— Barry, tenemos un robo en Laboratorios Ivo— Cisco dijo, yo miraba qué rápido corría el chico, sonreí mientras comía algunos palillos rojos de caramelo—. Dos hombres armados buscan diamantes para conductores—. Miré como Barry se pasaba y reí.

— ¡Oye, frena! Te has pasado — Dije—, como por unas 18 cuadras — Cisco y yo nos miramos con una sonrisa.

— Lo que encontré— Escuché la voz de Barry, aunque se me hacía algo completamente diferente, ¿amanecería enfermo?

— Qué alegría por ir a trabajar. Es demasiado temprano para esto. — Giré los ojos tras lo que dijo Cisco, mirando a Ralph quien se sentaba en unas sillas giratorias, me acerqué besando su mejilla.

— ¿Estás bien?— Pregunto.

— Claro.

— ¿En serio? — Él asintió, volví hacia donde Cisco ayudándole con Barry, escuchamos la conversación, pero él no hacía nada—. ¿Qué haces Barry? Golpéalo con un rayo.

— Le has fallado a esta ciudad. — Miré confundida a Cisco, él bebió un poco de lo que tenía en su taza.

— Creo que esa frase no es tuya — Miré el nivel de energía de Barry que emitía a traves de su traje y me sorprendí.

— ¿Todo bien, Barry? Tus niveles de adrenalina están por las nubes— Murmuré.

— ¿Todo bien?— Cisco habló, ambos estábamos juntos mirando la imagen simulando a Barry con su traje y podía verse que realmente lucía exaltado ante algo. — ¿No es demasiado? Los policías van en camino, deja que ellos se ocupen ahora.

— Raro — Dijimos al mismo para yo volver con Ralph y darle un dulce mientras miraba a Cisco de manera rara y después a mí — ¿Qué?

— Ustedes dos hacían linda pareja, la verdad — Sentí las mejillas arder, miré a Cisco algo nerviosa ante las palabras de Ralph, él también me miró bastante confundido—. No entiendo por qué terminaron.

— Fácil...— Dije para mí misma.

— Ralph, no creo que sea adecuado.

— Barry viene en camino, mientras lo espera Caitlin para hacerle un chequeo, yo iré por las gomitas al taller de Harry — Les digo alejandome de ahí lo más rápido posible.

En el pasillo sentí una energía muy extraña, alcé la cabeza y pude ver como se transmitía a traves de mí una extraña imagen sobre mí de pequeña, con Malcom. ¿Qué hacía con Malcom?  Parpaeé confundida y miré a Barry llegar con su velocidad, relenticé el tiempo, miré a Barry, pero él no era Barry.

Al volver a la normalidad, chocó contra la pared. Me asusté que me acerqué a ver que es lo que ocurría.

— ¿Quién eres? — Pregunté algo confusa, sabía que él no era mi amigo.

Él me miró algo confundido por lo que ocurría, hasta que intentó acercarse y yo abrí mis manos mostrando mi poder.

— ¡Espera! — Alcé una ceja —. Me llamo Oliver Queen y no sé qué hago aquí ni por qué la gente me llama Barry.

— ¿Oliver quién?

— ¿No has oído de...? Olvídalo. Soy amigo de Barry, en mi ciudad me conocen como Flecha Verde.

— Mm, no sabía que eso existía.

— Tenemos muchis crossovers, creo que este es uno de ellos — Asentí, me acerqué y estiré mi mano.

— Mucho gusto, soy Amanda. ¿Tienes alguna idea de qué haya sido lo que ocurrió?

— Podría decirse que Barry viajó al pasado, o arruinó la línea temporal, pero no parece ser nada de eso — Me encogí de hombros —. En ese caso, tú sabrías que soy Barry.

— Pues claramente no lo eres, así que vayamos con Caitlin.

— Puedes... — Se detuvo mirándome y hablandome en silencio, como si fuera algun secreto —. No decir nada.

— Claro.

— Así que ¿está bien, Caitlin? — Iris preguntó mientras Cait le hacía un escaner para ver si tenía alguna anomalía, yo me crucé de brazos relamiendo mis labios mientras miraba a Oliver. Caitlin solamente asintió con una bonita sonrisa —. Gracias a Dios — Oliver parecía que perdía la cabeza.

— ¿De veras? ¿Ninguna anomalía? ¿No tengo un tumor cerebral? ¿Nada de eso? — Ralph traía un traje como siempre, aunque cada vez que lo veo se me hace tan guapo. Un poco más cada vez.

— Barry, estás en perfecto estado — Cait insistió en que estaba bien, pero yo sabía que no era cierto. Oliver me miró con sus labios sellados en una línea.

— Cariño, ¿de qué hablas? Mira estos abdominales— Giro los ojos, que casualidad, a Barry ni siquiera le había dicho eso. Tremendo, sorprendente Iris—. Y son todos míos.

— Cielos...— Susurré bajo, Ralph me tomó de la mano mientras me atraía a su cuerpo el cual abracé sin dudarlo dejando un beso en su mejilla parandome de puntitas. La voz de Oliver llamó mi atención.

— ¿Podrías evitar las muestras de afecto en el trabajo? — Bien hablado Oliver.

— ¿Desde cuándo? Siempre dices que "tocarse es tu idioma de amor". — Miré a Ralph al sentir su voz rebotar en mi oído por su pecho.

— Es verdad Ralph— Caitlin apoyó.

— Me parece que es muy desconsiderado con ustedes — Insistió Oliver.

— Hablamos de esto — Cisco habló, le miré algo confundida, él se acercó a abrazar a Oliver quien para sus ojos era Barry —. Ya superé a Amanda. ¿Está bien?— Pude sentir la mirada de Oliver sobre mí mientras yo miraba sorprendida como Cisco hablaba como si nada y fuera toda mi culpa.— Pero gracias por tenerlo en cuenta. Estaré bien. — Él se separó del abrazo mientras yo continuaba sintiéndome ofendida y minimizada.

— Ya vuelvo — Susurré a Ralph para seguir a Cisco quien se había ido de ahí, llegué y toqué su hombro intentando detenerlo —. Hey.

— ¿Amanda? ¿Qué pasa?

— ¿Piensas que yo no tuve que superarte? — En efecto me sentía bastante ofendida.

— Emm, ¿no? Digo, tuviste a Mick a Ralph, incluso Wally te ayudó ¿y qué obtuve yo? No sabes lo que yo sufría y lo que hice para superarte.

— ¿Perdón?— Me crucé de brazos—. Yo sí sufrí a mi manera, me revolqué en mi cama y Barry fue el único que estuvo conmigo ¿sabes por qué? Porque tu ya te habías ido sin decirme nada. ¡Nada! Y Ralph había muerto, su cuerpo había sido tomado por DeVoe. Harry perdió su inteligencia, mi hermana acababa de morir, Tori también y tú, minimizas mi dolor.

— No seas ridícula...

— ¿¡Ridiícula!? Eres tan injusto. Injusto que yo sufra, pero no pueda hacerlo porque su sufres más que yo cuando yo he perdido más que tú.

— Mi hermano murió, mi familia no lo supera y yo no soy nadie para ellos.

— Mi hermana ha muerto frente de mí, dos veces. Mis padres no me quieren, mi padre me golpeaba y siete años después descubrí que no era mi padre, sino, que mi padre era un loco maniático que anda matando a medio mundo y me quiere muerta a mí. Mi mejor amigo se fue, mi primer amor (al que yo amaba) me dejó por tres meses sola, mi mejor amigo casi padre perdió su mente, mi hermana volvió a morir por culpa de mi padre biológico, mi mejor amiga fue asesinada por mi padre biológico, el amor de mi vida fue arrebatado de su cuerpo y murió frente de mí y casi lo pierdo igual por culpa de mi padre biológico — Dije, él se quedó en silencio —. No eres el único que ha sufrido, Cisco.

— Nunca me habías dicho que me amabas — Y caí en la cuenta de mis palabras, suspiré bajando la mirada subiéndola después rascando mi ceja.

— Sí bueno, supongo que es muy tarde para eso, porque ahora yo amo a otra persona que se merece mi amor y yo me merezco el de él.

Cisco se quedó de pie, mirándome, yo me di media vuelta para salir de ahí para irme a mi casa. Necesitaba un momento para mí sola, sin que nadie me molestara, pero fue algo imposible.

Randha y Marcus llegaron a mi casa como si fuera la de ellos, suspiré para verlos entrar. Estaba aventada en el sofá demasiado cómoda que no iba a moverme en lo absoluto.

— Hola mami — Marcus se acercó dejando un beso en mi mejilla, sigue siendo raro —. Trajimos helado sabor pistacho.

— Delicioso.

— ¿Estás bien?— Preguntó Randha—. Siempre traes esa cara después de una discusión fuerte con Iri-, con alguien.

— ¿Ibas a decir Iris?— Ella se quedó en silencio—. N importa— Resté importancia —, tuve una discusión con Cisco.

— Sí nos enteramos — Marcus habló, sonreí para levantarme y ver que traían algunas cosas en bolsas de plástico, pude ver que ya había una pizza recién hecha sobre la mesedora de la cocina.

— ¿De dónde es la pizza?

— Dominos.

— Rico — Dije abriendo la caja sintiendo el olor inmediatamente sobre mis fosas, quité un pepperoni comiéndolo. Giré a ver a Marcus quien tenía una sonrisa que se fue deshaciendo mirando hacia mis ventanas, giré encendiendo mi habilidad de relentizar mirando un extraño robot atravesando mis ventanas.

»— ¡Llévate a Randha, ya!

Dicho esto, Marcus agarró a su hermana llevándosela de ahí, yo hice mis manos puños viendo como se adentraba cada vez más y giraba a verme, fruncí el ceño viendo como el robot me golpeaba lanzandome contra la nueva televisión que me habían regalado. Me levanté disparandole a la vez que gritaba gastando mi poder; rápidamente tomé mi celular tocando la pantalla como Cisco me había dicho la primera vez, al alzar la vista el robot me tomó del cuello.

— Transferencia de poderes, nombre Explosive, nombre real Amanda Speerling — Habló el robot—. Amanda Blake, tengo órdenes de destruirte.

— ¡Amanda! — Escuché la voz de Ralph, entonces un golpe en mi cabeza me aventó al suelo sintiéndome mareada al instante y una punzada bastante fuerte e insoportable.

Sentía una dura superficie, me sostuve recargándome sobre mi espalda alzando la vista sorprendiendome por ver a Ralph siendo lanzando a un lado mío, el robot se acerca tomándome de nuevo de mi cuello, me sostengo de su mano golpeando sin tener alguna respuesta.

— Déjame mostrarte tu futuro...

Entonces eso hizo, mi final me rompía en mil pedazos, mis ojos ardían y mi mente sentía que iba a colapsar, gemí al ver a Ralph entre lágrimas, miré como moría siendo atravesaba por algo filoso, como me despedía dejando a mis hijos, cada uno tenía su final y despues caí de nuevo al suelo, pero no porque el robot quiso, sino, porque Barry lanzó una extraña flecha, el verdadero Barry. Lo miré con mis ojos borrosos.

— ¿Amanda? ¿Estás bien? — Yo asentí.

— Ralph...— Susurré acercándome a él, lo moví y respondió al instante, se acercó para abrazarme y ver que estuviese bien, claro que lo estaba. Me acerqué a besar sus labios y vi como sacaban al robot con un golpe rápido en el pecho por el mismo lugar que entró, traían capas.

— Amanda, vámonos.

Fue lo único que escuché, la voz de Ralph.