El aire de la ciudad es diferente, más pesado pero familiar para Jake.

Los sonidos y aromas del mundo Humano llenan sus sentidos, recordándole la vida que había dejado atrás.

Sunoo camina unos pasos por delante, observando a su mejor amigo con el tipo de atención que solo alguien que realmente te conoce puede tener.

Jake, sin embargo, no puede apartar su mirada de Sunghoon, quien parece fuera de lugar en este entorno pero aún así emana una seguridad tranquila.

Cada paso que da junto al Alfa es una reafirmación de la conexión que comparten, pero también del dilema que lo consume.

—Entonces... —Empieza Sunoo mientras gira sobre sus talones para enfrentar a Jake y Sunghoon—. ¿Alguien me va a contar qué está pasando aquí? ¿Por qué mi mejor amigo aparece de repente con un modelo sacado de una revista de hombres misteriosos y con definición de Aura?

Jake se frota la nuca, sintiendo el calor de las palabras de Sunoo.

—Es complicado, Sunoo.

Sunoo cruza los brazos y alza una ceja.

—Complicado es lo mínimo. Pero... te conozco, Jake. ¿Estás bien?

La pregunta hace que Jake se detenga. Quiere decir que sí, que está mejor de lo que había estado en años, pero su mente sigue enredada en miedos y dudas.

Antes de que pudiera responder, Sunghoon se adelanta.

—Jake está en un punto donde está tomando decisiones importantes. Pero no está solo. Estoy aquí para asegurarme de que esté bien, siempre.

Sunoo arquea ambas cejas, sorprendido por la firmeza en la voz del aún desconocido para él. Luego mira a Jake, quien parece más vulnerable que nunca.

—¿Es cierto eso? —Pregunta Sunoo con suavidad.

Jake asiente lentamente, sintiendo que su garganta se cierra un poco.

—Sí, pero... no estoy seguro de todo aún.

Sunoo lo observa por un largo momento antes de sonreír.

—Bueno, al menos tienes a alguien que te apoya... y que, por cierto, es bastante guapo.

Jake no puede evitar reírse, aunque sus mejillas se sonrojan. Sunghoon, por su parte, mira a Sunoo con una sonrisa contenida, pero sus ojos brillan con orgullo al ver a Jake relajarse.

Mientras la conversación continúa , Sunghoon permanece cerca de Jake, observando cómo interactúa con su mejor amigo.

Hay algo en Sunoo que hace que Jake se muestre más abierto, más relajado. Pero, incluso en medio de esa interacción, Sunghoon siente la conexión inquebrantable entre ellos.

Cuando la noche cae, y la ciudad comienza a iluminarse con luces artificiales, Jake y Sunghoon se separan un poco de Sunoo para tener una conversación más privada.

—Sunghoon... —Jake comienza, mirando las luces en la distancia—. Creo que... quizás sería buena idea volver a casa por un tiempo. Hablar con Sunoo, poner en orden mi vida aquí.

El corazón de Sunghoon se aprieta al escuchar esas palabras, pero se esfuerza por no mostrarlo.

—Si eso es lo que necesitas, Jake, te acompañaré.

Jake lo mira sorprendido.

—¿Harías eso por mí?

—Haré cualquier cosa por ti, Jake. —Sunghoon da un paso más cerca, sus ojos fijos en los de Jake—. Eres mi destinado. Eso significa que dondequiera que vayas, yo voy contigo.

El aire parece volverse más pesado entre ellos, y Jake siente cómo su corazón se acelera. No responde de inmediato, pero en el fondo sabe que hay algo en las palabras de Sunghoon que le hace sentir, por primera vez en mucho tiempo, que está donde debe estar... siempre y cuando Sunghoon esté a su lado.

En la distancia, Sunoo observa con una sonrisa.

—Bueno, definitivamente voy a necesitar detalles de todo esto... pero al menos sé que Jake está en buenas manos. —Murmura para sí mismo antes de regresar hacia ellos.

La noche está lejos de terminar, y aunque había muchas preguntas sin responder, algo queda claro Jake ya no está solo, y nunca más lo estará.

Jake y Sunoo se sientan en una pequeña cafetería, lejos de la vista de Sunghoon, quien decide darles espacio para hablar. Las luces tenues del lugar y el aroma del café les brindan un extraño sentido de normalidad en medio de una conversación que está lejos de ser normal.

Jake juega con la taza entre sus manos, evitando la mirada inquisitiva de Sunoo. Su mejor amigo había esperado pacientemente, pero la verdad ya no puede seguir guardándose.

—Sunoo... lo que voy a decirte puede sonar loco. —Jake levanta la vista, su tono serio por primera vez en mucho tiempo—. Pero te juro que es la verdad.

Sunoo entrecierra los ojos, aunque una sonrisa burlona comienza a asomarse en sus labios.

—Si me vas a decir que el chico sexy con el que viniste es un Vampiro o algo así, lo aceptaré siempre y cuando no me digas que su piel brilla como diamantes bajo el sol y que te compuso una épica melodía en su piano de miles de dólares y ni pienses que no me desinflaré de la risa si alguna vez te dijo "sujétate bien monito araña".

Jake suelta una pequeña risa nerviosa antes de negar con la cabeza.

—No es un Vampiro, aunque su aura es la de uno... Sunghoon es un Híbrido... mitad Humano, mitad Lobo.

La sonrisa de Sunoo desaparece por un momento, pero en lugar de reírse o desmentirlo, frunce el ceño, pensativo.

—¿Estás hablando en serio? ¡Una parte de mi siempre fue team Jacob!

Jake asiente.

—Lo sé, suena increíble, pero es real. He vivido con ellos estas últimas semanas. Y Sunghoon... él... —Se detiene, buscando las palabras adecuadas—. Es el Alfa de su manada. Y hay algo más... Yo soy lo que ellos llaman su destinado.

Sunoo se queda en silencio por unos segundos, procesando la información. Finalmente, se recuesta en la silla y cruza los brazos.

—Bueno, supongo que eso explica por qué parece tan protector contigo. —Lo mira con una mezcla de asombro y comprensión—. No sé si entiendo todo, pero sé que no me mentirías. Si dices que esto es real, te creo.

Jake suelta un suspiro aliviado.

—Gracias, Sunoo. En serio, no sabes cuánto significa esto para mí.

Sunoo lo mira con una sonrisa torcida.

—No te emociones tanto, aún necesito conocer a este chico lobo y asegurarme de que te trate bien.

Jake ríe, pero la risa se desvanece rápidamente mientras su mente vuelve al bosque.

Hay algo en su corazón que comienza a sentirse vacío desde que dejó la manada. Los árboles, el aire puro, las voces de los otros lobos... todo eso parece estar llamándolo de vuelta.

—Jake, ¿qué pasa? —Pregunta Sunoo al notar el cambio en la expresión de su amigo.

—Es extraño, pero... ya empiezo a extrañar el bosque. —Jake admite en voz baja, como si temiera decirlo en alto.

Antes de que Sunoo pudiera responder, la puerta de la cafetería se abre y Sunghoon entra. Su mirada se dirige directamente a Jake, como si pudiera sentir su inquietud desde afuera. Se acerca y coloca una mano en el hombro de Jake, ofreciendo una sonrisa tranquilizadora.

—Eso es normal, Jake. —Dice Sunghoon, con una calidez que no parece encajar del todo con su imponente presencia—. Es parte de lo que significa ser La Luna de la manada. El bosque y la manada son ahora una parte de ti, tanto como tú lo eres de ellos.

Sunoo lo observa con curiosidad.

—¿La Luna de la manada? ¿Qué significa eso?

Sunghoon lo mira, evaluándolo por un momento antes de responder.

—Significa que Jake es especial para nosotros. Es el equilibrio, nuestra guía en tiempos de incertidumbre. Pero también significa que su lugar está con nosotros, aunque él aún esté descubriendo lo que eso implica.

Jake se muerde el labio, sintiéndose dividido entre las dos vidas que ahora parecen reclamarlo. Sunoo nota la lucha interna de su amigo y, en un gesto poco común para él, se pone serio.

—Jake, si eso es lo que necesitas, si sientes que tu lugar está allí, no voy a detenerte. Pero... —Se gira hacia Sunghoon, sus ojos brillando con determinación—. Si vas a llevártelo, yo voy también, nosotros ya teníamos el plan de irnos lejos de esta ciudad apenas terminemos con la escuela y bueno ese es un asunto concluido.

Sunghoon levanta una ceja, pero su rostro muestra algo cercano a la satisfacción.

—Eso es lo que esperaba que dijeras. Los lobos siempre reconocen a otros marginados, Sunoo. Y tú también tienes un lugar con nosotros, si lo deseas.

Sunoo lo mira con desconfianza, pero luego suelta una risa.

—Bueno, parece que soy parte de un paquete ahora.

Jake mira a ambos, sintiendo cómo su corazón se aligera un poco. Quizás no había una solución fácil, pero al menos no tendría que enfrentar esta nueva vida solo.

"𝐈𝐟 𝐈 𝐞𝐯𝐞𝐫 𝐰𝐨𝐧𝐝𝐞𝐫 𝐰𝐡𝐞𝐫𝐞 𝐈 𝐛𝐞𝐥𝐨𝐧𝐠, 𝐢𝐭'𝐬 𝐢𝐧 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐚𝐫𝐦𝐬"

𝐓𝐡𝐞 𝐂𝐚𝐥𝐥
𝟏𝟖. 𝐖𝐡𝐞𝐫𝐞 𝐈 𝐁𝐞𝐥𝐨𝐧𝐠
𝟏𝟒/𝟏𝟐/𝟐𝟎𝟐𝟒

Gracias por leer la historia ❤️