Una semana pasó rápidamente y yo me estaba alistando para el cumpleaños de Rodri, estos días habían pasado normal en el hospital, lo único diferente es que él solía recogerme y llevarme a mi casa

El timbre sonó sacándome de mis pensamientos así que rápidamente fui a abrir encontrándome a mi amigo esperándome

—No era necesario que vinieras.— exclamé dejándolo entrar

—Si yo no venía por vos es probable que te fueras a perder.— se burló Rodri

—Ya casi estoy lista, espera aquí.— pedí dejándolo en la sala

Vi como se sentó en el sillón así que corrí hasta mi habitación para buscar una pequeña caja que había comprado ayer, cuando la tuve salí de regreso a donde él estaba

—¿Por qué sos tan veloz?.— cuestionó entre risas

—Realmente ya estoy lista, solo tenia que ir por esto.— dije dándole la cajita —Feliz cumpleaños.—

Él al verla simplemente sonrió y la abrió, dentro había un collar muy lindo

—Pensé que como te caes mucho es mejor que tengas un amuleto de la suerte.— reí un poco —Espero te guste.—

—Es buenísimo.— exclamó contento mientras lo sacaba y se lo ponía —¿Se me ve bien?.—

—Muy fachero.— dije y ahora él se burló

—"Re fachero".— corrigió —Si andas en Argentina debes tener más fijos los modismos de acá.—

—¿Ahora me vas a enseñar a tener tu asento?.— cuestioné y él asintió

—Ya tenés un paciente fijo así que te quedarás.— recordó —Yo puedo hacer que tengas más expresiones de acá.—

—Te conté que me ofrecieron trabajo y tú ya casi quieres darme hasta la nacionalidad.— hice una broma

Él se quedó callado como si lo estuviera pensando

—Te daré la nacionalidad Argentina.— aseguró —Si en unos años no tengo con quien casarme me casaré con vos.—

Ambos empezamos a reír por aquel chiste

—Yo no quiero ser segunda opción eh.— aclaré riendo

—Está bien, en unos años te daré la nacionalidad y serás mi primera opción boluda.— contó entre risas también

Nada de esta plática tenía sentido pero al menos era bastante especial, o al menos eso era para mí

—¿Nos vamos?.— pregunté y él asintió levantándose

—Si seguimos esperando Spreen y Tomi me asesinan.— dijo

—Es tu cumpleaños, no creo que te hagan nada.— reí un poco

—Vos no los conocés.— murmuró

Le quité importancia y simplemente salimos de ahí, él cargó mi bolso así que agradecí con una sonrisa

—¿A dónde iremos?.— cuestioné mientras caminábamos

—Es un restaurant cerca.— dijo —Quería que fuera cerca de tu residencia.—

Rodrigo era un caballero conmigo y eso alegraba demasiado mi vida aquí.

El camino siguió entre algunas risas entre los dos, cada día estaba más segura de que Rodri era más que mi mejor amigo aquí, era hasta mi alma gemela

—Ya llegamos.— avisó —Solo hay que cruzar la calle.—

La avenida era bastante transitada y no había semáforos así que pasar sería un gran desafío

—Vamos.— sonrió tomando mi mano para cruzar

La mayoría de veces solía ser muy insegura al cruzar pero ahora simplemente era guiada por él, me hacia sentir como una niña que no podía cruzar sola pero me encantaba

Cuando cruzamos simplemente me soltó y seguimos caminando hasta entrar al restaurant, ahí ya estaban sus amigos esperándonos

—Por fin llegan.— se quejó Rob —Estabamos por pedir sin ustedes.—

—No pueden ordenar sin el cumpleañero.— regañé mientras nos sentábamos

—¿Vas a defender a tu noviecito?.— se burló Spreen

—Dejá la envidia, ahora sos vos quién no puede conseguir una como ella.— exclamó Rodri en el mismo tono burlón

Sabía que sus amigos lo habían molestado bastante tiempo por no conocer una "buena chica" con la que salir pero ahora al sentir que me estaba presumiendo era extraño

—La encontraste justo antes de tu cumpleaños para que pudieran celebrarlo juntos.— exclamó ahora Rob

—Fue el destino.— sonreí un poco

—Carru nunca creyó en el destino, decía que eran bobadas.— contó Rob con una sonrisa —Tuviste que llegar a su vida para demostrarle que eso no era cierto.—

Llegaron a tomarnos la orden así que pasamos los siguientes minutos debatiendo sobre lo que deberíamos pedir

Cuando lo tuvimos claro lo pedimos y tocaba esperar a que lo trajeran

—Comerémos juntos y después nos vamos de joda ¿les parece?.— cuestionó Spreen

—¿Joda?.— pregunté en susurro

—Fiesta.— aclaró Rodri de la misma manera que yo

¿Ir de fiesta con ellos? ¿Dónde solían ir?

—Yo...— intenté pensar algo para sacarme se ese compromiso

—Ella tiene turnos difíciles de cumplir y ayer fue su guardia de 48 horas, no quiero que descanse mal por mi culpa.— se adelantó Rodri —Además dijimos que solo sería una reunión con ustedes y después quería llevarla a prender stream conmigo.—

Los tres lo miramos bastante confundidos por lo que acababa de decir

—¿Irá a prender stream con vos?.— preguntó Rob sin creerlo —¿La cosa va tan en serio?.—

Presentarme en su canal era como ponerme frente a todos como su amiga, eso me causaba demasiados nervios

—Quiero hacer mi stream de cumpleaños con ella.— contó

—Involucrar lo personal con lo laboral puede terminar mal.— aconsejó Spreen —Es como si _______ te llevara al hospital el día de su cumpleaños.—

Por esa analogía todos me voltearon a ver

—Por cierto, ¿cuando es tu cumpleaños?.— preguntó Spreen

—Espera, si ella se sabía el cumpleaños de Carre es obvio que él se sabe el de ella.— asumió Rob —Contáme, ¿cuando es?.—

Todas las miradas ahora se regresaron a Rodri quien me miraba como si esperara ayuda

—28 de...— empezó a teorizar y lo miré mal, por ahí no era —Febrero.—

Estaba totalmente equivocado pero por su cara pude ver que estaba asustado así que simplemente asentí dándole la razón

Los tres empezaron a hablar mientras yo simplemente me sentía un tanto mal por que ahora mi cumpleaños no tenía relevancia. Mi celular vibró así que lo saqué para ver, tenía un mensaje de Rodrigo a pesar de estar juntos

"Me asusté"

"Gracias por seguirme la
corriente"

Levanté la mirada para mirarlo y simplemente me miraba con una pequeña sonrisa, eso hacia que todo valiera la pena