𝐋𝐈𝐈
2 𝘴𝘦𝘮𝘢𝘯𝘢𝘴 𝘥𝘦𝘴𝘱𝘶𝘦́𝘴
Rhaena pensaba que moriría, llevaba una casi una semana sin poder hacer nada, no porque no quisiera, cualquiera que la conociera sabía que Rhaena era un espíritu libre, brincando de árbol en árbol, corriendo por los bosques, cazando e incluso volando con sus dragones
Pero eso había cambiado, su estado de ánimo había descendido, incluso la luz del Sol la molestaba, lo único que la calmaba era Neteyam, quien al ser Olo'eyktan tenía más cosas que hacer, aunque muchas veces pedia quedarse con su amada, Rhaena se lo impedía
-Rhaena, ¿sigues aquí cariño?- La voz de Neytiri en un tono suave llamó su atención, logrando que levantara su cabeza para poder girar su rostro adormilado y sus cabellos dorados despeinados
-Tal vez, depende quien pregunte
-Mi niña, ¿cómo te sientes? Hablé con mi madre y vendrá a verte en unos minutos
-Siento como si me hubiera arrollado un auto, y ni siquiera sé qué es un auto en persona, es oficial, estoy enferma y moriré por eso
-Eres igual que tú padre, vamos arriba, hay muchas cosas que podamos hacer- Neytiri tomó su mano, tirando de esta pero sin lograr que su hija se levantara
-Prefiero ahogarme en mi saliva antes que pararme, no quiero hacer nada mamá, ese es el problema... o tal vez el problema sea yo, eso es mucho peor
-Tu estado no solo te está afectando a ti cielo
-¿Como están ellos?- Preguntó Rhaena preocupada por sus dragones, a quienes los había visto en la semana a escondidas de todos, pasando la tarde con ellos en las montañas sin que nadie los descubrieran, porque parecía ser que cualquier cosa que a Rhaena le pasara, sus dragones lo sentían
-Diagon es el más fuerte por ahora, pero han comido menos, Tessarion y Diagon volaron hoy en la mañana pero Nymeria no se siente mejor
-Parece que las mujeres nos entendemos más
-Tal vez, pero si sales un rato tal vez te haga bien, pero antes... el desayuno
Justo a tiempo, Tuk y Mo'At aparecieron, las mujeres de la familia Sully siempre han sido unidas y se apoyaban entre todas, más cuando una se enfermaba
-Rhae- Tuk se acercó a la mayor, recostándose a su lado mientras su madre y abuela preparaban los alimentos
-Tuk Tuk, dime ¿qué tan mal me veo?
-¿Quieres la verdad? Parece que te caíste de un Ikran y que el Ikran cayó sobre ti pero la buena noticia es que sigues siendo bonita
-Eres un encanto Tuktirey, ¿viste a Neteyam?
-Lo vi hace unas horas, salió a cazar con papá, me pidió que te acompañara
Rhaena sonrió con ternura, recargando su cabeza en el hombro de la menor, le ponía triste no sentirse capaz de ayudar al clan, a su gente, quería volar con sus dragones pero se sentía bastante mal, incluso había comenzado a vomitar el día anterior
-¿Podemos visitar a mis dragones? Después de eso prometo hacer cualquier cosa que me pidan- Pregunto Rhaena con timidez, mirando a las dos mujeres mayores frente a ella
-Que sea rápido, tienes que alimentarte- Mo'at hablo con la seriedad que la caracterizaba, Rhaena había aprendido a no temerle, Mo'At era una mujer con conocimiento, con un temperamento alto y dispuesta a tomar las riendas de los asuntos serios, algo que Rhaena admiraba
Rhaena se levantó con pesadez, su cuerpo le dolía en ciertas partes, lo relacionaba con las noches intensas que tenía con Neteyam, noches que ella amaba pero sus secuelas no mucho
Al sentir el aire en su rostro se sintió mejor, tenía que empezar a activarse o definitivamente morirá en su cama, camino de la mano con Tuk, ella podía ser ya más grande pero para Rhaena siempre sería aquella niña de 6 años que le pedía que le contara historias, era su hermana pequeña
Muchas veces se detuvo en el camino gracias a que muchas mujeres del clan se acercaban a ella deseándole buena salud y algunas solicitudes las cuales atendería una vez que estuviera bien
-¿Estás bien?- Tuk le pregunto al verla desconcertada
-Algo así, es extraño el cambio de todo
-Todos te aman Rhaena, y sabes que siempre estaremos a tu lado
Rhaena le dedicó una pequeña sonrisa a la menor de los Sully, sonrisa que creció al ver a sus tres dragones en la zona más despejada de los bosques, soltando a Tuk para caminar con rapidez hasta ellos, siendo Tessarion el primero en encontrarse con su madre
-Lo se, también los extraño- Rhaena susurro pegando su frente al gran hocico del animal, el cual parecía ronronear ante el toque cariñoso de su madre
Diagon asomó su cabeza por la espalda de su hermano, todos sabían que era el consentido de su madre y gracias a eso... el dragón era todo un mimado aunque Nymeria podría ganarle ese puesto, la dragona solo comía ganado, no cazaba por su cuenta un que fuera capaz y se negaba a volar en malas condiciones climáticas
-Han comido poco, quienes los alimentan tienen algo de miedo ya que Diagon amenazo en quemarlos
-¿Amenazo?
-Casi los quema, supongo que saco el temperamento de su madre- Mo'At hablo con seriedad, mirando a Rhaena con intensidad, parecía que la examinaba
-Podrán parecer aterradores, pero son bueno, son mis hijos... tal vez los únicos que tendré
-Tranquila Rhaena, aún es muy temprano para que digas eso
Rhaena suspiro, estaba consciente de que uno de sus sueños siempre sería tener una familia con Neteyam, pero tenía ser una mala madre, y su miedo incrementaba en el trauma de su madre
Se tuvo que hacer a un lado gracias a que alimentarían a sus hijos, pero lo malo llegó al ver como estos se devoraban lo que se les había entregado, el olor fétido de la carne la lleno de nauseas, incrementando el sentimiento al ver cómo la sangre salía y el alimento era despedazado
Sus piernas la llevaron más lejos, tuvo que encorvarse un poco para poder vomitar, no lo entendía, los había visto cazar innumerables veces, ella los acompañaba cuando lo hacían y ahora parecía que era la primera vez y le provocaba un vomito constante
-Por Eywa- Neytiri se acercó a auxiliar a su hija, palmeando su espalda con tranquilidad, mirando a la antigua Tsahik como si las sospechas que ambas tenían fueran aclaradas, Neytiri había hablado con ella debido a los cambios físicos y de salud que Rhaena tuvo
-Eso fue asqueroso- Rhaena murmuró con pesadez, pensó que su etapa de vomitar había terminado el mismo día que empezó
-Ven aquí niña
Mo'At la llamó sin dejar de mirar a Neytiri, quien ayudó a su hija a incorporarse y la llevó frente a Mo'At, quien comenzó a observarla de pies a cabeza, rodeando su eje con lentitud, la sorpresa incremento cuando las manos de Mo'At se posaron en sus caderas, tocando estás como si las midiera, subiendo por su vientre con tranquilidad hasta llegar a sus pechos
-Eso no fue nada lindo, digo, nunca pensé que los Omaticaya tuvieran ciertas... prácticas- Rhaena se asustó, retirándose de las manos de Mo'At logrando abrazar su cuerpo
-Tus pechos crecieron, tus caderas también, y tu vientre está más abultado
-Debe ser porque moriré pronto, he estado vomitando seguramente fue algún alimento o...
-U otra cosa- Mo'At se acercó por última vez a la chica, tomando sus manos como si sintiera algo, al final, cada Tsahik, ya sea nueva o anterior, habían sido líderes espirituales, interpretaban la voluntad de Eywa, de la propia naturaleza
-¿Que es lo que tengo?- Pregunto Rhaena preocupada, sintiendo como un nudo en su estómago creciera y su garganta se secará
-Estás embarazada
El corazón de Rhaena aumentó su ritmo, sintió sus piernas temblar pero se mantuvo firme, su mirada se encontró con la de Neytiri, pensando que era una broma para levantar sus ánimos, pero no lo era
-Están bromeando ¿cierto? Yo no estoy embarazada- su voz era tembolorsa, sus ojos comenzaban a cristalizarse pero sonreía como si de una broma se tratase
-Sabemos que tú y Neteyam han tenido relaciones, y está bien, son adultos
-Solo piénsalo, dices que has estado enferma desde hace ¿5 días?, comenzaste con dolores de cabeza y tu apetito aumento, después cambios de ánimo y no querías levantarte, hace un día comenzaste a vomitar, cuando hacemos carne eres la primera en irse del lugar y tu cuerpo comienza a prepararse para el proceso de embarazo
-No, pero él y yo nos hemos cuidado, siempre lo hacemos
-Norm nos contó que no son 100% seguro, es una probabilidad de 1 de 99
La mente de Rhaena comenzó a recordar, no estaba enferma porque Mo'At se había encargado de usar las plantas medicinales que Kiri le había obsequiado la última vez que se vieron, ella tenía otra cosa
-Oh Dios- no sabía cómo reaccionar, su miedo creció en un par de segundos, ¿que pasaría si tenía el mismo destino que su madre? ¿Que pasaría si alguien le arrebatara a su bebé? ¿O su vida?
Su mirada cayó en Nymeria, la cual se notaba incómoda entre cómo sus hermanos devoraban su comida, ella apenas había dado unos mordiscos y se había acostado en el pasto para descansar
Rhaena llevaba rato dando vueltas por todo su hogar, Neytiri y Tuk se habían quedado con ella todo el tiempo tratando de calmarla y cuidarla
-¿Que voy a hacer? Se que ya no soy una niña pero no creí que tendría un bebé tan pronto
-Debes tranquilizarte Rhaena
-No puedo, son muchas cosas, ¿que tal si soy una mala madre?- Rhaena se detuvo por un momento, su pecho subía y bajaba, sus cambios de estado de ánimo se habían disparado una vez que se enteró de lo que le dijeron
-Serás una excelente madre, nadie cuenta mejores historias que tú, fuiste la que más me cuido cuando era una bebé y sigo viva
-Tienes buenos puntos, pero es diferente cuidar a quien consideras tu hermanita a cuidar a tu propio bebé
Sus piernas volvieron a temblar, obligándola a sentarse en el suelo sollozando, estaba asustada de lo que podría pasar, todo había sucedido demasiado rápido
-No llores mi linda niña
-Tengo miedo, no quiero pasar por lo mismo que mi madre paso, ella peleo y aún así se la llevaron
-No tienes que temer, yo también fui joven cuando me embaracé de Neteyam, también tuve miedo pero entendí que tenía que hacer todo para proteger a mi bebé, cuidar de mi sangre, cuando él nació fue como ver el más puro amor renacer, después llegaste tu, no viniste de mi vientre pero te amé como si lo fueras... lo que quiero decir es que tú madre cuidará de ti, has sido bendecida y quiero apoyarte en todo lo que necesites
Neytiri aunque fuera ruda y de alto temperamento, era amorosa con sus hijos, protegiéndolos de cualquier peligro, queriéndolos de la única manera en la que una madre podía querer
-¿Como es que cuidaré de mi? ¿Cómo cuídate de un pequeño Na'Vi? ¡¿Como le dire a Neteyam que estoy embarazada?!
Un golpe en seco llamó la atención de las tres, Jake se encontraba en el umbral de la entrada, en un estado de shock, obligándolo a soltar las armas que traía en sus brazos
-¿Que tú estás que?- Jake soltó sorprendido, sus manos temblaban mientras se acercaba con rapidez a Rhaena
-Papá, ¿qué haces aquí?
-Rhaena contesta por favor- Jake la miraba de arriba a abajo, sus ojos se cristalizaron en cuestión de segundos
-Estoy embarazada, obviamente el padre es Neteyam
Rhaena por un momento espero algún regaño, algún suspiro preocupado o algo peor, pero en cambio Jake la abrazo con fuerza, tratando de no llorar por la noticia que había recibido, su hijo y la chica que había criado tendrían un primogénito
-¿Estás llorando?- Rhaena pregunto asustada al escuchar los pequeños sollozos que salían de los labios de Jake
-Claro que estoy llorando, ¿sabes lo feliz que me hace eso? Creo que voy a desmayarme... Dios has crecido demasiado, parece que hace sólo un segundo te llevaba sobre mis hombros para que tomaras flores de los árboles, mi pequeño dragón
Rhaena no soporto más y también comenzó a llorar, era más sensible a todo y que Jake estuviera orgulloso de ella la emocionaba, había hecho algo bien, muchas veces se peleaban al punto de no hablarse por dos dias o incluso una semana, y ahora había crecido, esas peleas eran recuerdos divertidos
-¿Neteyam ya lo sabe?
-Recién me he enterado yo, y repetirlo lo hace cada vez más real, ni siquiera sé cómo se lo dire
-Tengo una idea, será divertido lo prometo- Tuk se acercó con una sonrisa divertida, se había emocionado demasiado que había planeado en silencio él como decirlo al resto de la familia
Neteyam estaba desesperado, le habían notificado que habían visto en la mañana a Rhaena en mal estado, vomitando incluso, en el momento en el que le dijeron aquello, pero Jake lo detuvo prometiéndole que Neytiri estaba con su pareja
-Eso será todo por hoy, ahora si me disculpan tengo que ir con mi Tsahik, todos estamos enterados de su estado de salud así que espero comprenderán el porqué de mi urgencia- Neteyam miro a todos los Na'Vi que rodeaban la gran mesa, había logrado hacer un comité de los Omaticaya más fuertes e inteligentes, incluyendo a Tarsem y Jake
Sin más que decir, Neteyam salió con rapidez hacia su hogar, rezando a Eywa para que su Tsahik estuviera bien, su sorpresa fue grande al verla sonriente y caminando con cosas en sus brazos, con la vestimenta que solía usar cuando montaba sus dragones
-Ma Teyam- Rhaena sonrió al verlo mientras jugaba con sus guantes, disimulando los nervios que sentía
-Mi hermosa Tsahik, me enteré de lo qué pasó, lamento no haber corrido hacia ti- Neteyam se acercó a la rubia, tomando sus mejillas y besando sus labios con preocupación
-Tranquilo, estoy bien, mamá me cuido y Mo'at me dio algunas cosas extrañas, me siento mejor
-Eso es bueno, ahora podrás descansar y salir como te gustaba
-Hablando de salir, ¿que te parece volar esta noche? Hay estrellas brillantes y hace mucho que no volamos juntos, ¿que dices?
-Siempre dire que si a lo que me pidas Rhae
Rhaena tomó acción, tomando la mano de Neteyam y corriendo entre los árboles entre risas, cada que hacían aquello sentían que volvían a ser aquellos jóvenes de 15 años que se escapaban de sus hermanos para poder visitar el árbol de las almas
-He extrañado a Tessarion también- Semanas después de la guerra, Toruk había emprendido un nuevo vuelo como un animal libre, se sabía que Toruk llegaba al guerrero indicado cuando la guerra estaba cerca, y ahora no había guerra, pero había dejado a Neteyam con el título de Toruk Makto
Rhaena subió con facilidad hacia la espalda de Diagon, quien aceptó a su jinete con felicidad, Neteyam imitó la acción de Rhaena en Tessarion, preguntándose él porque Nymeria no iría
-¿Nymeria se quedará?
-Tiene que descansar, tiene... un proceso algo complicado eso creo
-Extraña a Spider ¿no?
-Lo extraña, le gusta volar sola pero lo extraña, en unos meses irá a Ghiscari, por ahora intenta alcanzarme
Rhaena dio unas palmadas en el lomo del dragón indicándole que comenzara a activarse, Diagon respondió sin dudar al comenzar a caminar en grandes pasos para después desplegar sus alas rojas y comenzar a volar por el cielo nocturno, siendo seguido por Tessarion
Neteyam intentaba alcanzar a Rhaena, como si de un juego se tratara, adelantándose por un momento ya que Diagon procuraba más su vuelo ahora con la condición de su jinete
-Vamos muchacho, podemos hacer esto- Neteyam, emocionado, le ordenó al dragón escupir fuego en el cielo, pasando por debajo de este para poder ver a sus espaldas
Rhaena sin dudarlo atravesó en fuego con una sonrisa, saliendo de las llamas ilesa y con una mirada orgullosa, alcanzando a Neteyam para poder hablarle
-¿Es lo mejor que tienes?
-Admite que fue divertido linda
-Lo fue, lástima que para ti, tu novia es un dragón... baja un momento, quiero descansar
Confundido, Neteyam accedió, Rhaena no se cansaba fácil, podía pasar toda una tarde en los cielos y regresar sin una pizca de cansancio, pensando qué tal vez su malestar había afectado en ello
-Mira eso, la noche es más brillante hoy- Rhaena se detuvo un momento, respirando hondo mientras jugaba con el collar que Neteyam le había obsequiado en su cumpleaños
-Tienes toda la razón, mi abuela dice que eso sucede cuando Eywa tiene grandes bendiciones, dejando eso a un lado, ¿estás bien? Te noto cansada
-Lo estoy, pero es más cansado volar estando embarazada- Rhaena confesó, esperando cualquier reacción de Neteyam
-Es razonable, sueles sentirte mal por mucho tiempo o eso me han contado- Hablo Neteyam distraído, mirando a su novia hasta que cayó en cuenta de la noticia, sus orejas se bajaron y su cola también-¿estás embarazada?
-Estoy embarazada
Una gran sonrisa se posó en el rostro de Neteyam, sus ojos brillaron a la par que su cola se movía de un lado a otro de felicidad, acortando la distancia entre él y Rhaena besando sus labios con furor, tomando su cintura para levantarla del suelo y girar sobre su propio eje con felicidad
-¿Como? ¿Cuando te enteraste?- pregunto el Omaticaya emocionado, acariciando el rostro de Rhaena una vez que la bajo
-Hoy me enteré, por eso he estado diferente y él como pasó, creo que eso lo recordamos muy bien tú y yo
-Es bueno recordarlo mi hermosa Tsahik- Un suspiro alegre salió de los labios de Neteyam, pegando su frente con la de Rhaena, estaba feliz, había soñado muchas veces con ese momento que ahora parecía irreal
-¿Estás feliz?
-Claro que lo estoy, es la mejor noticia del mundo, tendremos un mini tu o mini yo, te prometo que lo amaré, los cuidare a ambos con mi vida, gracias mi amor, solo tú puedes traerme la felicidad propia cada día que te veo
Una gran noticia, pronto el clan completo se enteraría que el Olo'eyktan y la Tsahik tendrían a su primogénito, el cual sería amado y respetado por todos, un primogénito que tendría el poder que nadie antes tuvo
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