TaeHyung se hacía un sinfín de preguntas. ¿Cómo era posible que ese chico estudiara en la misma universidad que él? Nunca lo había visto, ni de reojo, y era extraño ya que iban a mitad de curso; tiempo suficiente para que por lo menos conozca de vista a todos.

Sentía que su uniforme lo asfixiaba así que quitó su chaleco de algodón y comenzó a desabotonar sus mangas para luego seguir con la camisa y lanzarla en su cama dejando caer su cuerpo también en esta. Trataba de mantener su mente fuera de eso, pero por alguna razón todo lo que había pasado lo inundaba como tsunami.

Él mismo trataba de convencerse que esa mirada de odio había sido porque aún estaba un poco resentido, solo un poco, pero por otra parte pensaba que podía volverlo picadillos en segundos si así lo quisiera.

El castaño era un poco nervioso, su cuerpo reaccionaba por si solo ante situaciones peligrosas o desconocidas, su mente le jugaba sucio casi siempre y mordía sus labios al tratar de calmarse. JiMin siempre había estaba para el cuándo algo le pasaba.

Si, JiMin...

¡JIMIN!

Abrió los ojos y dio un salto hasta quedar fuera de la cama. ¿Cómo pudo olvidar a JiMin? No había aparecido en la universidad de nuevo después de su torpe plan de escape. Sacó su celular y al encenderlo ignoró varios mensajes, entre ellos al de su novia y buscó el contacto de su mejor amigo.

Sonó una vez....

Sonó dos veces...

Sonó tres veces...

- JiMin, por favor... -suplicaba mirando a su celular. –Por favor, por favor, por favor...

Sonó cuatro veces...

Sonó cinco veces...

Sonó seis veces...

Y se rindió. Dejó caer el celular en la cama y fue hasta su guarda ropa; necesitaba darse una ducha larga, relajarse un rato mientras esperaba a sus padres, hacer la cena en un par de horas, aprender a no atropellar a la gente, quizás.

Mientras buscaba ropa cómoda comenzó a sonar Talk is overrated y literalmente se lanzó a la cama, tomó el celular y contestó.

- ¿JiMin? – su voz sonó esperanzada. – Oh, HoSeok.. – su voz se apagó.

- ¿Qué es eso de "Oh, HoSeok"? – imitó a su amigo. - ¿Qué pasa con JiMin y por qué parece que te dejó? Tenía una cara de pocos amigos hace un rato.

No pudo evitar sentirse culpable y asustado al mismo tiempo, JiMin lo mataría. Le daría créditos diciendo que era como una bolita de algodón rosa pastel, pero no, era todo un ser lleno de furia color rosa fluorescente.

- ¿Lo estaba? – preguntó con cierto timbre en su voz. – No, no es nada. – sonrió nervioso mientras mordía su labio, tenía que dejar de hacer eso. – ¿Pasó algo?

Se volvió hacia su guarda ropa y con una sola mano siguió buscando unos pantaloncillos cómodos y una camisa de algodón.

- ¿Recibiste mi mensaje? Dime que irás.

TaeHyung frunció el ceño, no tenía idea de lo que le hablaba.

- ¿Ir a dónde? – sostuvo su celular entre el hombro y su oreja para tener las dos manos libres y así darle un vistazo a la camisa de algodón que había elegido.

- ¡FIESTA! – su grito se escuchó tan alto que Taehyung tuvo que hacer malabares con su celular, su camisa y sus pantaloncillos para que ninguna de las tres se cayeran. –¿Tae?

- HoSeok, estamos a mitad de un curso. –habló en cuanto se repuso. – ¿Qué clase de idiota va a dar una fiesta justo ahora?

- ¡Min YoonGi! –su voz se escuchaba tan alegre que hasta a TaeHyung le dio gracia y comenzó a negar con la cabeza. –Es el chico de la B-4.

- No tengo idea de quien es Min YoonGi... –Colocó las prendas sobre la cama y comenzó a dirigirse hacia el baño. –Así que no creo que sea muy buena id...

- Está invitando a todo el mundo. –lo interrumpió. Se imaginó a su amigo haciendo expresiones exageradas y moviendo sus manos eufóricamente. –Todos irán, por favor...

- HoSeok, sabes q...

- ¡Te presento a mi hermana!

Definitivamente nadie podía contra HoSeok.

- Ya la conozco. –rió – Y es un encanto. –bromeó. –Tranquilo, puede que vaya.

Cortó la llamada y dejó el celular sobre el lava manos. Se deshizo de su ropa y se metió en la ducha disfrutando de las gotas que caían sobre su cuerpo, definitivamente era uno de los placeres más disfrutables para él.

(...)

La cena con sus padres había transcurrido tranquilamente, y por supuesto que el castaño no le había comentado sobre el pequeño accidente que había tenido, sus padres se alarmarían y le quitarían en auto por una buena temporada. A su hermano lo habían mandado al extranjero por algo similar.

Ahora estaba en su cuarto, acostado en su cama mirando hacia arriba. No tenía señales de JiMin, eso le preocupaba, pero ¡Joder! Iban a arrancarle la cabeza.

Mientras revisaba los mensajes que hace algunas horas decidió ignorar pudo leer uno de HoSeok y otro mensaje masivo.

< HoSeok >

Fiesta, fiesta, fiesta, fiesta este viernes.

< Número desconocido >

Levanten sus jodidos culos perezosos y vengan el viernes, ¡Fiesta!.

Min YoonGi.

- Vaya, que original.