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18 de Agosto, 2022
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Queridos alumnos en general, el teatro Hands Heiwa, se complace en invitarlos a las audiciones para la obra "La bella y la bestia". Esperamos contar con su participación, los cupos son limitados y recuerden que esta actividad ofrecerá puntos extras a los que decidan participar.
Fecha de inscripciones: 10 de septiembre.
Personajes limitados: 20
Lugar: teatro del Instituto.
Día de la audición: 15 de Septiembre.
Nota: Los guiones estarán disponibles desde el 11 de septiembre.
Los esperamos.
Atte: directores del Teatro.
El primer aviso del año fue colocado en el patio central del instituto Heiwa, a disposición de todos los alumnos, aún quedaba un mes para comenzar con las audiciones, pero la emoción en algunos ya era evidente. Entre murmullos desviaron su camino hacia la cafetería, listos para el refrigerio. Hyunsuk y sus amigos ingresaron al lugar, rumbo hacia la mesa libre que era suya como de costumbre, mientras platicaban sobre quiénes audicionarían para la obra.
Los más emocionados eran, Junkyu; el chico más alegre del grupo, Jaehyuk; el más considerado y Jeongwoo; el mejor amigo de todos. Pero no imaginaron que Yoshinori; el japonés, también se uniría, él no era un chico de hablar o actuar en público.
—¡Enserio! —exclamó Junkyu con exageración—. Yoshi, ¿estás bien? —continuó y tocó su frente.
—Si —respondió él con gracia.
—Realmente nos sorprende hyung —habló Jeongwoo, mientras tomaba asiento.
—Quiero intentarlo —dijo Yoshi no muy convencido. Tenía razón en estarlo, aún sentía mucha inseguridad al tomar una decisión.
—Te apoyaremos, tranquilo —Hyunsuk palmeó su hombro con una sonrisa, mientras lo animaba.
—¡Ay! ¡Estoy emocionado! —exclamó Jaehyuk con cierta felicidad muy evidente en sus acciones. Esta era una de esas situaciones donde disfrutaría más momentos juntos a sus amigos.
—¡Y yo estoy hambriento! —se quejó el menor del grupo, Junghwan.
Rieron en conjunto, y después de tan grata conversación, comenzaron a elegir su merienda, mientras esperaban al resto de sus amigos que estaban en otro salón. Si, lamentablemente debido a las pocas vacantes que había al momento de la matrícula no pudieron estar todos en un mismo salón, lo que los separó en dos grupos.
Luego de unos cortísimos minutos, aparecieron los chicos del aula H-1: Jihoon, Haruto, Asahi, Yedam, Doyoung y Mashiho, quienes ingresaban a la cafetería, uniéndose a los que llegaron primero. Listos para comer juntos y charlar de lo que sucedió en las primeras horas, se integraron con mucha facilidad.
—¿Ya leyeron el anuncio del teatro? —preguntó Yedam, acomodando su silla.
—Si —respondió Junkyu—. Yo, Jaehyuk, Jeongwoo y Yoshi audicionaremos —continuó, y le dio un mordisco a su hamburguesa.
—¿Yoshi? —preguntafon los 6 chicos al mismo tiempo, muy sorprendidos.
¿Qué tan malo era que Yoshinori audicione a una obra de teatro?
—Así como lo oyes —dijo Hyunsuk.
Todas las miradas fueron hacia el japonés mencionado, tenían que escucharlo para comprobarlo.
—No me miren así —se quejó Yoshi mientras intentaba abrir un refresco—. No es gran cosa.
—Si lo es, porque no es algo que llame mucho tu atención. Estoy sorprendido —habló Jihoon tomando asiento.
—Y de ustedes, ¿quiénes están interesados? —preguntó Jaehyuk, mirando a sus amigos que recién llegaron.
—Yo audicionaré —dijo Mashiho sorprendiendo a todos nuevamente.
El silencio se convirtió en risas, realmente estaban conociendo nuevas facetas de sus amigos.
—Jihoon hyung, ¿no audicionarás? —preguntó Jeongwoo.
—No lo creo. Tengo un buen promedio, no lo necesitaré. —Sonrió orgulloso del buen estudiante que era.
—Hablando de promedios, creo que yo sí necesitaré esos puntos extras —dijo Haruto con cierto temor, causando que las risas en el grupo se multiplicaran, generando un ambiente más cálido para todos.
Los doce chicos eran inseparables, tenían muchas cosas en común, y una de ellas es la música y el arte. Gracias a esa relación, formaron una banda musical llamada Treasure, que se convirtió en la más famosa del instituto desde su fundación hace unos meses, algo que lo consiguieron gracias a su esfuerzo. Y aquellas sonrisas que tenían, expresaban con sinceridad que realmente se querían como una familia, como verdaderos hermanos.
Ser compañeros desde la secundaria ayudó a fortalecer su amistad, y más aún cuando conocieron a los chicos de intercambio, aquellos cuatro japoneses que lograron ganarse su amistad, a pesar de lo difícil que fue al inicio.
No faltaba mucho para que el refrigerio termine, debían de apresurarse, a nadie le gustaba llegar tarde a clases y ser castigado, bueno, para Asahi eso era muy común, pero sus amigos no lo dejarían salirse con la suya esta vez.
