Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝐖𝐄𝐄𝐃𝐈𝐍𝐆 𝐃𝐑𝐄𝐒𝐒

Suelto un suspiro al notar que no he podido escribirte la melodía perfecta para esta ocasión.

Dime mi amor... ¿Acaso no fui suficiente?.

En el fondo mi corazón se parte en dos al ver aquella invitación.

"Nuestra Boda. Lee ChaeRyeong y Choi SooBin."

Que mal se oía eso. Allí debería ir mi nombre.

Me duele saber que tu corazón le pertenece a alguien más... A aquel que hasta hoy día, sigo considerando un gran amigo, un hermano.

¿Acaso te he lastimado? ¿Te he usado acaso? ¿Por qué me cambiaste por él? ¿Qué tiene él que yo no? ¿No fue suficiente el amor?.

Tantas preguntas hirientes para mi pobre corazón, tantos sentimientos guardados haciendo que me arrepienta a diario de haberlo hecho.

Acaricio las teclas del piano intentando que la magia suceda y pueda tocar una última melodía para ti. Sin embargo, es inútil.

Miro el reloj en la pared para asegurarme que estoy a tiempo de ir a la ceremonia, aún es temprano. Ordeno las hojas en mi carpeta levantandome del asiento y así ir junto a ti.

Reviso el teléfono percatándome que tengo como diez mensajes de SooBin preguntándome si iré, aún siento que lo ha hecho a propósito, tener que soportar ver como mi hermano de otra madre se queda con la mujer que amo, esto me quema por dentro. Y es que a pesar de todo lo que pasamos juntas lo elegiste a él, ¿Por qué?.

Guardo las teclas del piano, recojo mis cosas y me doy camino a la catedral en donde a él te entregarás.

He caminado hasta las escaleras del recinto, aún no has llegado, saludo a las chicas que están frente a la entrada esperándote, el lugar está lleno de gente, familiares y allegados, servidores y el sacerdote, estaban preparados para la ceremonia. Allí estaba él, aquel que consideraba mi hermano me ha herido en lo más profundo del alma, sin embargo no podía negarle su felicidad.

—¡YeJi!—sonríe al verme—¡Que bueno que llegaste!.

Correspondo a su abrazo a duras penas.

—Lindo traje por cierto... eh... yo... pensé que no vendrías...—soltó apenado.

—No me perdería el matrimonio de mi hermano por nada—sonrío.

—¡Genial!—ríe—Oye, ¿harás lo que te pedí?.

—Claro que si mi hermano.

Sonreír nunca me dolió tanto como ahora, un abrazo nunca me lastimó tanto como el suyo, la música nunca me ha herido tanto como ahora. ¿De verdad quieres que haga esto mi vida?. SooBin confiaba en mi para hacer esto, no debo defraudarlo, tampoco voy a arruinarlo por que a pesar que me duela aceptarlo, también es un día importante para ti.

Me acomodo en la silla en frente del bello piano a un costado del altar, ordeno mis parpituras en el atril y lo veo a él nuevamente, está nervioso.

Me le acerco nuevamente a dejarle mis palabras de apoyo, el momento se acerca, las personas empiezan a entrar al templo llenando los asientos vacíos, entre los dos vemos como una blanca limusina aparca justo en la entrada. Dejo a Bin, no sin antes darle una sonrisa para acomodarme y tocar la melodía de entrada.

Por favor, no me hagas abandonarte de esta manera, no me hagas renunciar a todos esos bellos momentos.

Comienzo a tocar observandote ingresar abrazada a tu padre, estás hermosa, con ese vestido blanco que te hace ver como el verdadero ángel que eres, los detalles de este te hacían ver más irresistible de lo que ya eras, pero pese a toda la maravilla de vestido que llevas para esta ocasión; quiero destacar algo importante: tú sonrisa.

No te he visto sonreír de esa manera hace mucho tiempo, ¿será esta la última vez que lo hagas?. ¿Qué pasará al final del día?.

Se me hace imposible no recordar los momentos junto a ti; cuando te cargué por que te habías dormido en la playa. Cuando jugábamos al básquet con SooBin, cuando te dije que te apoyaría en todo.

Te dije que estaría contigo en el día más feliz de tu vida... Aquí estoy...

—Hermanos y hermanas, sean todos bienvenidos a la casa del señor—habló el cura—En esta ocasión celebramos la unión de estos dos jóvenes en santo matrimonio.

