VEINTIDÓS
"𝑇𝑒𝑛 𝑝𝑜𝑟 𝑠𝑒𝑔𝑢𝑟𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑒𝑥𝑡𝑟𝑎𝑛̃𝑜 𝑚𝑎́𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑖𝑚𝑎𝑔𝑖𝑛𝑎𝑠, 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑝𝑖𝑒𝑛𝑠𝑜 𝑚𝑎́𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑐𝑟𝑒𝑒𝑠 𝑦 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑞𝑢𝑖𝑒𝑟𝑜 𝑚𝑎́𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑎𝑠 𝑣𝑒𝑐𝑒𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑒 𝑙𝑜 ℎ𝑎𝑔𝑜 𝑠𝑎𝑏𝑒𝑟, ¿𝑆𝑒𝑔𝑢𝑖𝑟𝑎́𝑠 𝑐𝑟𝑒𝑦𝑒𝑛𝑑𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑜 𝑒𝑠 𝑢𝑛𝑎 𝑏𝑟𝑜𝑚𝑎? 𝑉𝑎𝑦𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑛 𝑒𝑠𝑜 𝑛𝑜 ℎ𝑎𝑠 𝑐𝑎𝑚𝑏𝑖𝑎𝑑𝑜, 𝑐𝑢𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑒𝑛 𝑟𝑒𝑎𝑙𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑣𝑜𝑦 𝑒𝑛 𝑠𝑒𝑟𝑖𝑜 𝑎 𝑝𝑒𝑠𝑎𝑟 𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑒𝑥𝑝𝑟𝑒𝑠𝑜 𝑎 𝑡𝑟𝑎𝑣𝑒́𝑠 𝑑𝑒 𝑛𝑢𝑒𝑠𝑡𝑟𝑎𝑠 𝑏𝑟𝑜𝑚𝑎𝑠 𝑠𝑜𝑙𝑜 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑣𝑒𝑟𝑡𝑒 𝑠𝑜𝑛𝑟𝑒𝑖𝑟, 𝑙𝑎 𝑠𝑜𝑛𝑟𝑖𝑠𝑎 𝑞𝑢𝑒 ℎ𝑒 𝑔𝑟𝑎𝑏𝑎𝑑𝑜 𝑒𝑛 𝑚𝑖 𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒."
𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 22: 𝑁𝑒𝑐𝑒𝑠𝑖𝑡𝑜 10,000 ℎ𝑜𝑟𝑎𝑠 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑖𝑔𝑜
Seis meses después.
Soltó una sonrisa emocionado al ver los resultados de la evaluación, escuchó a sus amigas gritar un poco emocionadas mientras daban pequeños brinquitos, la señora Oh daba los resultados de quienes han sido aceptados para el nuevo proyecto y el nombre de Jungkook está en la lista, no dio explicaciones ya que Taehyung le ha ayudado muy poco, él intentó que eso sea como en los viejos tiempos pero Jungkook trataba de que esto ya es diferente, es imposible memorizarlos en el presente lo cual había sido un éxito, vaya que Taehyung haría cualquier cosa por él, dejándole en claro que va ser la última vez. Recibió unas cuantas felicitaciones de sus compañeros, para que al final todos de esa área han sido aceptados.
—¡Me alegra mucho en ver sus sonrisas de felicidad! — Alzó la voz Youngjae sonriente en medio de los aplausos y el grito de alegría. — ¡Todos ustedes demostraron su esfuerzo, su creatividad y talento para una gran oportunidad como esta! — Todo el mundo se calló como muestra de respeto para que su jefa pueda hablar. — Dentro del próximo mes, empezaremos con el mayor trabajo para la serie que está por grabar, se armarán en equipos para realizar lo que se va pedir, así que esperen el momento que diré quienes van a trabajar juntos. Por lo mientras, tendrán días seguidas de descanso, aprovéchenlas porque vamos a poner manos a la obra.
—¿Emocionado, Jeon? — Indagó Ryujin acercándose al pelinegro. Lo cual asintió como respuesta. — Se va armar una fiesta para esta noche, como celebración por ser aceptados en esta oportunidad, a primerizos como nosotros ¿Qué te parece?
—Me encantaría, pero no puedo dejar plantado a mi novio.
—Oh ya veo. — Suelta una diminuta sonrisa. — Disfruta tu momento. — Palmeó su hombro antes de mirar al frente y cruzar de brazos.
—Pueden irse a sus casas, nos vemos hasta el lunes. — Concluyó la mujer antes de escuchar la respuesta de sus empleados para después retirarse.
Todos se encontraban ordenando sus lugares, recogiendo sus pertenencias mientras hablaban sobre la fiesta, son las siete de la noche y eso comenzaría dentro de dos horas, Jungkook le gustaría ir pero prefirió ponerse más de acuerdo con Taehyung en espera de los resultados, terminando por mandarle un mensaje que saldrá temprano que lo esperará en la entrada.