El timbre sonó.
—Vamos chicos, volvamos a clases —dijo el mayor de todos, Hyunsuk, con su característico tono de madre.
Todos asintieron y empezaron a desplazarse. El grupo de Jihoon se dirigió hacia otro rumbo, por lo que tuvieron que despedirse rápidamente de sus amigos que iban para el aula H, no sin antes recordarles que almorzarían juntos.
—¡Adiós! —se despidió Junkyu del grupo que iba corriendo por los pasillos, mientras movía su mano.
Hyunsuk abrazó a su amigo mientras reía un poco, era demasiada felicidad contagiosa para él. Juntos comenzaron a caminar hacia su respectiva aula, que se encontraba en otro lugar.
—Será mejor que corramos o no llegaremos —dijo Jeongwoo comenzando a correr por el pasillo.
—Tengo que ir a un lugar primero —soltó Yoshinori de repente—, es importante.—Comenzó a alejarse de sus amigos.
—Pero llegarás tarde —gritó Junkyu.
—No lo haré. —Respondió seguro con una sonrisa, desapareciendo por una esquina.
—Bueno —susurró Hyunsuk no muy convencido—, sigamos —continuó su camino junto a sus amigos.
Después de tres minutos por fin habían llegado a su salón, y estaban agradecidos de que el profesor aún no llegó, eso era bueno para Yoshinori también, quien todavía no aparecía.
—Yoshi, Yoshi —cantaba Junkyu jugando con Junghwan, como si fueran niños.
—¿Tienen alguna idea de a dónde fue? —preguntó Hyunsuk.
—Ni idea —respondió Jeongwoo muy pensativo.
En la entrada del colegio, una nueva alumna ingresó.
Lee Ji Hyeon, es una joven diferente a la mayoría de estudiantes de su edad, aunque solo en algunos aspectos. Tenía ciertas habilidades que la hacían especial, pero también debilidades que prefería no mostrar. Aprendió a ser alguien completamente diferente gracias a su pasado, todas las experiencias vividas nadie las borraría, es por esa razón que la transformaron en la chica que es ahora; siempre tratando de ser valiente, y que en cuestión de segundos te dejaría sorprendido con el arte de sus manos.
Arregló el dobladillo de su falda y quitó algunas pelusas. Sujetó fuertemente su pequeña mochila y comenzó a caminar. Ser la alumna nueva no era de su agrado, pero esta no era la primera vez que se transfería de instituto.
Era su nuevo inicio.
Ingresó al instituto con muchos pensamientos, los nervios empezaban a apoderarse de ella, pero debía de mantenerse firme si quería sobrevivir hasta la hora de almuerzo, como le recomendó su tía Jessi.
—¿Puedo ir a los servicios higiénicos? —le preguntó, Jessi era la psicóloga del instituto.
—Claro cariño, de frente a la izquierda.
—Gracias. —respondió Hyeon.
Mientras caminaba, miró el lugar con mayor detenimiento, el instituto era muy grande, moderno y claro en cuanto a los colores de las paredes. Esos detalles podrían facilitar a que olvide ciertos recuerdos que en su momento fueron su tormento, aquel colegio donde conoció el verdadero dolor. Pero también había otra razón que le brindaba más tranquilidad, su buena estabilidad económica ahora, así que nadie podría burlarse de ella en ese aspecto. Aunque eso no era importante.
Todos los pasillos estaban en silencio, eso significa que los estudiantes están en clases. Con cuidado y tratando de no hacer ruido siguió su camino, en busca de los servicios higiénicos.
"De frente, a la izquierda."
Recordó las palabras de su tía. Siguió su camino de frente hasta llegar a una esquina, giró para el lado izquierdo, pero al hacerlo se detuvo de inmediato, luego de percatarse que alguien venía en dirección contraria, rápidamente tomó distancia y se disculpó con una reverencia, al ver el rostro de esa persona, sintió que caía en un pozo sin fin.
Sabía quién era, no quería pronunciar su nombre, ni siquiera pensarlo, pero las palabras salieron por si solas. Como si hubieran esperado ese momento desde hace tiempo.
—Yoshinori.
Pronunció en un susurro, tratando de calmar su respiración. Una presión dolorosa apareció en su interior, había escapado tanto de los recuerdos tormentosos que provocaba ese chico, y ahora con solo verlo no sabía que hacer, solo quería esconderse para siempre. Eso no era nada bueno.
—Ji Hyeon.
Dijo el japonés mirando con sorpresa y detenimiento a la chica. Verla de nuevo no era lo que tenía planeado, pero era demasiado tarde para retroceder, aquellos recuerdos junto a ella pasaron por su mente como un huracán, y sin medir lo que pasaba en su interior, un mar de sentimientos del pasado, se desarrolló en ese momento.
Eso apenas comenzaba.
Esta es una historia muy versátil, cuando menos se lo esperen, los papeles pueden cambiar, y a quien amaban, pueden llegar a odiar. ¿Eso sonó bonito creo? Jsjsjs
Gracias por haber llegado hasta aquí, y espero que sigan la historia, porque no se imaginan todo lo que se viene.
¿Les gustó esta primera interacción de los protagonistas principales? Jsjsjs, lo leo.
💛~
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