Al salir de la tienda de motocicletas se tomaron con un carro (que por cierto era el mismo con el que Shinichiro los llevó a la playa), la ventana bajo mostrando a hombre moreno y cabello blanco.

—¡Ya era la hora!—exclamó al verlos—¡Suban o me iré sin ustedes!—les advirtió prendiendo del vehículo.

—¡Es mi carro idiota!—grito Takeomi corriendo para tratar de bajar a su amigo que estaba como piloto.

Shinichiro que tenía su mano entrelazada con Umi se golpeo la frente al verlos pelear y decir groserías, pensando que estaban arruinando su imagen delante de la chica, pero pudo escuchar la risa de la castaña cosa que alivio.

Caminaron para subir al auto.

Él chico de la paleta abrió la puerta para la jóven, pero antes de que esta subiera Shinichiro empujó a su amigo adentro y luego él para quedar en medio de los dos.

No iba a dejar a Wakasa junto a Umi.

—Alguien me puede decir quien es la chica que secuestraron—habló Benkei para romper el silencio.

—Una amiga de Shinichiro, creo—respondió el de cicatriz con duda de sus palabras—¿Si son amigos?

—Es un poco complicado... —mencionó el peli negro.

—Somos quedantes—dijo ella directa—Aún no hacemos nada oficial.

Wakasa soltó una risita que trató de ocultar sin mucho esfuerzo, él había logrado captar la indirecta sutil de la muchacha.

—Demonios Sano-san, a ti te gustan las mujeres de carácter—también se rió Benkai sin vergüenza de ocultarlo—Me agradas chica, soy Keizo Arashi pero puedes decirme Benkei.

—Sakurai Umi, también es un gusto conocerte Benkei.

El camino fue más agradable para todos hasta llegar al bar a donde irían. Se bajaron y entraron sin problemas, tomaron asiento en una de las mesas ordenando cada quien bebidas. El lugar era tranquilo y deprimente, había poca gente bebiendo pacíficamente y en su mayoría señores ya grandes queriendo hablar con alguien para liberar sus problemas.

—¿Y como se conocieron?—les pregunto Takeomi prendiendo un cigarrillo, ofreciéndole a Shinichiro que se negó.

—La versión que yo recuerdo fue cuando me estaban asaltando y apareció Shinichiro-kun en su motocicleta, su aparición la aproveche para golpear al tipo y al final nos quedamos juntos para esperar a la policía. Él nunca se fue de mi lado—contó sonriendo—Pero hace poco me entere que nos conocimos desde niños.

—Me suena a esas series que ve tu abuela Benkei—comentó Wakasa—Se conocen de niños y son amigos pero por alguna razón se separan y de grandes se reencuentran.

—Prácticamente eso pasó—menciono el peli negro rascando su cabeza.

—Esos clichés me gustan—confesó Benkei fumando junto a Takeomi—Son muy buenos.

Llegaron todos sus vasos y brindaron por estar presentes, pronto comenzaron a pedir más, los primeros en estar borrachos fueron Shinichiro y el moreno.

Umi agradecía ser buena tomando para ver como Takeomi le preguntaba a Shinichiro las tablas de multiplicar, diciendo que no estaba tan borracho como para responderlas, pero en realidad si las decía mal. Benkei se estaba riendo mientras golpeaba la espalda de Wakasa que parecía también estar ebrio pero lo disimulada muy bien.

Todo bien hasta que decidieron ir por más diversión, salieron del tranquilo bar para buscar una discoteca, esta vez conduciendo la chica que se ofreció llevarlos a casa pero estos se negaron.

Entraron gracias a Takeomi que le pagó al guardia y les abrió la puerta al lugar con la música a tope y luces que los acandilo por que giraban por todos lados.

Pidieron unos shots brillantes y de una de los bebieron.

La gente estaba ambientada por la música, gritaban emocionados, la temática de luces neón invadía en el lugar, hasta les regalaron pintura para pintarse donde quisieran.

—¡Vamos a bailar!—grito Benkei siendo animado por la gente que lo escucharon, retirando su playera para entrar a la bola de personas y bailar, siendo popular entre los jóvenes.

Ellos en cambio se tomaron su tiempo para pintarse la cara. Él de cabello de dos colores tenía dos cuernitos arriba de sus cejas dibujadas por la chica que no podía parar de reír, anteriormente había pintado a Takeomi hasta los brazos y cabello, pero se quedó pidiendo más shots.

—Umi—a largo la última i para llamar su atención. La palabra "celoso" se le quedaba corto y más estando borracho—Es mi turno.

—De inmediato—término con Wakasa para agarrar otro color para Shinichiro, azul más específicos.

Limpio sus dedos llenos de pintura morada en su ropa y los hundió en el bote para pintar el rostro del chico.

Sabe Dios que pasó pero estaban tan cerca de repente, apuntó de besarse si no fuera por que fueron empujados por unas personas que se abrían paso queriendo pasar a la barra.

—Espera—le dijo quitando su playera—¿Puedes pintarme la espalda?

—Tu dejame el trabajo—sonrió pintando la espalda de Shinichiro con algunas líneas, aprovechando para tocar su piel y mirando uno que otro lunar que le daba un toque atractivo.

Se unieron a la pista para bailar juntos, los dos sin saber mucho como hacerlo. Una de las maravillas con las que se deleitó el chico fue ver a la joven movía sus caderas tratando de hayar el ritmo de la canción; desde el segundo piso lanzaron alcohol y varios abrieron la boca, el peli negro sacudió la cabeza que se había bajado por el líquido.

Voltearon al escuchar a Benkei, este estaba arriba de una de las barras bailando y le tiraban dinero, llamaba a sus amigos para que también se subieran, extrañamente él primero en seguirlo fue Wakasa, muchas mujeres chillaron pidiendo que se quitara algo ropa.

Era un descontrol total.

—Uy, mejor no veas—le cubrió los ojos. Benkei literalmente le quito la playera a su amigo para que le lanzaran más dinero y pudiera agarrarlo, estaba muy borracho pero se guardaría ese dinero.

Takeomi que seguía sentado se cubría la cara con sus manos viendo como dos de sus amigos bailaban arriba del mostrador donde el estaba bebiendo, le tiraron su vaso y le jalo la pierna a Wakasa para tumbarlo, cosa que lo enojo y lanzo un puñetazo golpeando a otro chico que ni conocían por accidente.

—Oh mierda—exclamó Shinichiro al ver como todos comenzaron a pelear.

—¡Hay que salir de aquí!—le grito Umi. Quizá se había pasado un poco con el alcohol, pero era la más conciente de los chicos—Shinichiro, ¿estas bien?

Para nada. Su cabeza estaba dando vueltas y teniendo a todos peleando no ayudaba, se iba a vomitar pero se lo resistía para que Sakurai no lo viera con asco, pero no lo soportaría por mucho.

La chica se dio cuenta y agarro de la mano para sacarlo del lugar lo antes posible, después iría por los demás.

Los guardias entraron tratando de controlar a la masa que seguía peleando.

Salieron a empujones y el más alto no aguanto más para soltar todo lo que tenía guardado en la banqueta, la fémina se quedó a su lado dándole pequeños golpecitos a su espalda.

—Eso es, expulsalo todo... No lo detengas—dijo mirando para otro lado o sino también vomitaria junto a él.

Ya mejor Shinichiro limpio su boca con su brazo.

—Vamos por los chicos—vocifero apenas.

Al entrar nuevamente a la discoteca todo estaba igual como cuando salieron, preocupado de que Umi saliera herida la colocó detrás suya cuidando de ella hasta llegar por el primer idiota que encontraron, Benkei había apilado un gran número de hombres y a la distancia estaba Wakasa que competía contra el anterior para ver quien apilaba más cuerpos, Takeomi le estrelló una botella en la cabeza a uno de los guardias.

La peor imagen que podía tener la chica de sus amigos.

—¡Detengan esta mierda!—bramo Shinichiro que había subido a una de las mesas llamando la atención de sus amigos y todos que se detuvieron de inmediato—¡Por favor dejen de estar peleando como animales!

El discurso duro poco.

Umi golpeo a una chica por tratar de tocar a Shinichiro.

Y la pelea se había desatado otra vez.

«Los jóvenes deben de disfrutar de su juventud a su manera, no obligados por alguien más diciéndoles como hacerlo. Deben recomendarles ser prudentes pero no a ser alguien que no son»

Escribí esto con una canción de fondo.. AjamRightRoundAjam.

Me emocioné, perdón.

@𝙰𝚢𝚊𝚖𝚎_𝚑𝚊𝚝𝚊𝚔𝚎⛓️