Capítulo 72|Los delirios de Musa
Luego del funeral de Huricihan, Nükhet interrogó a su hijo y a su nuera, el nerviosismo de Nurbanu la había echo sospechar.
—¿Entonces hizo eso con ese agha? - Nurbanu asintió —Bien, Nürhan haz que torturen y maten a Gazanfer agha, que no dejen rastros.
—Ya me hice cargo - Iskender hablo — es mi deber cuidar de mi familia madre.
—Mi hijo, ambos deben de tener cuidado de ahora en adelante, Bayaceto sospecha y ahora que tienen un príncipe es posible que los enemigos los persigan.
—Lo haremos sultana, fue un momento de debilidad pero nadie nos hará daño - Nurbanu sonaba segura, aquello calmaba a Nükhet.
—Bien, me retiro, debo de ir a visitar la fundación.
—Ve con cuidado madre.
—No te preocupes, su majestad me envió con Süleyman agha - la mayor se puso de pie. —Reposa lo más que puedas querida.
Los enemigos eran algo que Nükhet tenía por montones, Fatma y Mahidevran eran las principales.
La habían estado siguiendo desde que salió del palacio, Ivan se aseguró de protegerla de los asesinos y por azares del destino ambos habían acabado en una cabaña en el bosque.
—¿Se encuentra bien? ¿Le duele algo?
—Estoy bien querido - Nükhet se notaba preocupa por el. —¿Y tu?
—Lo estoy, solo es un pequeño rasguño.
—Si estas bien, entonces deberíamos de regresar - Ivan asintió.
—Sultana... ¿Podría contarme sobre mi madre? - Nükhet bajo la mirada y mordió su labio, habían salido de la cabaña.
Aquel pedido era imposible, era doloroso y angustiante.
—Tú madre era una muy hermosa... todos siempre iban a Circasia a pedir su mano - Ivan sonrió –Estaba muy feliz cuando supo que estaba embarazada de ti, aunque al principio sintió miedo, luego ese miedo se convirtió en amor puro... Ella te amaba Ivan, te amaba mucho.
—Todas las noches le pido a mi Dios que cuida a mi madre que esta a su lado, que me permita conocerla en otra vida - Nükhet toco su pecho. —Me hubiera encantado conocerla, pero hoy estoy aquí ante usted, es como mi madre...
—Me alegra que pienses eso, a ella le hubiera encantado que fueras cercano conmigo... - Sus lágrimas amenazaron con salir.
—¿La hice sentir triste? Lo siento.
—Perdí a varios hijos en mi camino, me hubiera gustado que me llamaran madre... ¿puedo pedirte algo? - Nükhet detuvo su andar.
—Puede pedirme lo que sea.- Nükhet pareció dudar, tal vez se alejara o la viera extraño.
—¿Puedes decirme mamá? Esta bien si te niegas, es algo tonto.
—Mamá... madre - Nükhet se quedó completamente quieta, su rostro se baño en lágrimas y el aire comenzó a faltarle —¿Esta bien? ¿Madre? - Nükhet soltó un ligero sollozo y el joven se acercó para abrazarla, Nükhet se aferro a él y cerró sus ojos sintiendo el aroma de su hijo.
Aquel gesto solo aumento el dolor de Nükhet, la cual acabo en llanto sin fin, extrañaba a su bebé pero aquel joven ya no era el niño que ella había dejado atrás.
Era una madre torturada, una madre que sufría día a día por la pérdida de su hijo.
Süleyman se encontraba fatigado, apesar de que sabía que Rustem estaba hablando frente a él, no podía escucharlo.
—¿Su majestad? - Süleyman se puso de pie y se tocó el pecho en varias ocasiones —¿Su majestad me escucha?
Süleyman avanzo hacia su cama pero en su trayecto cayó inconsciente.
—¡Su majestad! ¡Traigan a los doctores! ¡Rápido!
Nükhet había regresado al palacio luego de superar la crisis que tuvo con Ivan, su corazón se sentía más pesado que antes pero sentir los brazos de su hijo la hicieron liberar una parte de su triste vida.
—¡Sultana! - Nürhan se acercó algo apresurada —Su majestad ha caído enfermo.
—¿De que hablas? ¿Como esta?
—No se sabe, esta inconsciente. - Nükhet se despidió de Ivan y corrió hacia los aposentos del Sultán, Süleyman no podía morir aun, se negaba a verlo morir antes de matar a sus enemigos.
Uno a uno iban cayendo, Fatma tiraba indirectas hacia Hürrem, Mahidevran iba de camino a la capital con Mustafa y su ejército, Nükhet estaba desesperada tratando de saber si la condición de Süleyman mejoraba o si tomaba medidas extremas o si aun podía respirar tranquila.
Se reía internamente, le deseaba salud al hombre que odiaba, pero si no lo hacía Mustafa y sus ejército irían por ella y sus hijos, jamás se permitiría verlos morir.
—Sultana - Nürhan se acercó a ella —Musa paşa desea verla.
—No estoy de humor ahora, dile que se largue.
—Dijo que si no iba ahora mismo él iba a entrar y a hablar - Nükhet toco su cabeza y bufo.
—Iré, si preguntan estoy haciendo una plegaria por Süleyman, que nadie interrumpa en mis aposentos y que mis hijos estén juntos en los aposentos de Neelam.
Musa acaricio la cintura de Nükhet y coloco su cabeza en su pecho, el aroma dulce de Nükhet lo volvía loco. cada vez que la tomaba era una alegría única, su cuerpo reaccionaba de manera violenta a ella.
—Ya déjame ir, estoy harta de ti - Musa tomó sus mejillas con fuerza—¡Déjame!
—Eres mi mujer, te guste o no Gaia - La menor bufo y se alejo —Mejor cambiemos de tema, en estos tres años eh esperado que Ivan suba de rango, pero tu mi querida sobrina no ha echo nada por mi hijo.
—Süleyman no ha querido - Musa la tomó del rostro y la beso —Me das asco.
—Ahora que ese viejo esta moribundo es momento de que tomes el mando, quiero que Ivan sea el nuevo Sultán - Nükhet soltó a reír.
—Estas loco.
—No lo estoy, Ivan es tu hijo, merece ese trono por los años de abandono, con la ley de fratricidio podemos matar a tus hijos luego de que se estabilice el imperio.
—¡Estas loco! - Nükhet se puso de pie y se vistió.
—Lo estoy, loco por ti y por el poder - Nükhet toco su cabeza y negó, se había estado sintiendo cansada desde hace varias semanas.
—Pudrete Alek, pagarás caro por tus abusos - Musa soltó a reír y la vio salir.
—Eres mía ¡mía!
Desde ya les digo que el capitulo de mañana estará potente.
Se subirá junto a un video spoiler en tiktok, así que pendientes.
Mis redes para que me sigan desde ya.
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