—No me creerán a quién me encontré nuevamente —dijo mientras miraba a Namjoon y a Seokjin con alegría—. Nam ya te había hablado de él y hyung a ti también... ¿Recuerdan al chico del pastel de zanahoria con otros ingredientes raros?

Ambos chicos asintieron mientras seguían comiendo. Jimin bajó sus palillos con comida para reír emocionado.

—¡Me lo volví a encontrar! Fue gracioso. Estaba regresando de Busan ya que tuvo trabajo y nos tocó en los mismos asientos, al reconocernos comenzamos a charlar en todo el camino a Seúl.

—¿Y qué pasó con el pastel? Tiene gustos extraños —Seokjin rio un poco.

—Hyung, no era para él, era para su pareja. Me mostró unas cuantas fotos de ellos dos juntos y son demasiado tiernos, pude notar cuanto ama a su bebé y cuanto le agrada la idea de que dentro de unos cuantos meses será papá —sus ojitos brillaron—. Nos hicimos amigos, también intercambiamos números, me dijo que constantemente lo estaré viendo en la pastelería ya que su bebé suele darle muchos antojos a su pareja ya que casi no tuvo nauseas los primeros meses.

—Que lindo bebé —Seokjin dijo, haciendo a los otros dos reír ya que su bebé le había dado más nauseas que antojos, todo lo contrario al bebé del amigo de Jimin.

—Sí, me dijo que es muy tranquilo.

Después de unas cuantas risas más siguieron comiendo. Esos dos chicos no tenían planeado irse pronto y para Seokjin era algo maravilloso tenerlos un poco más en su casa.

🍼🍼🍼

—Bienvenido a... ¡Yoongi hyung!

Jimin miró sonriente al chico que acababa de entrar. Este solo sonrió con una reverencia para terminar de entrar y acercarse al pelinegro.

—¿Qué lo trae por aquí tan temprano? —rio un poquito.

—Mi novio —su rostro se iluminó de solo hablar de su pareja—. Se cuanto le gustan los pasteles y postres así que quise sorprenderlo con uno. Hoy pasará la tarde con sus padres y solo lo podré ver hasta la noche que salga del trabajo.

—Eres muy lindo, estoy seguro que harás que cambie todo el día de tu novio, estará realmente feliz. Créeme, estos pequeños detalles son los que amamos de nuestros novios.

Yoongi asintió comprensivo. Jimin lo llevó de su brazo hasta el área de pasteles para que el pálido decidiera que llevar.

Seokjin notó a Jimin ocupado con ese chico así que cuando otra persona entró él lo atendió, saliendo de la caja para darle la bienvenida. Así eran sus días, administraba la cobranza y cuando Jimin o alguno de los otros empleados estaban ocupados era turno de Seokjin para atenderlos.

Disfrutaba tanto de su empleo que no notaba en qué momento el tiempo corría tan rápido. Con Jimin se encontraban a punto de salir para almorzar, pero Seokjin no lograba decidirse que comer hasta que recordó el restaurante donde Namjoon lo llevó.

Su estómago rugió de solo recordar lo delicioso que olía el lugar. Después de despedirse de Jimin tomó un taxi que lo llevaría al lugar. La señora Jung al mirarlo llegar lo recibió con una sonrisa para llevarlo con ella a uno de sus mejores lugares.

—Qué bueno que vienes, cariño —estaba demasiado emocionada—. Mi hijo está aquí ¿Quieres conocerlo?

Seokjin asintió mientras ella se regresaba a la caja registradora donde un chico de sonrisa bonita admiraba un ramo de rosas rosas. Los miró charlar de algo con su madre para después apartar la mirada de ella y ahora mirar a Seokjin. Su mirada se encontró con la del otro chico, sintiendo la calidez en esa mirada y sonrisa.

En un abrir y cerrar de ojos madre e hijo se encontraban en su mesa. Seokjin lo observó un poco, mirando su pancita que era más notoria que la de él. Debía tener como dos o tres meses más que Seokjin.

—Un gusto conocerlo. Me llamo Jung Hoseok —sonrió haciendo reverencia.

Seokjin sonrió mientras se ponía de pie para hacer reverencia él también.

—Kim Seokjin —se presentó.

—¿Qué les parece si almuerzan juntos?

Ambos chicos asintieron, sería agradable hablar con alguien que entendía por lo que pasabas.

La mujer los volvió a dejar solos después que ordenaron lo que querían comer.

—Entonces... ¿Cuántos meses tiene, Seokjin ssi? —preguntó sonriente.

—Puedes llamarme solo Jin y tengo tres meses, mi bebé todavía es muy pequeño, pero veo que el tuyo es más grande ¿Cuánto tienes?

—Tengo seis meses —sonrió mientras sobaba su vientre—. Mi bebé es mi angelito, cada día me muestra las ganas de vivir que tiene... ¿Puedo contarte mi historia?

Sus ojitos brillaban con esperanza. Seokjin sintió para él porque a pesar de verse muy sonriente, había notado la forma tan feliz y triste con la que se dirigía a su bebé.

—Adelante, te escucharé.

El chico sonrió para después suspirar y comenzar a hablar de sus miedos y todo lo que lo atormentaba.

—Desde el primer mes fue difícil —suspiró—. Me enteré que estaba embarazo de una forma horrible... —sus manos se movían alrededor de su vientre con mucho cuidado y cariño—. Tuve sangrados, sabía que no era normal, incluso podía sentir que algo estaba cambiando en mí, pero no notaba que era por mi bebé —se tomó unos cuantos minutos antes de seguir hablando—. Mi novio me llevó al doctor y ahí nos dijeron que estuve a casi nada de tener un aborto natural. No entendíamos nada ¿Un aborto? Ni siquiera sabía que tenía casi un mes de embarazo.

Seokjin lo miraba con los ojos grandes. Su mano se dirigió a la del chico para apretar en forma de apoyo.

—Fuimos demasiado felices porque a pesar de haber tenido un posible aborto natural nuestro bebé quería que sepamos que ahí estaba y que nos iba a cambiar la vida de una manera extraordinaria —su sonrisa se hizo grande—. Me trasladaron con otro doctor que atendiera en el área de ginecología. Él me hizo un chequeo notando que sí, estuve por tener un aborto natural pero mi bebé tenía tantas ganas de vivir que se había aferrado a mí con tantas fuerzas que ni la naturaleza del embarazo pudo vencerlo.

Seokjin tenía tantas ganas de llorar al escuchar eso. Hoseok también pues sus ojitos brillaban aguados mientras su sonrisa permanecía.

—Estaba por entrar al segundo mes, mi doctor me recetó vitaminas para mí y otras para el bebé. Ese segundo mes fue excelente, no tuve ninguna complicación, tampoco tenía vómitos, por eso no noté que me encontraba gestando... Mi novio estaba igual de feliz que yo. Nos consiente mucho, si se me antoja algo, no importa que sea lo más extraño del mundo, sé que él recorrería cada lugar por encontrar eso —se rio un poquito—. Las otras complicaciones llegaron al tercer mes. Nuevamente estuve por tener un aborto natural, pero estábamos tan unidos que ahora tuvo a papá que no dejaría que nada ni nadie lo separara de su lado. Mi cuarto mes estuvo más tranquilo, mi vientre cada vez se hinchada más, dándome más motivos para estar demasiado feliz. Ahora estoy a la mitad del sexto meses, se el sexo de mi bebé y sé que desde ahora en adelante no nos podrán separar.

Seokjin se puso de pie para abrazar al chico mientras sus lágrimas bajaban y una inmensa felicidad inundaba a los dos.

—Tuviste unos meses difíciles pero tu bebé te dio otros excelentes. Entiendo que no todos los embarazos son iguales, estoy pasando por el tercer mes, pero también sé que hay más riesgos que se pueden presentar en cualquier momento y eso es lo que causa más terror, no saber en qué momento le puede suceder algo al bebé... Si lo piensas un poco, no la has tenido fácil, pero con eso te das cuenta de lo fuerte que es tu bebé y estoy seguro que tiene muchas ganas de vivir y de conocerte a ti y a tu novio.

Hoseok asintió con lágrimas bajando por sus mejillas. Estaba feliz de tener un nuevo amigo porque vio en Seokjin algo que no había visto en otra persona desde hacía mucho tiempo. Ahora compartían algo en común como el embarazo de ambos y eso les decía que se podían llevar muy bien en el futuro.

¡Hola!

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Dos nuevos personajes en la historia, desbloqueados ✔

Ahora ya conocen un poco de la historias de Hoseok

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Espero que les guste mucho ❤

Nos leemos pronto 💜

¡Adiós!

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Capítulo dedicado a: cariciass 💜

Muchas gracias 💖