Odiar.

Era una palabra muy fuerte.

Lo sentía.

Pero no lo entendía.

ㅡ¿Por qué?ㅡ. Susurraba ella recargada en la puerta, sintiendo de nueva cuenta el dolor, el odio. El inmenso odio de Tenko.ㅡ¿Por qué?...

Sentir las emociones que su paciente le transmitía siempre fue doloroso. Todos sufrían, no importa de qué manera lo hicieran. Sólo sentía el sufrimiento.
La oscuridad la retenía, podría haber dejado de sufrir esos martirios si dejara de sanar a las personas pero ¿Por qué ser egoísta con un Quirk como el de ella? ¿Cómo? Simplemente no podía y sólo soportaba.

Quería ayudar, estaba a punto de graduarse de la escuela de medicina aunque no lo necesitaba por que quería trabajar oficialmente en un hospital, quería ayudar sin importar que aunque una pequeña esperanza de que en algún hospital al que fuera encontrarán una mejoría a aquello de su Quirk, solo era un sueño pero no hacía daño pensar.

Un sueño...

Despertó, no se había dado cuenta que se quedó dormida posiblemente por las terribles heridas que le había hecho el chico. Aún supuraban vapor y no era capaz de sentirlos. Cerró los ojos digiriendo la posibilidad de que realmente no vuelva a usar los brazos.

ㅡTal vez así debió ser.ㅡse dijo a sí misma mirando sus brazos e intentando parpadear para poder ver, las lágrimas en sus ojos le obstuian la visión pero no lloraba por sus brazos si no por algo más, tal vez soñó algo de los sentimientos de Tenko pero nunca logra recordarlos, como solo eran sentimientos transmitidos era probable que no soñara nada pero se sentía como si así fuera.

Alzo un momento el rostro a una parte oscura y se asusto al visualizar la figura encorvada e hincada de Tenko, mirándola con un rostro que la mayoría llamaba "aterrador" pero no sabía que pensar realmente, a veces se dejaba llevar por los sentimientos de los demás en lugar de ver lo que realmente son.

«Es un villano, uno repugnante»

Sacudió su mente de esos pensamientos, ella no era de discriminar a la gente por solo la apariencia. Ella decidía conforme a los sentimientos. Ella sabía que debajo de una cáscara dura había algo más blando...

Ya no sabia que pensar.

Era suficiente con llorar por él, por preocuparse pero no podía enamorarse.

No podía.

ㅡDejame ir. Por favor.

Un estallido la desorienta haciéndola caer al suelo, es inútil que pueda levantarse, sus manos; aquellas que Tenko hirió no le funcionan aun. Solo le queda escuchar.

El cómo los heroes han llegado.

Para salvarla.

¿Pero quién lo salvará a él?

ㅡNo le hagan dañoㅡ. Susurraba para si misma. De nuevo sus emociones la dominaban.ㅡ Él sufre. Salvalo, All Migth.

Era lo único que esperaba.

Por que ya no se importaba a sí misma. No después de desquebrajar más su corazón pero, de la nada salió una sustancia viscosa de su boca, no dejándola respirar. Inundando su cuerpo y visión para perderse en la negrura y hacerla caer en un lugar inhóspito... Una ciudad destruida.

Una mano la levanto con brusquedad y poniéndola de pie sin mas y la coloco detrás de él para protegerla. Era Bakugou Katsuki quien estaba enojado no solo por la estupidez de quererlo reclutar, o que odiara casi todo el mundo si no por que noto que aun las heridas en los brazos de ella no sanaban, se maldijo a sí mismo por permitir que los villanos hirieran a una civil que era prisionera para su beneficio... Que la hicieron llorar.

ㅡ¡Quédate detrás mío!ㅡfue lo único que dijo y ella solo se quedó allí, en silencio. Mirando como es que Shigaraki Tomura la miraba fijamente posiblemente pensando en que hacer para no dejar que ambos huyeran.

Que ella no se fuera.

Sus sentimientos estaban revueltos, su Quirk nublaba su juicio y ella debía escoger: ir con el niño Bakugou o quedarse e intentar sanar un corazón destrozado.

Ambas manos se estiran para tomarla pero sólo una debe sostener. Su corazón se estruja y las lágrimas salen de sus ojos.

Ella no podía sanarlo.

Por más que quisiera hacerlo.

No podía permitirse inmiscuirse en algo tóxico, sus sentimientos la enjuiciaban y la cólera y sed de venganza de él... No podían estar juntos.

«Lo siento»

ㅡ¡Bakugou!ㅡtomo la mano del rubio lista para irse con él y con los amigos que habían salido para salvarlo pero el dolor en el agarre de uno de sus brazos y sintiendo como su piel se desgarraba la hizo mirar hacia atrás: Tenko no la dejaría ir.

Pero debía.

Dejó que el Quirk de él le arrancará el antebrazo para dejarla libre, era un precio que debía pagar y no sería suficiente dolor para saber lo que el sintió.

Estaba segura que no podía salvarlo pero sabía que alguien más lo haría y cuando ese momento pase... Ella estará ahí para él pero no hoy.

No hoy.

Se aferro al cuerpo del adolescente cuando este mismo explotó a Tenko para alejarlo de ella y después salir disparados hacia arriba y ser ayudados por sus amigos del rubio. Se mantuvo con el rostro en el pecho del niño, llorando.

Pero había hecho una promesa.

Estaría con él cuando su corazón comenzará a sanar.

ㅡLo prometo. ㅡsusurro mirando de reojo aquella cabellera celeste que cada vez que iba alejando.

Estar en el hospital y ser atendida por sus heridas además de ser interrogada por la policía y el mismísimo All Migth. No se compraban con el dolor que aún sentía al abandonar a Tenko así que con lágrimas en los ojos y después de decir todo lo que sabía acerca de la liga de villanos miró al símbolo de la paz.

ㅡPor favor salvelo. ㅡle dijoㅡ. ¡Salve a Tenko!

Se permitió llorar más sintiendo el reconfortante toque del símbolo de la paz en su cabeza.

ㅡLo rescatare. ㅡle dijo el hombre delgadoㅡ. Lo prometo jovencita.

Ella asintió aún llorando.

Tal vez no podía ayudar a Tenko como se debía pero pondría todas sus esperanzas en All Migth... En su sucesor Deku.

Y esperaría por él el tiempo que fuera necesario sólo con tal de verlo sanado.

ㅡLo prometo Tenko.

¿Fin?