Pero yo no estaba lista para aceptarlo.

Mi mente divagaba hasta aquellos recuerdos olvidados en el viento, aquellos que hacían que me ilusionara cada vez más contigo, había buscado la oportunidad perfecta para decirte lo que siento pero aún así, no pude hacerlo.

Cuando SooBin me confesó que le gustabas algo dentro de mi se rompió, comencé a desesperarme por que sabía que el tenía más oportunidades de llegar a ti sin problemas; el tiene todo lo que una chica puede desear, dinero, belleza, es alto y carismático, con buen estatus social, un partidazo en pocas palabras.

Yo en cambio, batallo a diario por un buen puesto en la empresa, cumplo con el tiempo completo, lo que gano apenas me alcanza para comer pues debo pagar una que otra deuda, alimentar y cuidar a Duke, básicamente solo soy un cero a la izquierda al lado suyo.

Sin embargo, no tengo control sobre ti, eres libre amada mía, has lo que quieras, sal con quién quieras, hazte un tatuaje, viaja, bebe, fuma, sal a correr, escala montañas, adopta las mascotas que quieras, comprate la casa de tus sueños, ten los hijos que quieras; vive... por que la vida es corta y es solo una, ¿a quién no le gustaría vivir una vida que quisiera recordar?.

El momento de los votos llegó.

—Yo Choi SooBin—comenzó—me entrego a ti Lee ChaeRyeong, para amarte y respetarte, para apoyarte y acompañarte en la salud y en la enfermedad, en la prosperidad y la pobreza, todos los días de mi vida... hasta que la muerte nos separe...

Con cada palabra que soltaba, a mi corazón una estaca le clavaban y el verte sonreír ante eso me destrozaba internamente.

—Yo Lee ChaeRyeong—no, por favor para—Me entrego a ti Choi SooBin, para amarte y respetarte, para apoyarte y acompañarte—te lo ruego por favor, para—En la salud y en la enfermedad, en la prosperidad y la pobreza, todos los días de mi vida...—por favor no lo digas—Hasta que...—por favor no—La muerte nos separe...

Las lágrimas no tardaron en salir, escucharte decir eso literalmente me destrozó, saber que después de esto le pertenecerás para siempre me lastima.

—Si hay alguien que se oponga a esta unión, que hable ahora o calle para siempre.

El silencio se apoderó del templo; esta es mi oportunidad de oponerme y hacerte saber que te amo con todas mis fuerzas Ryeongie, una parte de mi anhela que interfiera, te lleve a casa y te haga mía hasta que olvides a SooBin; pero otra pelea conmigo para que te deje ser feliz con él, ya que así lo quieres tú.

¿Por qué me castigas de esta forma?.

El sacerdote carraspea y continúa con la ceremonia—Ya que nadie se interpone a esta unión... Choi SooBin...—no, por favor no lo digas—Puedes besar a la novia.

Sonriente se te acerca, veo como te acaricia suavemente la mejilla, poco a poco van acortando el espacio entre sus labios, hasta que por fin los unen en un suave, tierno y conmemorativo beso.

Estaba hecha mierda por ti, no te voy a mentir, ver eso me partió el corazón en mil pedazos, saber que a partir de ahora le perteneces y que desperdicie la última oportunidad de reclamarte me lastimó a más no poder. No es culpa tuya después de todo, es la mía por pensar que te tendría para siempre a mi lado.

Por pensar que nadie se acercaría a lo que consideraba mío, por pensar que estaríamos juntas por siempre.

La ceremonia acabó; era mi momento de tocar, sin embargo, no puedo hacerlo, no quiero arruinar tu día especial mi amor, veo a SooBin y este me alienta a que lo haga, leo las parpituras una vez más antes de empezar con la melodía.

Te miro a los ojos, y no puedo evitar pensarlo.

"Nunca supiste que es lo que sentía por ti, Y te he odiado por eso... A veces hasta deseaba que fueras infeliz". "Ahora no tengo más lágrimas para llorar. Cuando estoy sola, hablo de ti como si estuvieras aqui"

¿Lo ves preciosa? Es mi corazón quien te escribió esta dulce melodía, lastimosamente no tengo el valor para cantarla.

"Por favor dejalo y ven conmigo"– Quiero gritarlo, pero no puedo, mi voz ha desaparecido. Mis esperanzas de que vengas a mi han disminuido.

Por favor Chaery mira mis ojos y dime que lo entiendes, dime que entiendes que te amo y por siempre te amaré, dime que también quieres estar conmigo y no con él.

"Por favor se feliz con él, con eso podre olvidarte"– es lo único que me queda por decirte.

Sonrieme por última vez princesa, hazlo para que pueda guardarla y hacer que ilumine mis días más oscuros. Que ilumine mi camino al final del día.

Me armo de valor para decirte las tan preciadas palabras de mi corazón, abro ligeramente la boca y suspiro.

—Algunos dicen que esto no acaba hasta que acaba...—mírame Chaer—Supongo que realmente terminó ahora...—mira mis ojos Ryeong—Hay algo que tengo que decirte antes de dejarte ir...

SooBin está desconcertado, sin embargo es mi última oportunidad, soy patética mi amor, pero ya no me queda de otra—"Te amo Lee ChaeRyeong..."

—¡Que vivan los novios!—es lo que termino diciendo.

La gente presente acompaña con un grito, SooBin me mira sonrojado, mientras que tú... sé que lo sabes, sé que lo leíste en mis ojos, sé que entendiste lo que quise decirte.

Poco a poco el templo se va vaciando, y aquí estoy yo una vez más, sola, frente al altar en donde a él te entregaste para siempre.

(...)

Ya en la fiesta, las personas no paraban de sonreírles y felicitarles por la boda, algunos bailaban otros brindaban y los niños jugaban, yo me mantuve alejada de la multitud, vacíe una copa de champán en mi boca y la dejé sobre la mesa para luego sentarme a observar la fiesta.

Sin darme cuenta SooBin se me acerca.

—Oye—susurra—¿puedo sentarme?.

Me hago a un lado dejándole espacio en el sofá, este se acomoda con la mirada gacha.

—¿Es verdad que te irás?—pregunta en un susurro.

Suspiro—Si...

—¿Por qué?.

—Aquí ya no me queda nada, mi familia está en Melbourne, el sueldo que tengo no me alcanza para nada, debo cuidar de Duke y también tengo que comer—respondo.

El azabache se muerde el labio mientras busca las palabras adecuadas para continuar conversando.

—Y... ¿Que hay de Chaer? ¿Que hay de mí?. ¿Nos dejarás?.

Poso mi mano sobre su hombro golpeándolo suavemente.

—Tú y yo sabíamos que este día llegaría hermano.

—Si pero... ¿Por qué hoy?—noto como unas lágrimas resbalan por su mejilla a lo que las seca inmediatamente.

—No llores amigo—le consuelo—Siempre podrás contar conmigo...

Ambos nos sonreímos como aquella vez en la que nos conocimos.

—¿Hay algo que no me has contado Hwang?.

Suspiro nuevamente—Mira Bin, tienes a la chica perfecta al lado tuyo, ahora es tu esposa, no sabes lo que daría por estar en tu lugar, cuidala hermano, ella es especial para mi—digo—Y si le haces algún daño, voy a matarte.

—¿Hace cuanto te gusta ChaeRyeong?—pregunta.

—Desde que la conocí—respondo.

—¿Por que no me lo dijiste?.

—Tú también empezaste a sentir cosas por ella y yo decidí no intervenir—solte apenada—Llevala a la luna por mi SooBin.

No responde, solo asiente con la mirada perdida.

—Debo irme—digo.

Me levanto del sofá para sentir como una mano me detenía.

—¿Volverás cierto?.

—Tal vez—respondo—Pero prefiero dejarlos ser felices.

—¿Algo que quieras hacer antes de irte YeJi?.

—Solo...—suspiro—Dile que la amo.

Él asiente y me da un fuerte abrazo, quizá sea el último abrazo que nos daremos en un muy largo tiempo.

Me despido nuevamente de él, he cumplido con mi promesa mi amada, por favor, cuida de él, a veces es un idiota.

Pero por sobre todo, adiós a ti también mi amor, perdón por haberte ocultado mis sentimientos, perdón por no tener el valor para reclamarte. Perdón por no ser lo que esperabas en alguien.

Hasta que la vida nos vuelva a juntar familia Choi.

"Hoy usaste un vestido de novia... y no fui yo quien te acompañó."

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro