𝐗𝐋𝐕𝐈𝐈𝐈
La guerra estaba cerca, estaba a nada de suceder, Rhaena se había encargado de entregarle a los adultos el intercomunicador para que Scarlett fuera quien les informara todo
Esa tarde todos volaron en diferentes direcciones, Neteyam, Jake y Lo'Ak volaron hacia los bosques como Toruk Makto lo prometió, todos los clanes de esa zona sabían que era hora de reunirse y volaron junto a Neteyam en camino a el arrecife, los Metkayina estaban dispuestos a cooperar también, la guerra los involucraba
-¿Aún no llega?- Kiri se colocó a un lado de Rhaena, admirando los detalles de su vestimenta
-Aún no... ya es de noche debieron haber llegado desde hace rato- Rhaena miraba el cielo estrellado, mirando por ratos a sus dragones quienes descansaban, sería un día largo cuando amaneciera
-Tranquila, mi hermano siempre vuelve, es su mayor virtud
Un rugido se escuchó con fuerza, Rhaena sonrió al reconocerlo, en la cabeza del vuelo iba Neteyam junto a su padre y hermano, sus dos seguido por todo un batallón de Omaticayas
-Te lo dije, y ahora Romeo bajará para ver a su amada
-Kiri...
-No miento
-Mi hermano debe estar solo haciendo... nada
-Esa es una forma efectiva para hacer que me vaya pero no lo haré aún
Ambas amigas rieron a la par, todos por alguna razón estaban más tranquilos, había Metkayinas, Ghiscarinas y ahora Omaticayas reunidos, muchas cosas podrían pasar pero el ambiente tranquilo hacía que Rhaena se sintiera más confiada de lo que pasaría
Neteyam aterrizó frente a ella, aunque no bajó de Toruk, en cambio le extendió la mano a la humana para que la tomara
-¿Aceptas un paseo? ¿O solo puedes viajar en dragón?- Neteyam le dedicaba una de aquellas sonrisas que volvían loca a su novia
-Solo si prometes que no me caeré
-Sería un idiota si permitiera que te cayeras
Rhaena le dio una última mirada a su mejor amiga quien intentaba aguantarse la risa, le parecía divertido el nivel de romántico que Neteyam podía ser cuando estaba con Rhaena, pero era él mismo que ella tomaba cuando estaba con Spider
Rhaena se colocó frente a Neteyam, quien abrazaba su pequeña cintura sin pena alguna, quería pasar tiempo a solas con ella antes del amanecer, querían ser adolescentes por un rato
Se alejaron de la isla Metkayina, volaron por los cielos con sonrisas en sus rostros, Rhaena observaba las estrellas y Neteyam la miraba a ella, no pasó mucho para que llegaran a un lugar apartado, una pequeña cueva que en su interior estaba llena de fauna hermosa y agua
-¿Donde estamos?- Rhaena pregunto mientras descendían justo en la entrada
-Un lugar secreto, te gustará
Lo'Ak fue quien le enseñó este lugar, una cueva cercana a la que él y Tsireya solían ir juntos cuando querían estar lejos de los demás, su lugar secreto, y ahora aquella hermosa cueva sería el lugar de Neteyam y Rhaena
Rhaena no pudo evitar sonreír al sentir el agua bajo sus pies, poco le importaba que el vestido se mojara, ella siempre fue así, una amante de la naturaleza en su totalidad, le gustaba vivir y convivir con ella
En el suelo de la cueva habían pequeños cuencos con pintura, una pequeña fogata y flores a su alrededor, Rhaena lo consideraba como su primera cita romántica
-Es común que en la guerra pintar nuestros rostros con los colores de nuestros Ikran, creí que sería bueno hacerlo juntos