La relación de ambos ha sido como soñaban, sin miedo de ser descubiertos como esas veces, solo un mundo entre ellos dos teniendo citas o reuniones con amigos, Jungkook terminó hablando de nuevo a las personas que les hablaba en esa universidad y como no olvidar a Eunwoo, uno de sus mejores amigos finalmente ha cumplido con su sueño al igual que unos cuantos, esa reunión ha sido de las mejores.
El señor Jeon aún no sabe de esta noticia, pero no cabe duda que tenga problemas al respecto, ya que acepta a Jungkook tal y como es, con la probabilidad de la incertidumbre lo que sucedió para que estén separados, recordando las veces que el señor Jeon llegaba a darse cuenta cuando Jungkook lo veía triste y trataba de mentirle que "está bien", porque también no quería ver a su progenitor desilusionado. Jungkook llegaba a contarle un poco de sus sentimientos hacia ese chico basquetbolista, recibiendo un consejo de vez en cuando, viéndolo sonreír, para que después con nostalgia Hyunki recuerde de cómo ha sido su romance con Ahnmin.
Se colocó su chamarra de cuero para cubrirse del aire fresco de la noche, viniendo acompañado por sus amigos quienes no dejaban de hablar sobre sus futuras ideas para sus proyectos, Minnie abrazaba a Jungkook por el antebrazo, mientras esperaban al novio de Hyejin quien se propuso ir por ella para celebrarlo, Jaehyun solo está allí para no sentirse solo y evitar de ser mal tercio con cualquier pareja que aparezca si la mayoría de sus amistades va celebrar la noche con la pareja.
—¿Taehyung vendrá por ti? — Indagó la rubia viéndolo.
—Está en camino, de verdad seguía en el trabajo que jamás imaginó que saldría temprano.
—Puedes ver si sigue allí, así para que pueda llevarte al trabajo donde está. — Propuso Jaehyun sacando un cigarro de su caja junto con un encendedor. — Yo no iré a festejar, hoy es el cumple de mi madre así que va ser doble, mi padre ha de prepararnos lo mejor.
—¿Entonces seré yo quien asistirá a la fiesta? — Cuestiona Minnie fingiendo en sonar incrédula y triste.
—Bueno, Soojin y Shuhua dijeron que van a ir contigo.
—¿De verdad?
—Revisa los mensajes.
La pelinegra sacó su celular sin soltar a su amigo, quien veía que su novio si está en camino, le mostró a Jaehyun la respuesta y asintió entendiéndolo soltando humo con tranquilidad, pasaban los minutos, Hyejin se ha retirado con su novio pero dos chicas han aparecido para hacerle compañía a Minnie, Jungkook conoce a esas personas que sin problemas charlaba con ellas, hasta incluso Jaehyun lo hacía.
El auto de Taehyung se detuvo enfrente de ellos, salió dejándolo encendido para asomarse y silbarle a Jungkook, él ha volteado e hizo un ademán de saludo, diciendo unas cuantas cosas a sus amigos antes de retirarse, se despidieron para que finalmente cada quien se vaya en su propio camino. Se adentró al copiloto, cerrando la puerta mientras dejaba su mochila en los asientos traseros, para acercarse a Taehyung y besarle por la mejilla, no tuvo oportunidad en besarlo por los labios porque estaba manejando.
—¿Mi lindo chico ha sido aceptado?
Jungkook hizo un sonido de afirmación acomodándose en el asiento.
—Y va ser una buena noticia para ti ya que tendré más tiempo, así podremos pasar más tiempo juntos.
—Me parece una buena idea, quizás podemos ir de viaje en un fin de semana.
—Pronto son tus vacaciones, ¿Dónde iríamos entonces?
—A Daegu quizás.
—¿Daegu?
—Bueno, es la ciudad donde nací, no me gustaría visitar a mis parientes solo ir allí contigo.
—O quizás otro lado, podemos ver en estos días para ponernos de acuerdo.
—Me suena bien.
Suavizó su sonrisa desviando la mirada en la pantalla de su celular, tecleando la respuesta para Namjoon, ya que le ha dado la noticia y llegará a casa a las once porque al día siguiente Taehyung tiene cosas que hacer, le alegra la manera que esto pueda funcionar de nuevo, le encanta este tipo de actos dulces mientras soltaba lo que ha guardado para él, Jungkook jamás imaginó que estar tan perdidamente enamorado de Taehyung sería duradero, restándole importancia la idea de qué pasaría si dejara de gustarle, lo cual es imposible porque siente esa clase de sensaciones cuando está con él, a pesar las malas decisiones que ha tomado aún así sentía que su hyung es el indicado.
Se detuvieron cuando el semáforo está en rojo y unos cuantos autos enfrente, Taehyung aprovechó el momento para tomarle de la mano, guiarlo hasta sus labios para besarle en el dorso, como le encanta ese detalle de la nada sin pedirle, y los recuerdos vinieron así.
Después de unos minutos, Taehyung detuvo el auto en un restaurante, un lugar tranquilo y no tan caro como intentaban convencerlo que ese tipo de lugares son los indicados, Jungkook cuando supo lo que sucedía con Jiyeon, estaba equivocado el hecho que Taehyung sería feliz con ella ya que ha sido lo contrario de lo que creía, las palabras y los actos siempre han sido hechos con el corazón, con el sentimiento que ha sido tan real. Le entristeció por un tiempo, disculpándose por no haber hecho lo posible en averiguar lo que sucedía, cuando sospechaba que hay algo mal no hizo algo al respecto. Se sentaron en el área del balcón, así para disfrutar el aire libre en la ciudad nocturna, esperaban lo que han pedido mientras escuchaba de como le ha ido el día a su novio.
Se imaginaba de como serían las cosas si siguieran siendo amigos, si después del tiepo ya se animarían en ser novios y que esto sea otro año más de noviazgo, el príncipe rojo que tiene al frente es el que salía en su gran variedad de cuentos, la persona que le provoca miles de sensaciones y sonrisas que le alegra sus días, el comienzo y el final no debe olvidarse con un mensaje sin importar que sea largo, corto o algo que encuentran en las redes sociales. Cuando Taehyung olvida ser el primero en mandarle mensaje, solo porque va tarde o está agotado, Jungkook lo hace, siendo llamado como pequeño príncipe, apodos cursis que estos dos chicos se nombran, solo para ellos, tan lindo y especial.
Efectivamente va conociendo aún más del mayor, hay cosas que Jungkook jamás supo, solo quedaba en silencio escuchando, recargó su brazo sobre la mesa mientras comía y tenía agarrado los palillos con un pedazo de kimbap, masticando con tranquilidad sin apartar la mirada del pelirrojo.
Su cabello rojo como el color de sus labios, y cada que se sonrojaba puede lucir como un lindo pastel de cerezas y fresas. El color de sus ojos, son tan lindos que se podía asomar una galaxia con gran cantidad de estrellas. De nuevo vamos con los labios, rojizos, suaves y perfectos cuando los besa, uno de sus lugares favoritos que no se cansará en estar ya que hay demasiadas razones para eso, escuchar su voz, de como pronuncia su nombre, su risa, sus bromas, sus maneras de seducir, vaya que terminaría creando una gran lista. Y por último antes de alargarlo, su sonrisa rectangular, tan genuina y brillante, diría miles de veces que es linda, una sonrisa que le encanta ver, de provocar solo para apreciar.
Eso hacía suspirar a Jungkook.
Taehyung calló al darse cuenta que su novio ha suspirando, y apartó su mirada a otro lado solo para evitar el contacto visual, queriendo ser discreto lo que está pensando, lo conoce, sabe como es Jungkook cuando piensa algo de él, es muy tierno.
—Jungkook ¿Escuchaste lo que dije?
—Si, si escucho lo que dices.
—Estoy pensando en hablar con mi madre sobre esto.
El pelinegro entre abrió la boca al escuchar eso, desviando lo que estaba pensando para prestar más atención con este tema, en realidad no sabía desde un principio lo que platicaba.
—¿De verdad?
—No me gustaría ocultar esto de nuevo, no cuando a los dos nos puede lastimar.
—Taehyung, me gustaría acompañarte, solo... — Le aterra el hecho de volver a ver a la madre de Taehyung, cuando la conoció sintió como si su alma se fuera de su cuerpo, intentaba actuar como su amigo para que nada saliera mal, terminó por agradarle. — Da miedo, pero estaré contigo para...
—Si tienes miedo, no vayas. Estaré bien cuando se lo diga, solo pensaré las palabras exactas para confesarlo.
—¿No te consiguió una cita mientras estamos juntos?
—Si lo hizo, pero rechazo a esas chicas que mi madre me preguntó si en realidad tengo demasiado trabajo.
—Haz mentido por mucho tiempo, será un golpe para ella.
—Lo sé, cuando vea que su hijo perfecto no es perfecto como lo decía, se va decepcionar.
—¿Sabes algo, Taehyung? — Colocó su mano sobre la del pelirrojo, así para tomarla. — Tú eres perfecto para mí, no me importa que alguien quiera separarnos porque yo seré quien no lo permitirá, ocultaste las cosas por miedo hasta que lo enfrentaste, estuvimos a punto de andar que todo se salió de control, pero ahora que somos novios me gustaría ayudarte y apoyarte, estaré para ti cuando necesites, no decepcionas a nadie solo son ideas y expectativas que tu madre quiere para tu futuro o solo para presumir que tiene el hijo que cualquier padre quiere tener.
Taehyung movió su pulgar con suavidad, sonriendo ante esa declaración, sabe perfectamente que Jungkook ahora haría lo que sea solo para que él esté bien, de que su miedo no dependa lo que digan los demás, solo es él viviendo su vida, a pesar que en su pasado ha sido complicado él ya tiene la edad de tomar grandes decisiones, de escoger los caminos indicados para seguir adelante.
—¿Alguna vez no te has puesto a pensar que ves a esa persona y dices "jamás imaginé que exista una posibilidad que esa persona es hecha para mí", porque ves esa conexión esa... lo más especial que se forman en ambas? — Sintió como el menor comenzó a temblar un poco, asintiendo con lentitud. — Bueno, es lo que pienso todos los días cada que te veo.
—¿Crees que yo estoy hecho para ti?
—Lo estás, porque cada vez nos enamoramos mientras van pasando los días, cada vez queremos vernos y hay cosas que solo los dos entendemos, o que con una sola mirada o ademán el otro puede entender, ¿Sabes a lo que me refiero? Eres tan especial para mí, Jungkook, por eso digo que has sido creado para mí, al igual que fui creado para ti.
Se quedó sin palabras, solo el sonrojo en sus pómulos mientras escuchaba como palpitaba su corazón, le hace feliz en escuchar ese tipo de cosas porque eso mantiene el amor que trataban de mantener, no comprende porqué tiene esa sensación de querer llorar pero le restaba importancia, solo quiere abrazarlo y dar miles de besos en sus labios porque no hay palabras para responder, pero si una infinidad de actos.
Taehyung siempre ha sido así, un chico que hace lo posible para tenerlo enamorado, es inevitable no caer o contenerse porque tiene ese encanto, si, su arma mortal es ese jodido encanto que Jungkook puede colapsar, es demasiado débil cada que se habla de él.
Salieron del restaurante, ya era hora de llevar a Jungkook a casa, aunque quieran que el día termine con tan solo dormir juntos no podían hacerlo, pero el pelinegro terminó en convencerlo, porque la trayectoria es de quince minutos y hasta la casa donde Taehyung vive es de una hora y media.
Namjoon saludó al pelirrojo cuando los vio entrar, había terminado de lavar los trastes y ordenar el departamento, no le sorprendía que de nuevo van a dormir juntos, diciendo como broma que ya deberían vivir juntos, y bueno, Taehyung es Taehyung, es obvio que ha de pensar eso para intentar poner a su novio nervioso.
Se acurrucaron en la cama después de colocarse sus pijamas, Sarangi se dormirá con Namjoon por esta noche, ya que hay ocasiones que el gato quiere dormir con él. Jungkook apagó la lámpara y se volteó para encarar al pelirrojo, planteó unos cuantos besos en sus labios pero ha sido él quien acercó al pelinegro para besarlos bien, quejándose al momento para hacerlo.
—La idea de Namjoon no suena mal ¿no es así? — Comentó el mayor después que se separaron, el pelinegro alzó una ceja.
—¿Quieres que vivamos juntos?
—No ahora, llevamos meses de novios y es muy pronto para eso.
—Nuestros hyungs se sentirían solos.
—Oh vamos, Seokjin siempre ha vivido solo y no ha sufrido por nuestra presencia.
—Eso sonó muy grosero.
—¿No crees que sea muy temprano en pensar sobre nuestro futuro?
—No lo sé, prefiero mil veces disfrutar el presente que pensar el futuro.
—Porque me gustaría que eso suceda.
—Siempre tomamos las cosas a su tiempo, pero me encanta la idea.
Los corazones rotos se pueden reparar si la misma persona quiere sanarlos, sin importar que también ha perdido unas piezas y en que ambos puedan buscar algo para repararlo, reemplazar lo dañado con algo nuevo o recuperarlo. A Jungkook le emocionó esa idea, teniéndolo para un futuro cuando los dos se sientan listos para tener una propia vivienda, teniendo un poco de ilusión en llegar ese gran paso, imaginarse una vida al lado de Taehyung es lo que desea.
Cerró sus ojos dejándose llevar por él beso de nuevo, mientras su cuerpo es abrazado y atraído por esos brazos, Taehyung anhelaba el olor de avellanas del menor, agradecido que jamás ha quitado esa costumbre, para terminar cayendo en el mundo de los sueños teniendo a su chico con él.
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