ㅤㅤ𝟎𝟐.ㅤregreso
Valeria.
ㅤMarcos e Ian, con un tintineo burlón, ríen cuando me doy vuelta sobre la silla y noto algo helado en mi asiento.
"Pa, dejense de romper las bolas." suelto un frustrado suspiro y me pongo de pie. Yuliana chista la lengua y se acerca a mí posterior a fulminar con la mirada a nuestros amigos "¿No tienen poronga para hacer que me romper los huevos boludo?" cuestiono y es Ian quién intenta decir algo pero las carcajadas del pelinegro a su lado lo interrumpen.
El regaño de Paloma, la profesora de Adolescencia, no se hace esperar y nos indica de manera autoritaria salir del curso e ir a dirección.
Paso por su lado y bajo pido disculpas; al salir, camino rápido y así alejarme de los idiotas que tengo por amigos.
"Che, disculpanos." habla Ian a unos pasos de mí. Bufo y le ignoro. Cuando entro en el baño con la mochila cubriéndome el culo, un brazo rodea mi muñeca de manera suave y me detiene "Era joda Val." dice al extenderme su buzo negro mientras lo veo.
En su mirada noto algo de seriedad y calidez. Sus ojos verdes no parecen querer quitar la vista de mi rostro, más aún cuando desvío los míos tras de sí, mirando ningún punto en específico.
"Bueno, está bien." digo segundos después y una sonrisa cruza por sus enrojecidos labios "¿Me dejas así me cambio?"
"Dale." breve dice y se separa. Manteniendo todavía la sonrisa en su rostro "Te espero acá." asiento e ingreso al baño.
Noto de inmediato a Yuliana caminar atrás mío y me volteo para verla mejor. Tenía las cejas arqueadas y una sonrisa juguetona.
Dejo escapar un suspiro; esperando el ya común interrogatorio de mi castaña amiga.
"No tengo nada con él, ¿sos idiota?" inquiero largando una risa. Ella me imita y yo me encierro en un cubículo.
"Si, bueno, vos sabes que él siempre ha querido intentar algo con vos." comenta con voz cantarina "Pero nunca le das bola al nene." río y ruedo los ojos.
Yuliana sostiene con la mano el buzo de Ian y mi mochila por sobre la puerta. De ella saco mi pantalón de repuesto; un jogger negro.
"Es mi amigo y bien sabes que nunca salgo con ellos." inquiero una vez abro la puerta y la miro. Yuliana blanquea los ojos y se aleja al lavabo.
"Podes salir con él pero no queres después de lo sucedido con ya sabes quién." inspiro cruzada de brazos. La miro cortante y río sin gracia.
Ya había pasado cerca de año y medio que no veía a Mariano; mi ex novio. O bueno, quién fingió serlo por unos meses.
La cuestión es que mis queridísimos amigos continuaban hablando sobre el tema; como si se tratase de un recordatorio contante de la cagada que me mandé al enamorarme de un flaco tan hipócrita como él lo había sido conmigo.
"Mariano, así se llama ese quién." con voz seca digo, mientras me lavo las manos "Nombralo, problema no tengo." indico irritada. Actuando de manera desintersada.
Sin reparar en la espera de su contestación tomo mi mochila y salgo del baño, con sus audibles llamados sobre mi nombre.
Lo cierta era que sí me dolía oír de nuevo sobre él. No lo he olvidado, eso era obvio; pero actuaba así, a la defensiva, porque estaba harta de recordarlo, de saber todo lo que me había hecho y que continuaba con su vida como si nada.
Ahogada en mis pensamientos, no me percato que choco con alguien hasta que lo oigo putear en mi dirección.
"¿Pero sos boluda flaca?" suelta enojado. Indignada lo miro y carcajeo cuando se agacha sobre sí y recoge los libros y demás hojas en el piso.
"Ah bueno." es lo único que sale de mis labios al cruzarme de brazos.
"Valeria." esucho a mis espaldas y reconozco casi de inmediato la voz de Ian. Siento su presencia a mi lado y ríe mientras mira al chico en el suelo "Uy, tarada siempre vos, ¿eh?" me vuelvo rápidamente y lo fulmino pero me ignora entre risas "Perdonala Valentín, es medio pelotuda.
Al finalizar su pequeño disculpa se agacha y ayuda al tal Valentín. No tardo mucho en imitarlo y tomar las últimas hojas sobre un charco de agua y barro.
"El pelotudo sos vos." digo después de varios minutos "Eu, disculpame. No te vi," hablo mirando al rubio "estaba absorta en mis cosas.
Trago saliva una vez sus ojos azules se fijan en mí. Y no entendí en ese instante el cúmulo de sensaciones que lleno mi interior; el carraspeo de Ian capta nuestra atención y yo desvío la mirada a otra parte. Aún con las manchadas hojas en mis manos.
A unos metros veo a Yuliana y Joana caminando a nuestro lugar, ambas con el ceño fruncido y los ojos en la entrada del colegio.
"Valeria." nombra Joana tomando mi brazo de manera suave, sin poner su ojos sobre mí. Mis cejas se unen desentendida y decido voltear.
Mis ojos se abren de par en par y la respiración me falta. Es el agarre de Ian y Joana que me mantiene cuando mis piernas flaquean.
Por un efímero momento sus ojos cafés se cruzan con los míos, persistiendo en el aire esa actitud burlona y el rostro tan sereno a la que tan acostumbrada, por un tiempo, estuve; y no es hasta que vislumbro la pelinegra cabellera de Marcos delante suyo encajando un golpe lleno de rabia en su mandíbula, que me acerco lo más rápido que mi cuerpo me permite, y separo a mi amigo del idiota que una vez pretendió ser mi novio.
La indiferente risa de Mariano capta mis sentidos y respiro hondo para no gritar: "Es un gusto verte de nuevo, Lea." murmura mirándome directo, haciendo que mi corazón se encoja por ese apodo. Marcos putea audible, más aún cuando el otro se acerca y se cuadra frente a mí "Te extrañé, ¿sabías?" inclinándose hacia delante, muy cerca de mi rostro, dice.
Sus manos un tanto acarician mi cabello, y siento una presión en el pecho una vez todos recuerdos vividos en torno a él me envuelven.
Había vuelto. Y era evidente que ya nada podía ponerse más difícil en mi vida.
✡︎
mmm no se q opinan de mariano, a mi m cae mal pero tiene sus cositas q me hacen quererlo un poquito noma
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