Neteyam tomó su mano, dirigiéndola por el agua hasta llegar a la roca sólida para poder sentarse uno frente al otro, las leves flamas de la fogata iluminaba sus rostros sonrientes, Rhaena paseaba su mirada riendo nerviosa por la intensa mirada que Neteyam tenía sobre ella
"Tú eres música
La más bella melodía
Y quiero que bien te lo creas
Porque es verdad, vida mia
Haría por ti muchas cosas"
-¿Crees que ganemos?- Rhaena tomó el naranja para poder tomar un poco del líquido y comenzarlo a colocar en el rostro de su pareja
-Tenemos más de 20 clanes, tres dragones y a Toruk... sería imposible que no lo hiciéramos
"Que eres un rayito de sol por las mañanas
Al cual nunca pierdo de vista
Me iluminas el alma Y eres motivo de mejores poesías"
Rhaena pasó sus dedos en el rostro de Neteyam, dejando lineas naranjas similares a las de Toruk, tomando así el color negro para acomplejarse los colores de aquel feroz animal
-No quiero morir Neteyam- Rhaena confesó con miedo, dejando las cosas a un lado para poder mirarlo
-No lo harás, jamás dejaría que alguien te hiciera daño, estaré a tu lado todo el tiempo... nadie morirá, lo prometo pero necesito que seas más fuerte... de corazón fuerte- Neteyam imitó las palabras que su padre solía decirle a su madre en situaciones desesperadas
"Te digo para que creas Que de verdad lucho por lo nuestro Y que siempre estaré ahí
Porque de esto se trata el amor
Quiero que siempre confíes en mí
Porque hoy en día, tuyo es mi corazón"
-No creo poder serlo, ¿qué tipo de guerrera soy si le tengo miedo a la muerte?
-Todos lo tenemos y eso nos hace fuertes
Neteyam tomó una de las manos de Rhaena, pintando la palma de esta con un azul celeste similar al de sus ojos, Rhaena simplemente lo miraba descifrando qué haría, hasta que Neteyam llevó su mano hasta su pecho, marchando la palma de Rhaena en el, una forma de sentirla más cerca a la guerra
-Quiero hacerte una promesa Rhaena- Neteyam ahora tomó su turno y comenzó a pasar la pintura blanca por el rostro de la chica, haciendo líneas finas con el color de su dragón, Nymeria
-¿Que promesa?- Rhaena sólo podía ver cómo Neteyam tomaba el azul y el negro, asimilándolos con el resto de sus dragones, coda que le pareció maravillosa
-Cuando todo esto termine... seremos solo nosotros dos, no más guerra... quiero formar un futuro contigo Rhaena, te he amado desde que tengo uso de razón... yo soy tuyo como tú eres mía, desde este día hasta el final de mis días
-Mi respuesta siempre será si, tú y yo estamos destinados a estar juntos, dos corazones de fuego que arden en la misma llama, todo lo que quiero es estar contigo toda mi vida, Neteyam Sully
"Como tú eres la Luna de su vida, él será tu Sol y Estrellas. Tu amor estará tan presente como esos dos cuerpos celestes... aunque a veces estén ocultos a la vista del otro. Tu amor será la fuerza guía que trazará el curso de tu mañana, mantendrá unido a tu mundo en tiempos difíciles y hará que la vida misma brille más audaz y brillante de lo que los seres humanos tenemos derecho a soñar"
Él amanecer no tardo en salir, anunciando que el gran día había llegado
La RDA voló a primera hora hacia el arrecife,llevando a todos sus soldados disponibles, naves y armas para poder lograr su cometido, buscando algún clan débil para poder atacar y llamar la atención de su objetivo
Scarlett Meyer estaba pendiente a cualquier movimiento, era discreta en lo que hacía y sabía que sería más difícil de lo que creía comunicarse con Rhaena y su familia
La RDA no tardó en conseguir a sus victimas, era un clan pequeño, quienes no les dieron demasiada pelea, dispararon a sus animales y dejaron que algunos huyeran, para así esperar a Jake Sully y su ejército
-¿Rhaena? ¿Alguien?- Scarlett se había alejado de todos, fingiendo ir a buscar que nadie espiara para poder comunicarse con alguien
-Estamos en la isla más alejada del arrecife, es pequeña... están esperándolos
Esperar... la paciencia era algo fundamental para la vida, y ahora en la guerra, Jake fue informado por Atan'eko, era hora de volar y acabar con esto
El metal resonaba a la par de los pasos de Rhaena, Korra se había encargado de darle una armadura para que su seguridad fuera mayor, y dragón no aseguraba que salieras viva de la guerra
Para ser metal no era pesada, le permitía caminar con tranquilidad, pero dándole fuerza, un símbolo de tres dragones adornaba su pecho así como espacio para poder cargar su arco y flechas que Neytiri le había obsequiado cuando regresó
Spider ya se encontraba en el lomo de Nymeria, esperando a su hermana ya que ellos serían quienes estarían en la primera línea de defensa, al ser dragones sería difícil de matarlos
Rhaena tomó por última vez la mano de Neteyam, sentía su corazón golpear su pecho con fuerza pero tenía que avanzar, no podía dar media vuelta u correr fuera de el batallón, quien estaba reunido en la arena y el mar respectivamente
Subió por el ala de Diagon temblorosa, pero el dragón se mantenía tranquilo para que su jinete lo hiciera también, Tessarion volaría solo este día ya que Toruk Makto tenía que volar al frente también
-¡La gente del cielo no se va a redimir! Sabemos que son y que es lo que hacen, han atormentado a los clanes del bosque, destruyeron el hogar de los Omaticaya, extinguieron por unos años al clan Ghiscari e intentaron atacar al clan Metkayina- Rhaena habló en voz alta, mirando a todos a su alrededor, tenía miedo de perder a su familia, a Neteyam, a su hermano
-Es hora de que aprendan el mensaje, podrán torturarnos, matarnos o quitarnos todo lo que tenemos, pero ahora saben que el fuego se expande... ¡y si nosotros ardemos ellos arderán con nosotros!
Los gritos de euforia le dieron el valor necesario para volar, los tres dragones rugieron a la par que el resto de animales, Diagon fue el primero en despegar, siendo seguido por Nymeria y Tessarion, Neteyam voló en la cabeza de los clanes del bosque junto a su madre, siendo seguido por Atan'eko y el clan Ghiscari, en el mar, Tonowari encabezaba a su clan junto a Ronal, detrás de él iban Jake y Lo'Ak, todos con un objetivo en mente, acabar con una guerra que los atormentaba desde hace años
"Guerra ha de haber mientras tengamos que defendernos de la maldad de un poder destructor que nos devoraría a todos; pero yo no amo la espada porque tiene filo, ni la flecha porque vuela, ni al guerrero porque ha ganado la gloria. Sólo amo lo que ellos defienden"
-Han tardado, deberíamos de ir detrás de ellos- Lyle hablo desesperado, llevaban poco tiempo esperando, en fila, algunos buscando cosas o Na'Vi, cualquiera era bueno
-El plan sigue en pie, ya deben estar cerca... ¿verdad Scarlett?- Quartich miro a la rubia, quien se congeló al escuchar la pregunta, aferrándose al arma que portaba en sus manos
-Eso creo Coronel... dejamos ir a varios Na'Vi y...
-Por favor Scarlett, ¿acaso crees que no sabemos lo qué haces?
