Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

cap 19

[Narra la escritora]

Esa noche llena de "diversión" no lo era tanto para tí, dentro del baño aún ebria y desorientada caminaste hasta el lavabo para limpiar tu rostro.

Urogi tuvo que irse pero había cerrado con seguro, con pesadez caminaste hasta la puerta para quitar el cerrojo, pero una figura ya estaba allí, miraste con cansancio esos bellos ojos rubí para solo derrumbarte en sus brazos.

—Mierda —se quejó sentadote sobre la taza del baño aún estando inconciente retirando los cabellos sudados de tu rostro.

No estabas tan sucia, pero aún así se encargó de limpiar cada rastro de tu cuerpo con un paño suavemente.

Al verte dormida totalmente sabiendo la hora estaba con la preocupación más relajada, pasó una mano por tu mejilla sabiendo que tendrías una resaca horrible.

—¿Por qué siempre me haces cuidarte? —pensó en voz alta y el ceño fruncido que empezaba a debilitarse.

El alcohol lo descontrolaria si no empezaba a alejarse, el pequeño cuarto olía demasiado a hormonas, él no quería creer que fueras de otro hombre.

Un nudo se le formó en el pecho para cargarte sobre sus brazos, algo mareado sabiendo que esa noche sería su única oportunidad.

Antes de abrir la puerta, Sekido ya bajo los efectos del alcohol, depósito un suave beso sobre tus labios.

—Maldita, mira lo que me haces hacer.

[...]

Todo quedó en silencio, eso había salido del fondo de la garganta, el nudo que tenía desde hace unos meses estaba desapareciendo pero otro volvía.

Ume te ayudaba sosteniendote por el brazo, el desmayó había sido según los doctores de allí, un golpe de calor nada más.

Karaku en un movimiento fugaz, corrió hacia tí, lo miraste sorprendida correspondiendo,  pesadas lagrimas resbalaban por tus mejillas, palmeo tu espalda y depósito un suave beso sobre tus labios que no rechazaste.

—Estas bien —se dijo así mismo aliviado tomando tu rostro entre su mano.

El gruñido de Sekido llamo la atención de ambos haciendo que apartaras tu rostro.

—No sirve ya ocultarlo —Informó el oji-verde— vámonos fue mucho por hoy.

Sekido se veía  calmado, sus ojos hacia tí eran sin expresión alguna, su mirada se clavo en la tuya, su propia aura te castigaba severamente.

Cerraste tus ojos evitando su vacía mirada, Karaku te envolvió en una toalla, Ume abrumada persiviendo la tensión le otorgó tu bolso a dándole sus bolsos a Karaku se retiraron en un silencio.

Era la primera aparición de la pareja en público y vaya que era desagradable.

No sabías que tanto había pasado, habías estado inconsciente por el agotamiento, eran demasiados constantes ya tus desmayos, pero ahorita no era el momento.

—Adiós Ume —te despediste suavemente para retirarte en silencio.

—Espera, vamos contigo —llamó Ume corriendo con Kaigaku enrollado de su brazo y Gyutaro a su lado.

Tus ojos se iluminaron, te pegaste a Karaku suspirando suavemente, serían una pareja formal, miraste una última vez a los demás sabiendo que enfrentarias las consecuencias en algún momento.

[...]

Estaban en casa, no tenían otro lugar donde quedarse.

Sekido se había metido hacia su habitación y ya no había salido, la cena estaba lista, Ume se quedaría por hoy mientras aceptaban  esto.

El ambiente estaba tenso, era un dolor de cabeza para todos esto, un día tan hermoso lo habias hecho un desastre.

Mirabas tu plato de comida, esta estaba sin tocar, nada más movias la comida de un lado a otra

—T/n come un poco —insistió Ume por segunda vez— se va a enfriar.

—Lo se —aclaraste tomando un bocado— esta rico.

Karaku te abrazo siendo severamente observado por Aizetsu y Urogi, te enteraste que ellos solos se delataron, ahora expresaban libremente sus celos.

Correspondiste y seguiste comiendo, estaban muy callados, ahora enfrentarían las consecuencias de ser una pareja formalmente conocida por el mundo.

Las horas pasaron y tocó el momento de dormir, Sekido en ningún momento salió, esperabas siquiera un insultó, su ausencia te preocupaba.

Ume y los demás se retiraron al ser ya de noche, un dolor abrumaba tu pecho, en tu mente deseabas que lo entendiera siquiera un poco.

Karaku estuvo de consuelo, Aizetsu y Urogi no tenían ya poder sobre tí solo podían abrazarte, jamás pensanste que llegaría este día.

—Ahorita vengo —avisaste levantandote de tu cama a Karaku.

—Si te tardas de más iré a revisar esta vez y no dejaré que estos psicópatas me tomen de vuelta —aseguró el moreno mirando de manera amenazante a ambos mencionados.

Urogi le sacó el dedo del medio con una sonrisa, te había tenido que soltar  para que fueras a hablar con Sekido.

—Por favor ten cuidado —dijo Aizetsu.

—Estaré bien —aseguraste— no me esperen.

Dijiste para salir de tu habitación y bajar las escaleras, cada escalón se sentía como bajar al infierno que te esperaba solucionar esto.

Era lo que querias después de todo, tarde o temprano lo hubiera descubierto.

Te sumergiste en el pasillo que llevaba a su habitación y diste unos leves toques a la puerta.

—Largó —ordenó su pesada voz.

—Sekido tenemos que hablar, por favor abre la puerta —continuaste nerviosa, no esperaste que contestará tan rápido.

—¿Hablar de que T/n? —Una ronca risa sarcástica salió de su boca— ¿De qué te follas a mi hermano desde hace años?

Tus mejillas se coloraron de manera que apretaste el puño, el no se refería así de tí en ningún momento.

Bueno, tampoco es que esperabas un abrazo de felicitaciones, ni siquiera había comenzado a insultarte y ya te sentias miserable.

—Sí, quiero hablar de eso —respondiste decidida— solo quiero solucionar esto.

El ambiente quedo en un silencio abrumador que hacía que el aire de tus pulmones se escapara más rápido con cada respiración.

Cuando la puerta de abrió dejando ver su figura, su rostro era de pocos amigos, no apartaste tu mirada, muchas veces habías sido una total cobarde y hoy sería la excepción.

—Habla mujer —exigió metiendote a su cuarto por el brazo, cerró con un puertazo, jamás habías imaginado esa agresividad.

Cerraste los ojos del dolor con la presión de sus dedos sobre tu brazo, sus ojos no tenían una pequeña pizca de compasión.

—Tienes el tiempo contado, si vas a quedarte callada mejor te sacó.

Mordiste el interior de tus mejillas, todas tus explicaciones se habían ido a la basura en este momento.

—Mi intención nunca fue ocultarte mi relación con Karaku —contaste y ya habias iniciado con el pie izquierdo— es solo que sucedió.

Soltó tu brazo y froto su entreceño interrumpiendote antes de que continuaras hablando.

—Solo algo te pedí y fue la primera idiotez que cometiste.

Su desdén hacía tí no lo estabas soportando.

—¡No tienes derecho a hablarme así! —exclamaste elevando la voz.

—¡¿Y COMO DEMONIOS QUIERES QUE TE RESPONDA T/N?! —gritó exaltado— ¿QUIERES QUE TE APLAUDA MALDITA PUTA?

Tomó bruscamente ambos hombros sacudiendote de manera violenta, una llama se encendió en tu corazón, no estabas dispuesta a aguantar esos maltratos.

—¿AHORA SOY UNA PUTA? —Lo empujaste hacía atrás con todas tus fuerzas de manera que te soltó.

—LO ERES TOTALMENTE —contestó ante tu pregunta.

