"𝐸𝑠 𝑖𝑛𝑐𝑟𝑒𝑖𝑏𝑙𝑒 𝑠𝑎𝑏𝑒𝑟 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑜𝑠 𝑠𝑒𝑛𝑡𝑖𝑚𝑖𝑒𝑛𝑡𝑜𝑠 ℎ𝑎𝑛 𝑑𝑒𝑗𝑎𝑑𝑜 𝑑𝑒 𝑒𝑥𝑖𝑠𝑡𝑖𝑟, 𝑝𝑒𝑟𝑜 𝑠𝑖𝑔𝑢𝑒𝑛 𝑎ℎ𝑖, 𝑒𝑠𝑡𝑎́𝑠 𝑎𝑞𝑢𝑖 𝑒𝑠𝑝𝑒𝑟𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑝𝑜𝑟 𝑚𝑖, 𝑒𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑒́ 𝑙𝑖𝑠𝑡𝑜, 𝑎 𝑠𝑎𝑏𝑖𝑒𝑛𝑑𝑎𝑠 𝑙𝑜 𝑐𝑢𝑎́𝑛 𝑛𝑜𝑠 𝑒𝑥𝑡𝑟𝑎𝑛̃𝑎𝑚𝑜𝑠, 𝑑𝑖𝑚𝑒 ¿𝐸𝑠𝑡𝑒 𝑚𝑎𝑟𝑐ℎ𝑖𝑡𝑜 𝑎𝑚𝑜𝑟 𝑐𝑜𝑏𝑟𝑎𝑟𝑎́ 𝑣𝑖𝑑𝑎 𝑑𝑒 𝑛𝑢𝑒𝑣𝑜? 𝐴𝑙 𝑚𝑒𝑛𝑜𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑎𝑠 𝑐𝑜𝑠𝑎𝑠 𝑑𝑒 𝑎ℎ𝑜𝑟𝑎 𝑠𝑒𝑎𝑛 𝑚𝑎́𝑠 𝑠𝑖𝑛𝑐𝑒𝑟𝑎𝑠 𝑦 𝑐𝑜𝑛 𝑐𝑎𝑟𝑖𝑛̃𝑜, 𝑎𝑠𝑖 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑠𝑜𝑙𝑡𝑎𝑟 𝑢𝑛 𝑝𝑎𝑠𝑎𝑑𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜𝑠 𝑠𝑒𝑝𝑎𝑟𝑜́."

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 13: 𝑃𝑒́𝑡𝑎𝑙𝑜𝑠 𝑑𝑒 𝑛𝑎𝑟𝑐𝑖𝑠𝑜

Empuñó sus ojos con un poco de fuerza, soltando grandes suspiros mientras el dolor de cabeza se está haciendo presente, pero el sonido del timbre resonar le molestaba, bufando a la vez mientras se levantaba con cuidado de no volver a la cama.

Aún así mareado se le ocurrió salir de su habitación, preguntándose dónde estará Jungkook o si ya se habrá levantado, diciendo que ya está en camino, lo suficientemente audible para la persona.

—¿Por qué molestan en un día domingo? — Se quejó antes de abrir la puerta, encontrando a un chico con un uniforme verde puesto.

—Buen día, señor. — Al parecer es menor, eso pensó Namjoon.

—Buen día para ti. — Guio la mirada cuando el chico alzó un poco una bolsa de plástico con comida dentro.

—Su pedido. — Asintió con lentitud tomándolo, lo más extraño es cuando le dio por igual un ramo de narcisos, frunció el ceño confundido. — No piense que yo se lo traje, alguien pidió en que se lo diera.

—¿Darme un ramo? — Indagó confundido. — Supongo que no pagaré.

—Está en lo cierto. — Hizo una diminuta reverencia antes de voltear sobre sus talones. — Disfrute de su comida.

Prefirió adentrarse a su departamento y cerrar la puerta a sus espaldas, dejó la bolsa sobre la mesa, quedándose viendo un poco el ramo que tiene en las manos, teniendo un recado entre las flores, pestañeó extrañado intentando recordar lo que sucedió anoche.

—¿Alguien me dará esto? — Desvió la mirada en la comida. — ¿Qué habrá sucedido?

