CAPÍTULO 41: ESCORPIÓN
—— ESCORPIÓN ——
Habían pasado varios meses desde que todo parecía haber vuelto a la normalidad, desde que todo lo sucedido parecía ser una vaga pesadilla de la que nadie se acordaba, pero en verdad, aquello no era así. En realidad, Elara recordaba lo que había sucedido, lo que sucedía y lo que sucedería, pero tampoco lo pensaba en exceso, ya que una parte de ella quería omitir todos aquellos episodios traumáticos, o simplemente fingir que la presencia de Søren no la estaba volviendo loca con cada día que pasaba.
—¿Segura que deberíamos de ir a investigar esto?— Preguntó Scarlett mientras ambas seguían caminando por el bosque para evitar ser vistas por nadie.
—Debo de hacerlo.— Respondió Elara con frustración. El hecho de estar embarazada y no poder hacer nada, la enfurecía. Ella era alguien que necesitaba estar haciendo algo, lo que fuera, porque no poder salir al bosque a correr, transformarse o simplemente entrenar, comenzaba a hacerla irritable, no por las hormonas, sino por el hecho de que sentía como si se estuviera ahogando al sentir que estaba siendo inservible.
—Esto es peligroso, Lara.— Volvió a recalcar la Beta.
—No te he pedido que vengas, Scarlett. Puedes volver. Pero yo no voy a irme sin saber que está pasando.— Respondió con firmeza la mujer lobo. Sabía que aquello era un peligro, era, literalmente, ir a la boca del lobo, pero era un riesgo que ella quería correr.
¿Estaba mal?
Por supuesto, y Elara lo sabía. Sabía que aquello era peligroso, ya no solo por Scarlett, sino también para ella y el bebé, pero aquello, en cierto modo, no la importaba, porque tenía la confianza de que todo iba a salir bien. Además, de que si seguía sin poder hacer nada, lo más seguro era que terminaría mostrando alguna debilidad para que Søren volviera a tener el control, y eso era algo que Elara se negaba a permitir que ocurriera, ya que entonces, se desvelaria lo que llevaba ocultado por seis meses.
—Como que voy a dejar que vayas sola.— Respondió con obviedad la Beta. —Puede que esté en contra de que te arriesgues por algo tan insignificante como puede ser esto, pero no voy a dejar que lo hagas sola. Esto sería un suicidio.— Afirmó la Beta haciendo sonreír a Elara al escucharla. —¿Y cuál es el plan?— Preguntó mirándola con curiosidad.
—Saber que están organizando.— Respondió con tranquilidad al mismo tiempo que llegaban hasta donde estaban las naves.
Ambas, con bastante agilidad, se subieron hasta una plataforma, donde vieron, en su interior, como varios cazadores tenían atrapados alguna que otra criatura sobrenatural a la que, aparentemente, parecía que estaban torturando. Al verlo, ambas intercambiaron una mirada de confusión y de temor, mientras agudizaban sus sentidos.
—¿Donde está la Beskyttende? Sabemos que está en Nueva Orleans.— Habló uno de ello, haciendo que Elara se removiera incómoda al escucharle. —Sabemos que está embarazada, así que dinos dónde está. No tiene que ser muy difícil reconocer a una mujer lobo, sobretodo si es un Alfa y si está embarazada de varios meses.— Ambas sobrenaturales intercambiaron una mirada justamente antes de que uno de los cazadores alzará un arma y apuntará a un hombre lobo a la cabeza, para después disparar, haciendo que la pared fuera salpicada por la sangre y el hombre lobo, cayera al suelo como un peso muerto.
—¿Qué hacemos? Les están ejecutando.— Afirmó Scarlett con miedo.
—Y por mi culpa...— Murmuró Elara mientras mantenía su mirada en lo que pasaba en el interior.
—¡Eh, vosotras dos!— Gritó alguien desde abajo.
Rápidamente Elara y Scarlett se miraron, y sin pensarlo bajaron de la plataforma para después atacar al cazador y dejarle inconsciente. Pero mientras Elara se encargaba de ello, Scarlett la obligó a esconderse al ver que más miembros de los Escorpión aparecían dispuestos a matar a los intrusos, pero para suerte de ellos y para desgracia de la Alfa, a quien vieron únicamente fue a Scarlett, la cual fue reducida con dificultad, ya que ella, a diferencia de muchos otros hombres lobo, sí había puesto resistencia, tal y como Elara la había enseñado.
Elara salió de allí, y volvió a meterse en el bosque mientras pensaba en la forma de sacar a Scarlett. Hacerlo ella sola era imposible, literalmente era un suicidio, por eso necesitaba ayuda. Sin pensarlo, sacó su teléfono y marcó un teléfono.
—Necesito tu ayuda.— Se limitó a decir.
***
—¿Qué necesitas?— Preguntó Logan llegando al punto en el que Elara le había citado.
—Los Escorpión tienen a Scarlett, y junto a ella a varios hombres lobo a los que están ejecutando por no saber mi ubicación.— Explicó la mujer lobo haciendo que Logan la mirase incrédulo.
—¿Por qué tenías que meterte en esta clase de problemas, Lara? Con lo bien que estábamos sin ellos.— Se quejó haciendo sonreír a su amiga por su tomo dramático.
—Sabes tan bien como yo que lo normal aburre, ahora bien, ¿vas a ayudarme?— Preguntó mientras se cruzaba de brazos y le miraba con inquisición.
—¿Tengo opción? Porque conociéndote irás tú sola, y teniendo en cuenta que estás embarazada, por mucho que uses el rugido no tendrías oportunidad contra ellos.— Comentó haciendo que Elara respirase aliviada al saber que él iba a ayudarla. —Pero, ¿crees que solos podremos hacer algo?— Al escuchar su pregunta, Elara supo que se refería a que debería de haberle pedido ayuda a Derek, pero teniendo en cuenta que en cuanto se enterase la haría una lista de la errónea decisión que ella había tomado, Elara no estaba dispuesta a recibir un sermón por parte de él. —¿Cual es el plan?— Preguntó el Beta con seguridad.
—Sacarles de ahí, y si es posible deshacernos de los Escorpión.— Respondió haciendo que Logan sonriera.
—¿Porque siempre me gustan tus planes?— Preguntó haciendo que la Alfa le hiciera una mueca de burla, mientras volvían a dirigirse a las naves.
***
Logan y Elara observaron, de nuevo, el interior de una de ellas. Viendo, como en una jaula estaba Scarlett, junto a otro pequeño grupo de criaturas sobrenaturales, al verlo ambos intercambiaron una mirada de confusión, mientras se preparaban para intervenir.
—He de decir que esto es un error.— Comentó Logan después de noquear a un cazador y robarle el arma, para después disparar al candado para dejar libre a los sobrenaturales.
—¿Un hombre lobo que se cree Robin Hood?— Preguntó un cazador en tono de burla.
—En realidad soy yo la que se comporta como un Robin Hood.— Respondió Elara mientras salía de las sombras asustado a los cazadores.
—El Beskyttende.— Dijeron con certeza y con miedo.
—Sí, y creo que ahora me tenéis miedo. ¿Que ha pasado? Ahora que veis que todo esto se ha vuelto contra todos vosotros, teméis lo que os puede pasar, ¿verdad?— Los cazadores miraron de forma amenazante a Elara, haciendo que está sonriera, para después prepararse para atacarles.
Seguramente para todos ellos pasó demasiado rápido, todo era una confusión entre el humo, los disparos, los gritos y los rugidos, pero de entre todo aquello hubo un sonido que destacó sobre el resto. Ese sonido no era otro que el rugido de Elara, del Beskyttende. Y todos allí fueron conscientes de que aunque la mujer lobo estuviera embarazada seguía siendo capaz de hacer lo imposible por ayudar a otras criaturas sobrenaturales y, en especial, a su manada. Porque aunque no lo pareciera, aquello calmaba la presencia del Alfa de la muerte.
***
Enfrentarse a los Escorpión, había calmado a aquellos deseos por parte de Elara de matar y destruir, una parte de ella se sentía relajada, mientras que otra parte de sí misma sentía como si aquello hubiera estado mal. El rugido les había matado y todos habían salido ilesos, pero también la hacía recordar ese miedo que tenía cuando supo que ella había causado tantas muertes.
—Me sorprende que siempre haya un motivo de celebración en esta ciudad.— Comentó Derek mientras abrazaba a Elara por la espalda.
—¿Y por qué no debería de haberlo? Esto es Nueva Orleans.— Le comentó Elara sabiendo que aquel día, sí era un día o una noche de celebración.
—Por el misterioso motivo por el que han aparecido varios cadáveres a un par de kilómetros de aquí. Y lo curioso es que eran de los Escorpión.— Al escucharle, Elara puso una mueca de duda.
—Escuchaste el rugido.— Afirmó con obviedad.
—Difícil ha sido no hacerlo.— Aseguró haciendo que Elara supiera que ahora vendría el sermón de que no debería de haberse puesto en peligro, porque el bebé también había corrido peligro. —Pero al menos sabemos que puedes defenderte usándolo.— Afirmó haciendo que ella se sorprendiera, al mismo tiempo que se daba cuenta de que había sido la primera vez que había rugido por voluntad propia.
—¿No me vas a dar uno de tus sermones?— Preguntó incrédula dándose la vuelta para mirarle.
—Entiendo el porque lo has hecho. Me molesta que no me hayas pedido ayuda a mi, pero bueno. Creo que si ahora te digo algo acabarías tirándome por el balcón.— Afirmó Derek haciendo que Elara pusiera una expresión de que tenía razón.
—No te diría que no sería así. Pero ahora ya se que pudo volver a rugir como antes.— Afirmó sonriendo. Volver a rugir a voluntad propia había sido uno de los grandes dolores de cabeza de Elara, pero sentir que ella volvía a tener ese control la ayudaba a saber que cuando se volviera a enfrentar a Søren tenía mayores posibilidades de ganar, ya que no debía de preocuparse de rugir o no, volvía a tener el control de ello y, el hecho de perder el control y volverse más peligrosa de lo que ya era, era únicamente un plus.
★★★
Oficialmente los capítulos entre el embarazo de Elara y el último episodio de Teen wolf, han terminado.
Realmente me moría de ganas de publicar este, porque literalmente amo ese gif.
Bueno, recalcó el hecho de que Elara sigue siendo igual de camicace que siempre a pesar de estar embarazada, pero creo que era incapaz de no hacerlo. Siempre he buscado la forma de demostrar que este personaje era independiente a todos, que no necesitaba más ayuda que la que todos, en algún momento podemos necesitar, pero sin olvidarnos de que estos capítulos son previos a la GRAN TRAGEDIA.
Y para tragedia lo que estoy sufriendo, en la vida me ha costado tanto poner fin a una historia, pero creo que los próximos capítulos os van a gustar. No solo por el drama, sino por todo lo que sucede.
¿Que os ha parecido el capítulo?
Por cierto, todavía sigue abierta la pregunta de cómo creéis que se llamará la hija de Derek y Elara.
Os leo ❤️
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