Al día siguiente...

Taehyung disfrutaba con gusto la lechita de fresa que Jungkook le había traído. Estaba completamente absorto en saborear las fresas, que era su sabor favorito, que no se percató siquiera de la mirada intensa que el otro dirigía hacia él.

—Me sorprendió recibir tu mensaje diciendo que estabas aquí —Taehyung mencionó de repente, sus ojos conectando con los de Jungkook y, finalmente, notando la intensidad de la mirada que recibía, lo cual provocó un leve nerviosismo en él.

—Salí temprano de clases, así que quise venir a verte.

—¿Te molesta que viniera?

—Oh, no, para nada. Solamente me sorprendió, pero me salvaste de la clase de historia —respondió Taehyung con una sonrisa.

Jungkook abrió los ojos con sorpresa antes de parpadear un par de veces.

—Espera, ¿quieres decir que faltaste a tu clase por mí? —cuestionó con curiosidad.

—Exacto.

—No era mi intención interrumpir tus clases, lo siento.

—Descuida, tampoco es que esté perdiendo una materia importante —respondió Taehyung con una sonrisa, tratando de quitarle importancia al incidente para que Jungkook no se sintiera culpable—. Es más como una materia de relleno.

—Ya veo, te entiendo. Yo elegí algunas materias al azar y ahora tengo que lidiar con ellas. Debería haberlo pensado mejor.

Escuchar eso logró sorprender a Taehyung, quién no pudo evitar dejar escapar una carcajada.

—¿También tú? Me pasó exactamente lo mismo, ahora tengo que aguantarme —Taehyung comentó entre risas.

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El amor es una magiaaaaaaa...