—Buen día, hyung. — Escuchó a Jungkook llegar, viendo que tiene sus cabellos mojados y una toalla colgando por su hombro izquierdo.

El pelinegro menor posó la mirada en el ramo, soltó una sonrisa burlesca.

—Jungkook ¿Sabes qué pasó anoche?

—Hoseok y Jimin te dejaron en tu cama, encontré a Yoongi saliendo del departamento. — Explicó. — ¿No hiciste algún ligue donde fuiste?

—No, no creo. — Dijo tomando la nota. — Deja ver.

Asintió el menor sin interés adentrándose a la cocina, comenzando en tararear una canción. Namjoon comenzó a leer entre labios, suspirando con alivio que eso no era para él, estaba a punto de entrar en pánico y decidió dejar la nota en donde estaba.

—Hey, Kook. — Llamó, el menor hizo un sonido. — Esto es para ti.

Jungkook volteó cuando estuvo a punto de servirse agua.

—¿Para mí? — El mayor asintió dejando el ramo sobre la mesa.

—No viene el nombre ¿Conociste alguien anoche?

—Dudo que eso sea. — Respondió caminando directo a la mesa, empezando con tomar la nota. — Ve a tomar algo para la resaca.

—Eso haré, tal vez duerma un poco más. — Dijo yéndose, suponiendo que se pondrá la pijama para volver a la cama.

Un olor que él conoce llegó a sus fosas nasales, abriendo un poco la bolsa y viendo un contenedor de unicel grande con una mediana, uno redondo con algo rojo dentro y una bolsa de papel con el logo de una tienda de pasteles. Desvió la mirada en la nota, dudando demasiado que esto sea de la persona que acabó de conocer, si esto hubiera sido parte de Seokjin, el desayuno sería para dos.

"No te sientas mal por responderme de esa manera anoche, pero no voy a decir que me culpo, de hecho ambos dejamos de sentirnos culpables, no malinterpretes eso, me importas demasiado y espero que hayas dormido bien, no te preocupes en pagar, solo he pedido el desayuno para ti, disfrútalo."

De inmediato supo de quien venía todo esto, sonrió un poco al saber que Taehyung intentó aclarar lo que acabó de hacer, imaginándose lo cuán nervioso pudo estar mientras escribía eso, quizás arrepintiéndose por decir algo en vez lo que tiene en mente.

"Nadie se rinde cuando algo realmente le importa." Recordó su plática con Namjoon el día anterior, le había pedido en que lo pensara.

Cuando sacó lo que hay dentro, vio que era huevo con kimchi, con un platillo picante que le fascina comer, además unos hot cakes con frutos rojos. Pensando que podría compartirlo con su hyung, ya que es demasiado para él, Namjoon ha de tener la idea de volver a dormir sin importar que sean las nueve de la mañana, solo cambiarse de ropa para dejar de oler a alcohol, Jungkook no niega el hecho de saber lo que hicieron en esa reunión, por una pequeña parte arrepentido por no asistir, pero aliviado de ir con el resto de sus amigos a otro lado.

Terminó de darle de comer a Sarangi, el minino ya había reclamado por su preciado desayuno, siendo la única compañía, miraba sus redes sociales notando que en Instagram sus hyungs le dieron follow al igual con las solicitudes en Facebook, la mayoría de sus notificaciones trataba de ellos, solo de vez en cuando es parte de Taehyung. Desvió la mirada en el desayuno, aún teniendo las mejillas llenas de bocado y un poco de mermelada en una comisura de sus labios, ha notado que Taehyung no ha olvidado sus comidas favoritas y más en el desayuno, cuestionándose qué clase de cosas no ha olvidado, sintiéndose un poco mal de que "a punto de" no haya funcionado.

El maullido de Sarangi hizo que le mirara, exigiéndole atención o comentándole algo como consejo, no ha sido sencillo pero sorprendente de que pueda lidiar con algunas cosas, aún permaneciendo esos sentimientos en él y llamándolo pasajero a la esperanza de una nueva oportunidad.

Lo extraña demasiado.

Si pide algún consejo o respuesta, todas esas palabras que ha escuchado se va a repetir. No está listo, solo porque tiene miedo de ser lastimado por la persona que ha quedado perdidamente enamorado, eso de volver a ser amigos no va solucionar nada, aunque claro puede dar su perdón y seguir a la normalidad, no puede quedarse inseguro de esta manera, está poniendo en peligro a todo esto, será mejor arriesgarse que quedarse escondido y dudando.

No siempre se va esconder de Taehyung, y mucho menos cuando ese chico ya está dispuesto a no perderlo de vista.

Un mensaje ha llegado y vio el nombre a través de la notificación, accediendo al chat con la persona que conoció en la noche anterior, tragó el bocado y tomó el vaso con jugo de mango.

Mingyu:
𝖡𝗎𝖾𝗇 𝖽𝗂𝖺 ¿𝖣𝗈𝗋𝗆𝗂𝗌𝗍𝖾 𝖡𝗂𝖾𝗇?

𝖯𝖾𝗋𝖽𝗈́𝗇 𝗉𝗈𝗋 𝗇𝗈 𝗋𝖾𝗌𝗉𝗈𝗇𝖽𝖾𝗋, 𝗁𝖺𝖻𝗂𝖺 𝗂𝖽𝗈 𝖽𝖾 𝖿𝗂𝖾𝗌𝗍𝖺 𝖼𝗈𝗇 𝗈𝗍𝗋𝗈𝗌 𝖺𝗆𝗂𝗀𝗈𝗌 𝗒 𝖺𝗁𝗈𝗋𝖺 𝖺𝗇𝖽𝗈 𝖻𝗎𝗌𝖼𝖺𝗇𝖽𝗈 𝗋𝖾𝗌𝗉𝗎𝖾𝗌𝗍𝖺𝗌.

𝖠𝗆𝖺𝗇𝖾𝖼𝗂 𝖾𝗇 𝖾𝗅 𝗃𝖺𝗋𝖽𝗂𝗇 𝖽𝖾 𝗆𝗂 𝗏𝖾𝖼𝗂𝗇𝖺, 𝖼𝗈𝗇 𝗌𝗎𝖾𝗋𝗍𝖾 𝖾𝗌𝗍𝗈𝗒 𝖼𝗈𝗆𝗉𝗅𝖾𝗍𝗈 𝗒 𝖼𝗈𝗇 𝗆𝗂𝗌 𝗉𝖾𝗋𝗍𝖾𝗇𝖾𝗇𝖼𝗂𝖺𝗌, 𝗃𝖺𝗆𝖺́𝗌 𝗂𝗆𝖺𝗀𝗂𝗇𝖾́ 𝗊𝗎𝖾 𝗆𝗂 𝗏𝖾𝖼𝗂𝗇𝖺 𝖾𝗌 𝗅𝖺 𝗆𝖺𝖽𝗋𝖾 𝖽𝖾 𝗆𝗂 𝗆𝖾𝗃𝗈𝗋 𝖺𝗆𝗂𝗀𝗈, 𝗅𝗈𝖼𝗈 ¿𝗇𝗈?

Jungkook soltó una media sonrisa al notar que ese chico ha roto con su promesa, dejó el vaso para comenzar a teclear, creyó que podía olvidar lo que estaba pensando pero al menos es muy poco.

Jungkook:
𝖣𝗈𝗋𝗆𝗂 𝖽𝖾 𝗆𝖺𝗋𝖺𝗏𝗂𝗅𝗅𝖺 𝗒 𝖽𝗂𝗆𝖾 ¿𝖳𝗎́ 𝖺𝗆𝗂𝗀𝗈 𝗅𝖾 𝖺𝗌𝗈𝗆𝖻𝗋𝗈́ 𝖾𝗌𝖺 𝖼𝗈𝗂𝗇𝖼𝗂𝖽𝖾𝗇𝖼𝗂𝖺?

𝖠𝗅 𝗆𝖾𝗇𝗈𝗌 𝗇𝗈 𝗍𝖾𝗋𝗆𝗂𝗇𝖺𝗋𝗈𝗇 𝖾𝗇 𝖾𝗅 𝗃𝖺𝗋𝖽𝗂𝗇 𝖽𝖾 𝖺𝗅𝗀𝗎́𝗇 𝖾𝗑, 𝗌𝖾𝗋𝗂𝖺 𝖽𝗂𝗏𝖾𝗋𝗍𝗂𝖽𝗈 𝗅𝖾𝖾𝗋.

Tan agradable ha sido la charla con Mingyu, Minnie comenzó a darle ánimos para que puedan estar juntos, siendo "la pareja perfecta" para ella ya que se ven tiernos estando juntos, como si eso fuese posible, más cuando el dueño de sus pensamientos y sueños ha vuelto. Jungkook no es de esas personas, sabe que dolerá el triple si usa a alguien más para olvidar a Taehyung. Si Dylan empieza con esos actos dulces no sabe qué clase de decisiones puede tomar, le encantaría comenzar con un nuevo amor, pero el sueño de recuperar y ser feliz aún más, sigue al frente suyo, en espera de ser tomado para que todo sea hecho.

Bueno, con suerte esto es el comienzo, puede estar tan tranquilo de que Mingyu le hable con esas intenciones amistosas, si toma esa gran decisión le hará saber, está a tiempo de algo que pudo haberle aterrado.

Salió del chat cuando el chico ya no respondió más, y quedó viendo el nombre de Taehyung por unos minutos, ya no mandaba demasiados mensajes como en ese entonces, entendiendo el punto de no querer molestarlo, ya no se siente como esa vez que lo volvió a ver, solo neutral ante sus actos, sentimientos y emociones. Terminó por entrar y encontrándose con el más reciente, enviado desde hace unos minutos, sintió esa sensación que solía sentir cada que entraba a ese chat, no es nada viejo o nuevo, tan difícil de explicar.

Taehyung:
𝖯𝗎𝖾𝖽𝖾 𝗊𝗎𝖾 𝗅𝖾𝖺𝗌 𝖾𝗌𝗍𝗈 𝗒 𝗁𝖺𝗒𝖺𝗌 𝖺𝗆𝖺𝗇𝖾𝖼𝗂𝖽𝗈 𝖻𝗂𝖾𝗇, 𝗈𝗅𝗏𝗂𝖽𝖾́ 𝗆𝖾𝗇𝖼𝗂𝗈𝗇𝖺𝗋 𝗊𝗎𝖾 𝗇𝗈 𝖾𝗌𝗍𝗈𝗒 𝗆𝗈𝗅𝖾𝗌𝗍𝗈 𝗉𝗈𝗋 𝗍𝗎 𝗆𝖺𝗇𝖾𝗋𝖺 𝖽𝖾 𝗋𝖾𝗌𝗉𝗈𝗇𝖽𝖾𝗋, 𝗌𝖾́ 𝗊𝗎𝖾 𝖺𝗎́𝗇 𝗇𝗂 𝗊𝗎𝗂𝖾𝗋𝖾𝗌 𝗏𝖾𝗋𝗆𝖾 𝗒 𝖾𝗌𝗍𝗈𝗒 𝖽𝖺́𝗇𝖽𝗈𝗍𝖾 𝖾𝗅 𝗍𝗂𝖾𝗆𝗉𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝗊𝗎𝗂𝖾𝗋𝖺𝗌 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝗍𝗎 𝗋𝖾𝗌𝗉𝗎𝖾𝗌𝗍𝖺, 𝖾𝗌𝗍𝖺𝖻𝖺 𝗍𝖺𝗇 𝗇𝖾𝗋𝗏𝗂𝗈𝗌𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝗇𝗈 𝗌𝗎𝗉𝖾 𝖽𝖺𝗋𝗆𝖾 𝖾𝗇𝗍𝖾𝗇𝖽𝖾𝗋 𝗅𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝗍𝗋𝖺𝗍𝖺𝖻𝖺 𝖽𝖾 𝖽𝖾𝖼𝗂𝗋 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝗇𝗈 𝖺𝗋𝗋𝗎𝗂𝗇𝖺𝗋𝗅𝗈, 𝗌𝗂 𝗉𝗂𝖾𝗇𝗌𝖺𝗌 𝖺𝖼𝗅𝖺𝗋𝖺́𝗋𝗆𝖾𝗅𝗈 𝖼𝗈𝗇 𝗌𝗈𝗅𝗈 𝖺𝗅𝖾𝗃𝖺𝗋𝗍𝖾 𝗒 𝗍𝖾𝗇𝖾𝗋 𝖺 𝖺𝗅𝗀𝗎𝗂𝖾𝗇 𝗆𝖺́𝗌, 𝗅𝗈 𝖾𝗇𝗍𝖾𝗇𝖽𝖾𝗋𝖾́, 𝖺𝗁𝗈𝗋𝖺 𝗇𝗈 𝖽𝗂𝗋𝖾́ 𝖾𝗌𝖺𝗌 𝗉𝖺𝗅𝖺𝖻𝗋𝖺𝗌 𝗉𝗈𝗋𝗊𝗎𝖾 𝗌𝖾́ 𝗊𝗎𝖾 𝗏𝖺𝗌 𝖺 𝗏𝗈𝗅𝗏𝖾𝗋.

