Yeji era una chica bonita que Jungkook había conocido en el bufete de su padre cuando el mismo hacía prácticas allí.

La primera vez que la vió quedó cautivado por ella, se pasaba el día hablando de ella y pensé que era una de sus tantas conquistas, pero los meses pasaron y ellos seguían juntos cada día más enamorados hasta que Jungkook dio la noticia de que se casarían.

A mi no me quedaba más que callar.

—Estoy muy feliz por ustedes realmente —dije y de alguna manera me sentía feliz por ellos.

Mentira, era lo más hipócrita y envidioso que había dicho en mi vida.

—Yo y Kook estuvimos hablando y nos gustaría mucho que tu fueses nuestro padrino —ofreció la pelirroja y plasmé en mi rostro la sonrisa más falsa que tenía.

—Me encantaría.

Dije sin nada de emoción, espero que no se haya notado.

Terminamos de comer en silencio y podía ver la mirada filosa de la pelirroja encima de mi, como si quisiera comerme el alma, como si supiera todo lo que me estaba guardando.

—Quédense aquí, les traeré helado.

Jungkook salió del comedor y nos dejó a solas a la chica y a mi.
Yeji me miró mientras apoyaba su barbilla en las manos.

—A mi no me engañas Taehyung —dijo con sequedad— A ti te gusta Kook.

Posé mi vista en ella sin expresión alguna.

Iba a responder cuando apareció Jungkook con dos copas de helado en las manos.

—Para Tae y para mi amor —dijo y le dio un beso a la chica, me aguanté todo lo que pude para no hacer cara de disgusto— Rayos, se me olvidó preparar la mía.

El chico volvió a irse y la pelirroja se inclinó sobre la mesa para estar más cerca de mi rostro mirándome de manera amenazante.

—El jamás será tuyo Kim, MI Jungkook jamás se fijaría en ti porque el sólo te ve como su hermano.

Dijo sin más y se apartó antes de que Jungkook la viera.

Apreté la copa en mi mano pero me callé porque sabía que esa víbora solo estaba diciendo la verdad.

.....

—Sube más el rostro Tae —pidió el fotógrafo e hice caso.

Sonreí un poco y cambié de posición de nuevo, la sección de fotos para la campaña estaba yendo bien. Hasta que se tuvo que aparecer en el set.

Pude jurar como mi rostro cambió drásticamente de expresión y Jungkook solo me regalo una sonrisa alegre.

Genial.

Había pedido un descanso y había salido a hablar con Jungkook, el chico me había pedido que lo acompañará a  tomar café, no tenía forma de negarme, después de todo seguíamos siendo mejores amigos.

—¿No tienes frío?

Pregunto al verme con una simple camisa blanca y unos jeans holgados, la verdad si tenia un poco de frío, se acercaba el otoño y el clima en Busan había comenzado a cambiar.

—Un poco —Dije y me encogí de hombros y luego vi como el chico se quitó su abrigo y me lo pasó.

—No quiero que me regañe mi madre por no cuidar a su modelo estrella de un posible resfriado.

Sonreí un poco y me senté junto a él en una de las mesas vacías del café.

—Tae —dijo respirando hondo mientras se ponía serio— Yeji me lo dijo todo.

¿¡QUE MIERDA!?

Notita

Hola bebés

Procedo a hacer unas pequeñas aclaraciones antes de continuar con la historia.

Normalmente no suelo escribir historias de este tipo, pero a medida de una situación que se ha dado en mi vida decidí atreverme un poco.

Basé la historia en dos grandes canciones.
We can't be Friends de Arianna Grande y That Way de Tate McRae.

Pero principalmente lo base en el sentimiento, no se a cuantos le habrá gustado un amigo/a, pero esta no es la sensación más agradable que existe.

Es dolorosa
Caótica
Y quema mucho.

Quería transmitir estas emociones a través de esta historia y a pesar de ser ficción espero que muchos puedan canalizar ese dolor a través de mis palabras.

Sean sinceros y digan lo que sienten antes de que sea muy tarde para ustedes💔