ix. chapter nine
❛❛Why? Why did you leave me?❜❜
CLINT LOGRÓ LLEVAR A ALENA HASTA QUINJET a pesar de sus gritos, súplicas y pataletas para que no la tocara. En cuánto llegó ahí ella no esperó nada más y se derrumbó, se mantuvo alejada de todos con las rodillas en su pecho y la mirada en el piso.
El resto del equipo no estaba mejor. Natasha estaba con la mirada perdida. Steve sumido en sus pensamientos y Bruce .. Bruce estaba destrozado.
Tony y Clint estaban preocupados por sus amigos. Pero más por la pequeña Alena que se le escuchaban los sollozos "silenciosos".
— Las noticias los aman, muchachos. Pero nadie más. — habló Hill por la computadora portátil del Quinjet. — Aún no han dado el arresto hacía Banner. Pero se debate.
— ¿La Fundación ayuda Stark? — preguntó Tony apartando la mirada de Alena.
— Ya esta en escena. ¿Como está el equipo.?
— Todos están.. — Tony miró a todos y los vio devastado. — Fue un golpe duro. Lo superaremos.
— Por ahora yo me mantendría en modo silencioso y me alejaría de
aquí. — sugiere Hill.
— ¿Correr y ocultarse? — pregunta Stark incrédulo. Hill ladea la cabeza.
— Mientras no hallemos a Ultron no puedo ofrecer más.
— Nosotros tampoco. — Tony corta línea. Se dirige a Clint quien era por el momento más cuerdo de todos. — ¿Quieres que te releve?
— No, estoy bien pero si quieres dormir hazlo ahora. Aún faltan algunas horas para que lleguemos.
— Lleguemos.. ¿A donde?
— Un refugio.
El Quinjet se detuvo y los Vengadores miraron una simple, pero grande, casa de campo. Parecía un lugar Pacífico pero eso no dejó menos confundidos a los chicos.
Clint ayudó a Natasha a caminar por los hombros. Trató de hacerlo con Alena pero esta solamente se mantuvo alejada de ellos.
— ¿Dónde estamos? — preguntó Thor estando en el porche.
— Un refugio.
— Eso espero. — murmuró Clint para después abrir la puerta y entrar. — ¿Cielo? Estoy en casa.
De repente una mujer muy embarazada hizo acto de presencia y los miró entre confundida y sorprendida. Clint se acercó a ella.
» — Traigo compañía, perdón, no
avisé. — se disculpó Clint mientras la besaba. Los Vengadores miraron la escena con los ojos muy abiertos.
— Ella es una agente,
obviamente. — le dijo Tony a Thor.
Se escucharon pasos corriendo y dos niños de diferentes edades entraron detrás de su madre.
— ¡Papá!
Clint cargó a la niña y abrazó fuertemente al niño.
— Hola, princesa, ¿como has estado, campeón? — los saludó felizmente Clint. Steve frunció el ceño.
— Ellos son.. Agentes más
pequeños. — prosiguió Tony. Alena lo miró como si hubiera vendido su mansión en dos dólares a otro millonario.
— Caballeros.. — Alena
carraspeo. — Y señorita, ella es Laura.
— Conozco sus nombres.
— ¿La tía Nat vino contigo?. — preguntó emocionada la pequeña Barton.
Su voz hizo que Natasha de alguna forma reaccionara y pusiera una sonrisa en su rostro.
— ¿Por que no la abrazas y lo averiguas? — Natasha cargó a la pequeña y ambas rieron feliz. Steve, Tony, Thor e inclusive Clint miraron a Alena incómodos mientras que ella sólo apretaba la mandíbula y presionara duramente los puños hasta el punto de hacerse daño con sus propias uñas.
¡Debe de ser una broma! Era capaz de comportarse como la más cariñosa con hijos ajenos pero la despreciaba a ella que era de su sangre.
— Perdón por llegar así. — le dijo Steve a Laura.
— Si, habríamos llamado antes si supiéramos que existían. — dijo Tony con ironía. Alena lo golpeó en el brazo.
— Sí, Fury me ayudó a mantenerlo oculto cuando me uní a SHIELD. Lo mantuvo en secreto y así lo quiero dejar. — los Vengadores aceptaron la indirecta bien directa. — Es un buen lugar para ocultarnos.
Los ojos de Alena se volvieron involuntariamente violetas y tuvo que apretar con fuerza los párpados y tomar una respiración muy profunda para controlarse. Funcionó.
Tony la observó con preocupación. Y no era el único, el matrimonio Barton también lo habían notado.
— Hola cariño, ¿como has estado?. — le preguntó Laura a Nat mientras le tocaba la mejilla.
— Ay te he extrañado. ¿Y la pequeña Natasha? — preguntó Nat con una sonrisa mientras tocaba el vientre abultado de Laura. La susodicha hizo una mueca de disculpa.
— Ella es.. Nathaniel.
La sonrisa de Natasha se borró mientras se agachaba a la altura de la barriga de Laura.
— Traidor.
Ella y Laura empezaron a reír.
La tostadora sonó y así sobresaltó a Alena y a Thor. Este último salió de prisa de la casa con la adolescente y a Steve detrás de él.
— Thor..
— Vi algo importante en ese sueño. Necesito respuesta y no las encontraré aquí. — Thor no dijo nada más y se alejó con ayuda de su martillo.
Alena sintió la mirada de Steve sobre ella.
— ¿Estas bien? — la pregunta de Steve dejó helada a Alena quien forzó una sonrisa mientras se abrazaba a ella misma.
— S-Sí, estoy bien. — Alena puso las manos frente a ella en modo de defensa al ver que Steve iba a dar un paso en su dirección.
No estaba lista aún para el contacto, necesitaba tiempo. Pero sabía que no lo tendría si no le contaba a nadie del equipo la razón.
— ¿Segura?
Alena abrió la boca para decir algo pero simplemente la volvió a cerrar y se volvió a adentrar a la casa Barton.
Steve iba a copiar su acción cuando unas voces lo detuvo.
❛ Podemos ir a casa..❜
❛ Podremos tener una vida juntos..❜
— Puedes darte un baño aquí. Después se asignará habitación a cada uno.. — le explicaba Laura a Alena mientras entraban en una habitación de invitados. — Una cosa más. No te acabes el agua caliente.
Laura le sonrió pero lo único que recibió a cambio fue un intento de una que salió a una mueca.
— Gracias, Laura.
Laura se acercó y la abrazó. Alena sin embargo no respondió a la acción, sólo se tensó y deseó que acabara pronto.
— ¿Segura que estas
bien? — Alena se abstuvo de rodar los ojos.
— Si, estoy bien. — Alena había sonado un poco más dura de que lo deseó. — Por ahora sólo quiero ducharme e intentar dormir un poco.
Lo último no fue del todo mentira. Si quería ducharse, se sentía sucia. Y claro que después iba a intentar dormir que de antemano sabía era en vano.
— Cualquier cosa de la que quieras hablar soy todo oídos. — Alena sonrió forzada y le agradeció. Laura salió y cerró la puerta tras suyo.
Alena se acercó al baño donde había un espejo. Lo que miró fue a una simple niña indefensa. Y odió verse así. Odió el saber que su pasado aún le afectaba. Creyó haberlo dejado atrás, creyó haberlo superado. Pero no es así.
Iván siempre la perseguiría hasta el día de su muerte. Las atrocidades que le hicieron en HYDRA la perseguirían hasta su muerte. Se libraría del desprecio de su madre hasta su muerte.
Lágrimas cayeron por sus mejillas y sollozos salían por su boca. Al lado del lavamanos estaba un rastrillo femenino y sin perder el tiempo lo desarmó.
Extendió su muñeca y por última vez miró su reflejo.
❛- ¡Eres una buena para nada..!❜
Las palabras de Iván se repitieron en su cabeza mientras cerraba los ojos.
❛ - Ya veo por que fuisteis abandonada, mocosa.. Das lástima.❜
Todos los insultos que los soldados de HYDRA le gritaban..
❛-Sólo fuisteis producto de un condón roto. Un error. Un adefesio. Una vergüenza para todos. ❜
Con decisión Alena hizo el primer corte. La sangre llenó el lavamanos y el agua se lo llevaba directamente a las alcantarillas.
❛- Shh.. No me arruinarás el momento.❜
Corte tras cortes se hacia Alena en él brazo mientras lloraba de impotencia. Quería gritar. Quería destrozar el lugar. Quería estar sola.
Pero no lo hizo. Por su garganta no salió ni un sonido. La habitación estaba intacta y de atrás de la puerta estaba un insistente Clint golpeando la puerta.
— ¿Alena? ¿Eres tu la que se esta gastando el agua caliente? — Al no escuchar respuesta Clint abrió la puerta y al ver lo que Alena estaba haciendo le quitó el filo del rastrillo y la apartó del lavamanos a pesar de sus gritos y pataletas.
Clint hizo presión en la herida con una toalla mientras que Alena enterraba su rostro en el cuello de Clint mientras lloraba.
— ¿Por que? ¿Por que me abandonó? ¿Que hice mal? — lloraba Alena sin consuelo en el piso del baño y con Clint como paño de lágrimas.
Clint sólo la abrazaba y dejaba que ella se descargara todo su dolor y su tristeza.
El cuarto pronto se llenó de los demás Vengadores y de Laura. Todos miraban con lástima a Alena. Nunca la habían visto tan desmoronada. Ella fue apartada y casi nunca hablaba, pero nunca pensaron que estuviera tan rota. En este momento todos pensaban en 100 maneras para matar a la Maximoff.
Natasha sintió una oleada de culpa. Todo lo que quería evitar por lo que pasara su hija.. Lo pasó.. Y ella no estuvo ahí para protegerla.
Ahroa Alena se culpaba todo cuando nada era su culpa.
» — ¿Que esta mal en mi?
— No hay nada malo en ti, pequeña.
██████████████████
HOLAAAA..!!!
¿LLORARON como yo al escribir esta parte?
¿Les gustó?
¿que cambiarían?
Se acerca el próximo
¿Alguna petición?
¿Quien creen que es la segunda voz que escuchó Steve? 😏😏😏
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