𝐐𝐮𝐢𝐧𝐭𝐨 𝐞𝐫𝐫𝐨𝐫.
Caminando por varios minutos, lado y lado iban Min Yoongi y Park Jimin, el silencio estaba presente, el rubio solo seguía al mayor muy obediente, él no tenía ni idea a dónde iban, pero sabía que estaban en la parte central de la ciudad, era intrigante a dónde lo llevaba el pálido, pero sin rechistar lo siguió.
Yoongi entre ratos miraba hacía Jimin, le causaba gracia la inocencia del rubio que gracias al miedo que le generaba lo seguía obediente, su plan era cobrarse la humillación que le hizo pasar con los imbéciles de sus amigos que leyeron la carta y se burlaron por la firma de Jimin en la hoja.
A él no les disgustaba por varios motivos, pero que sus "amigos" se burlasen de él, eso sí de plano no le gustaba, pronto llegaron a un restaurante de comida japonesa su favorita, sabía que Jimin no podía costearse aquel lugar por ser fino, pero solo lo haría entrar para molestarlo
Ambos enteraron al restaurante, la recepcionista solo les dió la bienvenida y les indico un salón privado, el rubio observo todo el lugar quedando estupefacto por el lujo, sabía de principio que la comida no era nada barata y eso indicaba que su semana completa sería gastada dejandolo en cero.
Entraron al salón privado y dejaron sus mochilas a un lado de la entrada, la mesa era típica en el suelo al igual que las sillas que solo consistían de un cojín y una reposadera de espalda, la mesa estaba decorada con un árbol bonsái y figuras de cerámica representativas de la cultura, tomaron asiento y pronto la mesera con su traje típico entró con los menú.
La boca de Jimin casi cae al suelo al ver los precios de las comidas, en definitiva tendría que tomar dinero de su tarjeta de ahorros para poder pagar, por otro lado Min Yoongi reía por la expresión de Jimin, si bien su plan era burlarse del rubio un tiempo para después compensarlo a su manera, solo esperaba que las cosas salieran tal y como lo llevaba planeando desde hace unos meses.
La carta errónea solo fue el pretexto para dar el primer paso.
Pidieron los platillos y la mesera se retiró dejándolos solos completamente. Jimin estaba cohibido con la mirada baja pensando como le hará en los siguientes días que al pelinegro se le antoje comer, a veces creía que tenía una maldición encima por toda la mala suerte que tenía.
-Es bonito el lugar, ¿No?.
Yoongi trato de sacarlo de sus pensamientos.
-S~si, si es b~bonito.
Jimin estaba más preocupado por todo que por la apariencia del lugar.
-Dime algo, ¿Por qué te atreviste a confesarte de esa manera a Min-jae?.
Yoongi lo miró con la cabeza ladeada expresando curiosidad.
-Por que soy un cobarde aparte de que no quería asustarla con mi apariencia.-Se encogió de hombros algo melancólico.
Yoongi frunció el ceño, no le agradaba la poca autoestima que el rubio tenía, si él supiera cuántas y cuántos admiradores igual de tímidos que él tenía, si duda su inseguridad cambiaría, pero eso solo lo sabía Min, nadie más podía arruinar sus planes.
-¿Asustarla?, ¿Por qué lo dices?.-Quiso aparentar duda.
-Tú mismo lo sabés, siempre me lo dices.-Jugó con sus dedos de las manos sin levantar la mirada.
-No, no sé de qué hablas.-Frunció el ceño.
-No soy guapo, mis lentes son horribles y siempre te burlas de como me visto.-Levantó la mirada y se encogió de hombros.
-Dejame decirte que esos abrigos son horribles, no se porque los usas, encima el horrible calor que hace.-Recalcó sin arrepentimiento, porque era cierto, eran horribles a su vista.
-Estos me protegen la piel, sufro de alergias y por ello lo tengo que usar.-Explicó cortamente.
-¿No puedes usar otra cosa?.-
Alzó las cejas por la respuesta.
-No, mis abrigos son lana y es la única tela al igual que la seda que no me saca ronchas en la piel.-Respondió jugando con los palillos en la mesa.
-Vaya, eres delicadito.-Sonrió por eso, ya sabía porque la apariencia del rubio, pero eso no le quitaba lo bonito a su vista.
-Algo así.
La plática fue interrumpida gracias a la llegada de los alimentos, Jimin no se espero tal extravagancia en la comida, pero ahí estaba, alimentos 5 estrellas que comería sin disfrutar gracias al alto costo y que dejaría vacíos sus bolsillos.
𝐶𝑜𝑛𝑡𝑖𝑛𝑢𝑎𝑟𝑎...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro