
Capítulo 6 || [EDITADO]
Conociendo a Ralph, parte 1.
Hace tres semanas que ha pasado de todo; con Barry nos hemos hecho más cercanos de lo que esperaba. Cisco y yo hemos estado en contacto con Wally, bastante como mejores amigos.
Cisco y yo convivimos cada tarde que es posible, me habla de sus planes para encontrar a los metahumanos del autobús, que al parecer eran doce y tenían que hacer lo mejor que fuera posible para poder ayudarlos o incluso ver si son las víctimas o los villanos de la historia; desde que Wally y Cisco hablaron, no se me separan.
Iris también se hizo un poco más tolerable, un poco nada más.
—¿Entonces? — Estábamos en el córtex todos nosotros mirando algo que Iris había encontrado—. Estas diciendo que encontraste algo que podría ayudarnos a localizar a todos los del autobús.
—Casi todos, el chófer al parecer murió..., suicidio.
—Oh — Cisco apareció detrás de mí, me abrazó por los hombros y traía un dulce largo, color rojo que honestamente, se había convertido en mi favorito, cuando lo mordió, se lo quité para darle una mordida yo—. Entonces, sólo nos queda ver quien más falta.
—Eso estaba diciendo, Cisco — Iris se cruzó de brazos, nos miró con un poco de duda y luego me separé para acercarme y mirar algo que me había llamado la atención.
—Hey, regresa— Dijo Barry —. Ralph Dibny, rayos — Ahí estaba también Joe quien era el policía a cargo.
—No puede ser.
—¿Quién es Ralph?
—Es un detective — Dije, todos me miraron raro—. ¿Qué? Ahí dice en la tarjeta, Investigador privado, a lo que nos lleva que es un detective.
—Sí, y es uno de los peores del mundo entero. Un policía de los más corruptos que podrás conocer.
—¿Estás bien, Barry? — Le pregunté, asintió.
—Iremos a hablar con él, veremos que podemos sacar de él.
—¿Puedo ir? Ya puedo manejar mis emociones un poco mejor, así que no tendrás problema alguno, no molestaré, ¿por favor?
— Manejas tus emociones, ¿pero qué hay de tus poderes? — Iris comentó captando mi atención —. No sabes usarlos, al menos no correctamente. Acompáñalos, pero no los uses.
— Gracias — Le dije a la morena con una sonrisa ladina, ella asintió alejándose del córtex y Barry va detrás de ella.
—¡Cisky! No me gusta aquí — Un señor apareció de la nada, ¿de qué me había perdido? Cisco me miró pidiendo ayuda, yo me encogí en mi lugar.
—Vamos, iremos a tomar algo a Jitters.
—Bueno.
Cuando se van, miro a Harry aparecer, lo miro con una sonrisa, bueno, mi enamoramiento en forma de crush ha crecido con ese hombre, más inteligente, guapo..., él me revuelve el cabello, nos hemos hecho cercanos también, me ha ayudado en algunas cosas sobre mis poderes, a entenderlos más que nada.
—Es el padre de Gypsy.
—Oh — Hasta parecía que nos leíamos la mente, Dios, este hombre me encanta.
—Bueno, vámonos Amanda, tenemos que encontrar a Dibny y de ahí, seguir nuestra vida mejor que nunca, genial.
Me alejé con Joe, Barry se quedó unos segundos más con Iris fuera del cortex, al parecer tenían que hablar de algo importante, cuando se puso a mí lado alcé la vista mirándolo por un momento.
—¿Todo bien? No tienes que venir si no quieres.
—Tranquila, sólo cosas, tenemos una historia.
°°°
Los tres fuimos al edificio donde se supone que Dibny se encontraría en ese momento, todos las puertas del pasillo tenían nombres e incluso oficios en los que se encontraban, hasta que llegamos al de Dibny, no dudamos que haya sido el de él porque una chica salió llorando con algunas fotografías en las manos, los chicos dijeron algo entre ellos y en eso tocaron la puerta para abrirla.
—¿Lo consideró? — Dijo al que estábamos buscando, hasta que giró su silla y lo miramos, o al menos por un momento sentí que me miraba a mí. Sí lo conozco —. Oh, detective Joe West..., Barry Allen, o mejor dicho, novato — Sus ojos ahora sí captaron los míos, sonrió de lado—. Tú has de ser una dulzura, ¿qué buscas? ¿Necesitas ayuda en algo? Se nota en tus ojos que buscas algo más que ayuda, tal vez ¿diversión?
—¡Guarda silencio, Ralph! — Barry se metió entre la conversación, sonreí de lado y Ralph lo miró esperando una respuesta.
—Ralph, estamos aquí para una pregunta. — Joe fue el que habló después.
—¿Estuviste hace tres semanas en un autobús alrededor de las 3 de la tarde o 5? — Continuó Barry.
—Eso es muy específico, realmente demasiado, es como si me preguntaras cuántas veces me acuesto o voy al baño entre más cosas... — Ralph parecía evitar la pregunta, pero Barry no lucía muy contento con eso.
—Contesta, sí o no — La manera en la que Barry hablaba me preocupaba un poco, así que me acerqué por detrás tomando su hombro, él me miró, luego sonreí mirando a Ralph, quien analizaba la escena.
—No — Entonces negué, me acerqué a su escritorio, analicé su rostro—. No me intimidas.
—Ni tú a mí— Contesté —De todas maneras, se sabrá la verdad luego.
—¿Por qué lo dices?
—Porque yo si te recuerdo, me pagaste mi boleto.
—¡Ah! Cierto, tienes razón. Tú eres la que se escapó de la estación de policía — Negué para alejarme dándole la espalda.
—Nos vamos — Joe dijo, asentí y Barry se puso detrás de mí.
—¡Hasta luego muñeca! Aquí estoy los trescientos sesenta y cinco días del año para ti, mi número está en mi página web.
—Cierra la boca, Dibny — Barry giró en unos segundos, se acercó intimidante, Dibny se levantó de su lugar, yo tomé la muñeca de mi amigo deteniéndolo, colocándome enfrente de él.
—Barry, vámonos.
—Sí Allen, hazle caso a tu dueña.
— Ten mas respeto de como te diriges a Amanda, Ralph — Barry en un rápido movimiento ya lo tenía agarrado del cuello de la camisa.
— Amanda...— Repitió mi nombre con una sonrisa burlesca —. Así que ese es su nombre, nada mal para una dulzura.
— Barry — Insisití, el nombrado me miró entendiendo que no debía de hacerle caso, de por sí era difícil hablar con él.
—Te odio, Dibny— Barry lo soltó al decir esas palabras.
—Mutuo.
Barry se fue cuando lo empujé de la espalda, Joe también detrás de él, yo fui la última en salir, mis ojos fueron directo al chico que antes estábamos interrogando recibiendo una mirada un poco incómoda por la situación, relamí mis labios con mi rostro serio, cerré la puerta y me fui con los chicos que decían algunas cosas sobre que seguía siendo el mismo idiota que siempre.
—No saben cuánto lo odio, no lo soporto.
—Barry, te dije claramente que si no querías venir estaba perfecto, nosotros pudimos manejarlo — Al salir de su lugar del detective, Joe y yo nos detuvimos por unos segundos mirando al enojado Barry.
—¿En serio? ¿Y qué hubiera pasado si se hubiera propasado contigo? ¿Si hubiera hecho algo que...?
—Barry — Tomé ambos de sus brazos analizándolo—. Sé cuidarme sola, ¿sí? Aparte, Joe venía conmigo.
—No, tú no entiendes Amanda. Tengo años conociendo a... — Interrumpí.
—Lo que entiendo es que Ralph te trae de cabeza hacia abajo, así que mejor vámonos antes de que quieras hacerle algo en un flash.
Al momento de salir del edificio, los chicos comenzaron a hablar sobre que era un mentiroso y que pronto se sabrá si en realidad sí estaba o no en el autobús, tal vez yo no les dije con claridad que lo conocía, pero él debía de decir algo, yo no podía por lo que había aprendido en este tiempo con los policías alrededor mío.
Cuando íbamos pasando, escuchamos un grito, por lo que nos devolvimos y miramos a Ralph colgado del techo boca abajo, con sus piernas más largas de lo normal, abrí mis ojos par a par porque no podía creer lo que estaba viendo. ¡Era como plástico! El hombre alargado, uy, a Cisco no le va a gustar que nombre a uno.
°°°
Tras de regreso a los Laboratorios, estábamos al lado de Ralph intentando ayudarlo y calmarlo tras los gritos de perra loca que tenía, tomé uno de sus brazos a lo que recibí una mirada amenazadora culpándome por unos momentos de haber estado con él en el autobús, pero luego giró a gritarle a Barry que no tenía la culpa de nada, Joe tuvo que callarlo a gritos al lado de Harry, yo quería reírme y bueno, Cisco se había escapado del café con su "amigo".
—Uy, te mereces un nombre...
—¡El hombre Alargado! — La mirada de Cisco era toda una poesía, reí demasiado tras verlo así, pero una mano en mi brazo me hizo dejar de reír.
—Lo que me está pasando... ¡no es gracioso! — Negué hacia el muchacho que estaba asustado con un rostro de que probablemente jamás vuelva a estar como antes.
—No Ralph, sólo da mucha risa —Me alejé de él con una sonrisa juguetona y sarcástica, aún estaba algo incómoda o molesta por cómo me habló.
—Eres una...
—Ralph, tranquilo, buscaremos como ayudarte— Barry le interrumpió antes de que dijera algo de lo que podría arrepentirse después.
—Tú culpa Allen, lo vuelvo a decir.
—Oh vamos, ¿no puedes pasar ni un minuto peleando?
—¿Qué me está pasando?
—Brillante, la materia oscura polimerizó las células de Dibny — Dijo Harry mostrando la pantalla de la Tablet que traía en sus manos la cual transfirió las células hacia nosotros, eran algo extrañas.
—¿Qué rayos es la materia oscura y por qué está en mis células? — Gritó el chico mientras hacía una cara de asustado.
—¿Estás diciendo que las paredes celulares de su cuerpo son elásticas? — Caitlin mencionó entusiasmada.
—Tiene un enlace indestructible a nivel atómico y ahora puedes estirar y estirar las células — Harry le mencionó.
—Como masilla plástica — Continuó Caitlin.
—Masilla — Harry le siguió, me encantaba como ambos hablaban sin que yo pudiera entender ni la mitad de lo que han dicho.
— Carajo, que sexy se ve hablando de células y esas cosas — Dije con mis brazos cruzados, Cisco carraspeó a mi lado lo que provocó que le mire un poco apenada—. Lo siento. —Parecía que solo él me había escuchado y agradecía eso.
—¿Soy masilla plástica? — Ralph preguntó asustado y casi al borde del llanto, aunque si era honesta, se miraba un tanto gracioso.
—No — Barry y Caitlin dijeron al mismo tiempo para intentar calmarlo, pero Harry es más frío y le dijo que mas o menos sí lo era.
—¿SOY MASILLA PLÁSTICA? — Dijo ya más alterado.
—Ralph — Interrumpió Joe mientras este le miraba—. ¿Quiénes eran los chicos del techo? —Yo me acerqué a ver más sus piernas, era bastante interesante.
—¿Ese es el tema más importante ahora mismo? Sólo... ¡MI-REN-ME! — Tomó a Barry del cuello de su chaqueta para atraerlo a él—. Allen, tú y los laboratorios deben repararme.
—Tratamos de ayudarte.
—Claro que no.
Ni que decir después, comenzaron a pelearse entre ellos diciendo incoherencias, sobre de quien es la culpa, quien no, que se callen, que deben repararlo entre más. Al igual que Barry le dijo que tenía suerte literalmente sí, de estar vivo y tener poderes que lo harían indestructible.
Ralph le gritaba que lo provocara, dando aires de superioridad. Yo ayudaba a que se callaran al lado de Harry, ambos nos miramos y no aguantamos la risa. Es increíble como ambos nos habíamos hecho cercanos y podíamos reírnos de cualquier cosa.
—Podemos hacer esto más tarde, necesito una muestra de sangre.
Dijo Caitlin a la misma vez que tomaba la mano de Ralph y se estiraba como arcilla, abrí mis ojos sorprendida por lo que veía, pero Caitlin se asustó por tomarla de sorpresa y la mano se fue al suelo, ella le pisó y se sostuvo del talco de bebé que estaba ahí por inercia, para después ver como Dibny estornudaba.
Lo que podría decir es que Joe finalmente vomitó tras todo lo que había visto en años.
—¿Esta es mi cara? — Preguntó, con una voz algo rara, sus ojos lucían algo asustado y bueno, no lo dudaría porque bueno, nadie quisiera ver su propia cara trastornada.
—Cuatro años de esto y por fin vomité.
Los chicos se alejaron del lugar mientras yo me quedé a su lado mirándolo con algo de gracia, su rostro comenzó a formarse de nuevo, me miró algo pálido y suspiré tocando su hombro con algo de tranquilidad y compadecida del chico.
—¿Tú tienes algo como esto? Estuviste en el autobús — Me preguntó, calmado.
—Podría decirse, mi poder es algo innombrable, porque honestamente no sabemos bien que más pueda hacer con el — Me encogí de hombros tomando un poco de su sábana y jugando con esta—. Sólo se que puedo manejarme con mis sentimientos, si estoy muy molesta o desesperada, puedo lanzar una onda... — Entonces él comenzó a roncar, hice una mueca, me crucé de brazos y luego abrió sus ojos mirándome.
—¿Qué? ¿Qué pasó? — Negué. Él preguntó como si hubiera despertado a penas.
— Idiota.
— Uy, cuidado con ese carácter.
—¿Alguna razón en específico que seas así? Como idiota, claro. Pero bueno, no importa, iré a ver si han descubierto como ponerte en orden. — Le dije para darme media vuelta soltando mis brazos.
—Oye — Tomó mi muñeca en cuando me di media vuelta, volví a él esperando a que me fuera decir lo que tuviera que decirme —. Tengo miedo, es claro, pero como hombre no lo admitiré así que finge que no dije eso. Por lo tanto, ¿podrías quedarte conmigo cuando lo necesite? Ya sabes, aprender a controlarlos y así.
—Claro. No es que me quede de otra, ¿o si? — Le sonreí.
Asentí, nos quedamos un momento en silencio, por lo que decidí decirle que me iba a retirar para ir con Caitlin y así poder ayudarle con lo que fuera hacer para Ralph, pero de lugar de eso me encontré a Barry y ellos hablando en forma de una discusión.
—Aún — Alcé la vista mirando a lo que hablaban—. Él es un hombre malo, lo conozco, créeme — Al parecer Barry creía que podría hacer algo malo, me sentí mal por un momento.
—Barry, juré ayudar a otros. Soy médica. No puedo dejarlo, así como espagueti — Dijo Caitlin, miré lo que Barry hacía en el pizarrón, los chicos se sorprendieron un poco a lo que Iris interpuso.
—¿Villanos?
—Sí, cada persona del autobús es ahora mil veces más peligrosa que antes. Incluyendo a Dibny — Dijo, señalando la fotografía que tenía sobre él sobre el pizarrón.
— ¿Que antes? Ni siquiera sabemos cómo eran antes. — Le dije captando su atención.
— Sabemos de Ralph.
—¿Y si cambió? — Pregunté.
—La gente no cambia — Me miró por unos segundos, no tenía ninguna expresión y lo podía saber con exactitud. Giró después hacia Caitlin.
—Yo sí. Cuando me convertí en aquello, creíste en mí.
—Tú eres una buena persona. Él..., no lo es.
—Barry, ¿qué tal si tu y yo vamos a la oficina de Dibny para encontrar la muestra que necesita Caitlin? Papá, tu ve a la policía a ver por qué Dibny estaba en riesgo con ellos. Vamos — Se acercó a Barry, no sin antes que Joe dijera que sí a su jefa, solté un suspiro pesado mirando a Caitlin, ella sonrió triste, entiendo como se ha de sentir después de todo. Porque yo también me sentía de la misma manera.
°°°
Regresé a la habitación de Ralph para ver cómo se encontraba a petición de Caitlin, dormido, miré un libro que estaba por ahí, lo tomé y comencé a leer en voz alta, era sobre algo de detectives, tenías que averiguar quién pudiera haber sido la persona que asesinó al niño y al padre, la primer sospechosa era la mamá, pero se encontró limpia.
Habían buscado miles de razones por las cuales pudiera haber sido, al final el resultado fue el vecino. Ridículo.
Después era otro caso sobre una chica encontrada muerta, intentan averiguar qué es lo que había sucedido, buscaron en todos lados, desde sus amigos y su novio, también su familia, es un caso donde la policía nunca descansó, escuché como Ralph tenía abiertos sus ojos, mirándome con una sonrisa amplia.
—Se suicidó — Fruncí el ceño —. La chica de la que estas leyendo, se suicidó. La chica era muy inteligente, plantó muchas pistas, intentando inculpar para que al final entendieran que se suicidó por toda la presión que ejercía.
—¿Cómo lo supiste? — Dije viendo el final de la historia.
—Soy un detective.
—Yo digo que ya habías visto este caso antes, no me engañas — Le insistí, pero él negó, aunque al final lo admitió.
—En una serie, fue muy interesante — Reímos, hasta que la puerta se abrió de golpe mostrando a un Barry enfurecido —. Es mi buen amigo, Barry Allen.
—Alguien voló tu oficina — Me miró, yo a él; después volvió hacia el chico frente de él en camilla.
—Genial —Dijo riéndose, bajé la mirada rascando mi nuca, era algo incómodo—. Un reclamo para el seguro.
—Mi prometida y yo casi morimos.
—¿Conseguiste a la hija de West?
—Bueno...
—Vaya. Todo te está saliendo de maravilla. El trabajo, la chica — Alcé la vista para ver a Ralph, pero él ni siquiera miraba a Barry hasta que le preguntó lo siguiente.
—¿Quién intenta matarte, Dibny? — Por fin le miró.
—¿Sabes a cuantas personas hice enfadar en los últimos cinco años? Esposos enfadados, esposas enfadas. No tratas con la alta sociedad cuando fotografías adúlteros.
—¿Por qué hablas con el alcalde? — Confundida, miré a Barry, no tenía ningun signo de mentira. Dejé el libro sobre la mesa mirando a Ralph desde donde me encontraba, él me miró por unos segundos volviendo al que le hablaba.
—¿Quién dice eso?
—Tus registros telefónicos.
—¿Conseguiste una orden para eso? Se que haces todo por la ley — Dijo sonriente, oh Ralph.
—¿Cuál es tu asunto con el alcalde Bellows?
—Ninguno. Solo lo llamo y le digo que hace un trabajo estupendo— Ralph comenzaba a hacerse escuchar de forma sarcástica, no estaba bien.
—Quince veces, lógico.
—¿Quince veces? — Pregunté, Barry me miró diciéndome que no me metiera, y creo que ahora mismo debería irme, pero, algo me dice que me quede, esperando a que Barry no lo mate.
—Doce veces marqué con mi trasero.
—Está bien, como sea. De todas maneras, hablaremos con el alcalde. Es un gran admirador de Joe.
—Sí, háganlo.
—Está bien.
—Yo me quedaré aquí, a estirar las piernas— En cuanto Barry cerró la puerta sacándome un brinco por la fuerza que usó, miré a Ralph, él parecía un tanto avergonzado, negué suspirando pesadamente.
—Sea lo que sea Ralph, yo no te voy a juzgar, todos necesitamos algo incluso desde la persona más alta del país en todos sentidos, confiaré en ti porque yo tampoco tengo el historial magnífico, ¿ok?
—¿Qué hiciste...?
—Es lo único que te diré, ahora me iré a buscar a Cisco por si quiere ir a buscar más metahumanos y comer dulces ácidos.
—¿Te gustan los dulces ácidos?
—Mis favoritos con salsa chamoy. Oh y, no creas que por creerte esta vez no estoy molesta contigo por cómo me hablaste en tu oficina, ¿entendido?— Le miré apuntándole con mi dedo índice.
— A sus órdenes, capitán.
Sonreí despidiéndome de él, salí por la puerta y fui en busca de Cisco sin éxito de encontrarlo. Por otro lado, miré a Harry quien estaba en una tableta haciendo quien sabe que cosas que cuando iba a hablar, él me hace un gesto de silencio haciendo que vea a Cisco salir de la alcantarilla, me sorprendo riéndome.
—¿Qué? No lo veía venir — Dije sarcásticamente.
—Gracias dulzura, eres muy amable. No te preocupes por mí, si muero no me llores.
—Ramon — Harry habló mientras yo reía—, ¿crees que es seguro escabullirse en un lugar tecnológicamente armado?
—Es más seguro que lo que yo enfrento — Me acerqué tomando una gomita ácida, le ofrezco una y parece no verme, estaba preocupado y pensativo, en eso cuando muerdo la gomita, me toma de los hombros mirándome horrorizado—. Están cazándome.
—Del verbo casar con Gypsy o cazar para comerte en una deliciosa barbacoa.
—Ja, ja. De la barbacoa.
—El café salió mal, anotado — Cisco se giró mirando a Harry, yo tomé la bolsa de gomitas colocándome al lado de Harry ofreciéndole, agarró una sin dudarlo y la mordió mientras miraba al desesperado chico frente de nosotros.
—Bueno... El papá de Gypsy quiere cazarme durante 24 horas para ver si soy merecedor de su hija. Sin poderes— Ambos asentimos al ver como explicaba su situación. —No sé qué diablos debo hacer con esto.
—Enfréntalo — Dijimos al mismo tiempo comiendo otra gomita.
— ¿Hay salsa chamoy? — Preguntó Harry. Asentí tomando la salsa que estaba sobre una de las mesas, se la entrego y le pone a su gomita comiéndosela y chupando sus dedos tras mancharse un poco.
—Lo juro, parece que escuchan, pero solo asienten mientras piensan en otra cosa.
—Cisco, usa tu cerebro — Comencé a decirle—. Eres más que sólo Vibe, más que un. Superhéroe guapo e inteligente. Eres un técnico, ingeniero, con muchísimas formas de poder usar la tecnología para engañarlo, haz una trampa y listo — Me encogí de hombros, Harry se levantó mirándome con sus manos en la cintura.
—No podría haberlo dicho mejor — Miró a Cisco, él negó y luego pensó. Comenzó a tomar muchas cosas buscando aprobación en el taller de Harry sobre sus cosas—. Sí, sí..., demasiado, no — Dijo conforme tomaba algunas cosas.
—¡Cisky, Cisky! — Gritó alguien, Cisco me miró preocupado, le ofrecí una gomita a la mitad, la tomó y salió por el mismo lugar de donde entró, negué para tomar el chamoy y ponerle a la gomita comiéndola, el padre de Gypsy apareció enfrente de nosotros con su rostro que da más miedo que buenos deseos—. ¿Dónde está?
—Aquí no —Negué.
—Puedo olerlo.
—Se fue por allá — Harry señaló sin ver, el señor aún me miraba y le ofrecí una gomita, la tomó, se la comió y se fue. En cuanto quedamos solos miré a Harry quien también me miraba.
— ¿Qué?
— ¿No pudiste darle chamoy?
—Si no tuvieras la edad de lo que podrías ser un padre, te juro que ya serías mío.
—Ponte a trabajar — Me empujó con su pie de forma juguetona sobre mi pierna al lado de mi cadera, ya que estaba sentada en el escalón que había donde él recargaba sus pies.
Continué riéndome más de lo que imaginaba.
°°°
Más tarde volví al córtex con Caitlin, ella me enseñó la fórmula que podría ayudar a Ralph a poder estar como una persona normal, o al menos su cuerpo. Entramos juntas a la habitación mirando la cara de preocupación.
—Me tiré un gas. No sé si todo sigue como debe allí abajo.
