Tan pronto como terminó su labor, Yoon-Gu fue directo al baño, las arcadas lo habían mareado demasiado. 

Heesung lo siguió, preocupado. Acarició suavemente su espalda, esperando que el menor terminara de vomitar. 

—- Lo siento —- susurro el pelirrosa —- Creo que fui muy violento. 

El pelinegro negó ligeramente, limpiandose con agua para luego cepillarse los dientes —- Yo decidí hacer eso. 

Heesung sonrió acariciando el cabello del menor, ambos volviendo a la habitación. 

Yoon-Gu espero algún beso o acción de parte del mayor, pero el pelirrosa simplemente se sentó en el borde de la cama, mirando al suelo. 

—- Uh... —- susurro el menor confundido —- ¿Te dio asco? ¿No quieres seguir? 

El pelirrosa volteó con el rostro sonrojado, observando fijamente al pelinegro. 

—- Joder Yoon-Gu —- jadeo el mayor —- Estoy tan caliente, pero no quiero hacerte daño. Lo siento. 

El pelirrosa empezó un bombeo lento a su miembro, oh, hace muchisimo tiempo que no se auto satisfacía. Siempre había alguien dispuesto a hacerlo por él, pero esta vez... Temía continuar con la acción. 

Tiró la cabeza hacia atrás, apoyándose con una mano en la cama y moviendo la otra en busca de llegar al clímax. 

Yoon-Gu podía ver perfectamente cada expresión del mayor, y eso lo calentó en sobremanera, olvidando el ligero mal rato que pasó. Lentamente su miembro también comenzaba a despertarse, producto de la excitación. 

Heesung poco a poco se iba desesperado, su mano no era suficiente para bajar esa erección tan pronunciada que tenía, incluso podría decir que se estaba excitando más. 

Yoon-Gu por su parte, metió dos dedos en su interior, expandiendo un poco su entrada y moviendo en tijeras. Quería llegar al dulce punto que siempre solía tocar el pelirrosa, pero no podía, frustrandose en el proceso. 

Cubrió su mano con un poco de lubricante, para luego apoyar su cabeza en la almohada y levantar las caderas, teniendo una mejor posición para llegar más lejos. Empujaba cada vez más, sintiendo como su interior se abría un poco, capaz de introducir un tercer dedo. 

Los jadeos, gemidos y gruñidos se hacían presentes en la habitación, pero ninguno se atrevía a verse mutuamente, querían acabar tan pronto... Pero parecía que solos era más complicado. 

—- Neee, Heesung —- susurro el menor -— Puedes hacerlo. 

El mayor volteó cuando el pelinegro tocó su hombro, con el rostro sonrojado y el cabello alborotado. 

Heesung se detuvo por un breve momento —- Oye, ¿esto no le hará daño al bebé? 

Yoon-Gu sonrió ante tal respuesta, le parecía tan tierno que se preocupara por el pequeño feto. 

—- No, solo... Entra en mi —- jadeo el pelinegro en respuesta. 

El mayor simplemente negó —- Primero debemos ir con un médico —- Si, podía ser muchas cosas pero irresponsable no. 

—- ¡Qué ya le dije joder! —- gritó levemente el menor —- Dijo que incluso sería saludable mantener relaciones sexuales —- Su rostro se tornó más rojo al decir dichas palabras. 

Heesung sonrió, era tan erótico que el menor haya preguntado sobre eso con anticipación. Volteó con ferocidad al menor, dejandolo en cuatro y levantando bien sus caderas.

Sin previó aviso sabiendo que el pelinegro se estaba preparando, apoyo su glande y metió toda su longitud de un solo golpe en el menor. 

Oh, eso si era lo que quería... Tan jodidamente caliente. 

De inmediato, la espalda del menor se arqueo sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo por completo y sus paredes apretarse como respuesta a la intromisión. 

—- Relájate —- gruño Heesung —- No me puedo mover. 

Yoon-Gu golpeo ligeramente el hombro del mayor —- Idiota, tienes que avisar. Duele. 

El pelirrosa rió al ver el rostro casi lloroso del menor y susurro un "Lo siento" para luego llenar de cortos besos la carita del pelinegro, esperando que se calme un poco. 

El pelinegro movió sus caderas lentamente, dándole paso al mayor para aumentar la velocidad, siendo completamente aceptado por él. 

Heesung movía sus caderas empujando a lo más profundo de su interior, golpeando repetidas veces el punto dulce del pelinegro. Recibiendo como respuesta un profundp gemido, seguido de un suspiro ahogado.

Una y otra vez, el sonido de sus pieles chocando era exquisito dando toques eróticos al ambiente. Los fluidos conectandose, la respiración irregular de ambos, la sensación de ser uno solo, absolutamente todo era perfecto

Las manos del menor apretaron fuertemente las sábanas, sintiendo como llegaba al cielo con una sensación punzante en su médula espinal, mientras sus sentidos eran nublados por el placer recibido recientemente. Apretó sus paredes internas, tensando de los pies a la cabeza, intentando regular su respiración.

Heesung se detuvo un momento, sintiendo la presión ejercida en su miembro completamente sofocado, caliente y excitante. 

Tan pronto como sintió al menor relajarse, continuó golpeando lo más profundo del más peqieño, buscando ahora su propia liberación. 

El pelinegro se retorcía debajo de él, sintiendo como sus sentidos eran un remolino de emociones, las ganas de seguir eran tantas como las de detenerse. Por lo que solo pudo gemir, jadear y gruñir ajustando más el agarre en las sábanas y enterrando su rostro momentaneamente en la almohada. 

El pelirrosa estaba tan cerca a su terminacón que aumentó la cantidad de embestidas siendo más profundas y violentas. 

--Uh... Oh... ahg.. -- jadeo con desesperación el pelinegro --- Más lento... ngh... Hee... ngh --- sentía como su interior se movía, apretandose violentamente. Al haberse corrido recién todo su cuerpo estaba sensible. 

Heesung aprovecho el último momento, su última estocada para morder el cuello tan apetecible del menor, dejando una marca que no se borraría facilmente y siendo reclamado por un gemido de dolor. 

Llegó al éxtasis de la manera más hermosa, sintiendo su mente nublada y un escalofrío recorrer su cuerpo, feliz por su liberación. 

Yoon-Gu jadeo sintiendose desfallecer, apretando una última vez para luego correrse junto al pelirrosa, completamente agotado.

—- ¿Una vez más si? —- preguntó el pelirrosa pero no recibió respuesta del menor. 

Preocupado, lo volteó con delicadeza, para darse cuenta que el pelinegro se encontraba durmiendo, probablemente del cansancio. O quizás desmayado.

Continuará... 

Gracias por leer jajaj, tenemos gogog después de 15 capítulos, creo que hice esperar mucho xd. 

Por si no lo saben xd, cuando lleguemos a 10k de vistas y a 500 seguidores, habrá un especial de gogogo.