Estoy sentado solo en un pasillo blanco, huele a desinfectante con cloro y de pronto una angustia me invade todo el interior.

Me levanto y corro desesperado buscando algún doctor que me pueda dar información.

Encuentro a uno y de inmediato me aferro a él.

— Doctor, ¿Cómo está él? Por favor, dígame que todo está bien ¿Dónde está? ¿Puedo verlo? — Las lágrimas no me dejan ver con claridad, mi corazón late con fuerza y un nudo se forma en mi garganta.

El doctor está tranquilo y es muy amable. — Hola, soy el doctor Kim SeokJin ¿Dígame en que puedo ayudarlo?

— Yoongi, Min Yoongi, es mi esposo, tuvimos un accidente en el auto, nos salimos de la carretera, yo iba conduciendo y entonces apareció de la nada y perdí el control, y él ¿Cómo está? Dígame que está bien doctor — Ya no podía más con la desesperación.

El doctor me toma del brazo y me lleva a sentar, él está calmado.

—Tranquilo Señor Min, su esposo está bien, solo tuvo algunos golpes, no hay de qué preocuparse.

De inmediato me sentí más ligero al saber que él estaba bien. — ¿Puedo verlo?

— De momento está descansado y está dormido, podrá verlo en unas horas más. — Me dijo el doctor y yo asentí tranquilo.

— Gracias Doctor Kim, esperaré.

Me sentí mejor de saber que él estaba bien, solo tendría que esperar un poco y podría verlo, si algo le llega a pasar a Yoonie yo no sé lo que haría.

Me quedé sentado en el mismo lugar, de pronto vi que alguien se acercó a mí, traía una bata blanca y un gafete con su nombre que decía Doctor Kim SeokJin. — ¿Jimin? — Pregunto por mi curioso.

— ¿Si? — Conteste un poco a la defensiva, ¿Por qué ese Doctor sabía mi nombre?

— Acompáñame por favor, no tengas miedo, tienes visitas, en mi consultorio.

— ¿Visitas? — Pregunté inseguro ¿Visitas de que?

Yo solo me puse de pie y lo seguí, al entrar a su consultorio estaba ahí mamá e iba acompañada de un joven bastante lindo, serio y con unos ojos bonitos.

— ¡Mamá! — Dije contento de ver una cara familiar, la abracé y ella me recibió amorosa como siempre.

— Hola mi niño ¿Cómo estás? — Preguntó viéndome enternecida ¿Con lastima tal vez?

— Bien, ¿Dónde estamos? — Me acerque a su oído — ¿Quién te acompaña? ¿No vas a presentarlo? — Eso la hizo sonreír.

— Jimin te presento a Min Yoongi, Yoongi, él es mi hijo Park Jimin.

El de inmediato me sonrió, tenía una hermosa sonrisa y unos ojos que me derritieron ahí mismo y me sentí acalorado, era muy atractivo, me extendió su mano — Mucho gusto Jimin. — ¡Dios! Era tan guapo que me estaba poniendo muy nervioso y comencé a coquetear con él sin darme cuenta, o tal ves si me di cuenta.

Yo extendí la mía y después le di una pequeña reverencia — El gusto es mío. — Dije sonriéndole y sin que nadie mas que él lo notara, le guiñe un ojo el sonrío aún mas y se sonrojo, ¡Era tan lindo!

— Jimin, amor ¿Recuerdas a Yoongi?

La verdad es que su rostro me era familiar y al igual su nombre pero no lo conocía, al menos no recordaba conocerlo, seguro que un pedazo de hombre como aquel no lo olvidaría nunca. "Contrólate Park" me regañe a mi mismo.

Yo solo la mire y negué ¿Debería conocerlo?  No me atreví a decirlo en voz alta, no quería parecer grosero.

— No amor, no te preocupes.

—Jimin-ssi, te llevaré a una habitación para que esperes un momento, necesito hablar con tu madre ¿De acuerdo? — Me dijo el Doctor amablemente.

Yo solo asentí y antes de irme me despedí del chico — Hasta luego Yoongi, un gusto conocerte. Espero verte mas seguido. — Dije siendo un poco coqueto y creo que él lo percibió por que se sonrojo y sonrió apenado — Lo mismo digo Jimin — Me dijo aun sonriendo aunque su mirada lucía triste.