Scarlett intentaba no temblar de nuevo, no había posibilidad de pelear ya que eran miles de soldados con los ojos en ella, muchos de ellos con Avatares para pelear, y ella una simple mujer con un arma en sus manos que podía quedarse sin municiones en un parpadeo
-Que les dijeras nuestra ubicación y nuestros "planes" era parte de todo esto, dándote información alterada, y la ubicación de ahora era necesaria que la dieras linda, y ahora que lo hiciste no nos sirves de mucho... llévensela
No tuvo tiempo de pelear, Lyle y otro soldado la tomaron de los brazos, apenas pudo forcejear cuando la esposaron de espaldas, pero no había tiempo de dramas, a lo lejos comenzaron a escucharse algunos ruidos indistinguibles, que poco a poco comenzaron a ser claros, ruidos del agua chocando entre sí y gritos de guerra por parte de los clanes reunidos
-¡Vienen por ti! ¡Por todos ustedes malditos asesinos!- Scarlett intentó escapar pero los Avatares la sostenían con fuerza
-No tenemos tiempo para esto, ¡todos a sus puestos! Y llévensela a otra parte
Los soldados comenzaron a movilizarse, había soldados en la arena con sus armas apuntando al mar y cielo, había barcos alrededor de la pequeña isla la cual tenía un poco de fuego gracias a las amenazas que habían hecho hace un rato
-¡Apunten al cielo y al mar! ¡Maten a cualquiera que este sobre un Ikran, Ilu o incluso un dragón! Saben cual es la marca para comenzar a disparar, ¡todos listos! ¡Podemos vencerlos!
A su vista comenzó a ser más visible las pieles azules de diferentes tonos, dirigiéndose sobre el mar y el cielo, lo que más llamó la atención de Quartich fue ver al Sully primogénito sobre un gran Ikran, cayendo en cuenta de que ahora aquel joven era Toruk Makto como su padre alguna vez lo fue, su vista se paseó por todos lados al verlos y escucharlos cada vez más cerca, pero no encontraba a quienes eran sus hijos
-¿Donde están pequeños rubios?- Como si su pregunta fuera escuchada por el viento, del cielo se escuchó un rugido especial... tres rugidos especiales
De entre las nubes descendió un poco una gran bestia negra, detrás de él otras dos, una blanca y una azul... tres dragones, quienes impusieron el miedo que le faltaba a la RDA para que el miedo corriera por sus venas
Diagon voló encima de el mar, sobre los clanes del bosque y Ghiscari, siendo la primera línea de defensa, podía jurar que sentía el miedo de la RDA al ver a sus hijos acercarse con mayor rapidez y rugiendo a los primeros barcos que podían ser una amenaza para su gente
-¡Dracarys!- Rhaena gritó al sentir estar frente a frente con aquellos barcos, Diagon fue el primero el lanzar sus oscuras llamas, incendiando todo a su paso y logrando dar las primeras bajas representativas para la gente del cielo, Spider rodeó un poco con Nymeria, imitando la acción de su hermana, dejando un paso en medio libre para que los demás atacaran sin preocupación
De entre las llamas en el mar se asomaron los primeros Metkayina, Jake y Lo'Ak fueron los primeros en comenzar a disparar sin control a todo aquel humano que veían, pronto, desde los aires Neteyam y Neytiri comenzaron a lanzar flechas siendo seguidos por todos los clanes quienes furiosos atacaban sin control, siendo correspondidos por las armas de los soldados
Lanzas eran clavadas en los pechos de algunos soldados, así como algunas balas alcanzaban a los animales y a sus cazadores, todos peleaban por sus propias razones, pero solo un bando saldría victorioso
"Las personas no se dividen en buenos y malos, todos tenemos luz y oscuridad en nuestro corazón, lo importante es que parte decidimos potenciar"
Neteyam intentaba mantenerse cerca de Rhaena pero era difícil cuando luchabas por tu vida, esquivando balas y asesinando a quien se cruzara en tu mirada, aunque podía ver al gran dragón a lo lejos quien era conducido por su jinete a las orillas de la isla, quemando barcos como si fueran simples juguetes sin significado alguno, dándole una mayor ventaja a los Na'Vi quienes parecían que ganarían de nuevo
-Quiero a todos en las ballestas, derriben a esos dragones- Quartich volvió a ordenar, subiendo a su Ikran para poder disparar de vuelta hasta llegar a uno de los barcos que contenían la gran ballesta que ellos creían dignas para matar a un dragón, habían estudiado a cada animal de Pandora, llegando a conclusiones de que tan fuerte era la piel de dragón
Las flechas de acero apuntaban a los tres dragones quienes volaban en círculos e incendiando todo a su paso sin control, esperaron la orden y cuando fue dadá dispararon sin dudar
Rhaena fue rápida al ver la flecha ir por ella y Diagon, tuvo que inclinarse con rapidez hacia un lado esquivando con suerte la amenaza, mirando a su lado para asegurarse de que Tessarion, Nymeria y Spider estuvieran bien, siendo estos últimos casi heridos ya que la flecha logró rozar el estómago de la dragona, hiriéndola sin gravedad
-¡Rhaena detente!- Pudo escuchar los lejanos gritos de Neteyam y su familia, pero los ignoro
Rhaena sintió la ira apoderar su cuerpo, se sostuvo con fuerza de Diagon y comenzó a descender con rapidez, sacando su frustración en un gran grito, Diagon respondió a la furia de su madre lanzando sus llamas al frente, aunque tuvo que verse obligado a dar la vuelta gracias a que una lluvia de grandes flechas lo acecharon
Gracias a los barcos que habían estallado, la gasolina se había integrado por un momento al agua, llevando las llamas alrededor de todo el lugar, el eco de las armas era claro, los gritos eufóricos de los clanes también
Rhaena se detuvo por un momento en una roca observando todo, su cara tenía rastros de cenizas al igual que su cabello pero nada de eso le importaba, estaba enojada, quería acabar con todo en ese instante, su mirada se encontró con la de Quartich... su padre, quien la apuntaba sin dudar a lo que Diagon rugió como una amenaza
-No lo hagas Rhaena, no lo hagas sola- Neteyam estaba lejos de ella, pero pudo ver que estaba decidida a acabar con todo sin ayuda lo cual le preocupaba
Parecía que la victoria será de los Na'Vi pero no podían dejar a muchos vivos, y ahí estaba Rhaena, frustrada y enojada, sus ojos se habían cristalizado gracias a aquellos sentimientos, estaba mirando al padre que jamás podría tener, aquel que su sangre corría por sus venas también, aquel que nunca la amo
Un suspiro frustrado salió de sus labios antes de seguir su camino, Diagon se elevó levemente sobre el mar dirigiéndose hacia Quartich, quien sin dudarlo disparó al ver al dragón acercarse con rapidez, logrando darle en el pecho, una herida poco profunda pero que gracias al dolor, Diagon rugió
Rhaena tuvo que aferrarse a lo que pudo gracias a que el dragón comenzó a moverse inquieto, hasta llegar al punto de aterrizar con brusquedad en el barco que pensaba destruir, obligando a Quartich a moverse a un lado para no ser aplastado, en cambio gracias al impacto Rhaena cayó del dragón, llevándose varios golpes que incluso algunas partes de la vieja armadura se desprendieran de su cuerpo
-¡No!- Neteyam intento volar hacia ella pero lo rodearon en un parpadeo, estaba con su familia y tenía que luchar para salir vivo de ahí y poder ayudar a Rhaena
Rhaena con rapidez y adolorida se acercó a su hijo quien se removía incómodo, tuvo que tomar la gran flecha con sus manos intentando quitarla, era pesada y había logrado herir a Diagon, a sus espaldas, Quartich la apuntaba con silencio
-Tranquilo, todo estará bien- El susurro fue acompañado de un arma, Rhaena sabía bien de quién se trataba- ¡vuela Diagon! ¡Vete de aquí!- el dragón, aunque no quería hacerlo terminó desplegando sus alas y elevándose, ayudando a su madre a quitarse aquella flecha de su cuerpo y lograr escapar antes de que fuera asesinado
-Quartich
-Rhaena...
