La desesperación lo hizo actuar rápidamente, aunque no quería alejarse del menor, tenía que buscar rápidamente al médico... Que afortunadamente estaba desocupado. 

El tiempo de atención fue relativamente más corto que antes, pero cada minuto que pasaba lo atormentaba y desesperaba, su corazón latía rápidamente sin poder detenerse. 

—-¿Señor Heesung? —-preguntó la enfermera —- Ya puede pasar. 

Con temor ingresó al lugar dónde lo esperaba el médico junto a Yoon-Gu.

—- Seré sincero y rápido —- mencionó el mayor —- No me importa los problemas que tengan ustedes, solo tienen que arreglarlo y no tener peleas. ¿Entendido? 

Heesung asintió rápidamente, avergonzado por el regaño. 

—- Por otro lado, ambos bebés se encuentran sanos —- dijo este —- Ustedes, por favor... Eviten discusiones. 

El pelinegro asintió ante eso, se sentía más tranquilo al saber que ambos estaban bien.

—- Oh, por cierto... —- susurro el peliblanco —- Ya podemos saber el género de los bebés, ¿les gustaría que se lo revele mediante una ecografía? Aún no es 100% seguro, pero no hay gran margen de error.

Ambos se miraron sorprendidos, ¿tan pronto se podía verificar eso? 

—- Estoy en mi... ¿Novena semana? ¿Verdad? —- preguntó el menor a lo que el médico asintió.

—- La próxima semana será la décima, lo que equivale aproximadamente a tu tercer mes —- habló el médico —- Es algo confuso hablar por semanas, pero es más preciso. 

Heesung asintió, preguntando algunas cosas pues según tenía entendido las ecografías para eso eran cuando pasaba las 13 semanas aproximadamente. 

—- El test de Lorgen, es usado para determinar el género del bebé, a partir de la octava semana —- mencionó el médico —- Mediante un análisis sanguíneo y tiene una probabilidad de 98% seguro. 

Yoon-Gu asintió rápidamente, queriendo hacerse esa prueba siendo aceptado por el pelirrosa quién solo miraba a lo lejos. 

—- Tendré los resultados en unos días —- mencionó el médico —- ¿Desea que se lo mande por correo? ¿Venir a recogerlo? ¿O mandarle a alguna otra persona para que ustedes no se enteren? 

Ambos se miraron dudando, pero sonrieron teniendo la misma idea. 

—- Nosotros le avisamos —-dijeron al mismo tiempo, porque tenían que pensarlo. 

Tan pronto se fue el médico, el pelinegro bostezó lleno de cansancio, podía calcular que era casi las dos de la madrugada.

Levanto su manito, queriendo tomar la del pelirrosa quién se acercó con cuidado, afianzando el agarre.

—- Descansa pequeño —- susurro Heesung acariciando ligeramente su cabeza —- Yo me quedaré a tu lado, no te preocupes. 

El menor asintió, aún dudando y demorando un poco antes de cerrar sus ojos y quedar plenamente dormido. 

Su respiración se hizo más lenta y relajada, sintiendo como el calor del mayor seguía cerca de él, con seguridad pudiendo descansar. 

Por su parte, Heesung acomodó un poco su rostro para que quede en la camilla y él en la silla, algo incomodo pero al estar lleno de cansancio también quedó dormido. 

La noche fue extrañamente tranquila, todos aquellos pensamientos que los aquejaban se disiparon ante el agotamiento.

El sol pronto salía y la enfermera entraba a la habitación para entregar el desayuno. 

—- Buenos días joven —- mencionó la mayor —- Cuando se despierte el menor, asegure que coma todo y me llama para inyectarle algunas vitaminas. 

El mayor asintió suspirando, su cuello le dolía demasiado pero definitivamente lo valía... No quería que el menor se sintiera solo. 

Por unos minutos se dedicó a observar como el más pequeño dormía plácidamente, sus pestañas largas, su fina nariz y esos labios tan suaves se encontraban en total relajo.

Su celular sonó incansablemente, haciendo que el tuviera que contestar, molestándolo inmediatamente. 

—- ¡Choi Heesung! —- gritó alguien en la otra línea —- ¿Se puede saber dónde estás? 

El mayor alejó el celular, había olvidado un detalle importante. 

—- Ocupado —- mencionó el pelirrosa —- No voy a poder asistir al plan de hoy.

Casi sintió como todos los insultos que existían fueron pronunciados por dicho hombre. 

—- ¿Sabes lo mucho qué me esforcé para conseguirte esta sesión de fotos? —- preguntó su mánager —- Prometiste que no fallarías, puedes dejar tus tonterías para después. 

El pelirrosa suspiro, tomó algo de aire para hablar —- Mi novio, está enfermó... Lo estoy acompañando en el hospital.

El mayor rió ante tal afirmación —- Todos en la industria te conocen Heesung, no tienes pareja estable. Así que saca ese estúpido cuerpo de tu cama y ven a trabajar. 

El pelirrosa frunció el ceño enfadado ante tal afirmación, mandando su ubicación en tiempo real y señalando que efectivamente estaba en el hospital.

Sorprendido, su mánager observó dicha dirección, esperando que fuera una broma o algo parecido, pero no tuvo más opción que aceptar esa realidad.

—- Busca alguien más que lo cuide —- mencionó un poco arrepentido el mayor —- Ven en máximo media hora y veré la forma que terminemos todo rápido. 

Heesung agradeció inmediatamente, buscando el número que lo salvaría en esa situación. 

—- Estoy bien —- susurro Yoon-Gu algo somnoliento —- Puedo quedarme solo hasta que vuelvas, no llames a nadie. No quiero molestar. 

Ante dichas palabras, solo fue ignorado. 

—- ¡Hermanita! —- sonrió el pelirrosa cuando esta respondió —- ¿Cómo estás preciosa? 

—- Ya dime qué quieres, qué estoy ocupada para ti —- mencionó lo más fría posible la pelirroja. 

—- ¿Puedes venir al hospital? —- preguntó el mayor —- Hubo un accidente con Yoon-Gu, pero tengo que ir a trabajar. ¿Le puedes acompañar hasta que vuelva? 

Diciendo eso, mandó su ubicación esperando una respuesta afirmativa de su hermana.  

—- Ohh, para él si tengo tiempo —- mencionó la menor —- Fíjate, que estaba en camino de ese hospital, llego en 15 minutos. 

Tan pronto ella dijo eso, Heesung colgó, besó en los labios al pelinegro y salió corriendo esperando no llegar tarde.

Continuará... 

Estoy con unas ganas de shippear a Hee-neul (la hermana de Heesung) [nuestra mujer] con Hakase (el médico especialista) {tiene mucho dinero}

Hee-neul:

Su cabello es un rojo medio anaranjado xd. 

Hakase: