Al día siguiente, Yoongi pudo comenzar a alimentarse, primero una dieta líquida, la doctora le explicó que su cuerpo debía hacer una adaptación, ya que la cesárea requirió mover y volver a acomodar algunos órganos digestivos para retirar al bebé.

―¿Qué tal la sopa de algas? ¿Te gustó? ―preguntó Jungkook, quien había sido el encargado de escoger el menú líquido.

―Si, moría de hambre, ―respondió el pálido, acabando con el tazón.

Un rato después de acabar, Yoongi miró a su menor, quería preguntarle algo, aunque se veía venir una respuesta negativa.

―¿Cómo es el horario de visita? ―habló, con la voz baja y suave.

―Verás a Jimin... ―murmuró más como afirmación que como pregunta.

―Si eso haré, necesito hablar con él. ―contestó.

―Desde las cinco a las ocho de la noche, te llevaré antes de irme al trabajo ¿de acuerdo? ―le sonrió.

Puede que no le agradece mucho la idea, pero él mismo lo llevaría si eso hacía feliz al omega.

―Gracias, ―Yoongi asintió, contento. ―Me gustaría caminar un poco, duele estar acostado todo el día, ―río, pues llevaba seis meses y un día acostado.

―Vamos, puedo cargar a Byeol mientras caminas, ―asintió, ayudando al mayor para ponerse de pie.

Momentos después salieron de la habitación, caminando lento por el pasillo. Yoongi debía acostumbrarse a la nueva debilidad de su cuerpo, y además a mover el porta suero de pie a donde fuera, hasta que obtuviera el alta.

Recorrieron el pasillo hasta la salida que llevaba al parque del hospital, era un buen momento para descansar.

―Vamos a sentarnos, me gustaría descansar un momento, ―pidió mirando a su amigo y a su cachorro.

Los tres pararon en una banca de madre blanca, bajo un árbol de sauce que daba sombra fresca.
Cabe destacar que Jungkook se había tomado el medio día libre para ayudar a Min en lo que necesitara.

―¿Qué sabes de Taehyung? ¿Donde está él? ―pregunto mirando a Jeon.

―Pues, esta haciendo tratamiento en una unidad más alejada, él y Jimin acordaron estar en lugares diferentes, es increíble como a ambos les afectó tu accidente, ―suspiró, ―Ellos de verdad cambiaron por ti.

―¿Por mi? ―El castaño inclinó un poco el rostro, confundido.

―Si, por ti, ―sonrió, ―Luego del accidente ambos se sintieron muy culpables, al momento de instalarse para el tratamiento les dieron opción de elegir su unidad, Tae le dijo a Jimin que se quedará en el ala más cercana, así podría estar al pendiente de ti y del cachorro.

El pálido abrió la boca, pasmado, no creía que algo como eso fuese posible.

―Los dos responden bien al tratamiento, incluso creó que podrían salir antes. ―comentó.

Había considerado decirle de la noticia más importante, sin embargo le daba un poco de miedo, un sentimiento algo irracional, ya que era su libertad después de todo, y él no podía negarsela.

―¿Hay algo más que quieras decirme? Porque creo que si, ―sonrió y se acercó más a Jungkook, para hacerle pequeños mimos a Byeol.

―Yo...La verdad si, solo no quiero que te ilusiones con cosas inciertas. ―suspiró.

―Imaginó que te refieres a Jimin, ¿Qué es? ―pregunto expectante.

―Tae...Firmo el divorcio.

Yoongi quedó sin aliento al escucharlo, invadido por una extraña combinación de estupefacción y felicidad.

―¿Lo dices enserio? ―expresiones alegres adornaron su rostro.

Jungkook asintió, recibiendo la cabeza del mayor en su hombro. Yoongi pasó su brazo alrededor de la extremidad del omega menor y comenzó a reír y patalear.

―Escuchaste eso Byeol, tu padre es legalmente soltero ahora, ¡Soy libre! ―Exclamo en voz medio alta, callandose al instante ya que no podía forzar mucho la garganta.

Levanto la mirada chocando con el rostro del omega menor, por inercia se sonrojo al verlo tan cerca, optando por agachar la mirada.

Yoongi no se daba cuenta, pero Jimin lo observaba desde la ventana en la salida contraria. Su enfermera, Sowon, lo había acompañado a caminar, como parte de su rutina diaria, solo que ninguno sabía que los omegas estarían ahí.

Para ser sinceros, le dio tantos celos, parecían una verdadera familia, aún más, una verdadera pareja disfrutando a su recién nacido. Park entendía que quizás Yoongi no era del todo consciente de la forma en que Jungkook lo miraba, o no quería darse cuenta y fingía ignorar las señales. Pero no podía evitar que le molestara ver al menor así de cerca, el pelinegro soñaba con ser él quien estuviera allí, en ese momento, con su omega apoyando en su hombro mientras contemplaban al fruto de su amor. En verdad deseaba ser él y no Jungkook.

Mucho antes de llegar a esto, mientras iniciaban la internación, Jimin llegó a confesarle a Taehyung lo que el sabía que Jubgkook sentía por el pálido. Y aún recordaba las palabras de su mellizo.

"No me sorprende, Yoongi es el tipo de persona de quien te enamoras con solo verlo, amarás todo lo que haga o diga, te sorprenderás con su inteligencia, amaras la felicidad en su rostro cuando habla de las cosas que le gustan, te enamorarás de la pasión con la que se expresa, como si supiera todo y a la vez no le temiera a nada. Y aunque ni el mismo se lo crea, Yoongi es una persona muy fácil de querer, pregúntale a todos los que lo han conocido, no hay nadie que no lo quiera."

Río solo al recordar que para cerrar la frase, Taehyung dijo burlón, "excepto nuestra hermana, es un milagro que ella nos quiera porque usualmente odia al mundo", eso le causa gracia hasta el día de hoy. Pensarlo así le hizo olvidar lo celoso que estaba hace un momento, suspiró y continuó caminando.

Ansiando recibir noticias de la visita de Yoongi muy pronto.

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Holaaaa!! Sorpresas y más sorpresas, al parecer la relación de los mellizos Kim comenzó a mejorar después del accidente y el tratamiento.

Yoongi ha sabido por fin que ya es un omega libre, un poco de felicidad para nuestro protagonista.

¿Qué les parece el capítulo de hoy? Muchas gracias por permanecer aquí leyendo, lxs amo♡♡♡