El cielo a sus espaldas era oscuro apesar de aún tener el sol en el, las llamas ardían por todos los lugares y la gente del cielo comenzaba a perder alguna esperanza para ganar, Rhaena contra apuntó a él Coronel, levantando su arco y flecha sin temor alguno
-Parece que perderás... de nuevo, ¿acaso no aprendes la lección?- Se vio obligada a moverse ya que Quartich intentaba acercarse, pero Rhaena también era lista
-¿Quien dice que hemos perdido? Los trajimos aquí, aún no caemos
-Aun, pero lo harán hoy y jamás volverán a pisar este planeta
-Eres tan patética... igual a tu madre
-¡No te atrevas a hablar de ella!- Rhaena gruño por instinto, no permitiría que profanara el nombre de su madre de esa forma
-Ambas tienen la misma idea de ser el héroe, ¿como resultó para ella Rhaena? Me he enterado que ha pasado a otra vida
-No tienes ningún derecho para mencionarla, ¡ni siquiera la amaste!
-Tu no sabes nada de mi antiguo yo, vamos niña, has vivido lo suficiente como para saber que los buenos mueren primero, ¿moriras también o enfrentarás la muerte? ¿O tienes miedo?
"Solo hay un dios, y su nombre es la Muerte
Y solo hay una cosa que le decimos a la Muerte:
Hoy no."
-No tengo miedo- Rhaena declaró, y no lo tenía, estaba enfadada, un sentimiento más peligroso que el miedo
Lanzó su primera flecha la cual terminó clavada en la pierna azul del Coronel, sus pies la condujeron con rapidez hacia el Avatar golpeando su rostro con el arco gracias a que aquel cuerpo se había inclinado por el dolor, quiso golpearlo de nuevo pero ahora él contraatacó, golpeando su pierna haciéndola caer con rapidez, golpeando su cabeza logrando aturdirla, cosa que Quartich aprovechó
Tomó su cuello y la levantó con fuerza, ya no era una niña para tratarla con delicadeza, la espalda de Rhaena fue estampada contra la pared cercana de el barco, comenzó a sentirse desesperada, el aire le faltaba y no había nadie quien pudiera ayudarla
-Eres débil, quieres salvar a todo el mundo pero en el fondo eres igual a mi
-Eso... no es verdad
-Claro que lo es, al final del día siempre serás la hija de tu padre, y no hablo del idiota de Michael, esto nunca hubiera pasado si te hubieras entregado hace tres años Rhaena
¿Hubiera sido diferente? ¿Acaso Quartich se hubiera redimido si tuviera a toda su familia en sus manos? Él hubiera no existe, porque solo es una posibilidad que se queda en el pasado
-¿Por qué?- Rhaena sollozo sin soltar la muñeca de Quartich quien comenzaba a aflojar su agarre, un hijo siempre es una debilidad
-¿Hubieras dejado todo?
-Hubo un tiempo en el que quise lo que Jake Sully tenía, poder, admiración... una familia
-Pudiste haberla tenido, pero preferiste vengarte
-Justo como lo haces tú ahora
-No... esto no es una venganza, es proteger lo que amo, a mi familia
-Yo soy tu padre Rhaena
-No, no lo eres, porque nunca te molestaste en quererme como un padre quiere a su hija
-Hubo un tiempo en el que lo hice... cuando ella estaba embarazada, pero él hubiera no existe Rhaena, ya no soy ese hombre, ahora soy mucho mejor
-Aún puedes tenerlo todo... pero tienes que dejar esto a un lado, por favor
-¿Acaso no lo entiendes? No hay retorno
Un movimiento en falso y sin pensar podía traer muchas consecuencias, Quartich estaba cegado de venganza, no le importaba pasar sobre la vida de sus primogénitos para poder lograrlo y lo había demostrado, el filo se clavó en el pecho de Rhaena con facilidad pero no hasta llegar al corazón
El cuerpo de Rhaena se debilitó al sentir el cuchillo en su pecho, no había sido fuerte, no había peleado lo suficiente para defenderse, su cuerpo dejó de responderle rápidamente debido a la cantidad de sangre que comenzó a salir de aquella zona y pudo sentir como la sangre comenzaba a inundar su boca
-Perdóname niña, tal vez en otra vida pudimos ser una familia
-¿Por qué? Aún así pude haberte perdonado... pudo ser diferente
-Tu necesitabas un padre, yo necesitaba un soldado... eso fue lo que nos decepcionó a ambos
Ambos ojos azules conectaron, había dolor, enojo, venganza, arrepentimiento en ellos, dos vidas diferentes pero que tenían mucho en común, dls vidas que poco a poco se apagaban, tal vez en otra vida Quartich pudo redimirse, ver crecer a sus hijos y amarlos
Una flecha atravesó el pecho de Quartich haciendo que soltara el cuerpo de su hija, la cual cayó en seco al suelo intentando detener el sangrado, lo cual era en vano, Quartich flaqueó gracias al dolor logrando girarse para poder encontrar a su cazador
-Spider...- la voz rota de él Coronel se escuchó al darse la vuelta y ver a aquel joven que tomó en su manto a la fuerza, aquel joven al que llegó a tomarle cariño
-Te lo dije una vez, si la tocas... te mataré yo mismo- Una nueva flecha se clavó ahora cerca de su corazón, logrando herirlo de gravedad y pronto terminando con su vida si así lo permitía
Spider sin dudarlo se acercó a su hermana, tomando su cabeza y colocando sus manos en su pecho sin remover la daga la cual permitía que no muriera desangrada
-Rhaena, ganamos... hemos ganado hermanita- Spider intentaba mantener a su hermana consiente, mirando a su alrededor pero los demás estaban ocupados terminando el trabajo, solo Nymeria y Diagon volaban hacia ellos
-Eso es... algo bueno- Rhaena susurro parpadeando con pesadez, ¿acaso así terminaría su vida? ¿Acaso eso era lo que Eywa tenía planeado para ella?- No quiero morir, aún no estoy lista
-Quedate conmigo ¿si? No vas a morir, tú no... no me dejes por favor
-Lo siento tanto Spider...
-Tu no te irás, no como mamá, siempre hemos sido nosotros dos, no te voy a perder a ti también
Las lágrimas salían de los ojos de Spider sin control, necesitaba ayuda y sabía exactamente donde llevarla, con cuidado la cargo, llevándola hacia Diagon quien al ver a su madre de nuevo tendida en el suelo intentó moverla con su hocico, llevándose absolutamente ningún movimiento de parte de ma chica, permitiéndose sentir de alguna manera la agonía de su madre, dos chillidos agudos lograron salir de los dragones
-Diagon, llévala a casa, llévala lo más rápido que puedas volar- No tuvo que repetirlo, tomó a Rhaena entre sus garras y con tristeza comenzó a volar hacia el Sur, lejos de todo el desastre que habían ocasionado siendo seguido por Nymeria y su jinete
Neteyam pudo divisar aquella huida a lo lejos, aunque nunca imaginó que pasaba exactamente, le había prometido a Rhaena estar a su lado, pero la guerra siempre te llevaba por caminos diferentes, peleando lado a lado con los demás y manteniéndote de pie por aquello que amabas
Rhaena creyó haber hecho lo correcto, y la habían apuñalado por eso
"Familia, Deber, Honor son aquellas palabras que el viento se llevó
Ya no queda nada solo dolor, sangre y desolación"
Capítulo bastante largo y doloroso para mi, solo tengo que decir dos cosas
1-Si quieren releer la última parte les recomiendo hacerlo con la canción "When It's Cold I'd Like to Die-Mobby"
2- La armadura de Rhaena
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