Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 18


Después del funeral de Ana, yo me fui a mi departamento, no quería saber nada de nadie. Me sentía demasiado mal para poder hablar, salir, incluso comer. No podía soportar mas muertes y todo por culpa de Malcom.

Ralph se ofreció a llevarme a casa el cual agradecía demasiado, inclusive fuimos por el helado que habíamos acordado antes de lo de mi hermana.

— ¿Cómo te sientes?

— Mejor — Le sonreí —. Ya no me duele tanto, es como, si estuviera "acostumbrada" a perder a las personas que me importan o que amo — Sonreí para besar su mejilla en agradecimiento.

— Me alegra saber que estás mejor — Acarició mi cabello. Ambos estábamos sentados en el sofá terminándonos el helado mientras miraba cada lamida que hacía.

— ¿Has sabido algo de Cisco recientemente?— Le pregunté esperando a que me dijera que simplemente le mandó el traje y que no ha hablado con él en sí, pero para mi sorpresa, sí habían hablado.

— Pues dice que está de vacaciones y que regresará en un par de días, no dijo exactamente a donde...— Pero Ralph se detuvo, no continuó hablando y quería preguntarle la razón, pero ya había descubierto cuál. Era yo. Estaba llorando a la misma vez que me levantaba y aventaba lo ultimo de mi helado al suelo—. ¿Qué ocurre?

— Nada, solamente extraño a mi hermana.

Ralph se quedó a dormir esa noche, él se quedó en el sofá y yo en mi habitación pensando en por qué Cisco no me ha mandado mensajes o si quiera hablado, pero peor aún, dormí pensando en Malcom e ideando un plan para poder matarlo.

•••

— ¡Ralph! ¿Listo para el plan?

Los chicos habían ideado un plan contra DeVoe que habían puesto en marcha ahora mismo, Barry estaba preparado para poder pelear, mientras Ralph..., estaba despreocupado.

— Tengo un plan mejor..., ¡hey tú!— Gritó a la máquina que hacía ver que estaba DeVoe ahí—. ¡Cabeza de tortuga! — Ralph metió la cabeza dentro de su propio cuerpo de una manera muy extraña que no veía venir.

— Apágalo — Barry indicó mientras se apagaba la realidad virtual, Ralph seguía con la cabeza metida —. ¿Ralph? Ese no era el plan.

— ¿Ralph? ¡Ralph!— gritó Iris, aún seguía molesta por lo que no me importó demasiado, mi amigo saco su cabeza y les miró con una sonrisa —. El plan es simple, lo haremos de nuevo. Habrán dos flash, DeVoe se confunde, atacamos y listo.

— Fácil para ti decirlo, ¿pero y si lo haces?— Le dije, ella me miró con un rostro de pocos amigos, luego Barry me miró y negó ignorando el asunto.

— Ralph — Habló acercándose a su amigo—. DeVoe viene, intentamos protegerte. Necesitamos estar preparados todos nosotros — Nos miró a cada uno, pero parecía que no escuchaba.

— Meto la cabeza de tortuga, todo bien y ganamos.

Al llegar al cortex, Barry comienza a preguntar sobre los otros dos metas que faltan para poder completar el plan de DeVoe, aparte de Ralph, pero todos hacen muecas de silencio y entendí la razón del por qué. Harry usaba su gorra maldita para poder buscar información y comenzó a gritar que nada se le facilitaba con todo el ruido, no se podía concentrar.

Pero una broma sobre un gas hizo que estallara de risa Ralph.

— ¿En serio? — Dijo molesto, yo me acerqué al hombre al que quería como mi padre..., bueno, un padre, ese tipo donde ya saben, te lo quieres comer a besos—. ¿Estás bromeando?

— No, no fui yo — Harry le lanzó la bolsa del gas.— Eso es caro — Todos lo miramos con un rostro de "¿en serio, Ralph?"

