—— LOS HUÉRFANOS ——

Elara entró corriendo al instituto al recibir un mensaje por parte de Scott diciéndola que Liam había desaparecido, pero también a aquello se sumaba el hecho de que Scarlett no daba señales de vida. La morena estaba frustrada, enfadada y asustada, y sabía que ambas desapariciones tenían relación con la lista. Muy en el fondo sabía que tenían relación.

—El entrenador dice que no le ha visto.— Habló Scott al ver llegar a su amiga.

—Vale, nosotros nos encargamos de Liam.— Sentenció Elara haciendo que Scott la mirase confundido.

—¿Quién más ha desaparecido?— Preguntó con cierta curiosidad y al mismo tiempo con preocupación.

—Scarlett, pensé que estaría en su casa. Pero estaba mañana, cuando he ido, no había rastro de que estuviera. Derek ha ido con Malia a buscarla, se reunirán con Brett para rastrear la zona de Satomi.— Aclaró Elara justamente cuando el teléfono de Scott comenzaba a sonar. Los dos Alfas intercambiaron una mirada al ver en la pantalla de Scott el nombre de Liam.

—Liam.— Dijo Scott aliviado.

—No, prueba de nuevo.— Respondió Garrett haciendo que Elara soltará un gruñido.

—¿En donde está Liam?— Preguntó Scott manteniendo la calma.

—¿Crees que te lo voy a decir así de fácil?— Preguntó Garrett riéndose.

—Te daré el dinero.— Elara frunció el ceño confundida al escuchar a Scott.

—Sí lo harás. Pero con eso no recuperarás a Liam.— Aseguró el asesino. —Quiero el dinero y que liberen a Vaiolett o sino, Liam será historia.— Pidió Garrett finalizando la llamada.

—¿Puedo matarle ya?— Preguntó Elara mientras se cruzaba de brazos enfadada.

—Evitemos matar a alguien.— Pidió Scott haciendo que Elara adquiriera una actitud amenazante. —Quiere hablar con nosotros, por favor Lara mantente calmada.

—Intentaré estar calmada, Scott. Pero como me enfade le cortaré la garganta y recrearé la matanza de Texas con su cuerpo.— Le aseguró la mujer lobo, haciendo que Scott tragara saliva con dificultad ante la amenaza que Elara era capaz de cumplir.

Los dos Alfas llegaron hasta el aparcamiento, y buscaron entre los autobuses a Garrett. Scott mantenía sus sentidos puestos, en parte, en Elara, ya que sabía que podía ser capaz de cualquier cosa con tal de proteger a cualquier miembro de su manada, pero más si de quién se trataba era de sus Betas.

—¿Qué quieres?— Preguntó Scott intentando llevar el control de la conversación, para evitar que Elara cumpliera con la amenaza. —¿Quieres que vaya con Stilinski? Podemos hacerlo. Mi padre es un agente del FBI, al igual que el padre de Lara y su madre es policía. Podemos interferir.— Habló Scott con autoridad.

—¿Creéis que quiero que habléis con alguien con placa? Eso puedo hacerlo yo.— Aseguró Garrett. —Van a trasladar a Vaiolett a una cárcel federal hoy. Vosotros me ayudareis a evitarlo. Detendreis el furgón y la sacareis, después me daréis el dinero y os diré dónde está vuestro Beta.— Sentenció Garrett con obviedad.

—¿Ese es tu plan? ¿Tu plan es que asaltemos un vehículo federal?— Preguntó Elara mientras se cruzaba de brazos y Garrett mostraba el arma que estaba escondida en su stick.

—Apuñalé a vuestro cachorro con esta arma que estaba bañada en wolfsbane, y cuando llegué al corazón... Adiós Liam.— Elara volvió sus ojos rojos en señal de amenaza.

—Te ayudaremos.— Habló Elara volviendo sus ojos a un tono normal. —Pero te lo diré una vez y lo tendrás muy presente. Si mi Beta muere más os vale huir y esconderos, por qué si os encuentro la matanza de Texas se quedará corta con lo que os haría.— Advirtió la mujer lobo haciendo que Garrett la desafiará con la mirada.

—No te tengo miedo.— Aseguró él con diversión.

—Y no lo hago para meterte miedo, es un promesa. Y yo siempre cumplo mis promesas.— Elara sonrió con maldad mostrando sus ojos de doble color.

***

Mientras Scott se encargaban de ayudar a Garrett, Elara lo hacía con Alexander, el cual rastrearía a Liam haciendo un hechizo.

