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𝐱𝐱𝐱𝐯𝐢𝐢. 𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞 𝐬𝐞𝐫

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Como se dijo y se planeó, Sirius y yo pasamos toda la semana jugando y aprovechando cada espacio y lugar del resort en el cual nos encontrábamos. Lunes estuvimos jugando tenis con una pareja que conocimos ahí y fue cansado pero muy divertido ya que anteriormente nunca antes lo había jugado, y tengo que admitir, si que me gustó. Martes era día de exposiciones, varios artistas vinieron y trajeron sus obras para mostrar y vaya que eran lindas. Fue divertido ya que después de ello hubo una cena para todos los presentados y tomamos vino y probamos de quesos. Estas no son el tipo de actividades que yo suelo disfrutar pero no lo voy a negar, a un lado de Sirius, todo es muy divertido.

Miércoles, fuimos al parque de diversiones con su amigo Roger y sus otros amigos. Tampoco estaba acostumbrada a pasármela en toboganes de agua pero aprendí que puedo llegar a ser muy fan de ellos y estuvimos ahí casi todo el día hasta que terminamos muertos y de lo mas cansados.

Jueves, que fue el día de ayer, hubo una tipo feria y eso fue muy pero muy divertido. Estuvimos en cada uno de los juegos por igual y ganamos varios premios. Bueno, el a mi. Tengo ahora unos siete peluches en mi cama.

Pero ahora viernes, es la fiesta del amigo de Sirius y nos estábamos arreglando en la habitación para asistir.

Me encontraba peinando cuando el llega y me da un beso en la mejilla.

- nos vemos en la fiesta. - me voltea para verme y sonríe. - te ves preciosa.

- ¿ya te vas? podemos irnos juntos. - se me hacía de lo mas extraño que el quisiera irse sin esperarme. - no tardo mucho, de hecho.

- no, yo creo que mejor nos vemos allá ¿te parece? - lo miré con el ceño fruncido y aun así el se acerca a darme un beso de nuevo en la mejilla y se retira.

- okay... - dije para mi en voz baja y seguí peinándome.

Fue extraño, ya que hemos pasado toda la semana juntos y nunca pero nunca se había ido a ningún lado sin mi. Bueno... supongo que tiene que llegar antes, no lo sé. ¿Quizás para ayudar a el tal Roger? Pero bueno, tomé mis cosas y salí de la habitación.

En la entrada del evento, me encuentro a Danna. Una chica que conocí es nuestra estadía aquí y que es básicamente mi nueva amiga. 

- hey, hola. - me dice y me saluda de beso. - wow, te ves hermosa.

- tu igual, adoro tu vestido. - dije observándolo por completo. - amaría hacer algo así, algún día.

- por favor, tu hazme un vestido y lo uso con gusto.

- ¿en serio? - olvidé mencionarlo, Danna es famosa entre los muggles. Muy famosa. - ¿en serio lo usarias?

- por supuesto, para empezar eres mi amiga. - sonreí ante ello. - y segundo, no hay nada mas emocionante que tener una pieza de un diseñador nuevo y todo el mundo trata de averiguar quien te hizo el diseño. 

- genial, si. Um... en cuanto pueda hago uno especialmente para ti y te aviso. - dije con emoción y ella asiente. En ese momento, veo a Sirius pasar con dos copas y le entrega uno a otra chica. Muy pero muy guapa. - ¿quién es ella?

- no la conozco, lo siento. - dice levantando ambos hombros. - ¿por qué? ¿crees que Sirius le este coqueteando?

- de ser así, no pasa nada. - tomé de la copa de champaña que estaba sobre el mostrador y fingí como si no me importara. - solo somos amigos. 

- ¿entonces por qué la pregunta? 

- mera casualidad. - fingí una sonrisa y voltee a verlos de nuevo.

Ambos estaban riendo y literalmente coqueteando se. Ella es una chica alta, de cabello negro oscuro y largo, tes morena y un gran cuerpo. Ni se hable de esos ojos color cafés tan oscuros que parecían negros. Muy linda, es como si fuera una versión femenina de Sirius o algo por el estilo.

Pero decidí dejarlo pasar y disfrutar del evento. Escuché de toda la presentación de Roger y de como el se fue a firmar sus libros y nada, nada de platica con Sirius. Literalmente fue como si el día de hoy fuera invisible. Y esta bien, no tiene ningún compromiso conmigo pero yo no conozco a nadie aquí mas que a Danna por supuesto, pero de igual manera, hubiera disfrutado pasar nuestro ultimo día aquí juntos. 

Pero puesto a que nosotros regresábamos hoy mismo a mi casa después del evento, no iba a pasar mis ultimas horas aquí sola como un moco. Así que fui hacia donde el estaba y me acomodé a un lado suyo.

- hola. - dije y la chica por igual me saluda. - ¿de qué hablaban?

- no mucho. - ella dice riendo y extiende su mano para estrecharme la. - ¿eres su novia o algo así?

- no, no lo es. - Sirius dice y lo voltee a ver de inmediato. - no lo somos, solo somos amigos ¿no es así?

- cierto. - dije apretando los dientes de lo mas fuerte. ¿Qué rayos me pasa? yo no soy así de celosa. Mucho menos en esta situación que para nada lo amerita. - solo amigos.

- oh entiendo. - ella dice. - es bueno saber eso. 

- ¿por? - pregunté muy a la defensiva. - ¿ustedes dos...?

- no, Meredith. - Sirius me dice mientras me toma de los hombros para verme cara a cara. - te presento a Samantha Makkee. La que va a ser tu jefa en tu internado este verano. 

- oh. - sentí horrible al darme cuenta de que no debí ser tan intensa con ella. Pero que pena. - hola, es un placer conocerte.

- Meredith Allen. - ella dice mientras ve mi vestido. - te he visto estos días y tengo que admitir que siempre luces fabulosa. - sonreí ante ello. - me emociona ver que es lo que nos tienes preparados.

- juro que no los voy a decepcionar.

- confío en ti. - ella voltea a ver a Sirius. - el aquí presente se ha encargado de contarme maravillas de ti. 

- solo la verdad. - Sirius dice mientras abraza de mis hombros. - es fabulosa, te lo juro Sam.

- bueno, yo voy a platicar con unos amigos pero... fue un placer conocerlos a ambos. - ella dice y se voltea para irse. Pero se regresa. - espero y mi comentario no lo tomen a mal pero si ustedes dos llegaran a tener un hijo, creo que sería el ser humano mas perfecto del mundo. - ambos reímos de los nervios ante ello y ella se retira. 

- okay... um... - rasque mi nuca y me voltee para verlo cara a cara. - eso fue incomodo.

- ¿la parte donde me celabas?

- no te celé. - dije toda sonrojada. - pero no me hiciste caso toda la noche y creí que realmente me estabas dejando por ella y...

- entonces si estabas celosa. - dice sonriendo, muy pero muy feliz por ello. 

- no.

- ¿es tan difícil admitirlo?

- no. - repetí.

- ¿qué es mas dificil? ¿admitir que tienes sentimientos por mi? ¿o que estabas celosa en estos momentos? - abrí la boca en busca de tener algo que decir, pero nada salía. - muy bien, no quieres hablarlo, lo entiendo. ¿nos vamos?

- ¿ya? 

- no quieres que todos se preocupen porque nos fuimos por bastante tiempo al mismo tiempo tu y yo. - el ríe y me acaricia la mejilla. - te dejo en tu casa y sirve y saludamos a todos porque tengo entendido que hoy irían Lily y James.

- okay. - dije confundida y caminé a su lado fuera de la fiesta.

Empacamos las cosas y nos fuimos de una vez en el carro. Todo el camino fue en silencio, ninguno de los dos habló. Yo por mi parte, no hablaba porque no entendía que pasaba. Porque el estaba tan serio o para nada intentando sacar platica. Porque quiso que nos fuéramos tan temprano, no lo se... siento que algo aquí no cuadra.

Pero en cuanto llegamos a la casa, antes de entrar, lo detuve.

- Sirius. 

- ¿si? - se voltea para verme y me sonríe. - ¿qué pasa linda?

- ¿estamos bien, cierto? - el asiente con la cabeza y me da un beso en la frente. - no estas molesto o... algo por el estilo.

- ¿molesto? no tengo nada porque estar molesto. - hice como que creí esto y se abre la puerta, mostrandose mi mamá. Ella me da un gran abrazo. - que guapa Cassie ¿cual es la ocasión?

- ninguna, solo nosotros juntándonos los de siempre. - dice ella riendo. - bueno, menos Remus. - dice haciendo una mueca. - evidentemente el tiene cosas mas importantes ahora.

De recordarlo, me sentí mal y decidí mejor entrar. Lily y James, ambos me interceptan y me abrazan con mucha emoción. 

- oh, hola. - dije riendo.

- ¿cómo te la pasaste en tus vacaciones? - James me pregunta. - no espera, pregunta mas importante ¿tomaste fotos? ¿conociste a alguien? ¿te cuidaste?

- no conocí a nadie, si me cuidé y si tengo fotos. - reí y Lily tan solo le da un beso en la mejilla a su esposo. - ¿a ustedes como les fue?

- bastante bien creo, tranquilo. - Lily contesta. - ¿Vas a cenar con nosotros?

- claro, solo voy a dejar mis cosas. - dije volteando a ver a Sirius y el por igual me estaba viendo. Necesitaba hablar con el. Caminé hacia donde el estaba y aprovechando el que el estaba solo, le dije lo siguiente. - ¿podemos hablar? - el asiente con la cabeza y ambos salimos al patio para tener mas privacidad.

REMUS POV

Llegué a casa de Meredith con toda la intención de hablar con ella y de arreglar las cosas. Contarle que lo de mi hijo era la situación mas falsa posible y que yo solamente ahora deseaba arreglar las cosas y que podamos intentarlo. Ella sabe que la unica razón por la cual no sucedió lo nuestro, fue porque ella y yo creímos que lo mejor era que cuidara de Theodore, porque creíamos que era mi hijo. Pero puesto a que fui parte de una gran mentira, ella tiene que saberlo. Y saber que ya no hay nada que se nos interponga.

Toqué de la puerta y James es quien me recibe.

- ¡Remus! ¡estás aqui! - James me recibe con un gran abrazo y un beso en la mejilla. - ya te extrañaba, maldito.

- no tendrás que hacerlo mas. - hice una mueca. - no estoy mas con Lola.

- ¿qué? ¿por? ¿qué hay de tu hijo?

- um... supongo que esta es la segunda vez que alguien quiere que encubra un embarazo. - la sonrisa de James se borra en cuanto yo digo eso. - descuida, estoy bien.

- lo lamento tanto, Moony. - me da una palmada en la espalda. - se que estabas emocionado por la idea de tener un hijo.

- estoy bien, en serio. - dije volteando a todos lados. - lo único que necesito ahora es hablar con Meredith.

- ¿sigues con eso?

- James. 

- ya te dije que yo no soy impedimento, tranquilo. Pero... tienes que estar seguro esta vez amigo. 

- siempre lo he estado. - es verdad.- pero es cierto, tomo las decisiones mas estúpidas del mundo a veces.

- ya llegó. - no pude evitar sonreír al saber que estaba a nada de verla. 

MEREDITH POV

- ¿me puedes explicar que es lo que estas haciendo? - me crucé de brazos molesta. - y quiero la verdad.

- ¿de que hablas? - el ríe. - no he hecho nada.

- claro que si... haces... eso. - dije desesperada. 

- tienes que ser mas especifica y clara, querida. Porque no te entiendo nada. - ahora el se cruza por igual de brazos.

- te muestras distante apropósito. - el se ríe. - se que estoy en lo correcto. Lo haces para llamar mi atención.

- ¿funciona? - se acerca mas a mi y me pasa el cabello por detrás de la oreja.

- ¡lo admites!

- ¿tu vas a admitir que si sientes algo por mi entonces? - se muerde el labio inferior una vez que ve los míos. Y empiezo a sentirme nerviosa, mas porque estaba que me moría por besarlo. - se que puedes hacerlo.

- pero no puedo.

- pero quieres. - pasa su mano por mi mejilla y la coloca detrás de mi cuello lentamente. - ¿no es así?

- no puedo Sirius. - dije con dificultad. - quisiera mas que nada estar enamorada de ti así como debería pero es muy pronto y aun yo...

- aun lo quieres. - asentí con la cabeza. - lo entiendo, puedo vivir con ello. Lo que importa es que tu seas feliz.

- pero eso no quita el que no me importes. - dije yo ahora viendo sus labios. - o que no te quiera.

- hey Mer, descuida. No me debes ninguna explicación. Uno no puede pelear realmente contra el primer amor. - hice una mueca ante ello. - pero quiero que sepas que yo estoy aquí y de lo mas enamorado de ti y listo para arriesgarlo todo.

- ¿lo harías? 

- claramente. - y fue ahí donde fui yo quien lo besó. Necesitaba hacerlo.

Acerca su cuerpo mas al mio mientras se intensifica el beso. Desde el lunes ambos estábamos aguantando las ganas de hacerlo y fue por ello que el beso estuvo lleno de desesperación y deseo. Abracé de su cuello y el aprovecha eso para pasar sus manos por todo mi cuerpo y acariciarme. Se detiene en mi trasero y lo aprieta con sus uñas, haciéndome soltar un gemido que ni alcanzo a terminar de expresar cuando el ya muerde mi labio inferior y eso me hace perder la cabeza. 

- deseaba esto. - dije con dificultad porque sus labios seguían aun en los míos. - vaya que lo hacía.

- no te imaginas las veces que estuve rogando por este momento. - lo sentí sonreír entre el beso y se separa para verme a los ojos. - ¿esta tan mal? - no contesté y lo volví a besar. Seguimos en ello.

- siento que voy a terminar desmayado. - dice James y en ese momento nos separamos de inmediato. Con lo que ninguno de los dos contaba, era que Remus también iba a estar ahí. 

Pude sentir como la presión se me bajaba de una manera impresionante y que yo iba a ser la que se desmayaba de los presentes aquí.

- Remus, hola. Um... ¿cómo esta tu hijo? - Sirius le dice y lo siguiente que pasa es que el se acerca y lo golpea.

- ¡Remus! - dije sorprendida de lo que acaba de pasar pero ambos seguían peleando.- ¡qué haces!

- ¿qué rayos te pasa? - Remus le dice mientras le da otro golpe. - ¿por qué la besas?

- quizás por la misma razón por la cual tu lo hacías, porque me gusta. - escuchar eso lo hace enojar mas pero Sirius lo detiene y lo empuja. - no puedes enojarte, tu estas con Lola.

- no lo estoy. No mas. - lo miré con asombro ante ello. - ella sabía perfectamente que yo quería a alguien mas y por ello estoy aquí.

- ah ¿quieres a Meredith? - Sirius le pregunta cínicamente.

- como si no lo supieras ya. Lo cual me hace enojar mas porque aun tu sabiendo eso, decides besarla y buscarla de esa manera.

- ¡ella no es de tu propiedad amigo! - Sirius grita y lo vuelve a empujar. - yo no voy a dejarla así como si fuera basura así como tu lo has hecho. Porque si Remus, noticia del día, así la has hecho sentir.

- ni siquiera sabes como estuvieron las cosas. - Remus es ahora quien lo empuja. - ¿por qué lo haces, Sirius? ¿realmente solo querías agregarla a tu lista o estabas tan fascinado con la idea de poder lograr tenerla?

- aplica lo mismo contigo. - Sirius se cruza de brazos. - no eres ningún santo ni yo lo soy así que cálmate ya. - Remus en efecto se calma y empieza a respirar hondo. - yo no fui el que me la estuve sabroseando mientras era maestro y después la confundió para que estuviera conmigo. Yo no fui quien se la cogió, en cambio tu si.

- eres un idiota.- Remus por fin llega a su limite y lo vuelve a golpear pero esta vez en serio.

- ¡Remus basta! 

- ¡basta los dos! - James se muestra en medio de ambos y los separa antes de que terminen matándose. - ¿qué no se están dando cuenta de lo que están haciendo?

- ¿por qué pelean? - mi mamá dice una vez que sale y sale con Lily a un lado. - oh por Dios, estas sangrando. - ella corre a donde esta Remus y le checa el labio. Pero evidentemente Remus y yo no podíamos dejar de vernos y ella lo nota. - ¿qué pasa? ¿Meredith te hizo esto? - y también era obvio que ella ni siquiera iba a captar nada.

- necesito un poco de aire fresco. - dije molesta y caminé hacia la salida.

- Mer... - Sirius empieza a decirme pero lo ignoro y si logro salirme. 

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