— Bueno, tal vez estés batallando porque esa cosa no sirve.

— ¡Por Dios, Ramon 2.0! — Me crucé de brazos mirándole algo ofendida —. Lo siento, pero no está roto, solo necesito silencio y ninguna interrupción para poder encontrar a estos dos, donde él desapareció de la nada y ella, simplemente no la encuentro.

— Está roto, y apuesto a que el Ramon 1, lo sabría.

Él me miró con rostro de que lo supere, pero lo que nunca me esperé fue segundos después, mi celular sonó mostrando en pantalla el nombre de la persona que no creí que volvería a saber en toda mi vida.

Alce la vista mirando a Ralph por unos segundos yéndome de ahí en el momento en que puso su vista en mí. Me alejé para ver como la pantalla se apagó y volvió a iluminarse con el nombre, mis manos comenzaron a temblar y el mal sabor de boca apareció como la incomodidad en la boca de mi estómago.

— ¿Bueno? — Contesté, asustada, preocupada por lo que fuera.

— Amanda Carolina Speerling, ¿dónde mierda has estado? — Mi corazón comenzó a latir con fuerza en mi pecho, la ansiedad crecía desde los dedos de mis pies hasta mi pecho. La falta de aire prosiguió—. ¿Amanda? ¡Contéstame!

— Estoy ocupada — Entonces colgué, pero había sido en vano, volvían a marcar.

— ¡Amanda! ¿Estás bien?— Ralph llegó y puso una mano en mi hombro, le miré y solté un suspiro sintiendo una presión en mi pecho — ¿Por qué no contestas?

— No puedo — Entonces él tomó el celular, llevándoselo al oído, mientras yo me metía en mi propio cascarón haciendo oídos sordos, no quería escuchar nada de lo que decía, o... ¿no quería o no podía?

— Listo — Ralph volvió, él me dio mi teléfono por lo que lo miré y dejó de iluminarse la pantalla, suspiré aliviada y lo abracé con demasiada fuerza.

— Gracias.

•••

Había decido acompañar a Barry y Ralph donde se encontraba una escena del crimen, donde al parecer la nueva meta humana era responsable. Un robo de una corona cubierta de diamantes.

— No vayas a llamar la atención — Le dijo Barry a Ralph, donde él claramente había dicho que no lo iba a hacer.

— ¡Le trajimos su café, Detective West!— Gritó, yo negué soltando una leve risa, que gran manera de no llamar la atención mi querido amigo. Joe se acercó a nosotros con una sonrisa ladina y mirando a Barry con algo de pena, aunque podía sentir que él odiaba que lo vieran de esa manera.

— Bueno, puedo ver desde este punto que debieron haberlo lanzado a una cierta velocidad, o desde una altura..., de unos 30 metros — Miré desde mi punto de vista y la caja donde venía la corona, había sido completamente destruida.

Me había perdido de la plática al pensar en la persona que me había marcado, una mano en mi hombro me hace volver a la realidad. No entendía por qué aún tenía miedo de lo que podrían decirme, yo era una adulta, con amigos adultos, con un novio adulto aunque no me hable y parezca niño. Tengo 24 años.

— ¿Nos acompañas? — Barry me preguntó, mientras Ralph me miraba de lejos —. Iremos con un amigo de Ralph, Caitlin nos ha mandado la localización donde está nuestro meta.

— Okay, sí.

¿Ven? Incluso mis amigos adultos tienen amigos adultos también, son profesionales, ya trabajan y tienen un trabajo estable, son envidiables y tiene un excelente sueldo. O al menos eso creí hasta que miré la oficina en la que nos dirigíamos, era la misma o algo parecida a la que mi amigo tenía, solamente que ahí olía a comida, a sucio y a demasiado alcohol.

— ¡Ralphie! — Gritó el hombre obeso frente de nosotros, yo tomé por inercia la mano de Ralph, extrañamente me sentía pequeña ahí. El amigo de Ralph me miró con picardía y luego relamió sus labios viendo al más alto —. Ya veo que tienes una pequeña Ralphie.

— ¿Qué? — ¿Qué? No tenía sentido —. Ella es mi amiga y compañera, también el novato de atrás.

— Creí que ya no me decías así, Ralphie — Barry y yo reímos juntos a la misma vez que entrábamos a la habitación, solté la mano del alto y me quedé atrás con Barry analizando el lugar dándonos algunas miradas de «asco».

— Sabemos que alguien a quien conocen como Null esta aquí, asi que dinos donde está— Ralph parecía molesto y se miraba demasiado profesional, y algo sexi. ¿Pero en qué ando pensando? ¡Tienes novio! Y eres adulta, Amanda.

— No se de que hablan — Colmaba mi paciencia, asi que empujé a mi amigo, tomando una pluma de escribir y colocándosela en el cuello del señor.

— Dinos donde está, o te juro que meteré esta pluma donde menos te lo esperes, créeme que te hará gritar  y pedir que no la saque de donde la ponga — Entonces él abrió sus ojos algo asustado y mirando hacia arriba de nosotros, entonces giramos y ahí estaba la chica como si fuera el Hombre Araña.

— No hay trato — Dijo la chica de cabellos pintados apodados Null, yo hice mis manos puño lista para poder golpearla, sin mostrar mis poderes frente del hombre obeso con olor a grasa de papas fritas, aunque ame esas papas, él me quitó el apetito.

— Amanda, ponte detrás de mí.

Ignoré a Barry, la chica cayó del techo como sin ningún problema de quebrarse un hueso, parecía que flotaba y eso le amortiguaba la caída, increíble, de ella sí tenía envidia en ese aspecto. Entonces también se preparó para pelear, Barry se acercó primero a ella lanzando el primer golpe, pero su mano se iluminó y tocó su pecho haciéndolo flotar de inmediato.

— ¡Chicos! ¡Chicos!

Miré algo sorprendida y un poco sin creerlo, así que era mi turno, ella me tomó de los brazos lanzándome directo hacia unas cajas cercas de una ventana, me sonrió y lanzó otro golpe que esquive, Ralph intentaba bajar a Barry aunque era imposible, entonces al lanzar una patada, ella tomó mi pie, su mano brillo de nuevo y me lanzó hacia la ventana que atravesé.

— ¡Ahh! ¡Ralph! ¡No! — Grité con todas mis fuerzas, comenzaba a flotar de pies hacia arriba, intentaba aferrarme a los metales del edificio pero no fue posible, casi llegaba al techo y me iba a ir para siempre y probablemente morir, o cielos, pensar en la muerte me provocaba miedo, así que las lágrimas de arrepentimiento, tristeza y desesperación aparecieron de inmediato.

— ¡Amanda! — Ralph gritó, abrí mis ojos y todo lucia en cámara lenta, él alzó su brazo estirándose hasta poder agarrarme, sentí alivio. Él me fue acercando de nuevo a la ventana, me metió dentro de la habitación, pude divisar al chico en el suelo y a Barry en el techo.

— ¿Estás bien? — Asentí, también flotaba, mis pies no tocaban el suelo y Ralph me tenía agarrada de la cintura. — Tenemos que transportamos, no podemos ir por la calle así.

— Tengo en mi bolsillo el pequeño teletransportador que me dio Cisco — Lo saqué y lo encendí rápidamente, el portal se abrió y Ralph había amarrado el pie de Barry con una cuerda, entramos por la brecha llegando a los laboratorios, donde Iris y Caitlin se rieron levemente de nosotros.

— Iris, no es divertido.

— ¿Estás bien, cariño?

— Como nunca — Le dijo Barry, Harry se acercó a mí, tenía agarrada a Ralph de la cintura, sí lo soltaba me iba a ir.