Los mellizos, estaban sentados en el suelo del sótano, Alexander con varias plantas, una sucederá de Liam y rodeado de sal; su hermana, en cambio, no dejaba de mirarle o de estar pendiente de su teléfono a la espera de que Derek o Scott la mandarán un mensaje o la llamarán para decirla que ambos Betas o uno de los dos, había aparecido. Para la Alfa estar allí, en el sótano de su casa, la hacia sentir que no estaba haciendo nada para buscar a ambos, pero tanto Derek como Scott e incluso Brett la habían dicho que se quedará junto a Alexander, ya que él, también, era parte de la lista.

—¿Puedes mantener la calma, por favor?— Pidió Alexander a su hermana.

—Lo siento, no todos tenemos el deseo de volver al purgatorio.— Respondió Elara con una pizca de resentimiento.

—Lara ese día yo no quería decir eso... Es decir, por supuesto que el purgatorio no es un sitio agradable, pero si me dan a elegir entre una lista de muerte en la que hay precio por mí cabeza y el purgatorio, sin duda, una y mil veces, elegiría el purgatorio. Entiendo que te moleste que lo diga, pero es la verdad. Si cuando tuvimos la oportunidad de irnos supiéramos todo lo que pasaría, ambos, hubiéramos optado por tomar la decisión de Jackson y de Isaac, ¿verdad?— Elara cambió su expresión.

—No, Alex. No hubiera cambiado mi opinión de irme. Y no la cambiaría, el motivo de irme sería más importante que el hecho de que alguien quiera matarme o reclutarme.— Aseguró la mujer lobo justamente cuando su teléfono comenzaba a sonar. Elara se puso de pies. —¡Brett!— Exclamó ensaltada. —¿Habéis encontrado a Scarlett?— Preguntó Elara preocupada.

—Derek la lleva al hospital. Era la única superviviente... Han matado a gran parte de mi manada.— Al escucharle la expresión de la morena cambió drásticamente.

—Brett...— Empezó a decir Elara.

—Tus Beta te necesitan. Yo sé que mi hermana y Satomi están bien. Así que no te preocupes.— La tranquilizó su primo mostrando una gran tranquilidad por su parte.

A todo aquello se sumó el teléfono de Alexander. Los mellizos se miraron confundidos, justamente cuando la expresión del rubio cambiaba.

—Era Chris. Kiernan, Rafael y Noah han tenido un accidente. Y Scott ha salido herido, y Garrett ha muerto.— Se limitó a decir Alexander mientras preparaba todo. —Los atacó unos Berserkers.— Al escucharle, Elara le miró con temor.

—¿Berserkers?— Preguntó Elara confundida. Alexander asintió ante la pregunta de su hermana. —No lo han hecho por propia libertad, Alex. Solo existe una criatura sobrenatural a la que obedecen.— Aseguró mientras su mirada se oscurecía.

—Un hombre jaguar.— Respondió Alexander con sorpresa.

—Te aseguro que si le pasa algo a mi padre, no espero que me detengas. Por qué iré a por ella. Ya me arrebató a una madre, no voy a permitir que me arrebate a mi padre.— Sentenció marchándose.

Elara salió de su casa mientras salía corriendo hacia el bosque. Debía de encontrar a Liam o a los Berserkers, ya la daba igual que criatura debía de aparecer en su camino, porque estaba a un paso de perder el poco control que tenía.

—¿Crees que vas a salvar a tus Betas? ¿A tu familia? ¿A tu manada? Temo decirte que el tiempo se te acaba, Elara. No hay nada que vaya a poder salvarles. Pero si dejas que ese lado oscuro tome el control...— La voz de Søren resonó en la cabeza de Elara haciéndola gruñir.

—No me rindo tan rápidamente. Olvidas como nos comunicamos entre nosotros.— Sonrió la mujer lobo para después soltar un aullido, el cual fue correspondido por Liam. Al escucharle, Elara sonrió mientras salía corriendo tras lo que parecía ser una guía invisible que la llevaría hasta él.

La mujer lobo llegó hasta una parte del bosque en el que había un pozo, agudizó sus sentidos para segundos después sentir el aroma de Liam y su respiración. Corrió hacia el pozo, y justamente antes de que Liam volviera a caer, Elara le agarró del brazo, haciendo que él le mirase sorprendido y aliviado.

—Has venido a por mí.— Comentó Liam con alivio.

—Eres mi Beta, y nosotros nunca abandonamos a la manada.— Aseguró Elara sacándole del pozo, para que después Liam la abrazara con fuerza.

—Gracias.— Murmuró Liam aferrándose a ella como haría un niño pequeño con su madre después de tener una pesadilla.

—¡Lara!— Los dos hombres lobo miraron hacia Scott y hacia Chris.

—Le encontré.— Sonrió Elara con algo de dolor ya que solo había podido cuidar y proteger a uno de sus Betas.

—Yo me encargo. Ve al hospital.— Elara asintió ante la indicación de Scott y se marchó corriendo.

Al llegar a la puerta del hospital, Elara se quedó mirando, mientras suspiraba con pesadez. Sin detenerse ni un momento, Elara comenzó a caminar hacia la puerta, se dirigió a la habitación en la que estaba Kiernan sin detenerse en ningún momento. Por qué si lo hacía, saldría corriendo en busca de Kate y de sus Berserkers, y en aquellos momentos, Elara no debía de hacer estupideces, aunque quisiera hacerlas.

—¿Encontrasteis a Liam?— Elara parpadeó un par de veces al escuchar a su madre.

—Sí. Encontré a Liam.— Sonrió viendo tras la ventana a Kiernan, el cual estaba bien.

—No quiere que nadie se quede, ni que nadie entre. Lo he respetado.— Explicó Minerva a su hija con tranquilidad.

—Supongo que no quiere que nos preocupemos por él, ni que le recrimine lo que ha hecho Kate.— Puntualizó Elara haciendo sonreír a su madre.

—Deberías de ir a ver a Scarlett y luego ir a casa a dormir.— Elara la miró molesta ante lo segundo. —Vas a ir a casa y vas a dormir. Por qué se que no has estado durmiendo en estos días, o por lo menos no lo suficiente.— Elara rodó los ojos mientras se dirigía a la habitación en la que estaba Scarlett.

—¿Qué haces aquí?— Elara miró a Derek el cual estaba sentado al lado de la cama de la Beta.

—Ver a mi Beta.— Respondió con obviedad la mujer lobo.

—Me refería a que porque has venido. Tu padre está unas plantas abajo, Liam ha desaparecido y tu primo debe de estar furioso.— Elara rodó los ojos.

—Mi padre se ha recluido en su habitación, encontré a Liam y Brett no es tan impulsivo como crees. Supongo que eso no lo ha heredado de su padre.— Comentó Elara con tranquilidad.

—No la han atacado con wolfsbane. La lleve hasta Deaton y él no sabe lo que tiene.— Elara soltó un gruñido.

—Lo supuse en cuanto la trajiste hasta aquí. Necesito que me hagas un favor.— Derek se puso de pies y se acercó a ella. —No la dejes sola ni por un minuto, bajo ninguna circunstancia.— Dictó Elara con una seriedad que hasta para el pelinegro daba miedo. Elara solo adquiría aquella postura cuando se trataba de temas serios para la manada, pero nunca por una persona, ni tan siquiera con Alexander o con sus padres.

—No iba a irme, sabía que Minerva no te iba a dejar quedarte.— Elara se cruzó de brazos al escucharle.

—Que no duerma toda una noche no significa que por el día me vuelva un zombie.— Ironizó molesta.

—No, pero eso delimita tus capacidades. Y teniendo en cuenta que hay una lista de muerte, no conviene que tú y cualquiera, tengamos nuestras habilidades limitadas.— Puntualizó Derek con tranquilidad.

—Y fue a decirlo el que está perdiendo su lado de hombre lobo.— Respondió Elara con diversión.

—Que este perdiendo mi lado de hombre lobo, no me quita la razón.— Elara rodó los ojos. —Si despierta y pasa algo te llamaré.— La tranquilizó el hombre lobo.

Elara asintió mientras miraba a Scarlett, sus pulsaciones se escuchaba normales, eso era bueno, pero también sabía que había algo diferente. Pero si de momento, su Beta estaba bien, ella estaba parcialmente tranquila con ello.

★★★

Amo este capítulo. En relación con mi historia, con la serie... Me agobia mucho el hecho de ver a Liam en el pozo.

Sinceramente amo a Elara siendo una madre con sus Betas, es una mamá oso con ambos. Pero me alegro, por fin, de mostrar lo importante que ambos Betas son, y lo importante que es Kiernan para ella. Aunque no lo admita, quiere a su padre.

Bueno, he llegado a los 400 seguidores, y he pensando qué podéis, si queréis, hacerme una pregunta en relación con esta historia o con cualquier otra mía, y la responderé. Incluso si hay spoiler. Aunque si visteis el trailer de esta parte ya hay spoiler al final.

En el capítulo de mañana es uno intenso, porque ocurre algo importante. Algo que desencadenará un hecho. Pero también tendremos la presencia de Heather, siendo ella con Elara.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ♥