▪️▪️🥋𝐓𝐡𝐞 𝐭𝐞𝐜𝐡𝐧𝐢𝐪𝐮𝐞 𝐨𝐟 𝐥𝐨𝐯𝐞🥀▪️▪️
*Si no es mucha molestia comenten pliss y no sean lectores fantama se lo agradecería mucho que comentaran en esta historia*
Epílogo: Felices por siempre
El cuarto de los niños estaba iluminado por la tenue luz de una lámpara en la mesita de noche.
Los gemelos, Sam y Jeremy, se habían acomodado al lado de sus hermanos menores, Bryce y Anthony, mientras Daniel y Jessica estaban sentados en la orilla de la cama, sonriendo ante las expresiones maravilladas de sus hijos
Jessica terminó de contar la historia con una sonrisa nostálgica---Y así es como vuestro padre y yo nos conocimos... y cómo nos enamoramos.
Los niños se quedaron en silencio por unos segundos, procesando la historia
Luego, Jeremy fue el primero en reaccionar.
---Eso fue... ¡guay! ---exclamó con entusiasmo--- Papá, ¿de verdad venciste a Johnny Lawrence con esa patada?
Daniel sonrió con modestia---Sí, aunque en su momento no sabía si funcionaría, fue más instinto que otra cosa.
Sam miró a su madre con curiosidad---Mamá, pero si sabías karate desde antes, ¿por qué no participaste en el torneo?
Jessica rió---Porque en aquel entonces, para mí, el karate no era para demostrar nada en una competición, era más una forma de defensa y disciplina, yo quería aprender no competir
---¿O sea que podías haberle ganado a papá? ---preguntó Anthony con una sonrisa traviesa.
Daniel fingió indignación---¡Eh! ¿Por qué todos asumen que su madre me hubiera vencido?
Jessica le lanzó una mirada divertida---Porque lo habría hecho, cariño.
Los niños rieron y Daniel suspiró con fingida resignación---Está bien, está bien. Supongo que nunca lo sabremos...
Bryce, el hijo de ocho años, se abrazó a su almohada con emoción.
---¡Cuéntenos otra historia! ¡La de cuando fueron a Okinawa con el Sr. Miyagi!--- responde el rubio--- segun os escuche a ti y a papá fue un viaje con momentos muy íntimos, ¿eso significa momentos donde os amasteis mucho?
Ambos adultos rieron y Daniel asintio--- se podría decir que sí
Jessica intercambió una mirada con Daniel. La mención de Okinawa trajo muchos recuerdos, algunos felices y otros llenos de desafíos.
---Oh, esa es una buena historia... ---dijo Daniel, pensativo.
---¡Sí! ---insistió Sam, la más curiosa del grupo--- Y también cuéntenos qué pasó cuando Harry nací, cuando papá se tuvo que arrastrar para recuperarte
Jessica soltó una leve risa---Nos encantaría, pero...
Antes de que pudiera terminar la frase, el timbre de la casa sonó, resonando por el pasillo.
Daniel se levantó de inmediato---Eso debe ser la abuela.
Bryce se hundió en las sábanas con una expresión de decepción---Pero quiero escuchar más historias...
Jessica se inclinó y le acarició el cabello con dulzura---Las historias no se irán a ningún lado, cariño, mañana podremos seguir contándolas.
---¿Lo prometes? ---preguntó Anthony, mirándola con ojos somnolientos.
Jessica le besó la frente---Lo prometo.
Daniel aplaudió las manos, apurado,---¡Venga, todo el mundo a la cama!
---Pero papá... ---protestó Jeremy
---Sin peros, mañana seguimos, ahora, todos a dormir--- responde el señor
Jessica fue acostando a cada uno de sus hijos con ternura
Se aseguró de que Bryce estuviera bien arropado, acarició la mejilla de Anthony, le dio un beso en la frente a Sam y despeinó con cariño a Jeremy antes de apagar la lámpara.
---Buenas noches, mis amores ---susurró antes de salir del cuarto.
Desde la puerta, Daniel les lanzó un beso al aire---Dulces sueños, campeones y princesa
Cerraron la puerta con cuidado y, al girarse, encontraron a Lucille LaRusso en la entrada de la casa, quitándose el abrigo con una sonrisa maternal.
---¡Mamá! ---dijo Daniel, acercándose a abrazarla--- Gracias por venir.
---Por favor, Daniel, me encanta pasar tiempo con mis nietos, además, ¿qué clase de abuela rechazaría una noche de películas y palomitas?--- dice con una sonrisa
Jessica le sonrió con gratitud---Te lo agradecemos mucho
Lucille agitó la mano con despreocupación---Anda, anda, id a disfrutar de vuestra noche de aniversario antes de que los niños os atrapen otra vez.
Daniel tomó la mano de Jessica y la guió hacia la puerta---No hace falta que nos lo digas dos veces.
Jessica miró una última vez hacia el pasillo donde estaban los cuartos de sus hijos y sonrió.
---Buenas noches señora Larusso--- dijo la chica con una sonrisa
---Buenas noches, cariño--- dijo la mujer
Y con eso, Jessica y Daniel salieron de la casa, listos para disfrutar de su noche juntos.
Daniel abrió la puerta del coche para Jessica con una sonrisa galante---Después de ti, señora LaRusso.
Jessica arqueó una ceja con diversión mientras se acomodaba en el asiento del copiloto.
---Toda una caballerosidad, ¿eh? Si siempre fueras así, tal vez hasta te daría más besos--- respondió la mujer
Daniel soltó una risa mientras rodeaba el auto y se sentaba al volante---¿Y quién dice que no lo soy siempre?
Jessica se limitó a mirarlo con escepticismo, pero con una sonrisa juguetona en los labios.
Él arrancó el coche y comenzaron a conducir por las calles iluminadas por las luces nocturnas de la ciudad.
Después de unos momentos de cómodo silencio, Jessica se cruzó de brazos y lo miró de reojo---Por cierto... ¿a dónde vamos?
Daniel soltó un leve suspiro dramático
---Pues... con suerte, al restaurante donde hice la reserva--- dice el hombre
Ella rió suavemente---¿Con suerte? ¿No hiciste la reserva con antelación?
---Sí, pero entre la historia para los niños y que casi no salimos de la casa, ya vamos tarde ---dijo, girando el volante en una intersección--- Espero que todavía la respeten, porque este sitio no es fácil de conseguir
Jessica lo observó con curiosidad---¿De verdad? Ahora tengo más curiosidad.
Daniel sonrió con confianza---Solo espera a verlo.
Unos minutos después, el coche se detuvo frente a un elegante restaurante de estilo clásico, con luces cálidas iluminando la fachada y un cartel dorado con el nombre La Bella Vita.
Jessica miró el lugar con asombro---Daniel... este sitio parece muy exclusivo.
Él le dedicó una sonrisa traviesa---Solo lo mejor para ti mi amor, porque tu siempre te mereces lo mejor
Salieron del coche, y Daniel, siempre atento, le ofreció la mano mientras ella bajaba.
Al entrar al restaurante, la decoración los envolvió en un ambiente romántico y sofisticado
Las mesas estaban adornadas con velas y pequeños arreglos florales, la música suave de un piano flotaba en el aire, y el aroma de deliciosos platillos recién preparados los rodeaba.
Se acercaron al atril de recepción, donde un camarero con traje impecable los recibió con una sonrisa profesional.
---Buenas noches, ¿tienen reserva?--- pregunta el camarero
Daniel se aclaró la garganta con cierta tensión---Sí, a nombre de Daniel LaRusso.
El camarero revisó la lista y luego lo miró con una leve sonrisa---Por muy poco, señor LaRusso, su reserva sigue vigente.
Daniel soltó un suspiro de alivio y le lanzó una mirada de "te lo dije" a Jessica, quien le sonrió divertida
---Por favor, síganme ---dijo el camarero, guiándolos a través del restaurante hasta una mesa acogedora junto a una gran ventana con vista a la ciudad iluminada.
Daniel le retiró la silla a Jessica antes de sentarse frente a ella
---¿Ves? No había de qué preocuparse--- dijo
Jessica miró alrededor, observando la elegancia del lugar.
---Cariño... este restaurante tiene pinta de ser carísimo--- habló la chica
Daniel se encogió de hombros con despreocupación---Eso no importa, para ti, siempre lo mejor
Jessica lo miró con ternura---Eres un romántico incurable, ¿lo sabías?
Daniel sonrió y tomó su mano sobre la mesa---Solo cuando se trata de ti.
Por un momento, se quedaron en silencio, simplemente disfrutando el momento y la compañía
Después de que un mesero les entregara los menús y se retirara, Jessica apoyó el codo en la mesa y lo miró con curiosidad.
---Así que... treinta años de casados--- dijo la chica
Daniel sonrió con nostalgia.
--- treinta años casados, cuatro años de novios, cinco hijos, un montón de momentos felices y un par de desafíos en el camino--- responde el chico con una sonrisa
Jessica suspiró con una sonrisa---Ha pasado todo tan rápido aunque no todo fue facil
Daniel asintió---A veces parece que fue ayer cuando estabas dándome órdenes en el dojo del señor Miyagi
Jessica rió---¿Órdenes? ¿De qué hablas?
---Por favor, Jess, siendo la hermana de Johnny, me tenías bajo estricta vigilancia--- dice el chico entre risas--- eras más estricta que el señor Miyagi
Ella se encogió de hombros con una sonrisa juguetona---Bueno, alguien tenía que asegurarse de que no fueras un casi perdido como cuando te dio por meterte a Cobra kai
Daniel rió--- No me lo perdonarás ¿no?
Jessica negó con la cabeza---Ni en un millón de años pero me alegra
Daniel la miró con ternura y le apretó la mano
--- Jess, mi amor siempre supe que eras la mujer de mi vida--- dice el hombre
Jessica sintió un calor reconfortante en el pecho---Y aquí estamos... cinco hijos después, aún juntos--- susurró
Daniel sonrió---Y aún locamente enamorados.
Jessica le devolvió la sonrisa y, por un momento, simplemente se quedaron mirándose, disfrutando la conexión entre ellos
--- pero como se te ocurra hacer otra estupidez como aquella te mato--- dijo la mujer con una sonrisa--- o te dejó sin sexo lo que sea peor
El hombre se rió y tras un momento preguntó
---Por cierto, ¿cómo ha ido el trabajo últimamente?--- pregunta
Jessica se apoyó en el respaldo con una sonrisa.
---Bien, aunque cada vez hay más niños en la consulta, hoy atendí a un pequeño de cinco años que estaba asustado porque tenía que vacunarse, se aferró a su osito de peluche y no quería soltarlo--- contó la mujer con una sonrisa
Daniel sonrió enternecida---¿Y cómo lo convenciste?
---Le dije que yo también le tenía miedo a las agujas cuando era pequeña y que el osito de peluche probablemente era más valiente que los dos juntos--- le conto la rubia a su marido
Daniel rió---Déjame adivinar... el niño aceptó ponerse la vacuna para demostrar que era más valiente que tú
Jessica asintió con una sonrisa orgullosa---Exactamente.
Daniel la miró con admiración---Eres buena con los niños, siempre lo has sido.
---Bueno, tener cinco en casa me ha dado algo de experiencia--- respondió ella con una sonrisa
Daniel rió suavemente y luego apoyó la barbilla en su mano, mirándolo con cariño---Me encanta verte tan feliz con tu trabajo.
Jessica lo miró con la misma ternura---Y a mí me encanta verte feliz con el tuyo---Jessica suspiró con una sonrisa---La pediatría es mi pasión, ver a los niños mejorar y ayudar a los padres a sentirse más tranquilos es algo que realmente disfruto.
---¿Algún caso especial esta semana?--- pregunto Daniel interesándose por el trabajo de su esposa
Jessica asintió con una sonrisa cálida--- si, tuve un niño de dos años que, a pesar de estar en el hospital por unos días, siempre estaba sonriendo, se llevaba bien con todas las enfermeras y, cada vez que entraba a revisarlo, me hacía dibujos con crayones para agradecerme aún tan pequeño
Daniel sonrió---Es increíble cómo los niños pueden encontrar felicidad incluso en momentos difíciles.
Jessica asintió---Sí, me recordó lo afortunada que soy de hacer lo que hago.
Daniel tomó su mano de nuevo y le acarició suavemente los nudillos con el pulgar---Eres una gran doctora, Jess yuna gran madre.
Ella le apretó la mano con cariño---Y tú eres un gran padre y el mejor compañero de vida que podría haber pedido, además de un gran vendedor de coches
Daniel le sonrió con amor---Entonces, ¿te quedas conmigo otros treinta años más?
Jessica fingió pensarlo---Mmm... No sé... ¿me seguirás llevando a restaurantes caros?
Daniel rió---Siempre.
Jessica le guiñó un ojo---Entonces me lo voy a pensar Larusso, porque digamos que yo soy un poco más de hamburguesas de bares típicos de los sesenta y cincuenta
Daniel se rió y ambos sonrieron, disfrutando de la hermosa noche que apenas comenzaba
La cena había sido perfecta
Entre risas, conversaciones profundas y miradas llenas de amor, Jessica y Daniel habían disfrutado de una velada inolvidable
Ahora, salían del restaurante tomados de la mano, sintiendo la brisa nocturna rozar sus rostros mientras caminaban hacia el coche.
Daniel, con una sonrisa en los labios, se giró hacia su esposa cuando llegaron al vehículo---Feliz aniversario, amor.
Jessica le devolvió la sonrisa con ternura.
---Feliz aniversario, Danny--- respondió la chica
Se miraron durante un instante, compartiendo en silencio todo el amor y gratitud que sentían el uno por el otro.
Luego, Daniel abrió la puerta del coche para ella y esperó a que se acomodara antes de rodear el vehículo y tomar su lugar en el asiento del conductor
Cuando arrancó el coche y comenzaron a conducir de regreso a casa, Jessica se recargó cómodamente contra el asiento y lo miró de reojo con una sonrisa traviesa.
---¿Sabes? Ambos nos tenemos un regalo, pero no quise dártelo en el restaurante--- respondió Jessica
Daniel sonrió mientras mantenía la vista en la carretera---Yo tampoco quise dártelo ahí, no sé, se sentía más... especial hacerlo en otro momento.
Jessica asintió, comprendiendo el sentimiento---Exacto, no es solo un regalo, es algo que quiero que recuerdes.
Daniel le dirigió una mirada rápida antes de volver a enfocarse en la carretera---Bueno, entonces en cuanto lleguemos a casa, los intercambiamos.
Daniel asintió, pero luego pareció recordar algo y se mordió el labio antes de preguntar
---Por cierto, Jess... ¿has hablado con Johnny últimamente?--- pregunto
Jessica soltó un suspiro y apretó un poco el volante.
---He intentado llamarlo varias veces, pero no me coge las llamadas--- susurró la chica, se quedó en silencio por un momento antes de añadir---Hablé con la madre de Robby la semana pasada, la llamo de vez en cuando para saber cómo está Robby, pero terminamos hablando de Johnny--- dijo--- Me dijo que él ha estado ausente últimamente
Daniel suspiró con preocupación---Eso suena a Johnny, cuando algo no va bien desaparece.
Jessica asintió con tristeza---Por eso le dije que podríamos ir a verlo la semana que viene, quizá si nos ve a nosotros, si sabe que no está solo, se anime a salir de su caparazón, podría venirse un tiempo con nosotros aquí a casa con sus primos
Daniel la miró con cariño y asintió---Me parece bien, Johnny es un idiota a veces y aunque no es mi amigo, su hijo no se merece sentirse abandonado
Jessica le tomó la mano con ternura---Entonces iremos juntos con él
Daniel le sonrió antes de devolver la vista a la carretera
Unos minutos después, llegaron a casa. Daniel apagó el coche y ambos se quedaron sentados en silencio por un momento
Jessica giró su cuerpo hacia él con una sonrisa expectante---Bien, ¿listo para los regalos?
Daniel sonrió y sacó un pequeño estuche envuelto con cuidado en papel azul oscuro---Aquí está el tuyo
Jessica sacó un paquete similar, pero envuelto en papel dorado---Y aquí está el tuyo.
Se miraron con emoción y, al mismo tiempo, comenzaron a abrir los regalos.
Jessica fue la primera en descubrir lo que había dentro
Cuando abrió la pequeña caja, sus ojos se iluminaron con asombro. Dentro había un delicado collar de oro con un dije en forma de árbol de la vida, o más bien de un bonsai como los que había cuando se vieron la primera vez
---Daniel... es precioso--- susurró la chica
Daniel sonrió con ternura---El árbol de la vida representa nuestra familia, cada rama, cada hoja, es un recuerdo, un momento que hemos construido juntos
Jessica sintió que el corazón se le llenaba de calidez---Es el regalo más hermoso que he recibido.
Con una sonrisa agradecida, se inclinó y le dio un suave beso en los labios---Ahora abre el tuyo.
Daniel abrió su regalo y dentro encontró una caja de madera cuidadosamente tallada con patrones japoneses---¿Qué es esto?
Jessica sonrió misteriosamente---Ábrela.
Daniel levantó la tapa y dentro encontró un pergamino enrollado con una cinta roja
Desenrolló el papel y comenzó a leer en voz alta
"El amor es como el karate: requiere paciencia, disciplina y entrega. Aquello que se cuida, se fortalece. Aquello que se descuida, se rompe, el amor es la técnica más poderosa que existe. Úsala con sabiduría."
Daniel reconoció las palabras inmediatamente.
---Esto... esto es lo que el señor Miyagi me dijo cuando me casé contigo, cuando te llevo al altar y oficio nuestra ceremonia--- susurró Daniel
Jessica asintió con una sonrisa---Lo escribí y lo guardé todos estos años, quería dártelo cuando fuera el momento adecuado, para que recuerdes lo mucho que te amo
Daniel se quedó en silencio, conmovido, sintiendo una profunda gratitud y amor por la mujer que tenía a su lado--- Jessica... esto significa mucho para mí.
Jessica tomó su mano con suavidad---Siempre he creído en esas palabras y míranos ahora, después de tantos años, seguimos juntos, seguimos fuertes.
Daniel la miró con intensidad, sintiendo un nudo en la garganta por la emoción.
---Jess... me has dado una vida que nunca soñé, soy el hombre más feliz del mundo gracias a ti--- susurró el chico con una sonrisa
Jessica le sonrió con dulzura---Entonces parece que mi técnica del amor funcionó bastante bien contigo
Daniel rió suavemente y la atrajo hacia él para besarla con amor.
En ese momento, no existía nada más
Solo ellos, su amor y la vida que habían construido juntos.
Y puede que esa técnica del amor fuera efectiva ya que acabó uniendolos a ellos...
Acabaron encontrando a su alma gemela
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Epílogo publicado ✅️
(+50 comentarios, no valen puntos y se publica el capítulo especial )
¿Que les ha parecido el epílogo?
¿Les ha gustado la historia?
Gracias por todo su apoyo de verdad
Espero que les guste tanto leer esta historia como a mi escribirla
Espero que disfruten y nos vemos pronto en el capítulo especial 👋 ♥️
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