Yoongi y su lobo se sentían más tranquilos, ahora que veían al omega durmiendo en su cama. Su mejilla se encontraba levemente rosada, había colocado un poco de su saliva, para ayudarlo con la sanación.

–Yoongi –lo escucho murmurar.

Se acercó a él, tomándo asiento en su costado. Vio al omega removerse y abrir los ojos.

–Jimin, aquí estoy, cielo. –le dijo tomando una mano del omega.

–¡Yoongi!– rápidamente el omega lo rodeo con sus brazos, inhalando con necesidad su aroma a Chocolate y Menta.

–Esta bien, Cielo. Todo está bien ahora.

–¿Ya no volverá?

–Claro que no, cielo. –confirmo acariciando la espalda del omega. –Perdón, por llegar tarde.

El pelirosa se alejó.

–No, yo lo siento. Fue por mi culpa, fui descuidado. –hablo con la mirada baja.

Yoongi sintió a su lobo aullar en angustia. Tomó el rostro del omega, quien lo observo con los ojos llorosos.

–Escúchame Jimin, no es tu culpa. Esto no será jamás tu culpa. ¿Entiendes? Solo hay gente podrida en el mundo. –Jimin asintió –Me alegra que estés bien, si algo malo te hubiera pasado, habría sido difícil seguir viviendo. –Acarició sus mejillas.

–No digas algo como eso, debes vivir aún cuando no este. –Acarició la mano que se encontraba en su mejilla.

Yoongi sonrió.

–El mundo sería horrible si no estas en él, ¿Sabes? No me imagino como seria mi vida si no te hubiera conocido, seria tan monótona y no tendría la dicha de sentir el delicioso aroma a cerezas y Jazmines que tienes, me quedaría solo toda la vida.

Jimin se sintió avergonzado.

– Yoongi, se que luego de lo que paso, es algo extraño que diga algo como esto. –Tomó la mano del Alfa– Incluso en ese situación solo podía pensar en tí, te llamaba solo a tí. Por lo tanto déjame decirte que me gustas mucho.

–¿Quieres decir que aceptaras mi corazón?

El pelirosa sonrio.

–¿Tú me aceptas a mí? Yo me declare primero

Yoongi soltó una carcajada.

–Que importa. Ambos nos gustamos, no importa quién se confesó primero.

El Alfa se acercó a sus labios para dejar un pequeño beso, pero enredó sus brazos alrededor de su cuello para que no se alejara de él. Luego de varios minutos ambos se separaron por la falta de aire.

–También, tengo algo que decirte es sobre Giyoon. Yo... es que...

El rubio beso la punta de su nariz.

–Lo sé –susurró, perdido en los ojos violetas del omega.

–¿Como lo supiste?

–Desde que los vi en el hospital.

Jimin se sintió tonto, el Alfa ya sabía de ello.

–Lo siento, traté de ocultarlo. Siempre evité pensar en tí como ayuda para Giyoon.

–No, yo lamento no haberte buscado con más insistencia. Pero ahora, los tengo a ambos. Así que Jimin –Tomó sus rostro– ¿Te gustaría salir conmigo, sabiendo que es bajo la premisa de una boda?

Jimin sintió sus mejillas calentarse y su lobo revolotear dentro de él, con una gran sonrisa, abrazo al Alfa.

–¡Sí, Yoongi! ¡Me encantaría!

Cepillo su nariz contra la del Alfa.

–Quiero que me tomes –susurró.

–¿Seguro?

Jimin le sonrió y asintió. Subió sobre el Alfa y comenzó a mover su cadera. Las manos del Alfa rodearon su cintura, mientras soltaba un suspiro extasiado.

–Quiero que borres las huellas que ese hombre dejó en mi cuerpo. Haz que olvide todo Alfa –pidio.

Yoongi gruñó y se apoderó de sus labios, iniciando un beso poderoso que hizo que el omega temblará. El Alfa lo recostó suavemente sobre la cama y se alejó dejando una mordida en el labio inferior del omega.

Bajo a por su mandíbula y llego a su cuello dejando leves mordidas y chupones  en él. Comenzó a desnudar a omega, tomándose el tiempo de besar y chupar todo a su paso, adorandolo y memorizando cada parte de su cuerpo.

Jimin murmuró extasiado el nombre del Alfa cuando una de sus falanges se abrió paso en su entrada. Los gemidos subieron de intensidad al tener tres de estos y su boca tomar sus pezones.

–Yoongi, Ahg

Gimió fuerte cuando el Alfa fingió una embestida contra su entrada. La punta se encontraba bañada con presemen, que se mezclo leventemente con el lubricante.

–Entraré omega.

El omega asintió y el Alfa se adentro a él con suavidad, soltó un gruñido al sentir la sedosa carne rodearlo, la entrada lo apretaba tan bien. Espero varios minutos a que se acostumbrara.

–Alfa –gimió el omega.

El mencionado comenzó con la embestidas, mientras devoraba la boca del omega, quien jalaba del cabello del Alfa.

Yoongi tomó las piernas de Jimin abriéndolas un poco más. Soltó un gemido fascinado al ver su miembro ser devorado por la pequeña entrada del omega.

–Me vendría con solo ver esto –gruñó y aceleró las embestidas.

El choque de sus cuerpos y de la cama contra la pared, llenaron l habitación, además de los gemidos y gruñidos.

El Alfa salía y entraba con brusquedad, Jimin no era capaz de pedir más, porque el Alfa le estaba dando todo y más de lo que podía aguantar, sus ojos se nublaron y soltó un grito cuando el Alfa, tocó su punto.

–Agh, estas tan profundo~ –gimió cuando el Alfa levanto más sus caderas.

Yoongi sonrió y entrelazo sus manos con los del omega. Junto sus frentes sudorosas y abrió su boca soltando jadeos extasiados, gruñó cuando Jimin mordisqueo sus labios. Jimin chupaba y mordisqueaba su lengua. Jimin era su perdición.

Ambos sintieron el orgasmo cerca y cuando llegó arrasó con todas sus energías. Se besaron con pereza y soltaron suspiros encantados por la reciente acción.

–Yoongi –llamó el omega, desde el cuello del Alfa –Mi cuello... tu puedes..

Yoongi sonrió con ternura y acarició los mechones de color rosa del omega.

–¿Quieres que te muerda?

Jimin hizo un sonido de afirmación.

–¿Puedo dejar la mía también? –preguntó saliendo de su escondite.

El Alfa acarició sus espalda y bajo hasta su trasero, donde adentro sus dedos en su entrada, embistiendo con lentitud. Jimin tembló y beso el pecho del Alfa.

–Claro que puedes hacerlo. Donde tu quieras.

Yoongi se sintió afortunado al ver esos hermosos ojos violetas, brillar de felicidad, anhelo y amor. Estaría más que feliz de pertenecerle a ese omega y viceversa. Luego de esto, al fin tendría a su familia con él.

Me dan ideas de nombres para hijos del Yoonmin, quiero cambiar el nombre de Giyoon.

Gracias, por leer♡