—Oh, Ralph— Dije bajo riéndome un poco.
—Bebe esto.
—¿Qué es? Yo no sólo bebo cosas.
—Tiene 17% de alcohol.
—Hubieras dicho eso primero, hermana — Dijo para tomárselo de un solo trago, negué cruzándome de brazos para luego ver como comenzaba a hacer unas muecas que me causaban demasiada gracia, Caitlin también tenía una sonrisa demasiado grande—. Oh, ¿qué era eso?
—Era un suero, con algunas cosas para poder restaurar tus células, y memoria muscular.
—¿Memoria muscular? — Asentí junto con Caitlin, de la nada todo su cuerpo volvió a la normalidad, pegué un leve brinco sobre lo que acababa de ver, luego se levantó, alzó su camisa dejando ver su vientre regordete para después ver como de la nada comenzaba a desaparecer. — ¡Regresé! Luzco como un Hemsworth.
—Demasiado Ralph, no te reconozco, ¿eres Chris, Liam? — Hablé sarcásticamente.
—Muy graciosa, niña — Niego, Caitlin se va dejándonos solos por unos momentos, me siento en su cama y él no dejaba de verse en el espejo, había hecho que desaparecieran pequeños "defectos" que él tenía en su rostro, o al menos eso me decía.
—Te ves bien, no creo que eso vean los demás.
—Tengo que verme como Chris, o tal vez Liam — Me guiña un ojo.
—Vamos a que Caitlin tome tus signos vitales a ver como estas.
—Guapo y muy vivo, gracias a lo que me dio Caitlin... — Dijo, me levanté para ir a la puerta y pasar al córtex, pero él me detuvo estirando su manos hacia mí, me giré mirándolo al tomar mi brazo—. Gracias.
Yo solamente sonreí ante aquellas palabras, asentí amablemente y moví mi cabeza dándole una señal de que me siguiera hacia el córtex. Él me siguió.
En el momento que llegamos al córtex, Caitlin preparó el brazo de Ralph para tomarle sus signos, Iris miraba con atención y yo estaba sentada en la silla en medio del córtex sintiéndome algo tranquila de ver cómo todo estaba normal en el chico.
Joe y Barry llegaron minutos después donde miré al mayor sonriéndole, él asintió, pero Barry me ignoró por completo yendo directo con Ralph con su rostro demasiado molesto.
—¿Estás chantajeando al alcalde?
—Típico de Barry Allen, entrar y acusar a alguien — Miré a Ralph en ese momento, analizando la manera en la que su cuerpo se movía.
—Sabemos de las fotos, Ralph.
Joe habló, me levanté para colocarme al lado de Joe, Iris me miró por unos momentos mostrándome un poco las fotografías que habían dejado por ahí provocando que rascase mi brazo en forma de ansiedad, cuando me doy cuenta intento detenerme sintiendo la mirada de Ralph encima mío por esos segundos, aunque la aparta de inmediato.
—Bellows nos contó todo.
—Yo no soy el que le dijo que engañara a su esposa.
—Ralph... — Susurré, pero no me escucharon. En definitiva ya nada era tranquilidad ahora.
—¿Esa es tu defensa? Es su culpa de que lo extorsiones — Dijo de forma sarcástica Barry.
—Es fácil para ti decirlo, ¿no? — Dijo quitando la cosa aquella de los signos que traía en el brazo para acercarse un poco—. Con tu laboratorio, tu empleo y tu novia sexy. La gente como yo solo sobrevive de un cheque al otro. Y no tendría que vivir así si no hubiera perdido mi trabajo por tu culpa.
—¡Tú mismo causaste eso! Manipulaste las pruebas, incriminaste a ese tipo.
—¡Porque era culpable! Mató a su esposa e iba a salirse con la suya — Dijo Ralph exaltado, tragué saliva y él se acercó a Barry señalándolo—, y luego lo dejaste libre —. Barry se rio de forma burlesca, por un momento quería golpear a Barry en la cara.
» Yo era un buen policía, un buen detective —Pude ver la reacción de Caitlin, parecía que lo entendía en unos aspectos, pero no era la única que se sentía así—. Lo perdí todo — En ese momento, sus ojos viajaron por toda la habitación mirando a Iris, Caitlin y terminó conmigo, abrió sus labios para decir algo, pero se quedó en silencio como si pensara que mas decir —. El alcalde tiene mucho dinero, puede compartir un poco. Considéralo la pensión que tú me quitaste.
—Los buenos no creen que sea noble destruir las vidas de otros. Eras corrupto antes, eres corrupto ahora. Vive con eso —Ralph ya no tenía nada que más hacer ahí, al menos hasta que Barry lo tomó del brazo—. No irás a ninguna parte.
—Suéltame —Ralph iba a golpearlo, pero Barry se agachó rápido y luego lo golpeó en el rostro, pero su mano se fundió en su cara, al sacarlo Ralph le miró con su rostro consternado—. Gracias por arruinar mi vida dos veces, Allen.
En el momento en que Ralph pasó a mí lado, no me miró en ningún momento, rozó un poco su brazo con mi hombro tas lo alto que era, escuché apenas un "lo siento", asentí soltando un suspiro golpeando con mi puño levemente en la mesa, me doy media vuelta para ir detrás de él.
Era la extraña necesidad de perseguirlo; podía sentir como algo en mi pedia que no lo dejara ir, que había algo en él que me agradaba en cierto punto, o al menos es la extraña necesidad de que la persona ha pasado por mucho, ha hecho cosas y uno puede cambiarlo, pero la voz de Barry me detiene.
—¿Qué haces? ¿Ya te vas?
—Sí, Barry — Dije de forma calmada, pero él seguía molesto.
—¿Vas a ir detrás de ese idiota? Si te vas creo que podría decir que también tú eres una.
Dijo, me sorprendí por lo que dijo que volteé a verle; Iris le susurró algo, él cambió su mirada y alcé mi mano en cuanto él quería decir algo. No iba a dejar que me hablara así, mucho menos cuando comenzaba a tomarle cierto cariño.
—Yo sé lo que se siente hacer lo posible por conseguir algo de dinero, por sentirse bien conmigo mismo, él necesitaba algo para sentirse feliz, lo entiendo — Le mencioné—. Lamento que me creas que soy una idiota, no era mi intención, pero creo que nadie puede complacer a nadie aquí.
Tras decir eso, me alejé del córtex yéndome por el corredor a la salida, presionando el botón del elevador. Corrí al ver que Ralph salía por la puerta principal del lugar para poder alcanzarlo en cuantos las puertas del elevador se abrieron; al ser tan alto tenía que duplicar mi velocidad para poder ir con él, pero no miré a Cisco venir contra mí que me golpeó algo fuerte tirándome al suelo, no corras, me repetía en mi cabeza.
Gemí de dolor sintiendo como algo me tronaba en el hombro.
—¡Amanda! — Gritó Cisco, grité al parecer un poco fuerte, porque Ralph estaba a mí lado mientras Cisco enfrente mío.
—¿Estás bien? — Dijo el más alto.
—Sí — Me ayudaron a levantarme y jadeé, el dolor en el hombro era cada vez más fuerte, entonces negué—. No.
—Te llevaré al médico— Ralph dijo rápidamente.
—Lo siento Amanda, prometo recompensarlo ¿sí? Tengo que correr — Entonces se acercó, besó mi frente y se fue corriendo—. ¡NO CORRAN, ES MUY CANSADO! — Escuché que gritó, sonreí tierna al verlo, solté un suspiro y luego Ralph esperaba a que me moviera o dijera algo.
—Intentaba alcanzarte.
—¿Por qué me intentarías alcanzar? — Sonreí con mi mano en mi hombro, él parecía algo nervioso o incómodo por tenerme que ver tras la pelea.
—Porque yo te entiendo, a parte, creo que soy una idiota.
—Algo me dice que ambos lo somos — Me dio un leve golpe en el hombro mientras reíamos, pero fue mala idea que la risa se transformó en dolor, él hizo una mueca—. Ups.
—Llévame mejor al doctor ya.
—Lo que usted ordene, capitán.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro