está mal.
Pedro: señora, con todo respeto, nosotros no estamos haciendo nada mal.
Señora: ¿como que no? es obvio que si, es una asquerosidad lo que están haciendo.
Pedro: señora, nosotros no la estamos molestando en nada, así que si puede retirarse, le agradecería bastante.
Señora: yo no me voy, los que se van a ir son ustedes, si no voy a llamar a la policía.
Pedro: okey, llámenla, pero mi novio, y yo nos vamos a quedar, vamos a ver como reacciona la policía al ver que llamó por una estupidez suya.
Señora: ¿estupidez mía? dios, se nota lo poco que fueron a la iglesia.
Pedro: con todo respeto, le voy a decir que no pasa todo por la iglesia, y que lo que estamos haciendo no está mal, somos dos personas demostrandonos nuestro amor, que es lo que hace cualquier persona con pareja, o con quien ama.
Señora: no, lo de ustedes no está bien, porque son dos personas del mismo género, ustedes merecen la muerte, ustedes, y cualquiera que haga lo mismo que ustedes, dios los va a castigar algún día -dijo yéndose-
Pedro: a usted la va a castigar -le gritó- bebé, ¿estás bien? -dijo en un tono suave, tratando de separarse, para verlo a la cara- ay bebé, ¿por qué estás llorando?
Martin: la-la señora esa ti-tiene razón, no-no soy nor-normal, e-es obvio que estoy enfermo, y-y te contagie -dijo llorando-
Pedro: no bebé, vos no me contagiaste, ni mucho menos estás enfermo, es que esa señora está loca, y tiene su cabeza muy cerrada, gente como ella hay mucha, pero no hay que darle bola, vos sos como sos, y no estas enfermo por amar, son ellos los enfermos que creen que solo puede haber amor entre un hombre y una mujer -dijo en uno tono dulce, y secando con sus dedos las lágrimas del rostro del pelinegro-
Martin: te-te amo amor -dijo para abrazarlo-
Pedro: yo más mi cosita linda -dijo separandose del abrazo, y dándole un dulce beso al más bajo-

Los jóvenes siguieron un rato más, dándose abrazos, y besos. Todo era muy lindo, hasta que de un momento a otro, comenzó a llover mucho. Los jóvenes corrieron hasta llegar a unos baños que estaban en el parque, y allí se quedaron, esperando a que pare. Las horas y los minutos pasaban, todavía no había dejado de llover, y se estaba acercando la hora de volver a casa.

Martin: bebé, ¿qué vamos a hacer?
Pedro: ¿nos quedamos hasta que pare?
Martin: ¿y si no para?
Pedro: bueno, si en veinte minutos no para, empezamos a caminar.
Martin: bueno.

Y sin más, se quedaron esperando. Pasados los veinte minutos, la lluvia paró, y los jóvenes empezaron a correr, ya que no querían que los agarrara la lluvia.

[...] (En casa)

Los jóvenes entraron sin pensar, se había olvidado que no venían de la escuela, y que los iban a re cagar a pedos por haber faltado.

Flor: otra vez, ¿es enserio?
Santiago: ¿Pedro vos lo haces a propósito?
Pedro: ¿hacer qué? si yo no hice nada.
Flor: bebé...
Martin: no, ahorrarte todo ese discursito, mamá no soy más un bebé ¿okey? se cuidarme solo, y no necesito a nadie en este momento.

Su madre estaba en shock, no podía creer como le estaba hablando Martin.

Flor: e-está bien, em les queríamos decir que nosotros ya nos tenemos que ir.
Santiago: si, pensábamos comer con ustedes, pero viendo como está la cosa, nosotros vamos a comer en el aeropuerto.
Martin: bueno, chau -dijo sacando su celular, y yéndose hacia su pieza-
Pedro: que tengan buen viaje -dijo también llendose hacia su pieza, dejando a los dos adultos en la puerta solos-

A Flor le dolía que su hijo la tratara así, ¿tanto había cambiado en estos meses?. Los adultos tomaron las valijas, llamaron a un taxi, y cuando este llegó, se fueron en el hacia el aeropuerto.

[...] (Una hora después)

Una hora había pasado, una hora en la que ninguno de los dos jóvenes había salido de su pieza, ya que ninguno le quería ver la cara a su padre, ni a su madre. Como los chicos se estaban hablando por whatsapp, arreglaron para bajar, ya que había pasado una hora de que se habían ido. Los dos salieron de su cuarto al mismo tiempo, y bajaron a la cocina juntos.

Martin: bebé, tengo hambre.
Pedro: yo también tengo hambre, ¿querés que ponga la pava,y tomamos unos mates?
Martin: dale.

Pedro puso la pava, y se apoyó en la mesada viendo su celular, mientras que el pelinegro estaba viéndolo sentado en una silla. Como el más bajo estaba aburrido, se comenzó a acercar al castaño, hasta quedar en frente de él, y le dijo.

Martin: ¿me podés dar bola, y dejar de estar con el celular?
Pedro: es que vos no hablás bebé, y yo no sabía de que ha......

No terminó su oración, sintió el peso de los carnosos labios de Martin, en los suyos. El castaño le siguió el juego, lo dió vuelta, y lo subió a la mesada. Se estaban besando, Pedro con las manos en la cintura de Martin, y como el pelinegro quería, más acción, por así decirlo, tomó las mano del más alto, y las puso en su trasero. Pedro estaba en la suya a más no poder, se quedó con las manos quietas en ese lugar, hasta que luego de un rato muy pero muy corto , comenzó a apretar los muslos de Martin, haciendo que el antes nombrado, soltase unos jadeos. En todo ese momento que estaba pasando, la pava comenzó a chillar, indicando que el agua se estaba hirviendo, Pedro sacó una de las manos, apago la hornalla, ya que estaba ahí nomás, y siguieron en lo suyo.

Martin: ¿vamos a la pieza? -preguntó agitado, se le notaba que estaba excitado-
Pedro: ¿a la tuya o a la mía? -preguntó con la misma respiración-
Martin: a la mía.
Pedro: okey.

Pedro volvió a besar a Martin, lo alzó con las piernas del pelinegro rodeando su cintura, y sin separarse del beso, subieron las escaleras.

Hola💊〛
Que onda pastillitas, bueno, tengo dos cosas para decirles, primero, este viernes termino las clases, así que, puede de que esté un poco más activa, no se, no prometo nada, voy a tratar,y la segunda,es que estoy bastante inactiva, pero es por un bien, porque estoy escribiendo una novela, les doy un adelanto ahre, es una novela matsquare, bueno, eso espero que les haya gustado, si le gustó no se olviden de votar, y perdonen si hay faltas de ortografía, no soy perfecta, dicho esto, besos en la cola😘😘😘
Palabras: 1673
Publicado: 27/11/19
Modificado: 14/08/20

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro