Un camaro azul se estaciono en la esquina de un callejón, de allí salió una pareja; la chica se bajo primero y con rapidez entró por una pequeña puerta mientras maldecía en voz baja; la otra persona la siguió.

━━¿Ahora sí me vas a explicar porqué nos arriesgaste de esa manera sin siquiera robar nada? ━━chilló Melissa, caminando hacía el baño para quitarse el vestuario y ponerse ropa más cómoda, también que pudiera abrigarla más porque estaba tiritando. ━━¿Te volviste loco?

━━Solo fue un reflejo. ━━se excuso Mateo cerrando la puerta tras él, se tumbó sobre el sofá y bufó. Se salvo por poco. ━━Todos esos hombres te silbaban, parecían animales.

━━¿Y hacía falta disparar al aire? ━━insistió saliendo del sanitario, caminando con pantuflas hacía la cocina para prepararse un té caliente. ━━Dime la verdad, Mateo.

━━¡Esa es la verdad! ━━dijo fuera de sí, toda esa situación le estaba hartando.

━━¡No me grites que el que miente eres tú!

Ambos se quedaron en silencio, viéndose mutuamente a los ojos sin intención de desistir. Ambos con ideas y problemas completamente distintos; pero con solo una cosa en común: mentían.

━━Voy a salir. ━━sentenció él colocándose nuevamente sus zapatos.

━━¿Ahora? ¿En serio?

━━Sí.

━━¿A donde vas?

━━No tengo porque decirte a donde voy en todo momento. ━━dijo con un tono de voz desagradable, seco y sin amor alguno o la dulzura a la que Melissa estaba acostumbrada.

━━¿Vas a ir a tomar, cierto? Sabes que aún somos menores de edad y que la policía nos busca.

━━¡Me importa un carajo! ━━gritó tomando su abrigo, las llaves y saliendo de allí dando un portazo.

Melissa observó la perilla de la puerta durante unos minutos, con un nudo en la garganta y sintiendo como una depresión la iba cubriendo mientras caía poco a poco al suelo, abrazándose a sí misma para empezar a llorar.

No le gustaba que se comportara así con ella. ¿Qué había hecho mal? Solo quería saber la razón de su ataque de locura. Pero termino sintiéndose miserable, triste y sola en el frío suelo de la cocina. Llorando y preguntándose porqué era tan inútil, tal vez si recordara al menos un poquito sería de ayuda, pero nada.

Dos malditos años y su mente seguía en blanco.

Segundos después la puerta se volvió a abrir, Mateo entró y la abrazó arrepentido por haberle hecho pasar aquel mal rato.

Y era cierto, ni siquiera había logrado irse. Había estado detrás de la puerta tratando de mantener la calma y no hacer algo de lo que se arrepintiera luego, hasta que escuchó los sollozos de Melissa. Inmediatamente entró y la envolvió entre sus brazos, dándole su pecho para que pudiera botar todo lo que tenía dentro con libertad. Dándole la protección y la garantía de que no tenía pensado irse, y Melissa lo sabía. Nunca había dudado de eso.

Una pareja normal, con sus problemas, discusiones, conciliaciones y amor. Bueno, lo último tal vez solo por la parte masculina.

Porque muchas veces cuando una está sola, sin nadie en el mundo, confunde el amor con el cariño; aunque alguien más la esté buscando por donde sea, quién verdaderamente la ama.

(...)

━━Bien, este es el plan. ━━dijo Diego a su acompañante. ━━Oswald termina su turno a las cuatro treinta, cuando salga lo empujaremos al asiento delantero.

━━Yo estoy en ese asiento. ━━recordó Lila.

━━Okey, bien, en el trasero; lo inmovilizaras para que yo le corte el dedo índice y le diga que tiene veinticuatro horas para irse.

━━¿Ese es tu plan? ¿Hhmm?

━━¿Tienes algún problema con el? ━━cuestionó Diego mirándola.

━━¿Tienes algún problema con el? ━━repitió.

━━¿Qué?

━━Crees que va a matar al presidente, ¿cierto?

━━Sí.

━━Bien, matémoslo, una bala entre los ojos y listo.

━━No, no, no. ━━se repetía cada segundo. ━━No voy a matar a un hombre que aún no cometió el crimen.

━━Que estupidez. ━━le dijo viéndolo como un bicho raro.

━━¿Disculpa?

━━Pues en realidad todo el plan es estúpido, eso de cortarle el dedo índice.

━━No es cualquier dedo. ━━sentenció molesto al oírla reír. ━━¡Es el índice ¿si?! Es imposible disparar sin el índice.

━━¿Qué tal si es ambidiestro?

Diego se quedo callado viendo a la nada.

━━¿Cómo no se te ocurrió eso? ━━lo molestó.

━━Largo. Puedo hacerlo solo.

━━El doctor lo dijo, el complejo de héroe es real.

━━No, no tiene que ver con eso.

━━¡Pero claro que sí! Quieres demostrarle a tu padre que eres un hombre exitoso.

━━No sabes nada sobre mi vida. ━━dijo ya cansado.

━━Yo se todo lo que hay que saber. ━━comentó con aires de obviedad. ━━Eres un libro abierto escrito para niños muy lentos.

━━No, no estoy tratando de ser un héroe ¿okey?

━━Entonces, ¿Por qué lo haces?

━━Porque es un idiota. ━━respondió una voz atrás de ellos.

Lila volteo y lo miró asustado.

━━¿Quién rayos eres?

━━Hola, soy su amado hermano. ━━dijo Cinco con una sonrisa.

━━Qué me dejo encerrado en un loquero. ━━añadió Diego con rencor.

━━Para protegerte de ti mismo.

━━Eso es tierno. ━━interrumpió Lila con seriedad.

━━Okey. ━━habló Diego. ━━Ambos, ahora, largo.

━━Deja a la desquiciada y ven conmigo, tenemos un asunto importante.

━━No iré a ninguna parte contigo.

Cinco miró a la ventana, donde un hombre uniformado corría, parecía ir a un lugar exacto.

━━Esta bien. ━━se acercó a la ventana con una sonrisa en los labios. ━━¡Oficial!

━━¡Hey! ━━Diego lo agarró del cuello de la camisa. ━━¿Qué estás haciendo?

━━Dicen que hay una recompensa por los dos.

━━Esta mintiendo. ━━dijo Lila tranquila.

Diego miró a Cinco por unos segundos, mientras él seguía sonriendo.

━━Sé que no. ━━afirmo con seriedad. ━━Ya entiendo por qué Melissa se fue con ese delincuente.

━━¿Qué sabes? ━━preguntó Cinco poniéndose en alerta.

━━Solo que cuando llegué me dio una no muy cálida bienvenida.

━━¿Sabes donde se encuentra ahora?

━━Esa pelirroja se ha vuelto peligrosa, y todo esto es por tu culpa.

Cinco se quedó en silencio, él tenía razón y eso era lo que en verdad lo hirió. Si hubiera calculado mejor nada de esto hubiera pasado.

━━Oigan. ━━llamó Lila.

━━Ahora no. ━━dijo Diego, quién disfrutaba ver a su hermano con remordimiento en los ojos.

━━¿Sería demasiada casualidad que la pelirroja de la que hablan este huyendo de la policía ahora mismo con un chico que, en serio, hace despertar mis hormonas?

Ambos hermanos voltearon en su dirección a la vez. A unos metros estaba Melissa corriendo, en su dirección, acompañada del chico que los dos habían visto y las sirenas de policías se escuchaban hasta allí.

━━Si esa chica te gusta, secuéstrala.

━━¿Qué clase de consejo es ese? ━━preguntó Diego frunciendo el ceño viendo a Lila, quién alzó los hombros.

━━Le gusta, ella está ahí, que la meta al auto ¿Por qué no? Tú sabes como inmovilizar a alguien, ¿no?

━━¡Cinco no va a hacer eso!

━━La desquiciada tiene razón, ya vengo.

Dicho eso Cinco se teletransportó hacía ellos, apenas apareció sujeto a Melissa del brazo, quién volteo a verlo horrorizada, hace unos segundos no había nadie.

━━¿Quién carajo eres? ━━preguntó intentando recuperar el aire. Hace dos horas que estaban huyendo, Mateo tenía gran parte de las joyas en su maleta. Había visto a ese chico en el robo de anoche. Era el que grito su nombre.

━━¡Suéltala! ━━intervino Mateo acercándose corriendo, pues estaba unos metros más lejos.

━━Suerte para la próxima. ━━dijo Cinco, agarrando a Melissa de una parte exacta de la muñeca, logrando que segundos después ella cayera desmayada en sus brazos. Mateo vio eso y maldijo. Segundos después Cinco se volvió a teletransportar dentro del auto, Diego lo veía atónito y Lila con una sonrisa. ━━¿Qué esperas? ¡Conduce!

━━¡Esto es bajo hasta para ti!

━━Lila dijo que estaba bien.

━━¡Está increíble! ━━celebró Lila tomando un collar que tenía Melissa colgando del bolsillo de su chaqueta, parecía valioso. Se lo puso.

━━¡Esto es secuestro!

━━Estamos con una criminal buscada en más de treinta estados, así que ¡Arranca!

Diego bufó y le hizo caso a regañadientes; tenía razón, pues unos minutos después Mateo fue arrestado, ya que en lugar de seguir corriendo se quedó parado contemplando como el auto se iba con Melissa dentro.