I'm wearing my heart like a clown.

Aidan:

Hablo por teléfono con Britney Lee, una de mis varias amistades

Contaba detenidamente sobre su ex novio, el cual acababa de convertirse de novio a ex hace diez minutos por haberla engañado con su mejor amiga

Su tono de voz era ronco y cansado, probablemente había llorado hace poco

- Oh, vamos Britt, su amiguito solo fue educado - bromèe aún hablando por teléfono - Se levantó por ella

No hubo respuesta de Britney por unos segundos, no sabía aún si eso era porque no había comprendido el chiste o dudaba en que contestar

Jodete, Aidan. No tomas nada en serio - fue lo último que dijo antes de que escuchara el pitido del final de llamada

Cambié mi posición después de haber alejado el celular de mi rostro, me acosté de espaldas en mi cama dejando que mis pies tocaran el piso

Comencé a reír solo al pensar cuántas veces me habían dicho esa frase

“No tomas nada en serio”

Si me hubieran dado un solo centavo por todos los momentos en los que lo he escuchado, en manera dirigida a mi, no podría comprar nada porque siendo sinceros ¿En que lugar te aceptarían el efectivo en puras monedas de un centavo sin hacer historias?

Pero si serian muchas monedas

Solamente soy un gran farsante haciendo creer a las demás personas que todo está bien

Tengo más de treinta amigos, ninguno de ellos en realidad sería digno de hacerse llamar tal, pero a los ojos de todos soy el payaso de grupo, la persona más social y divertida, tal vez o muy seguido, bastante idiota

En realidad estoy solo, pero nadie lo sabe

Mi necesidad de fingir quien no soy es tal que pretendo ser diferente de sobre manera

A veces siento que mi corazón ya no puede soportar está soledad rodeada de personas, busco una salida para hacer de manera que mi alma respire y no se ahogue en la falsedad

Cargo el peso de mi centro latiente como una corona, aunque si la realidad de la situación es que mi corazón está tenso y sangrando, y nada del encanto de una corona.

Este engaño a veces puede lograr a sentirse demasiado real, llegándome a hacer creer que el solito y apesumbrado yo, ya no existe.

Todas esas ideas esperanzadas se disuelven en el camino del regreso hacia donde nacieron, recordándome a que alma le corresponde mi cuerpo