「 05 」
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"Jung Kook no podía parar de llorar; su corazón le dolía y sentía cómo su lobo estaba chillando por lo mismo. Ve la raspada en su mano, he inmediatamente siente ardor en la zona, haciéndolo llorar otro poco más; odiaba que por culpa de su lobo fuera así de sensible para todo.
—Tontos niños cabeza hueca —murmura, molesto, pataleando ligeramente.
—Aquí estás —escucha a sus espaldas, soltando un respingo por el susto, volviéndose para ver de quien se trataba.
—Yoon Gi hyung —susurra en un sollozo, escondiendo su mano en su espalda.
El mayor gruñe, acercándose a Jung Kook y agachandose hasta quedar a su altura —puesto que el menor estaba sentado, "escondido"—. Toma la mano del contrario y lo obliga a mostrársela, mirando la raspadura en la zona.
—Esto no es nada, Jung Kook —regresa a verlo, y el azabache baja la mirada para evitar la contraria—, ¿por qué lloras? —El más joven aparta la mano, escondiéndola nuevamente.
—No estoy llorando por eso —Yoon Gi frunce el ceño.
—¿Entonces por qué? —Jung Kook juega con sus dedos, ansioso, y volviendo a llorar al recordar todo.
—Por lo que me dijeron —solloza—. "Tus dientes son demasiado grandes y feos"; "todos piensan que eres molesto"; "eres demasiado feo como para que en verdad vayas a ser un omega"; "nadie te quiere ni querrán cortejarte" —sorbe su nariz, sintiendo su pecho contraerse ante todas esas palabras.
Desde que comenzó a dar indicios de que muy probablemente sea un omega, todos sus días parecían ser igual; todos le hacían burlas, por el simple hecho de ser "feo".
Yoon Gi suspira, sentándose frente al pequeño.
—Lo de tus dientes solo te lo dicen porque usas brackets —comienza—; eres molesto sólo en ocasiones, cuando te pones en un plan berrinchudo; no eres feo, eres muy lindo, y si necesariamente todos los omegas deben ser bellos como muñequitos de porcelana, creo que son unos estúpidos por dejarse llevar por simples estereotipos...
—«Estúpidos» es una mala palabra, hyung —murmura Jung Kook, comenzando a sentirse un poco mejor con lo que le está diciendo su mejor amigo.
—Bueno, tú les dijiste "tontos niños cabeza hueca", y maldecir a las personas también es malo —el menor siente su rostro enrojecer por la vergüenza—. Y eso de que nadie te quiere sabes que no es verdad. Tu mamá te quiere; tu papá igual; de tu hermano ni se diga. Los tres te quieren muchísimo, y te lo hacen saber todos los días —dudando un poco en lo que dirá, termina por soltarlo—: Yo igual te quiero, Jung Kook; y ten por seguro que igual habrá muchas otras personas que te querrán en el futuro.
Jung Kook levanta la mirada, topandose con la de Yoon Gi, quien le dedica una sonrisa ladina. El mayor sabe perfectamente que su pequeño tiene muchas inseguridades, y el tiene que apoyarlo en esos momentos; para que no llegue a crees que es cierto todo lo que los demás le dicen.
—¿T-tú en verdad m-me quieres? —Juega aún mas con sus dedos, demasiado ansioso.
—Claro que sí —responde el mayor, poniendo una mano sobre la cabeza contraria, acariciando con parsimonia el cabello suave de Jung Kook—. Y siempre te voy a querer.
Es el turno ahora del menor para sonreír, lanzándose a los brazos de Yoon Gi, siendo bien recibido en estos.
—Yo igual lo quiero, hyung —susurra, apretandolo un poco más. Luego, se aleja de forma mínima para verlo a los ojos—. ¿Es cierto que te presentarás como alfa? —El contrario hace una mueca.
—Aún no estoy muy seguro de que vaya a suceder eso.
—Pero todo pinta a que sí —una idea algo loca, él no se da cuenta de ello, surca su cabeza—. ¡Oh! Ya sé. Si te presentas como alfa, y yo como omega —guarda un poco de silencio—, ¿podrías ser mi alfa?
—¡¿Qué?! —No puede evitar exclamar con confusión y bastante sorpresa.
—Dijiste que me querías, y yo igual te quiero mucho; si nos queremos, creo que seríamos la mejor pareja —Yoon Gi hace un sonidito en desaprobación.
—Yo no me refería a esa clase de...
—¡Hyung! —Hace un ligero puchero, dando indicios de querer llorar nuevamente—. Por favor... no voy a querer a otro alfa más que a ti; todos los que parecen que serán alfas son unos... estúpidos —había dicho una mala palabra, pero no se arrepentía de ello; no cuando era totalmente verdad.
—Podrías conocer a otros y otras alfas que igual te gusten, incluso betas —el menor arruga la nariz.
—No creo que los vaya a querer tanto como a usted. Además... nosotros ya nos besamos —ante eso parecía no tener con qué contraatacar, así que por la necedad de Jung Kook, termina rindiéndose, suspirando de forma pesada.
—¿Sabes que sería algo malo, cierto? —Intenta con otra cosa.
—No me importa.
—Bien. Si es que me presento como alfa...
—Lo cual, es muy probable...
—Seré tu alfa —no podía creer que en serio esté diciendo eso; sabía que más adelante se iba a arrepentir.
Jung Kook chilla con emoción, sintiendo a su lobo ahora demasiado contento y entusiasmado, tal cual él ahora mismo.
—¿Y cómo nos aseguraremos de que eso pase? —Yoon Gi suelta una carcajada.
—¿Con mi palabra no te basta? —El menor niega—. Hay veces en las que siento que no me tienes la suficiente confianza —ve a sus alrededores, encontrándose con una lata vacía de refresco en el suelo, muy cerca a donde estaban. Se estira hasta alcanzarlo, y cuando la tiene, le quita la lengüeta, tomando la mano de Jung Kook después—. Considera esto como una prueba y para que recordemos esto —ahí, en el orificio más grande de la lengüeta, mete el dedito del menor hasta donde se puede para no lastimarlo, haciendo revolotear el estómago del pequeño.
No sabía por qué, pero le encantaba sentir aquello.
Ríe, y después besa rápida e inocentemente los labios de Yoon Gi, para abrazarlo por último.
—Ya quiero que seamos grandes, hyung —dice—. Ya quiero que nos casemos."
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¿Qué loco era el destino en ocasiones, cierto?
Jung Kook aún recordaba aquello perfectamente, y se sentía pésimo cada que lo volvía a revivir en su mente. Nunca habló respecto a eso después con Yoon Gi —aunque sí hubo ocasiones en las que él dijo algo respecto a esa conversación—, y supone que eso se debe a que en realidad fue algo demasiado bobo.
En ese entonces, Jung Kook tenía a penas ocho años y Yoon Gi diez, no es como si algo que dijeras en ese entonces dentro de veinte años después lo fueras a tomar en serio. Eran unos niños bastante ilusos, y aunque al final sí resultó que el menor fuese un omega y el otro un alfa, era más que obvio que nunca se casarían y dejarían aquella conversación en el olvido; aunque, bueno, Jung Kook no la ha olvidado, y tal parece que nunca lo hará.
Toma el collar que siempre traía junto a él, escondido, sacándolo para verlo. En esa cadena traía aquella lengüeta que esa vez Yoon Gi le había puesto en el dedo como "prueba de su compromiso". La traía con él porque sentía que era un amuleto de la suerte, o algo que le hacía siempre estar a salvo; era como una pequeña parte de su mejor amigo que siempre podía estar a su lado. Y cuando decía que siempre la traía junto a él, es porque siempre la traía; solo se la quitaba del cuello cuando se bañaba o dormía, y al hacer lo último, usualmente lo sostenía fuertemente con su mano para dormir junto a él. Amaba demasiado esa lengüeta, aunque a este punto ya no tiene significado alguno.
—¿Cómo es que de esto... —mira su mano, específicamente el dedo anular donde está el anillo del falso compromiso con Yoon Gi—... pasamos a esto? —Suspira.
Salta en su asiento en cuanto la puerta del consultorio se abre, por lo que esconde rápidamente el collar debajo de su camisa, regresando a ver de quien se trataba aquella repentina visita.
—¡Jung Kookie! —Dice alegremente la joven chica que acaba de entrar al consultorio, extendiendo sus brazos, con una sonrisa bastante familiar pintada en sus labios.
Por la vestimenta glamourosa verdaderamente no le recordaba a nadie, y quería verle a los ojos para poder reconocerla, pero estos estaban cubiertos por unos lentes de sol oscuros.
—Perdón, doctor Jeon; le dije que estaba en su tiempo de descanso y entró así sin más —le dice su secretaria asomándose a la habitación, temerosa.
—Descuida, Tae Yeon. Yo me encargo —su secretaria da una reverencia antes de cerrar la puerta—. ¿Qué se le ofrece? Ya que por lo que veo no trae a ningún niño ni tampoco quiere agendar una cita —se dirige a la chica.