— ¿Tu también?

— Sí — Asentí.

— Tienes que soltarte, no podremos calcular cuando dejarás de flotar como globo con helio.

— Púdrete Harry — Él sonrió, había sido una broma de mal gusto, entonces Ralph tomó mis manos — No me sueltes, por favor.

— No lo haré.

Entonces me despegué de él flotando de inmediato, él tomó mi pie mientras se estiraba a la misma vez que iba subiendo, Harry al parecer hizo unos cálculos con su mente, ya que en su mirada podía verse.

— Bueno, según mis cálculos el helio deberá desaparecer en cualquier momento.

— ¿Cuándo? — Preguntó Ralph, entonces Harry empujó a Ralph hacia un lado, Barry cayó segundos después y sentía que iba a caer yo, pero al momento de ya ir directo hacia abajo, Ralph me atrapó y caí en sus brazos, sonreí sintiendo mis mejillas tornarse de color carmesí.

— Aquí es donde agradezco no haber traído vestido o falda.

— Nunca traes vestido o falda — Bajé de los brazos de Ralph.

—Exacto.

Él soltó una leve risa haciendo que soltara una pequeña, miré a Barry tocándose el estómago, había caído algo fuerte y le sonreí encogiéndome de brazos.

— Tenemos que buscar como detenerla.

— No creo que sea algo difícil — Comentó Harry, últimamente se ha hecho muy serio, más de lo que ya era, es como si no tuviera tanta empatía y dijera que como es más inteligente nuestros pensamientos ya no valían la pena, me daba algo de mala de espina esto—. Simplemente colóquenle las esposas mientras Cisco y yo...— Se quedó callado recordando que Cisco no estaba —. Bueno, no importa, yo lo hago de todas maneras, como decía, mientras yo creo un aparato para hacer que no floten.

— Harry — Dije cuando él se daba media vuelta, se detuvo mirándome —, ¿te ayudo?

— ¿Tú? No gracias, deberías de ir a preparar la fiesta para cuando te gradúes.

Y es cierto, no me acordaba de la fiesta de mi graduación. Ralph y los demás voltearon a verme alto sorprendidos, ¿cuanto tiempo había pasado que ya me iba a graduar? Parecía que ni iba a la universidad con esto de ayudarlos a vencer el mal o alguno que otro problema, me puse algo triste en pensar en Tori, ella no pudo llegar a graduarse por mi culpa.

— ¿Graduación? ¿Tan pronto? — Barry preguntó con su mirada de asombro, a lo que asentí —. Es seguro que haremos una fiesta sobre esto.

— No lo creo necesario.

— ¡Claro que sí! Podemos ordenar muchas pizzas, al cabo Barry se las come todas cuando ya estes llena, globos y muchas luces por donde sea, podemos traer amigos de tu universidad — Dijo animado, pero había un problema enorme, ellos eran mis únicos amigos.

— Oigan, en serio — Sonreí —. No es necesario, me gustaría que fuéramos solo nosotros, como Cecil, Joe, Wally, ustedes..., no quiero algo grande — Le dije tocando su hombro —. Ahora tengo que ir a la universidad a preguntar cuando me gradúo, yey.

Fingí emoción, no me emocionaba demasiado si era honesta, jamás pensé que llegaría hasta el punto en que me encontraba..., es más, desde kínder jamás imaginé estar en donde me encontraba durante los años, me importaba más la escuela que hacer amigos, todos me odiaban y me decían aburrida solo por tener un libro en mis manos, se juntaban conmigo para hacer el trabajo donde al final, el trabajó en equipo era individual pero valía como equipo.

Amigos que tengo son contados, y son el mismísimo team flash.

Eso de que dicen que un amigo es mejor que un libro, en lo personal, prefiero un libro a tener un amigo que al final de cuentas me va a dejar.

[foto insertada de como el helio le afectó en los pies y se va volando por la ventana].

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro