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Al día siguiente, pasé toda la mañana con Sarah ya que era nuestro ultimo día de vacaciones y el día de mañana tendríamos que irnos al colegio de nuevo. Fuimos a desayunar y después a comprar una que otra cosa. 

- bueno... al menos ya no tienes porque preocuparte de estar cargando con un gran secreto. - me dice Sarah una vez que llegamos a la casa de los Potter como de costumbre pero aun no entramos. - quiero decir, ahora nadie puede sospechar de que estabas enamorada de la persona mas imposible del mundo porque ya no están juntos.

- supongo, si. - hice una mueca. - pero no significa que tampoco no sienta nada por el.

- ¿lo haces? ¿a pesar de todo? - estaba por contestar esa pregunta, cuando la puerta se abre y se muestra a Remus con unos anteojos oscuros y en su mano una taza de café. Al ver el sol, frunce el ceño. 

- ¿resaca? - pregunté riendo y el asiente con la cabeza.

- de acuerdo, voy a ir a um... a ayudar a Lily con la comida. - dice Sarah y entra para dejarnos hablar a solas. 

- ¿qué tanto tomaste anoche y como por qué? - reí pero el tan solo se quita los anteojos para verme. - okay, prefiero no saber la razón.

- supongo que es porque te lo imaginas. - asentí con la cabeza y es que prefiero no hablar de como es que el estaba triste porque acabábamos de decidir separarnos. - descuida, todo es mi culpa al final del día, no hay esto con intención de hacerte sentir mal.

- no sucede, solo... - suspiré hondo. - podemos ser amigos.

- claro. - el dice asintiendo varias veces, como si la idea de verdad le gustara. - desearía mucho que fuese así. 

- en fin, no es como que sea la primera vez que lo intentamos. - reí y gracias a todos los magos, el por igual. - pero la tercera es la vencida.

- estoy de acuerdo, Mer. - el le da un sorbo a su café y se queda viendo de mi vestido. - tu prenda esa nueva.

- lo es... si.

- tu lo hiciste ¿no es así?  - asentí emocionada de que el pudiera reconocer cuando algo lo he hecho yo. - esta hermoso.

- ¿si te gusta? estuve intentando algo diferente y...

- si, lo puedo notar. Traes ahora algo mas esponjado en la falda y también tirantes con resorte... - dice mientras me toma de la mano para darme la vuelta y ver el vestido completo pero yo tomo eso de excusa para sentir su mano junto a la mía una vez mas. - y usaste un zíper.

- ya eres todo un diseñador de modas. - reí. - notaste cada detalle.

- tan solo admiro mucho lo que haces. - imposible no sonreírle ante ello y ambos nos quedamos viendo por un momento, cuando nos vemos interrumpidos por mi mamá así que cada quien enfoca la vista en otra cosa. El en sus taza de café y yo en mi varita como si la estuviera chocando.

- buenas tardes a ambos. - dice mi mamá mientras se recarga en el marco de la pared. - ¿vas a quedarte a comer Remus?

- por supuesto. - el le sonríe. - va a ser nuestra ultima comida en familia antes de que regresemos al colegio.

- si, así será. - ella le sonríe y se le queda viendo a su taza.- ¿resaca? 

- realmente ni siquiera recuerdo nada de lo sucedido anoche. - levanta ambos hombros. - ni de como llegué a la casa. 

- el café no es el mejor remedio para ello. - le dije mientras le retiraba la taza de las manos. - necesitas alcohol.

- ¿cómo rayos voy a necesitar alcohol? - dice riendo.- debes checar tus fuentes, Mer.

- ¡hazme caso! - ambos reímos y por un momento olvidé que mi madre seguía presente. Voltee a verla y ella no dejaba de vernos entonces me mostré seria.

- no tengo recuerdo de que en serio se llevaran tan bien anteriormente. - ella dice.

- ni siquiera nos llevamos tan bien. - dice Remus levantando ambos hombros. - solo ocupo... ¿alcohol? 

- alcohol. - contesté de nuevo y ambos nos vamos a la cocina, escapando de ese momento incomodo. - soy yo o estaba mas seria de lo normal.

- seguramente es porque estabas diciendo tonterías y remedios falsos contra la resaca. - lo empujé ante eso y luego el a mi y empezamos a hacernos cosquillas hasta que casi resbalo y me toma de las manos para acercarme a el y evitar el que me tropezara. Dejándonos cara a cara y con las manos mas que juntas. Me mira a los labios y claro esta que yo a los suyos. Coloca su mano en mi mejilla y niego con la cabeza. - no he hecho nada.

- amaría que en serio no lo hicieras. - dije con dificultad. 

- de acuerdo. - me suelta lentamente y tan solo ambos bajamos la mirada para distraer la vista en nuestros zapatos. - voy a tomar algo de alcohol.

- yo voy a... - ni siquiera tenía ninguna excusa. - a cambiarme para la comida.

- buenas tardes bonita. - Sirius llega y me da un beso en la mejilla lo cual hace todo aun mas incomodo y Remus decide salir al jardín donde James y Harry jugaban. Voltee a verlo molesta. - ay vamos, no hice nada malo.

- se que no. - suspiré hondo. - hola. - le sonreí.

- así esta mejor. - me vuelve a dar otro beso en la mejilla. - lindo vestido.

- gracias, es nuevo.

- luce bien en ti. - hice una mueca al ver que el no notó que yo lo hice. Pero esta bien, no esperaba que fuese así. - oye estaba pensando algo...

- dime.

- ¿qué tan mal sería el que fuese maestro de Hogwarts? - lo vi con asombro ante ello. - quiero decir... se que solo serían dos meses básicamente y luego te gradúas pero me la he pasado tan bien contigo estos días y...

- pero tendrías que quedarte el próximo año y no se si quieras eso. - reí y el pasa mi cabello por detrás de la oreja. - es algo aburrido ser maestro.

- mas si no te voy a tener que ver el próximo año.

- hola. - escuchamos la voz de Chuck y Sirius se recarga en la barra para voltear a verlo. - ¿de qué hablaban? 

- nada. - dije nerviosa.

- de que estaba pensando en ser maestro en Hogwarts. - Sirius como quiera, si dice la verdad. - ¿te molestaría?

- no del todo, como quiera, ya me voy a graduar. - dice levantando ambos hombros y me repeina el cabello para sentarse de una vez sobre la mesa. - ¿te sientas a mi lado, Mer? Sarah ya viene y que se siente con nosotros.

- claro... - dije volteando a ver a Sirius e incómodamente me voy a sentar a un lado de Chuck. - ¿cómo va todo con Sarah?

- estamos pensando en viajar a Perú después de graduarnos. - lo miré con asombro. - si, será como nuestro viaje de graduación ¿te nos unes?

- no soy realmente una muy grande fan de ser mal tercio. - dije riendo y en ese momento, Remus se siente justo enfrente mío. - aparte tengo otros planes.

- ¿ah si? ¿qué harás? - Remus me pregunta. - solo curiosidad.

- tengo planeado ir a Venecia para pasar el verano en una pasantía. - dije con emoción y vi a lo lejos a Sirius platicando con James ahora. - aun no es del todo seguro pero es el plan.

- que increíble. - Remus me sonríe. - te deseo de verdad mucha suerte. 

- gracias. - ahora yo le sonrío a el. - va a ser difícil, se que será así. Pero estoy emocionada.

- vamos, eres increíble en lo que haces. Desde un principio era evidente que esto es para lo que naciste.

En ese momento mi mamá llega y se sienta a un lado de Remus para abrazar de su brazo. Momento incomodo como de costumbre entonces de nuevo enfoco la mirada en algo mas.

- ¿ahora de que hablaban? - ella pregunta. - siempre llego tarde a sus conversaciones.

- Meredith tomará una pasantía de modas en el verano. - Chuck contesta por mi y me agita los hombros. - que emoción. 

- bastante. - Sarah llega y se sienta a un lado de Chuck pero me saluda mientras se asoma en la mesa. - mucho éxito, amiga.

- gracias. - contesté y Sirius y James llegan para por igual sentarse en la mesa. Harry viene corriendo y se sienta también. - ¿y Lily?

- ya viene, se quedó muy entretenida con el postre. - dice James y este empieza a servirse su porción de puré de papa. - yo tengo mucha hambre así que ya voy a empezar.

- si, por favor, adelante. - dice Lily quien llega a poner el pastel sobre la mesa. - provecho.

- gracias. - contestamos casi todos y empezamos a comer. 

- ¿saben lo deliciosas que están estas aceitunas? - dice Sirius mientras prueba de la ensalada. - deberías probarlas Mer.

- no me gustan las aceitunas.

- no le gustan las aceitunas. - Remus y yo decimos al mismo tiempo y me nace el sonreirle.

- vaya, no tenía idea. - dice Sirius algo fastidiado con ello, lo pude notar, pero decidí ignorar ese hecho y seguir sirviéndome.

- no tenía idea de que no te gustaran. - dice mi madre, luciendo de lo mas pensativa. - ¿desde cuándo?

- um... no lo sé. Supongo que se intensificó esa idea hace poco. - levanté ambos hombros. 

- una vez, casi vomita en Hogsmeade cuando pidió una hamburguesa y tenía aceitunas. - dice Sarah riendo. - fue muy gracioso.

- deberías quitárselas como siempre y ya. - Remus dice y se a la perfección que todos prestaron atención a ese comentario en especifico. Me puse roja. - quiero decir ¿es lo que haces, no? ya que no te gustan.

- es cierto. - reí nerviosa. Pero sentía la mirada de mi mamá todo el tiempo. 

- adoro que ustedes dos ahora sean amigos. - mi madre dice con una amplia sonrisa. - quiero decir, recuerdo las veces infinitas en las que Meredith me decía que estaba mas que harta de Remus y que no quería que fuese mi amigo y recuerdo por igual varias veces que tu me dijiste que ella era una malcriada e insoportable. - incómodo.

- si, supongo que las personas cambian de opinión. - dice Remus.

- si... eso fue ¿antes o después de que te acostaras con ella? - cuando mi mamá pregunta eso, solo veo como James escupe sobre la mesa, lo que estaba tomando y se mancha por completo. Inclusive eso llego a llamar mas la atención que lo que pasó realmente.

- vamos Harry, quiero enseñarte esta nueva escoba. - James toma de la mano de su hijo y ambos se van de la mesa pero Lily seguía viéndonos de lo mas sorprendida.

- ¿qué? - Chuck pregunta riendo. - vamos señora Allen, esa no es una buena broma.

- pues... no es una broma. - ella ríe y luego toma de nuevo de su copa. - estoy consciente de lo enamorados que están el uno del otro.

- no, mamá yo... - estaba tan nerviosa, quería vomitar. 

- bueno, se que Remus si. Porque el me lo confeso. - dice riendo de nuevo. - ayer, en su estado de ebriedad. Pero no estoy del todo segura de que si tu también lo amas.

- Cassie... - Sirius empieza a decirle pero ella lo ignora. 

- te escucho. - me dice y Chuck voltea a verme de lo mas molesto y Lily voltea a ver a Remus también molesta. Sirius tan solo se distrae con su comida y Sarah estaba por igual nerviosa.

- ¿podemos hablar de esto en privado? - dije y ante eso, Chuck se levanta de la mesa molesto.

- ¿por qué te enojas? - Sirius le pregunta.

- ¿qué por qué? no lo sé, supongo que no todos los días te enteras que la persona que consideras básicamente tu mejor amiga, esta saliendo con su profesor y no te lo ha comentado ni una sola vez.

- no se lo dije a nadie. 

- a Sarah si, supongo. - no contesté y eso le dijo todo. - y si no me lo has dicho es porque seguramente todo esto empezó cuando tu y yo salíamos ¿o me lo niegas?

- ¿ustedes dos salieron? - Lily pregunta confundida y muy perdida en el tema. 

- nunca fuimos novios. - levanté ambos hombros. - al menos no oficial.

- huh. - el ríe y se va, Sarah quien se siente incomoda con su reacción, por igual se va pero creo que a otro lado. Demonios. Estaba por pararme de la mesa e ir a buscarla pero mi mamá me detiene.

- entiendo porque decidieron no decirme lo. - dice ella tomando de su copa. - pero que hijos de puta por realmente verme la cara de idiota.

- no fue así. - dije llorando. - las cosas jamas fueron así.

- ven Lily, esta conversación no nos incumbe mas. - Sirius le dice y se acerca a ella para llevársela.

- ¿por qué nunca podemos tener una comida normal? - ella dice y se va junto con Sirius.

- si tienes que estar molesto con alguien Cassie... es conmigo. - Remus se pone de pie y ella por igual pero lo empuja.

- claro que estoy enojada contigo, idiota. Tu eres el adulto responsable aquí para empezar, no ella.

- ya soy una adulta. - dije para defenderme pero literalmente no me hizo caso.

- y no solo eso sino que mi mejor amigo... mi mejor amigo y te enamoraste de mi hija. - dice mientras se cubre el rostro. - ¿qué rayos esta mal contigo?

- créeme que no fue como que yo lo busqué, o deseara que así fueran las cosas pero es cierto Cassie, lo siento mucho pero realmente la quiero.

- no, crees hacerlo.

- estoy seguro de lo que digo. - dice volteando a verme y empecé a llorar. - en ningún momento hice nada con intención de lastimarte.

- sin embargo pasó, ya que es obvio lo mucho que me gustas y tu lo sabías.

- mamá, Remus estuvo para ti bastante tiempo... mas del que una persona normal debería. ¿cómo es que de la nada de interesaste de el justamente este año? - dije y ella se acerca a mi y me da una cachetada. Dolió y mucho. 

- ¿qué sigue? ¿Se van a casar?

- ya no estamos saliendo. - dije con dificultad. - Remus y yo ya no somos pareja.

Ella voltea a verlo para confirmarlo y el asiente con la cabeza. 

- bien. - ella dice suspirando hondo. - perfecto.

- ¿Es todo? - Remus pregunta. - ¿solo te sientes satisfecha de saber que ya en serio no estamos juntos?

- es todo lo que necesitaba. - dice ella y toma su bolso para irse.- ¿es ella o yo?

- mamá...

- cállate. - ella me interrumpe y se cruza de brazos. - estoy esperando tu respuesta.

- no quieres que conteste eso realmente. - dice el y supe por completo que todo iba a empeorar ante ello.

- adiós. - ella dice y camina hacia la salida, a donde yo la sigo intentando arreglar las cosas. - por favor ni me dirijas la palabra. 

- ¿por qué estas tan molesta? nosotros no salimos con la intención de molestarte, tu no eras su novia ni mucho menos y no te gustaba el cuando yo empecé a sentir cosas por el. ¿Por qué te molesta tanto?

- ¿lo amas? - no sabía que contestar. - vamos Meredith, contéstame.

- lo hago. - cuando digo eso, ella se cubre el rostro. - pero eso no significa que vaya a estar con el...

- no puedes amarlo. - dice molesta. - es una tontería. Eres una niña inexperta y ni sabes lo que es amar.

- se que amar no es buscar a alguien solo cuando lo necesitas y solo cuando te sientes sola. - dije refiriéndome a ella. - se que amar a alguien no es solo cuando ocupas a alguien para cubrir tu embarazo ni lo es ahora que estas aburrida con tu vida y te diste cuenta de lo mucho que Remus vale. 

- así que ahora empezamos a juzgarnos.

- no, yo...

- estoy mas que harta de ti, Meredith. No fuiste una grata sorpresa al saber que nacerías, ni lo eres ahora. No necesito mas drama de tu parte ni tener porque seguir aguantando te. Ya cumplí como mamá los años necesarios, ahora olvídate de mi que realmente nunca te desee en mi vida y ahora mucho menos. - mi corazón se partió en dos una vez que escuché eso y ella sale de la casa sin decir nada mas.