—Vamos, Jung Kookie. No me hagas reír —toma asiento frente al omega—. Me rompería el corazón si dices que no me recuerdas —el chico frunce el ceño, y hasta que la, al parecer, también omega se quita los lentes reconoce de quien se trata.
—¿Kyu Young? —Exclama, sorprendido.
—La misma —ríe un poco.
Se trataba de Min Kyu Young, la hermana —o más bien hermanastra— menor de Yoon Gi. Tenía la misma edad que Jung Kook, sólo que ella era mayor por meses; aún así, nunca la llamo por ningún honorífico. Iban en el mismo salón en la escuela, y fue por ella —más o menos— que Jung Kook y Yoon Gi se conocieron.
A pesar de que nunca fueron amigos como tal, se conocían lo suficiente como para ser personas cercanas.
—¿Qué haces aquí? Pensé que te habías ido a Estados Unidos para trabajar como modelo —dice Jung Kook.
—Y así fue, sólo que me enteré por las noticias que mi hermano se iba a casar y tomé el primer vuelo a Corea para hablar con mi cuñadito —el menor empieza a ponerse algo nervioso—. Tu secretaria dijo que tienes tiempo libre, así que supongo que no tienes problemas con que vayamos a comer.
—Bueno, pensaba comer con Yoon Gi... —miente.
—Si es por eso no te preocupes, yo le digo que vas a comer contigo. En serio quiero hablar contigo de muchas cosas.
Al final, el omega menor terminó aceptando, y ambos fueron a un restaurante de comida china que quedaba a sólo un par de minutos de la clínica en dónde Jung Kook trabaja.
Ya después de haber pedido su comida —demasiada comida para ser sólo ellos dos—, es Kyu Young quien rompe el silencio:
—Quiero ver —toma la mano de Jung Kook, admirando el anillo que el dedo anular traía—. Sinceramente no me sorprende que sea así de feo, Yoon Gi nunca tuvo buenos gustos conforme a los accesorios... sin ofender —el chico ríe un poco.
—Descuida; a mí me gusta, y es suficiente con eso —aparta su mano, pues se sentía algo incómodo al tener que mentir con eso.
Toma algo del agua que les habían traído, ya que quería bajar su nerviosismo lo más mínimo que se pudiera.
—¿Ya follaste con mi hermano? —No puede evitar escupir algo del agua que traía en su boca al escuchar aquello, para poco después comenzar a toser un poco.
—¿Pero qué pregunta es esa? —Limpia los residuos de agua que tenía en sus comisuras y en su barbilla.
—Bueno, es que se están casando después de mucho tiempo de conocerse; no lo sé, pero creo que se comieron la torta antes del recreo —Jung Kook bufa.
—No estoy embarazado —responde.
—Eso lo sé, no puedo percibir ningún olor que lo delate. Aún así, quería saber eso por si las dudas, y no has respondido.
—No me siento cómodo hablando de eso.
—Entonces hablemos de otra cosa —piensa—. ¿Cuántos hijos piensan tener? —De sólo escuchar eso, su corazón se estruja con violencia.
—No lo sé —murmura—. No es algo que hemos hablado ya, pero Yoon Gi siempre ha dicho que quiere tener cinco; cuatro niñas y un niño.
—Entonces van a tener que coger como malditos conejos para que me conviertan en tía de cinco seres maravillosos.
—Kyu Hyung...
—Ya sé, la cague. No tuve porqué haber mencionado nada sobre coger —ríe—. Aún estoy sorprendida, ¿sabes? Yoon Gi hace mucho tiempo me había dicho que estaba saliendo con alguien, pero no quiso decirme quién porque quería que fuese una sorpresa para todos. ¿Por qué no pudo decirme que eras tú y ya? ¿Tan difícil era?
—Quizá es porque nunca nos llevamos bien, y quizá no te ibas a tomar muy bien eso de que seamos cuñaditos.
—Admito que hubo ocasiones en las que te traté mal y me enojaba mucho contigo, pero era más porque Yoon Gi te prefería a ti que a mí, y se supone que es mi hermano mayor —bufa—. Por cierto, perdón por todo lo que pude haberte causado cuando éramos niños, fueron por simples celos de hermana.
Es el turno de Jung Kook de reír y le dice:
—Descuida.
Cuando les traen la comida, Kyu Hyung habla:
—Tengo que advertirte de algo —se echa un poco de comida a la boca—. Creo que estás enterado de lo especial que puede llegar a ser mi mamá en ocasiones. Ella me llamó y me dijo que estaba molesta por todo lo que mi estúpido hermano hizo, así que deberías estar al pendiente de que no te haga nada —se agacha un poco para susurrar—. A veces, se le suele soltar un poco el tornillo —Jung Kook ríe un poco, sólo que eso no evita que sienta algo de temor por la madrastra de Yoon Gi ahora.
Él la conocía, habían intercambiado un par de palabras en ocasiones, y nunca le ha dado una buena espina esa mujer. Desde lejos, se veía que es una beta controladora y prejuiciosa; su semblante siempre detonaba seriedad y nada que tuviese que ver con algo agradable. A Yoon Gi por algo no le agradaba —dejando se lado que ella fue la causante por la que su padre dejase a su madre biológica—, y a Jung Kook tampoco. Además, él era la única persona fuera de la familia Min que sabía que aquella mujer no es la verdadera madre de Yoon Gi, y seguramente eso también es por algo.
—¿Llegué algo tarde? —Una tercera voz se suma, una familiar para ambos omegas presentes.
—Llegaste justo a tiempo. No tiene mucho que nos sirvieron la comida —responde Kyu Young.
—¿Qué hace aquí, hyung? —Pregunta Jung Kook, mirando al alfa sentarse a su lado.
—Kyu Young me invitó —antes de que el menor pudiera decir otra cosa, Yoon Gi besa su mejilla, tomando al omega por sorpresa.
Más no hace comentarios al respecto y se mantiene neutro, sabía que estaban en público y frente a Kyu Young, quienes piensan que lo de su compromiso va muy en serio.
Se limita, a sonreirle sin mostrar los dientes, tratando de que no se vea como una mueca de disgusto; le había gustado el beso, claro, pero no le gustó el que sea "a la fuerza" para que el papel de futuros esposos sea creíble.
—Aww~, en serio se ven muy bien juntos —comenta Kyu Young, sintiendo leves cosquillas por la bella escena que presencian sus ojos—. Te pedí lo de siempre, Yoon Gi.
—Gracias —responde, tomando los palillos para empezar a comer.
—Voy al baño, ahora vuelvo —informa la omega, levantándose y llendo hacia donde se encontraban los sanitarios, dejando a los chicos solos.
—Pensé que se lo dirías a tu hermana —dice Jung Kook, refiriéndose a su compromiso falso.
—No podría. Es demasiado cercana a Mi Kyung, y hay veces en las que suelta cosas que en realidad sólo está pensando; es bastante arriesgado decírselo, aunque quisiera —come un par de fideos después.
—¿Quién más lo sabe además de Yong Sun?
—Nadie más —Jung Kook muestra una cara de sorpresa—, y no se lo puedes decir a nadie.
—No me siento cómodo mintiendole a personas que me importan, hyung.
—Créeme que no será por mucho tiempo; cuando menos lo esperes, esto se acaba —el teléfono de Jung Kook toca la melodía de cuando le llega un mensaje, así que se siente un poco aliviado tener que salir de esa conversación con esa excusa.
Al revisar, se da cuenta de que se trata de un mensaje de Ho Seok —lo cual, se le hacía increíblemente raro, pues casi nunca le mandaba mensajes a menos que sea por algo que tuviese que ver con su hija—.
"Hola, Jung Kookie. ^^"
"Me preguntaba si el sábado estás libre para ir al cine con So Yeon. Quiere ver una película, pero me pidió que te invitara porque quería salir contigo".
"Ella, no yo. ㅋㅋㅋ".
"Si no puedes, está bien, entiendo; y So Yeon también. ^^"
Yoon Gi no pudo evitar mirar de reojo la pantalla del celular, leyendo el contacto de 'Ho Seok hyung ^^' en la bandeja de mensajes. Gracias a lo poco que lee de los mensajes, sabe más o menos de lo que tratan, por lo que suelta una carcajada.
—¿Es el chico de ese día? —Pregunta el alfa, viendo como Jung Kook volvía a guardar el teléfono aún sin haber respondido los mensajes.
—¿Por qué lo preguntas? —Suena tan tranquilo, que logra molestar a Yoon Gi.
—Bueno, él te está invitando a una cita; ¿qué no sólo es un amigo tuyo? —Jung Kook regresa a verlo con el ceño fruncido, confundido.
