
🔥 23 🔥
25 de marzo, 2019
Ocho Hargreeves
—¿Te encuentras bien? —habló Cinco llamando mi atención.
Yo hasta hace unos momentos tenía la mirada perdida mientras vagaba en mis pensamientos pensando en cómo en tan pocos días podría ocurrir algo tan grave como el final del mundo. Por lo que sabía no había alguna amenaza entre los países, que sería lo más lógico de pensar pues normalmente las guerras son las que creadoras de grandes destrucciones. Mirando por la ventana todo lucía "normal", o al menos como lo recuerdo, claro había cambios físicos pero el ambiente se sentía igual.
Me giré a mirar a Cinco y asentí para luego regresar mi mirada a la ventana, quería encontrarle alguna razón lógica al porqué de un día para otro todo terminaría. Solté un suspiro mientras me reacomodaba en mi asiento para poder mirar con suma atención a mi acompañante, quería mirar todos sus gestos desde los pequeños para confirmar si en serio estaba conmigo o quizá el tener alucinaciones era también un efecto secundario de viajar con maletín averiado.
—¿Ahora no crees que tienes una mejor vista? —preguntó al sentir mi mirada sobre él.
—Pues... —dije bromeando y él frunció el ceño —. ¿Falta mucho?
Negó, asentí y lo miré el resto del camino, aunque ante esto una sonrisa se formó en su rostro. A los pocos minutos llegamos, al bajar del auto me fue inevitable soltar un bostezo pues ahora que el efecto de toda la cafeína ingerida se había ido comenzaba a sentirme exhausta. Fuimos hasta su cuarto y me senté en su cama.
—¿Y ahora qué sigue? —pregunté bostezando de nuevo.
— Debo ir con Klaus, espero pueda ser lo suficiente bueno para este trabajo —apretó los labios ligeramente mientras se quedaba pensando por un momento y me miró —. Si quieres duerme un poco, espero no tardar para poder convencerlo sin perder la paciencia.
Yo asentí y me recosté en su cama para estar con mayor comodidad ya que gracias a que tuve que dormir en un auto me dolía el cuello y no quería me doliera más. Acomode mi rostro en su almohada y sorpresivamente después de bastantes años aún olía a él por lo que continúe inundándome de su aroma hasta que caí dormida.
Narrador Omnisciente
—¿Cinco? ¿Ocho?
Preguntó Vanya al entrar a la academia, había ido a buscar a sus hermanos pues quedo extrañada al no verlos esa mañana cuando se suponía se habían quedado a dormir en su departamento.
—¿Están arriba? —volvió a preguntar comenzando a subir las escaleras.
Al llegar al respectivo piso de sus habitaciones primero por instinto se asomó en la habitación de su hermana, pero estaba vacía así que se asomó en la puerta justo frente al cuarto de Ocho correspondiendo a la habitación de Cinco y ahí los vio a ambos. La chica de ojos de colores estaba dormida profundamente en la cama mientras que el chico se encontraba mirando por la ventana, sintiéndose aliviada al saber que ambos se encontraban bien soltó un suspiro.
—Menos mal, me tenían preocupada —dijo entrando al cuarto.
—Perdón, nos fuimos sin despedirnos —le respondió girándose a mirarla.
—No, yo soy la que debería pedir perdón, Debí tomarte más en serio y... —hizo una pausa —. Creo que yo no supe como procesar lo que me decías, aún no puedo para ser franca.
—Tal vez no debes tomarme en serio —dijo comenzando a pasearse por el cuarto —. Tal vez lo que pasó no fue real, se sintió real pero no lo sé —se volvió a quedar quieto frente a su hermana —. Como dijiste, papá decía que viajar en el tiempo contaminaba la mente.
—Tal vez deberías hablar con otra persona sobre esto. Yo... —volvió a hace una pausa —. Conozco a una terapeuta, solía verla. Puedo darle tu información.
—Si, gracias, pero creo que necesito descansar. Llevo tiempo sin dormir como se debe y creo que Ocho también.
Ambos se giraron a mirar a la chica en la cama, estaba descansando plácidamente o eso parecía. Cinco sonrió al mirarla en paz, los únicos momentos donde podía mirarla tan tranquila era cuando dormía pues no era común verla así, normalmente sus emociones eran demasiado inestables y aunque tratara de no mostrarlo sus ojos la delataban.
—Ok —Vanya llamó su atención y comenzó a acercarse a la puerta, pero se detuvo en seco antes de eso —. Una cosa más —dijo girándose a mirar a Cinco —. Gracias.
—¿Por qué? —frunció el ceño levemente.
—Por regresarle ese brillo en la mirada —dijo tratando de parecer serena.
Él sonrió inconscientemente y Vanya se fue finalmente de ahí mirando el suelo. Cinco miro a Ocho y se acercó levemente a ella para sentarse a su lado en la cama, comenzó a acariciar su cabeza suavemente pensando en que era lo que soñaba. Mientras Cinco pensaba en lo que posiblemente podría estar soñando, lo que pasaba en la cabeza de la chica no era para nada lo que él creía.
En su cabeza se reproducía el sueño que llego a darle malas noches en su infancia, aquel donde entrenaba con alguien más y gracias a la fuerza de sus poderes combinados causaban una pequeña explosión. Después de aquella escena también pudo visualizar unas cuantas escenas más, una donde pudo ver a Klaus atado a una silla tratando de gritar, aunque una cinta en su boca lo impedía y estrellaba su cabeza contra una mesa, otra donde podía ver a su hermana Allison en el piso desangrándose de la garganta mientras ella estaba a su lado tratando de parar el sangrado con las manos y por último pudo ver como un rayo morado se unía a una fuerte luz blanca y celeste e impactaban contra la luna destruyéndola.
Gracias a todo lo que pasaba por su mente comenzó a afectar todo a su alrededor pues muchas cosas comenzaron a flotar asustando a Klaus, quien se había escondido en el armario desde que se escuchó que Vanya había llegado a la academia. Se alteró un poco al ver como algunas cosas dentro del ropero comenzaran a elevarse también, por lo que salió casi corriendo de este logrando hacer el suficiente ruido para despertar a Ocho y hacer que todos los objetos cayeran de golpe.
—Por un momento pensé que comenzaría a volar —dijo Klaus riendo un poco mientras Cinco se acercaba a él —. Pero dejando eso de lado, fue tan conmovedor todo eso de la familia, papá, tiempo, brillo. Wow.
—¡Cierra la boca! —le dijo Cinco acercándose a vigilar la puerta y luego acercarse de nuevo a su hermano —. Te oirá, Klaus.
—Me moje todo —habló el mencionado en un tono algo bajo.
—Pensé que Cinco te había dicho que fueras profesional —dijo Ocho somnolienta ya sentada en la cama, talló sus ojos y luego miró a Klaus —. No está mal pero no creo sea muy de su agrado, mira cómo te mira —agregó señalando a Cinco con la cabeza.
—Ésta —se señaló —, es mi mejor ropa.
Cinco soltó un suspiro ante eso mientras Ocho se ponía de pie y se acercaba a ellos ya que al fin había despertado completamente. Se sentía algo confundida por su sueño, pero trato de no darle mucha importancia y enfocarse en lo que ahora pasaba.
—Busquemos en el ropero de papá —dijo Cinco.
Ocho asintió estando de acuerdo y salieron de la habitación seguidos del más alto.
—Como quieras, mientras me pagues.
—Cuando el trabajo esté hecho.
—Okey, pero quiero aclarar los últimos detalles —ante las palabras de Klaus los tres se detuvieron en el pasillo —. Solo tengo que ir a ese lugar y fingir ser tu querido padre, ¿Correcto?
—Si, algo como eso —respondió Cinco.
—¿Cuál es la historia de fondo?
—¿Qué? ¿De qué estás hablando?
—¿Historia de fondo? —preguntó Ocho después que Cinco también cuestionara a Klaus.
—Digo, era muy joven cuando te tuve, como de dieciseises —contestó —. Joven y terriblemente perdido.
—Si, seguro...
—Tu madre, esa zorra, quien quiera que sea la conocí en... —hizo una pequeña pausa para pensar —. La disco, eso es. Recuérdalo —chasqueó los dedos —. Y para el sexo era asombrosa —dijo alargando la última "o".
—Que vistazo tan perturbador a eso que llamas tu cerebro —dijo Cinco y comenzó a bajar las escaleras.
—No me obligues a quitarte tu mesada —le respondió.
—A veces me preocupas hermanito, y con "a veces" me refiero a siempre —Ocho le dio un par de palmadas en el hombro a su hermano y siguió a Cinco por las escaleras.
—A todo esto —dijo Klaus comenzando a seguirlos —. ¿Ocho que será en esta misión?
—Mi novia —respondió Cinco, Klaus los miró pícaro y volvió a hablar.
—Bueno, eso no se aleja mucho de la realidad.
Después de no actualizar en dos semanas aquí estamos, estoy tratando de regular mis tiempos para actualizar y también cumplir con mis obligaciones pero mis ataques de ansiedad no cooperan, trato de darles lo que puedo.
Otra cosa, al paso al que voy siento que van a ser muuchos capítulos así que quería preguntarles que opinaban si los hacia un poco más largos para que puedan ser menos, no sé que opinen pero me gustaría saber su opinión. Además se viene un maratón soo les pido escojan rápido js.
Si gustan alguna dedicatoria no duden en comentarlo aquí, con todo gusto lo haré.
No se olviden de seguirme en mis redes sociales que están disponibles en mi Linktree (link en bio), perdonen las faltas de ortografía y recuerden que los amoooo. 🤍
- E
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro