La vida, la vida puede tener bastantes significados desde una óptica filosófica o científica pero en el caso de Aoi ella era consciente de que su vida no era grandiosa pero tampoco era mala, la chica había tenido recuerdos donde veía gente la cual no lograba reconocer o recordar.

Shibuya poco a poco fue recuperándose del gran incidente de hace meses, y la femenina pudo seguir su vida tranquilamente hasta había conseguido un nuevo empleo junto a la persona que amaba, Chishiya se había formado en un adulto responsable, había renunciado a su anterior empleo para estar mas tiempo con Aoi y claro que había que hablar de sus amigos.

Arisu había conseguido un empleo de programador y Usagi trabajaba en una cafetería junto a Kuina y Ann trabajaba de forense. Seguía visitando a sus padres de vez en cuando, también Chishiya había aceptado cuidar de Toby aunque las alergias lo estaban asesinando por dentro.

Hoy era un día realmente importante, era el cumpleaños de Aoi y la misma chica se había tomado el día libre para pasarlo con su pareja y amigos pero esta claro que cuando uno trabaja con niños era imposible tener días tranquilos y así estaba pasando en este momento, la mayor corría por los pasillos del hospital mientras sus tacones resonaban por todo el hospital.

—Doctora, discúlpenos sabemos que es su día libre pero...—la chica encargada de examinar trataba desesperadamente de explicar la llamada inoportuna hacía la mujer.

—Pierdes más tiempo explicándome lo sucedido. Palpaba el abdomen del chico mientras este se quejaba.—Tuvo recientemente una cirugía así que el dolor puede ser causado por eso.

—El dolor no puede ser tan seguido, lleva dos horas así doctora.—Interrumpió una mujer mientras calmaba el dolor del niño. —Yo trabaje como enfermera un tiempo.

—No se preocupe, entiendo la preocupación de una mamá.—Trato de reconfortar a la angustiada mujer.—Le administraremos fluidos intravenosos y veremos como continua.

—Muchas gracias doctora.—Con una reverencia se retiro de la habitación.

—Pide estudios y llámame cuando estén los resultados.—Indico la femenina mientras devolvía el expediente a la enfermera a su lado.

Ato su cabello en un moño alto mientras caminaba hacía un lado de las habitaciones, aún tenía esperanzas de poder salir antes de la hora de celebración. Detestaba esto de su profesión, siempre sus planes se veían arruinados por pacientes inoportunos y claro que no los culpaba pero era frustrante.

—Doctora.—Aoi se volteo al llamado de la enfermera.—El pequeño tiene una ulcera perforada, tiene una hemorragia.

—Necesita cirugía.—suspiro al saber que el tiempo no era suficiente.—Prepárelo y yo voy en un segundo.

La peli negra busco su teléfono marcando el número de su pareja, ella sabía que el lo entendería si dentro de todo ambos trabajaban de lo mismo, solo se sentía algo triste por no poder cumplir el estar con sus amigos y pareja en un día tan importante.

—¿Hola? ¿Aoi ya vienes?—Hablo la voz del otro lado, la femenina dudo por un momento si contarle.

—Hola Shun.—Respondió la femenina.—Yo... tuve un inconveniente, un niño de diez años con dolor abdominal luego de una cirugía, pensé que podría llegar a la hora pero recién vamos a entrar a cirugía yo.. discúlpame no quería arruinar los planes de hoy y si puedes avísale a los chicos de mi parte y ofréceles una disculpa.    

—No hace falta que te disculpes, ambos trabajamos de cirujanos y entendemos lo que es tener que trabajar inoportunamente—La calmo el chico.—Te veré en casa, suerte en la cirugía.

Ambos terminaron la llamada con un "te amo" el cual la lograba hacer sentir mucho mejor, juraba recompensar a su pareja y amigos con alguna comida o noche en su hogar.

El rostro de Aoi mostraba una linda sonrisa, podía haberse perdido una gran noche pero la comprensión de su novio siempre la hacía sentir mejor. Ese día el hospital estaba más lleno de lo normal, por donde caminara se escuchaban llantos, gritos, y el típico olor de los hospitales, alcohol gel mezclado con vomito. Tan rápido como pudo termino la cirugía y ya estaba completamente lista para irse a su casa.

—¡Doctora!—Maldijo a sus adentros al ser llamada por una enfermera.

—Osaki eres mi enfermera favorita pero ahora no.—Suplico con las manos juntas mientras se alejaba lentamente.—¡Tengo algo pendiente! ¡Juro que te compensare con algo!

Volvió a ver su teléfono y esta vez la hora marcaba "00:30am" solo iba dos horas tarde... suspiro frustrada mientras pedía un taxi lo más rápido que podía.

𝐀Ú𝐍 le impresionaba las cosas que había logrado en "poco tiempo" aveces se preguntaba si el meteorito nunca se hubiera estrellado en Shibuya ¿ella estaría con Chishiya? ¿Habría conocido a ese gran grupo de amigos? ¿Estaría trabajando como una cirujana reconocida? ¿Se habría mudado de la casa de sus padres? ¿Sería tan feliz como lo es ahora? Tantas preguntas rondaban su cabeza, aún pensaba en Tatta... ¿por que ella sobrevivió y el no? Ambos estaban en el mismo lugar. Renegó mientras miraba su teléfono en especifico su fondo de pantalla, Chishiya con Toby.

—Llegamos a su destino.—El señor del taxi rompió el cómodo silencio.—Alguien pago por usted.

—¿Por mi?—Interrogo la femenina.—Que extraño... en fin muchas gracias.—Finalizo para bajar y caminar hasta su hogar, la llave giraba lentamente y la femenina trataba de hacer el menor ruido posible.

Al abrir la puerta todas las luces se encontraban apagadas, saco sus tacones dejándolos a un lado de los zapatos de su pareja, sus pies realmente necesitaban un descanso después de estar casi tres horas en cirugía. Quito su abrigo y lo dejo en una de las sillas del comedor.

—¿Shun estará dormido?—Hablo hacía el aire mientras se encaminaba hacía su dormitorio el cual se encontraba vacío, sin rastros de su pareja.

—¿Shun? Ya estoy en casa.—Suspiro mientras dejaba su bolso en la cama la cual compartían.

Cerro los ojos un momento y cuatro chicos llegaron gritando su nombre mientras la abrazaban, Shuntaro camino a paso lento con un pastel en sus manos.

—Feliz cumpleaños cirujana.—Aoi se encamino hacía el y deposito un beso en sus labios.—Obviamente no íbamos a posponer esto, lo llevamos planeando hace bastante tiempo.

—Lo llevo.—Corrigió Ann llevándose una risa de la femenina junto con Kuina y Usagi.

—Feliz cumpleaños impulsiva.—El peli negro se acerco a ella dandole un cálido abrazo seguido de un beso en la frente.—Un año mas antigua, te quiero Aoi.

—¡Feliz cumpleaños hermanita!—Usagi también recibió a la peli negra en un lindo abrazo.—Puede que no seamos hermanas de sangre pero siempre te considere una, feliz cumpleaños Aoi.

—Que cursis son todos.—Se sincero Ann mientras caminaba seguida de Kuina.—Feliz cumpleaños Aoi, me alegra que seamos amigas.

—¡Feliz cumpleaños Aoi!—Kuina atrapo a las dos chicas en un abrazo grupal.—Te tengo el mejor regalo de todos.

—¿Ah si?—Las tres chicas se separaron del abrazo.

—Entradas para Taylor Swift.—Aoi salto a abrazarla mientras le agradecía de todas las formas posibles.

—Apresúrense, me empiezan a doler los brazos sosteniendo el pastel.—Chishiya respingo.

—No te pongas celoso, ambos sabemos que tu novia me quiere mas a mi.—Kuina lo molestó recibiendo una mala mirada del chico.

Se sentía tan en paz, amaba a sus amigos, amaba a su pareja y realmente jamás pensó llevar una vida así pero no tenía de que quejarse, al contrario.