—No tiene nada de malo que me invite a salir, eso no es necesariamente una cita; tú igual me invitabas a salir, pero no eran citas —el mayor se queda sin palabras para refutar, hasta que, sin saberlo, se le ocurre decirle lo peor:
—A mí no me gustas, a él sí —Jung Kook se queda en silencio ante eso, sintiendo como su corazón se estruja con violencia y un nudo se forma en su garganta; también, siente cómo su lobo decae, sintiéndose igual dolido por lo que "su alfa" acaba de decirle.
"Te dije que no te ilusionaras, lobo tonto" le dice Jung Kook, escuchando su chillido doloso.
—Entonces no le veo lo malo en salir con él —responde, tratando que no se note su voz cortada—. Quizá él igual me gusta, y con esta cita me pida que seamos novios formalmente...
—¿Acaso se te ha olvidado que él piensa que nosotros estamos comprometidos? No creo que se atreva a pedirtelo.
—Estaría dispuesto a decirle la verdad si es que la conversación se da; Yong Sun lo sabe porque es tu novia.
—No puedes hacer eso.
—Claro que puedo; no eres nadie para prohibirme cosas ahora que lo recuerdo.
—¿Piensas delatarme?
—No te voy a delatar, Ho Seok no se lo diría a nadie; sólo quiero ser completamente feliz por una puta vez en mi vida...
—No puedes salir con ese tal Ho Seok...
—¡¿Por qué no?! ¿Acaso también me vas a prohibir tener pareja cuándo tú si tienes una? Tú mismo dijiste que no te gusto, y me haces entender que lo único que parece importarte es esta estúpida guerra con tu padre, no yo; así que ¿esto en qué demonios te afecta? —Yoon Gi ahora sí no tenía nada para refutar, pero estaba molesto, muy molesto; no con Jung Kook, sino con su lobo que parece haberlo controlado en ese momento; y con el maldito de Ho Seok, que sin estar ahí presente, ha sido su mayor provocación.
Ahí, puede notar la mirada dolida y molesta también del menor, sintiéndose el doble de enojado consigo mismo. No podía creer que después de tanto, se haya peleado con Jung Kook por culpa de su estúpido lobo. Más aún porque ni siquiera sabe por qué su lobo actuó así al ver los mensajes de Ho Seok para su amigo omega —tal cuál aquel día en el que los vio abrazándose, su lobo no dudo ni un segundo y le hizo salir de su auto para impedir que aquello llegase a más—; se molestó demasiado, a tal grado de poder controlarlo, y hacerle creer que estaba... celoso.
«¿Qué mierda? ¡¿CELOSO?!»
—Los baños estaban demasiado llenos; perdón si me tarde —Kyu Young dice mientras toma asiento nuevamente en la mesa, notando casi de inmediato el aura que uno de los dos chicos frente a ella desprendía—. ¿Pero qué pasó? Yoon Gi apesta a enojo —el alfa parece sorprenderse ante aquello, pues no se había percatado que había comenzado a sacar feromonas que delatan el estado actual de su lobo y el suyo mismo.
Jung Kook no se había dado cuenta de ello tampoco, así que agudiza su olfato, notando un desagradable olor amargo.
Inmediatamente frena sus feromonas, para que poco después vuelva su olor de menta y cerezas tan característico de él; eso no significaba que se le había bajado el enojo, pero no quería que todo el mundo lo notara —pues hasta ese punto se percata de las miradas curiosas que son dirigidas a ellos—.
—No ocurrió nada —se limita a decir Jung Kook—. Ya es algo tarde, y tengo que volver al trabajo —toma sus cosas, listo para irse.
—¿Ya te vas? Pero no has comido nada —dice la omega.
—Se me ha quitado el apetito —se levanta de la mesa y dice—: Nos vemos luego —le importaba muy poco lo cortante que aquello se haya escuchado, pues sólo quería salir de ahí y alejarse lo más posible de aquel alfa que sólo altera sus emociones.
Y ahí fue cuando Yoon Gi lo supo; la cagó horrible.
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Por si quieren saber como es para mí la hermana de Gigi —o la persona que tomé de inspiración para describirla—, aquí una foto:
Su nombre es Park Kyu Young, obviamente para este fic tuve que cambiarle el apellido a Min. Es una muy talentosa actriz; la había visto en algunos dramas antes, pero no fue hasta que la vi en 'Está Bien No Estar Bien' que me dije: "¡Es perfecta como para ser la hermana menor de Gigi en FL!" Y aquí la tienen.
Nadie pidió foto de ella seguramente, pero quiero que me digan que no soy la única loca que le encuentra cierto parecido con Yoon Gi, porque lit en todo este drama a mí me parecía que veía a Yoon Ji —y creo que en la foto el parecido no es tan notorio—. xD
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