Chelsea estaba hecha bolita en un rincón del cuarto, esperando que Ruby regrese.

Al final la solución a la que llegaron fue que Ruby baje sola a ver a su familia, mientras ella se quedaba en su cuarto, escondida.

No parecía ser una mala idea, sin embargo, la posibilidad de que algún familiar de Ruby quiera ir a su cuarto era muy alta. Simplemente no podían jugar a la suerte, no en una situación como esta.

Pero, no tenían otra opción.

...

...

...

De repente, la puerta ser abrio, Chelsea se sobresalto ya que no sabía si era Ruby la que había entrado, por suerte, si se trataba de ella.

Ruby cerró la puerta detrás suyo y se dejó caer lentamente sobre ella.

"¿Que paso, Ruby?, ¿lograste arreglar algo?, ¿ya puedo salir?" Pregunto Chelsea.

"Tengo... dos noticias, una buena y una mala"

"Quiero escuchar la buena primero..."

"Ok, la buena noticia es que ya puedes salir, la mala es que de seguro te lincharan apenas pongas un pie fuera de este cuarto"

"¡¿Que?!, ¡¿de que hablas?!, ¿tu... les contaste?"

"¡No, no lo hice!, ellos mismos se dieron cuenta..."

"¡¿Pero como?!, ¡me quede en silencio tal y como dijiste!"

"Bueno... según palabras de mi madre, ella escucho algo cuando estábamos en las escaleras... y también vio una cabellera roja irse con rapidez..."

"Ay... maldición... espero que no haya escuchado cuando le dije zorra por accidente... ¡¿y que paso después?!"

"Ella me dijo que solo te diga que bajes... y que hablaremos sobre todo esto en la sala, mi padre y mi hermano se fueron de la casa, para que estemos a solas con mi madre..."

Chelsea tomo aire, profundo y cansado, solto todo en un suspiro agotador que la termino hundiendo aún más en el colchón de la cama.

Ruby se recosto de igual manera, al lado de Chelsea. Buscando consuelo, un consejo, lo que sea.

"Entonces... tendré que hacerlo, no me queda de otra, además solo es tu madre... no creo que sea tan malo..."

"Tú no la conoces... ella... puede parecer ser amable y cariñosa, pero cuando se enoja... la desconozco completamente... ¡tengo miedo de su reacción!, ¡tengo miedo de que no vaya a entender lo nuestro y me obligé a terminarlo...!" Exclamó Ruby con su rostro exaltado, su mirada pérdida por los pensamientos que rondaban por su cabeza.

"Tranquila... Ruby... eso no va a pasar" Chelsea envolvió a Ruby en un abrazo suave con uno de sus brazos "Solo... trata de calmarte, si tu estas asi yo tampoco puedo calmarme..."

"No es tan difícil para ti... no creo que se moleste contigo... para todos tu eres perfecta, y para ella también lo serás, ella solo pensará que tu único error fue aceptarme como tu novia... pensará que yo soy un error..."

"¡No digas eso!, ¡claro que es difícil para mi" Dijo Chelsea con una expresion seria y nerviosa "A veces me siento vulnerable... y cuando digo a veces me refiero a todo el tiempo, mas ahora que nunca, yo... no quiero que nos separen... solo... quiero que todo siga igual... y... no se... arreglarlo. Pero definitivamente no soy perfecta... y tú no eres un error"

"¿Tú... te sientes vulnerable siempre?, nunca lo hubiera adivinado. Quiero decir, cuando todos te miran, solo ven a alguien perfecto, alguien que no puede hacer nada malo. Supongo que pensé que nunca podrías tener miedo. Lo siento, no debí haber dado por hecho algo que no conocia..."

Ruby se acomodo en la cama, para acurrucarse más cerca de Chelsea. La sirena solo sonrió al sentir el calido contacto de la chica kraken. Pero seguía nerviosa, con un millón de pensamientos pasando por su cabeza.

"No te preocupes... todo va a salir bien... podemos hacerlo, juntas. Me has dado la valentía que necesitaba... ahora solo faltas tú" Dijo Ruby con una leve sonrisa.

Chelsea se quedo contemplando a la pequeña kraken, viéndola con amor y deseo, sus mejillas se sonrojaron mientras que su corazón tomo control de su ser.

"Eres... la chica más hermosa que he visto en mi vida..."

"¡¿Q-que?! ¡¿lo soy?! ¡nunca... nunca me habían dicho eso antes!. Quiero decir, he oído que algunas personas piensan que soy bonita, ¡pero eso nunca! ¿De verdad quieres decir eso?"

"Claro que quiero decir eso, eso y mucho más... simplemente no puedo evitarlo..." Dijo Chelsea avergonzada, volteando su mirada hacia otro lado.

Ruby la sorprendió acercándose todavía mas, poniendo su cara cerca de su rostro.

"¿En serio?, ¿y que más te gusta de mi?" Pregunto Ruby, con una sonrisa inocente en su cara.

"Si tuviera que elegir... escogeria tus ojos..."

Ruby se sonroja, mientras sus ojos brillan.

"¿De verdad crees eso?" Sonríe con timidez "¿Mis ojos? ¿que te gusta de ellos?" Sus ojos revolotean con interes.

"Me gusta que sean azules, un color profundo que hace que mi corazón se acelere... me encanta que tus ojos coincidan contigo, me encanta que tus ojos de repente brillen de esa manera tan dulce... y-yo... y-yo..." Se sonroja con fuerza y para por un momento "Lo siento estoy siendo muy empalagosa..."

"Tranquila, yo pienso lo mismo de tus ojos, son tan hermosos... tan fascinantes. Cuando te miro a los ojos, puedo ver la eternidad. Tus ojos son del color del océano, de las olas. Como el océano, tus ojos son hermosos y profundos, y encierran tantos misterios... Podría perderme mirándolos para siempre. Tienen todo lo que siempre he querido: amor, amabilidad, compresion, y una dulce compañia en la que puedo confiar... son perfectos"

Chelsea se sonroja, al escuchar aquellas hermosas palabras. Vuelve a sonreir, con más emocion y fuerza esta vez.

"Bueno... ya que estamos en el tema, ¿me permites confesame de la manera correcta?, nunca tuve tiempo de decirte todo lo que siento..."

"¿A que viene eso?, ¿y por que tan de repente?" Pregunto Ruby con una ceja levantada.

"Porque me siento inspirada, y siendo honesta... no creo tener la misma fuerza para decir esto otra vez..."

"Jajaja... adelante entonces"

Chelsea se preparo mentalmente, para soltar todo lo que su corazón sentia. Eran muchas cosas, así que trataría de ser lo más breve posible.

"Desde el primer momento que te vi, capturaste mi atención, no solo porque fácilmente descubrí que eras un kraken... también porque eras... linda, adorable y muy única en tu estilo, seguí observándote. .. viendo tus actitudes, tu comportamiento, todo lo que vi fue genial... Me fascinó tu forma de ser tan optimista... Desde pequeña me encantan los krakens y estaba pensando en casarme con uno cuando sea grande... jaja... pero bueno, eso quedó en una fantasía... hasta ahora, que te tengo a mi lado y me muero por expresar adecuadamente lo que siento. No me cansaré de decírtelo, porque quiero que lo sepas, que lo recuerdes, que cada mañana al despertar ese sea tu primer pensamiento... y yo... te lo recordaré las veces que sean necesarias..." Chelsea se sonroja aún más, al darse cuenta de que esta hablando demasiado "¡Simplemente te amo!, ¿ok?, ¡te amo!, ¡estoy profundamente enamorado de ti, Ruby Gillman!"

Los ojos de Ruby brillan todavía más, mientras suelta una pequeña risa al ver la torpeza de la chica.

"Yo también te amo, Chelsea, nunca pensé encontrar el amor en ti... y eso fue principalmente porque al principio me tratabas como basura, jaja... pero, eso ahora solo es un divertido recuerdo. Yo... tenia dudas, no te voy a mentir, tenía dudas al principio... muchas veces llegue a pensar que tú solo estabas jugando conmigo... pero ahora que se que tus sentimientos son reales, me siento muy feliz de haber seguido a mi corazón..."

Chelsea empieza a derramar algunas lagrimas, no puede créer que esto este pasando, finalmente abrio sus sentimientos a Ruby de la forma que siempre soño. 

Hoy, ese sueno, esa fantasía, se estaba haciendo realidad, y de la manera más dulce y hermosa.

"Me has hecho la sirena más feliz del océano... yo... luchare contra quien sea, ¡contra el cielo, el mar y la tierra!, ¡no permitiré que nada me separe de tu lado!" Exclamó Chelsea con determinación.

"Voy a hacer lo mismo. Desafiaremos al mundo cuando se trata de nuestro amor. Me preocupo mucho por ti, Chelsea. No hay nada que yo no haría por ti. Me alegro de que nos hayamos encontrado..." Ruby abraza con más fuerza a Chelsea "Te amo..."

"Yo también te amo, hoy, mañana y siempre... mi pequeña kraken..." La mente de Chelsea vuela, fascinada por lo que está pasando, a pesar de estar enfrentandose a un gran problema, no puede evitar sonreír ante la situación. Esta feliz y decidida. Finalmente consiguio la fuerza que necesitaba para levantarse y defender el amor que compartía con Ruby.

"Nuestro amor es tan fuerte, tan puro. Llena mi corazón con un sentimiento cálido. Me completas, Chelsea, y estoy muy orgullosa de llamarte mi novia... te amo y lo seguiré haciendo por siempre..." Ruby besa a Chelsea con fuerza, sus labios comparten un tierno beso profundo y dulce.

Al parecer Ruby anda tomando más la iniciativa en la relación.

Chelsea sonrie, extasiada y satisfecha. Como si estuviera viviendo el sueño... y prácticamente así es.

El beso termina, fue muy breve, pero no importa, ya habrá tiempo para más.

"¡Esto es tan mágico!. Todo se siente tan perfecto. Tengo la sensación de que este es el comienzo de una aventura increíble. Es como un cuento de hadas, ¡y nosotros somos las estrellas!" Dice una muy emocionada Ruby, con las mejillas sonrojadas y una sonrisa de oreja a oreja.

"¿Por que brillamos más cuando estamos juntas?" Pregunta Chelsea con sus mejillas pintadas de rojo carmesi, sintiéndose tonta por lo que ha dicho.

"Si... por eso mismo. Porque nuestro amor es tan puro, nuestros corazones tan puros. Nuestro vínculo es tan fuerte, porque el amor es la fuerza más poderosa de todas. Con nuestro amor podemos mover montañas, navegar a nuevas tierras, explorar nuevos mundos. Juntos, brillamos como la estrella más deslumbrante del cielo"

"¿Donde aprendiste a decir frases tan cursis?, me estas seduciendo más rápido de lo normal..." Dijo Chelsea sintiendo que el calor invadía su cuerpo.

"¡No sé!, simplemente me siento inspirada, supongo que me enamoré tanto de ti tan rápido que todo salió a raudales. No tuve oportunidad de pensar en otra cosa, ¿sabes?, ¡me tienes embobada!"

"Jeje... No me sorprende, soy irresistible" Chelsea se da cuenta de lo que Ruby acaba de decir "¡¿Lo ves?, ¡te lo dije!, ¡sabía que podia hacer que te enamores de mí!, y lo he logrado... jaja... es gracioso porque me salió mal, ya que en el proceso también me enamoré... y eso no fue en el plan al principio!, aunque... no me arrepiento, definitivamente no lo hago..."

"¡Bien!, ¡lo hiciste!, eres bastante irresistible, ¡te lo concedo!" Sonríe con dulzura "¿Y tú también te enamoraste de mí? ¡Eso es... eso es increíble! ¡Pensé que estaba loca por pensar que algo así podría pasar! Pero aquí estamos... nos tenemos el uno al otro. ¡Eso es lo más importante!"

"Tú lo dijiste. Mientras estemos juntas... ¡lo demás no importa!"

"¡¡¡Exactamente!!! Las dos juntas resolveremos cualquier problema. Nuestro amor será la luz que nos guíe en cualquier aventura que deseemos emprender"

"Ok... ya te estás pasando con las frases raras... no querrás provocarme y menos en una situación como esta..." Chelsea retrocede, intentando controlar sus deseos de hacer suya a su pequeña.

"¿Uh?, ¿y eso por que?, ¿te avergüenza que mi madre escuche tus gemidos?" Pregunto Ruby con una sonrisa picara y burlona.

Chelsea se sonroja con fuerza, todo su rostro esta rojo. Ruby solo se rie ante la reacción de la pelirroja.

La situacion, antes dulce y romantica, cambio radicalmente a una atrevida y algo... caliente.

Y todo gracias a Ruby.

Definitivamente ella esta tomando más la iniciativa en la relación.

...

...

...

Ambas dejaron de pensar, y ahora, sus cuerpos semidesnudos se conectaban entre si.

Dejando salir a flote sus más bajos intintos, no pensaron en nada mas que unirse, ser una misma con la otra de nuevo, como habían hecho tantas veces antes.

Pero, ahora era más especial, el sentimiento era más fuerte, por todo lo que anteriormente se había dicho.

El calor reinaba, la temperatura había subido demasiado.

Ellas querían refrescarse...

...

...

...

Por desgracia, su satisfacción no iba a durar mucho tiempo.

Ya que... alguien se encontraba subiendo las escaleras.

Dirigiéndose, justamente, al cuarto de Ruby.