—NO SE QUE DIABLOS GANAS CON TRATARME ASÍ —te acercaste a el de manera retadora.

—EL AMOR NO ES ALGO QUE SE PUEDA CONTROLAR CON OPIONONES DE TERCEROS —continuaste furiosa—  NO ESCOGÍ SENTIR LO QUE SIENTO POR ÉL.

Sin que te dieras cuenta, no estabas solucionando nada, sus ojos se entornaron sin interrumpir, estaba algo desconcertado.

—YO AMO A TÚ HERMANO Y NUNCA LO CAMBIARAS.

...

Grave error fue decir eso.

Tu rostro de hundió hacía tu derecha junto con el puño, el impacto te tiró al suelo de manera que tu cuerpo cayó al suelo y golpeaste tu cabeza.

Tu nariz sangraba y tu rostro tenía una cortada en conjunto, cubristee tu boca, cerraste los ojos aguantando las lágrimas atrapadas en tus ojos, levantaste tu mirada para ver la amenazante figura de Sekido.

—Me golpeaste —susurraste  para tí misma, tu conciencia apenas lo asimilaba.

Sus ojos rubis se abrieron de sorpresa al verte en el suelo, sus nudillos de la mano derecha estaban rojos, verte temblar bajo el era apenas como si se diera cuenta.

Jadeabas de dolor sujetando tu mejilla tratando de detener el sangrado ahora de tu labio roto.

—No quise hacer eso...—su voz salió trabada.

Ni tu propio padre jamás te había levantado la mano, era la primera experiencia donde un hombre te golpeaba.

Bajaste la cabeza de manera que hundías las heridas del golpe y dejabas caer las lágrimas.

Viste como se puso de concuclillas frente a tí.

—<<Esto fue un error, lo sé>> —pensaste temblando— ¡AHHH!

Exclamaste de dolor a la vez que las enbras de cabello débil se rompía con el puñado de cabello que te obligaba a levantarte.

—Hubiera sido mejor que jamás hayas bajado —monólogo arrastrandote hacía la salida.

Gritabas de dolor mirando su fría figura ¿donde estaba el Sekido que nunca te montaba siquiera un dedo?

Al llegar a la puerta te cargó en sus brazos como si fueras una tonta muñeca de trapo, sollozabas de dolor suplicando que te soltara.

—A partir de ahora tu estas muerta para mí —declaró— pero como no lo estas, me quedaré para asegurarme de que deses estarlo, puedes quedarte con mis hermanos, no me importa, cada que te vea me encargare de que sufras el triple de esto y pierdas a cualquier bastardo que lleves en tu vientre.

—Se-Sekido..—No dijo más cuando te sacó de su habitación de un empujón y cerró la puerta tras de tí.

Tú visión se volvía borrosa  la sangre se resbelaba por la herida del golpe en tú cabeza.

Empezaste a cerrar lentamente los ojos desvaneciendote en el frío piso, las cuando las veloces pisadas se aproximaron a tu ayuda, pero no escuchabas ya nada.

—T/N AMOR TE LO RUEGO NO CIERRES LOS OJOS —Suplicó Karaku teniendo a la castaña en brazos.

[...]

Wow que pontente cap jaja

¿T/n estará mejor?

¿Por qué el cambio de personalidad  de Sekido?

¿Volvere a actualizar?



Nunca lo sabremos

Perdón, ningún bot me daba ya el drama que necesitaba y he vuelto, me canse de eso de "le agarra el brazo" por 8 veces seguidas.

Les dije que esta mierda se está poniendo seria.

Y ya voy poco a poquito actualizando, el semestre me pasó duro, me tocó en la tarde y sabrán que no voy a llegar a las 10 pm  a mi casa con cuatro proyectos en la mochila jajaja

Como quiera me dicen que historias quieren que actualice para poder aprovechar mis últimos días de vacaciones

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro