Los días pasaban más rápido de lo que podían disfrutar, Adelaida y Sirius llevaban una tierna relación. Que aún que nunca se blanqueo nada, ya todo Hogwarts sabía que sus corazones les pertenecían el uno al otro, y eso hizo que más de una ocacion alumnos de otras casas, intentarán acercarse a Adelaida, ganándose Sirius castigos por meterse el peleas con esos muchachos. Sumándole que no solo recibía un sermon de Minnie, sino también de su amada "Black, debes dejar de dramatizar todo".
Los ataques de los Oscuros seguían atemorizado a todos, los alumnos hijos de muggles o mestizos estaban preocupados por por bienestar de sus familias, Dorcas que era hija de una muggle y un mago, hacia un mes había recibido la noticia que los oscuros habían matado a su madre y su hermano en un barrio muggle.
En cuanto la relación de Regulus y Sirius, aún se encontraban en situación "crítica" o así lo había denominado James, aún ninguno de los dos se atrevió a dar el paso.
Adelaida se veía en más de una ocasión en la situación de tener que mentirle a Lily, respecto a que hacia tanto en el salón de Mcgonagall, dado que era la única a parte de Dumbuldore en saber que no eran de esa época y le habia ofrecido que utilizará su despacho para poner en práctica su avance en la "magia astral".

Mayo 1979

La primavera se hacía presente, las hojas de los árboles dejaban ver diferentes tonos de verdes, los pájaros que el bosque prohibido alberga se podían oír cuan felices estaban.
Adelaida se encontraba sentada al lado de Lily en clase de pociones, cuando alguien le toca el hombro, generando que esta se gire para toparse con los ojos de la profesora McGonagall y haciéndole un gesto con su cabeza para que se levantara.

-Profesor Slughorn, tendré que llevarme a la señorita Potter unos minutos- Dijo llamando la atención de no solo del profesor y también del resto de los alumnos

-S-si claro profesora- dice rápidamente este- Luego me entregas tu informe Adelaida- le dijo posando sus ojos en la joven, a lo cual esta asiente.

Mientras terminaba de poner todo en su bolso, unos ojos grises se toparon con los de ella con cierta curiosidad, a lo que ella solo se encogió de hombros.

En todo el camino ninguna de las dos hablo, pero por todos los atajos que le hizo tomar supo hacia donde se dirigían.

Al entrar, se topo con otras tres figuras dándole la espalda. Cuando notaron la presencia de ella, automáticamente se giraron para su dirección con cara de confusión, ignoro sus gestos y entro en silencio, quien lo rompió fue la persona que se encontraba detrás del escritorio.

-Bien, ya que están todos aquí les tengo un comunicado- los presentes se acomodaron en sus lugares para escuchar atentamente- Hemos encontrado la manera de volver a su época, pero sin depender de un artefacto- hace una leve pausa- Señorita Adelaida, ¿recuerda los libros que le hice leer sobre la magia astral?- a lo que ella asiente lentamente- muy bien, utilizaremos ese tipo de magia para hacer una proyección futurista y requeriré que usted lo realice. Es quien esta más capacitada, ¿cree poder hacerlo?

-Si puedo- dijo en tono serio, ante esto Dumbuldore se levanto y se dirigió hacia el mapa astral observándolo por unos instantes hasta que volvió a hablar

-Lo harás el viernes 26 a las 19: 35 exacto.

-Pero profesor, eso es en una semana- espeto Harry

-Así es, ¿tienen algún problema?

-No señor- respondió rápidamente Hermionie .

-De acuerdo, pueden retirarse.- sin mas, los cuatro se levantaron y salieron de su oficina.

Harry rompió el silencio que se había genero sin intención- No quiero irme, no puedo...

-Harry...- dijo Ron- Tenemos que volver, no somos de aquí. Ya causamos muchos daños.

-Él tiene razón, cada vez que pasamos más tiempo aquí, nos desvanecemos allí- acoto Hermionie.

Adelaida no decía nada, estaba sumergida en sus pensamientos. Ella tampoco quería irse, pero pronto fue sacada de estos por una voz proveniente de atrás.

- ¿Cómo que irse?- al girarse volvió a toparse con esos ojos grises que tanto le encantaban.

-Tenemos que volver- respondió Ron.

-¿Ada?- se dirigió hacia ella, lo cual ella clavo su mirada en el piso y asintió, corroborando lo que dijo Ron.

- Pero... ¿aun hay tiempo?- pregunto James, colocándose al lado de Sirius.

-Una semana.- contesto Harry.

Antes de que alguno pudiera decir otra palabra, Sirius se avanzo a paso decidido hacia Adelaida tomándola del brazo y llevándosela lejos de todos, la dirigió hacia uno de los pasillos donde no había ningún alumno.

-¡No puedes irte!- espeto

- Sirius...- dijo en tono leve

-No-no escúchame, por favor no puedes irte.

- Tengo que ir.

-Todavía no, te necesitamos- hace una leve pausa- te necesito.

- Ambos sabíamos que esto algún día pasaría Canuto- suspira- no soy de este tiempo, no pertenezco y cada momento que paso aquí, pongo en riesgo el futuro. Por favor Sirius, no quiero que este tiempo que nos queda discutamos.

- ¡Te esperaré!- dijo rápido, ante esto se le escapa una leve risa.

- No puedo pedirte eso.

- No lo haces, yo lo digo.

- Sirius, no lo hagas. Luego de que me vaya, encontraras a alguien que te ame como yo lo hago o quizás más y me olvidarás. Estoy segura.

-¿¡NO LO ENTIENDES!? No va ver otra. Porque es a TI a la que amo, la persona que me hizo ver las cosas de una manera diferente, la que me cambio y me hizo sentir algo que creía estupido. No puedes suponer que amare a otra, porque no lo haré, entiende- ante esto, sus ojos empezaron a ponerse rojos- Te amo Adelaida Parkinson- empieza a respirar con dificultad- no puedo dejarte ir tan fácil.- dijo susurrando y acercándose a ella.

-Sirius también... te amo- dijo acunando su mano en el rostro del azabache y en sus ojos un pequeño picor de que unas lagrimas se acercaban, antes de que pudiera decir o hacer otra cosa, este la beso. No era como los besos que se solían dar, este era diferente, se sentía como una desesperación por parte de ambos.

Ninguno de los dos hubieran creído jamás que podrían sentir lo que sienten hacia una persona y menos el uno hacia el otro. Al principio creían que era un capricho del otro, por querer romper reglas, pero cada momento que pasaba se ponía más en duda eso.

Al terminar el beso, se distanciaron, pero antes de que Sirius pudiera decir o hacer algo, ella se alejo corriendo. Le parecida de lo mas tonto haber hecho eso, pero no sabia ya más que decirle y si se quedaba ahí, se rompería ante él. Había algo entre las familias sangre pura que les enseñaban a sus herederos "no te muestres ante nadie vulnerable", de las cosas que le enseñaron, es una de las pocas que seguía.
Ninguno de los dos se percato, que había dos personas observando la escena detrás de la estatua de la mujer tuerta.

Pov Sirius

Luego de que Adelaida se fuera y lo dejara ahí solo, tomo uno de los atajos que lo guiaban a su lugar seguro, sabia que ella no estaría ahí.
Apenas entro, ya el enojo lo tenía cegado. Empezó a arrojar todo lo que se ponía a su paso, los cuadros estaban rojos y dispersos en el suelo, al igual que las pinturas. Cuando no vio más cosas las cuales romper, fue momento de él en romperse en llanto. Unos pasos atrás de él, haciendo que se sobresaltara.

-¿¡qué haces aquí!?, ¿vienes a burlarte o qué?-
-Deja tu orgullo de lado Sirius- hace una pausa para hacercase hasta donde estaba su hermano mayor arrodillado- déjame ayudarte, déjame ser tu hermano.
-¿Por qué?, ¿Por qué ahora?- estaba en shock al ver como su hermano estába siendo sincero.
-Porque te lo debo, tenías razón... siempre estuviste para mi, quizás no este último tiempo, pero se que no dejaste que nadie me molestara, cuando me veían como el "bicho raro de pociones".

Antes de que su orgullo llegara devuelta, se rompió bajo los brazos de su hermano menor, quien lo abrazaba con fuerza.
Regulus desde hacia tiempo sabia que había algo raro en la llegada de los supuestos hermanos Potter y Granger, pero jamás hubiera imaginado que esas sospechas lo guiarian al futuro.

Pov Adelaida

Corrí hasta más no poder, deje que mi instinto me guiará hasta el tercer invernadero, sabia que nadie lo utilizaba. El lugar seguro, nuestro lugar, que habia sido testigo de tantos momentos juntos no había sido una opción, era el lugar de Sirius primero, mientras que pudiera mantener distancia entre ellos, lo haría lo mejor posible.
Me desplace entre los alumnos que salían de la última clase de herbologia para poder colarme, cuando vi que la profesora Sprout se fue, pude sentir como las lagrimas volvían a amenazar, dejándome bulnerable.
Con las rodillas pegadas al pecho y escondida entre las plantas, creí que nadie me encontraría. Que equivocada estaba. Se escuchaban unos murmullos acercándose.

-Yo la vi por aquí-confirmo una voz masculina.
-No lo se... ¿y si solo se fue al bosque prohibido sola?- contesto esta vez una voz femenina.

Se escucha como la puerta del invernadero se abría, Ada se acurrucó más, quien la viera pensaría que es una niña de 5 años escondiéndose de un regaño de su madre.

-Ada...-la voz de Lily resonó, Adelaida trato de mantener en silencio sus sollozos, pero para su mala suerte su codo dio con una maceta, haciendo que esta se partiera en varias partes.
Sam y Lily se dirigieron hacia donde habia venido el sonido, topandose con una Adelaida indefensa.
Sin dudarlo, ambos se pusieron a su par uno de cada lado.
-Linda... ¿Qué sucedió?- interrogo Lily
-Y no digas que nada... vimos con Reggie la charla que tuviste con Sirius-refuro Sam.

No era que no quisiera decirles, es que no encontraba las palabras para decirles lo que sentía.

-Paso Lily...- Sam miro con confusión con ambas amigas, pero Lily sabia a que se refería.
-Lo qué temias, ¿sucedió?
-De verdad me ama...-susurro con los ojos clavados en el piso- Carajo, yo también hago con locura- y se rompió en llanto.
Los brazos de su tío fueron lo primero que sintió, la sostenía con tanto amor y cariño- Todo estará bien sobrinita- Ada levanto la vista y la clavo en Lily.
-Lo siento... tuve que explicarle- dijo un tanto avergonzada.
- Esta bien... me alegra tenerlo a ambos aquí.

En el almuerzo, en la mesa de los leones faltaban varias personas y no solo eso, sino que era la primera vez que esta estaba en silencio y no entre bromas como era costumbre.

...

Buenasss, se que parece muy apresurado, pero como dije en anteriores capítulos no quería alargar mucho el viaje al pasado, dado que quedan hechos por suceder en el futuro...Solo hay que ver si nuestra protagonista es lo bastante madura y valiente para enfrentarlos.
-A.N.P