𝖳𝖾 𝖾𝗑𝗍𝗋𝖺𝗇̃𝗈 𝖽𝖾𝗆𝖺𝗌𝗂𝖺𝖽𝗈, 𝖺𝗅𝗀𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝗇𝗈 𝗉𝗎𝖾𝖽𝖾𝗌 𝗂𝗆𝖺𝗀𝗂𝗇𝖺𝗋.

𝖠𝗎́𝗇 𝗌𝗂𝗀𝗈 𝖺𝗆𝖺́𝗇𝖽𝗈𝗍𝖾 𝗒 𝗌𝖾𝗋𝖺́𝗌 𝗅𝖺 𝗎́𝗇𝗂𝖼𝖺 𝗉𝖾𝗋𝗌𝗈𝗇𝖺 𝗊𝗎𝖾 𝖺𝗆𝖺𝗋𝖾́, 𝖺𝗎𝗇𝗊𝗎𝖾 𝗁𝖺𝗒𝖺 𝗍𝖾𝗇𝗂𝖽𝗈 𝗈𝗍𝗋𝗈𝗌 𝖺𝗆𝗈𝗋𝖾𝗌, 𝗍𝗎́ 𝗌𝖾𝗋𝖺́𝗌 𝖾𝗅 𝗉𝗋𝗂𝗆𝖾𝗋𝗈 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝗆𝗂.

𝖳𝖾 𝖼𝗈𝗇𝗌𝗂𝖽𝖾𝗋𝖺𝗋𝖾́ 𝖼𝗈𝗆𝗈 𝗆𝗂 𝗉𝗋𝗂𝗆𝖾𝗋 𝖺𝗆𝗈𝗋, 𝖩𝗎𝗇𝗀𝗄𝗈𝗈𝗄. 𝖭𝗈 𝗆𝖾 𝗂𝗆𝗉𝗈𝗋𝗍𝖺 𝗅𝖺 𝗆𝖺𝗇𝖾𝗋𝖺 𝖽𝖾 𝖼𝗈𝗆𝗈 𝗁𝖾𝗆𝗈𝗌 𝗍𝖾𝗋𝗆𝗂𝗇𝖺𝖽𝗈, 𝗌𝗂 𝖺𝗅 𝗆𝖾𝗇𝗈𝗌 𝗆𝖾 𝖽𝗂𝖾𝗋𝖺𝗌 𝗅𝖺 𝗈𝗉𝗈𝗋𝗍𝗎𝗇𝗂𝖽𝖺𝖽 𝖽𝖾 𝗁𝖺𝖻𝗅𝖺𝗋 𝖼𝗈𝗇𝗍𝗂𝗀𝗈, 𝖼𝗈𝗇 𝗎𝗇 𝗉𝖾𝗋𝖽𝗈́𝗇 𝗍𝗎𝗒𝗈 𝖾𝗌 𝗌𝗎𝖿𝗂𝖼𝗂𝖾𝗇𝗍𝖾.

𝖫𝗈𝗌 𝗇𝖺𝗋𝖼𝗂𝗌𝗈𝗌 𝗊𝗎𝖾 𝗆𝖺𝗇𝖽𝖾́, 𝗅𝗈𝗌 𝖾𝗌𝖼𝗈𝗀𝗂 𝗉𝖾𝗇𝗌𝖺𝗇𝖽𝗈 𝖾𝗇 𝗍𝗂, 𝖽𝗂𝗌𝖿𝗋𝗎𝗍𝖺 𝖾𝗅 𝖽𝖾𝗌𝖺𝗒𝗎𝗇𝗈 𝗊𝗎𝖾 𝗉𝖾𝖽𝗂 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝗍𝗂 𝗒 𝖽𝗂𝗅𝖾 𝖺 𝖭𝖺𝗆𝗃𝗈𝗈𝗇 𝗊𝗎𝖾 𝗆𝖾 𝗉𝖾𝗋𝖽𝗈𝗇𝖾 𝗉𝗈𝗋 𝗇𝗈 𝗉𝖾𝖽𝗂𝗋 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝖽𝗈𝗌, 𝖾́𝗅 𝖽𝖾𝖻𝖾 𝖾𝗌𝗍𝖺𝗋 𝗍𝖺𝗇 𝖺𝗀𝗈𝗍𝖺𝖽𝗈 𝖼𝗈𝗇 𝗎𝗇𝖺 𝗋𝖾𝗌𝖺𝖼𝖺, 𝖼𝗎𝗂𝖽𝖺𝗍𝖾.

Sintió esa punzada en su pecho, era de esperarse y Taehyung no cambió en ese aspecto, cada que no podía agregarle por simple vergüenza, al final se lo cuenta sin importar que pasen días o semanas, tan triste por contenerse de esta manera, teniendo en mente las palabras que podría responder, dejándolas allí y conservarlo con el resto de cosas que quiere decirle.

"Igual te extraño, solo somos dos tontos que están enamorados, pero el que lo impide soy yo."  Lo pensó como si quisiera escribirlo y mandárselo, miró los narcisos que están en un florero, los ha puesto en agua para conservarlos, esos blanquecinos y suaves pétalos, siendo hermosos que unas simples rosas. Soltó una diminuta sonrisa, una sonrisa embobada, imaginándose de como sería si Taehyung quisiera entregarlo en persona. Aunque dijera que está manteniendo su dignidad, aún así le abriría.

¿Por qué imaginar este tipo de escenarios cuando realmente no es capaz de hacer?

Quiere ser ese Jungkook que soñaba como un niño, siendo el único que puede sentir esa conexión mientras el brillo de sus ojos aparece cada que lo ve, sintiendo sus besos en su cuello, mano sobre todo en sus labios, el tacto entre sus manos, sus caricias tan suaves y delicadas, y ese lindo acto cuando sus dedos entrelazan con los ajenos. Ver esa sonrisa que suele dedicar, esa mirada que ha creído que perdió su brillo cada que veía su reflejo, la vista de verlo sonrojado y balbucear cada que intenta decir algo o hacer, los abrazos, los besos, las dulces palabras y las miles maneras de decirle lo cuán que se aman.

Volvió a volverse loco.

¿Tanto lo extraña?

Si, así es.

Lo extraña con locura que podría amarlo con esa intensidad.

Ha esperado por esto, ha esperado por él, ¿Y ahora? Bueno, quizás haya tomado ciertas decisiones que está por comenzar a planearlo sin sentir esos nervios.

Comenzó a leer los anteriores mensajes con gran tranquilidad, mientras su corazón está palpitando demasiado, a un ritmo que el mismo órgano conoce. Puede que hayan cambiado un poco, pero está tan seguro que todo sigue igual, de que Taehyung sigue siendo ese chico en los tiempos de universidad.

Nadie justifica, nadie defiende, solo Taehyung tomó malas decisiones y no supo lidiar con unas cosas, terminándole por afectar a Jungkook, un odio no tan grande como cree, no pudo odiarlo demasiado cuando él mismo lo evitó, más cuando la verdad ha sido revelada. Ese hueco en su pecho, esa tristeza que emanaba, suspiró tan profundo sabiendo que las dulces emociones se mezclaban con las tristes, una combinación tan extraña.

La continuación de este cuento, es que su príncipe rojo sigue allí, esperándolo, buscándolo y amándolo en silencio, en busca de que su chico volviera con él, Jungkook no quiere un final feliz, quiere que esta historia de amor por más dolorosa que pueda ser, la mayoría sea como lo ha soñado, despierto o dormido no importa. Que sea eterno.

Entró al chat de Seokjin, no quiere levantarse e ir a la habitación de Namjoon para despertarlo, decidido en prepararse para sanar el amor que está marchitándose, puede que hayan pétalos u hojas muertas, pero todo volverá a nacer. Todo ese sucedido, será borrado para siempre porque son ellos dos los escritores de su propia historia, su historia.